La App “Cruzada de Oración” ha sido creada con el propósito de facilitar el acceso a la Cruzada de Oración recibida por la profeta María Divina Misericordia. Como propósito secundario pretende dar información sobre los mensajes relacionados con María Divina Misericordia (MDM)
María Divina Misericordia (MDM) es la última profeta de Dios. Es una mujer irlandesa que desde Noviembre de 2010 ha recibido mensajes de la Virgen María, Jesucristo y Dios Padre. Los mensajes pretenden recordarnos la Verdad en una época de tanta confusión. Todos los mensajes juntos forman el llamado “Libro de la Verdad”, profetizado en Daniel 10,21 y Apocalipsis 5,1-9. Dios revela acontecimientos previos a la Segunda Venida de Jesucristo con el fin de que podamos prepararnos adecuadamente, como por ejemplo El Gran Aviso profetizado en Garabandal (España) en 1961. Es un llamado, a toda la humanidad, a la conversión de vida y a la oración.
Dios quiere formar un ejército remanente de oración para combatir el mal en estos últimos tiempos. Para ello ha entregado a MDM unas oraciones que contienen grandes gracias. Todas ellas juntas forman la Cruzada de Oración, que junto con la recitación del Rosario y la Coronilla de la Divina Misericordia, traerán la conversión de millones de pecadores.
Además Dios está ofreciendo grandes regalos, como por ejemplo el Sello del Dios Vivo (que ofrece protección Divina contra el Anticristo), la Medalla de Salvación (que ofrece el Don de Conversión) e Indulgencia Plenaria para la Absolución Total (para no católicos especialmente)
La página www.elgranaviso-mensajes.com recopila los mensajes de MDM y proporciona mucha más información sobre esta última Misión de Dios para salvar almas.
La página www.internetgebetskreis.com/es/ es un lugar común para formar grupos de oración. Ahí se puede encontrar un email de contacto.
Todo está en manos de Dios. La Virgen María nos deja este mensaje de esperanza, consuelo y ánimo:
"...Ánimo, mis queridos hijos, todo está en las Manos de mi Hijo, Quien saldrá a buscar a toda alma, incluyendo los más endurecidos (insensibles) de entre vosotros. Mi amor por todos vosotros es eterno y deseo que utilicéis todos los Dones/Regalos, dados a vosotros mediante los Santos Evangelios y por medio de estos Mensajes, para la salvación de las almas.
Dios no abandonará jamás a Su Remanente y será a través de vuestros grupos de oración y de todos los demás grupos de oraciones, que se derivan de mis comunicados con el mundo, a través de otras misiones, que las almas pueden ser y serán salvas.
Consolaos unos a otros en tiempos de pruebas espirituales y Dios os guiará en cada paso del camino. Yo, la Madre de la Salvación, seguiré siendo vuestra protectora y os responderé cada petición que me hagáis. Me quedaré a vuestro lado hasta el Día en que mi Hijo regrese a recuperar Su Reino en la tierra.
Gracias por responder con fe, esperanza y confianza, a mi llamada y a la de mi Hijo.
Vuestra amada Madre
Madre de la Salvación”
"Mi amadísima hija, debe saberse que deseo formar un ejército de grupos de oración alrededor del mundo. Les proveeré, Mi ejército, con oraciones que necesitarán ser recitadas para salvar almas. Estos grupos de oración se expandirán y dentro de sus filas se levantará un ejército de seguidores devotos que darán a luz la Verdad de Mi Promesa Divina de Salvación para todos. Estos grupos formarán el ejército según lo dictado por Mi amado Padre, el cual abordará la oscuridad del mal causada por Satanás y sus creyentes y seguidores.”
Jesús ha dado a la profeta María Divina Misericordia más de 170 oraciones que conforman la "Cruzada de oración".
Jesús ha pedido que se recen algunas diariamente (unos 10 min.) mientras que otras son para rezar en grupo (al menos 2 personas) Si aún no tienes grupo, puedes rezar las oraciones junto a tu Ángel de la Guarda. En el menú principal están las oraciones diarias y la cruzada por partes para rezar en grupo.
Conservar Agua Bendita cerca, tener presente un Crucifijo (con cuerpo) y rezar la Cruzada de Oración para Bendecir y Proteger el Grupo de Cruzada de Oración 96.
Seguir con el Santo Rosario, comenzando con la cruzada de oración 26 y los misterios del día.
A continuación, se reza la Coronilla de la Divina Misericordia seguido por la oración final especial dada por Nuestro Señor.
Comenzar a recitar el grupo de oraciones de la cruzada que se haya elegido para ese día, por ejemplo el "Grupo I-A: Por los gobernantes". Estos grupos están en el apartado "Cruzada por partes"
El Señor nos ha pedido no estar más de hora y media reunidos.
Si hay personas que tienen intenciones personales lo mejor es que se recen en silencio sus intenciones. La gente puede inclinar su cabeza y luego levantarla al acabar para no interrumpir.
Si el grupo es numeroso tal vez un líder puede estar de pie al frente del grupo, para que se sepa cuando las personas han terminado sus intenciones.
No apresurarse. Estos Grupos de Oración harán un gran trabajo. La oración es el arma. Cuenta más fina es la oración, más fina es el arma.
Algunas oraciones de la cruzada deben recitarse diariamente. En el menú principal de la aplicación se pueden ver.
Si algún mensaje se comparte, normalmente se da para que lo lean en sus casas. Si es un mensaje de los grupos de oración, la importancia de la oración o un mensaje muy importante, se leen al final de la oración, y no se comentan ni se discuten.
El día que la persona no pueda reunirse con su grupo es importante que haga las oraciones en su casa.
Terminar con la Cruzada de Oración 96.
”Deben mantener junto a ellos Agua Bendita, tener presente un Crucifijo Mío. Rezar la Oración de la Cruzada No. 96 al iniciar y al terminar la reunión del Grupo de Oración. Elegir Oraciones de la Cruzada que les he dado, y rezarlas. (...) Pero sepárenlas en partes para que puedan enfocarse en las intenciones especiales. No hay necesidad de rezar todas las oraciones juntas, aunque insto a que recéis la mayor cantidad posible durante toda la semana."
La Iluminación de la conciencia, también conocida como "El Gran Aviso", fue predicha por Nuestra Señora en Garabandal en 1961 y tendrá lugar pronto para salvar al mundo.
Nuevas profecías recibidas por una Vidente Europea revelan eventos globales que conducirán a la Segunda Venida. Previamente Dios avisará al mundo mediante un gran acto de su Misericordia.
Para demostrar a todos que Dios existe.
Para traer a todos de regreso a Jesús y al camino de la Verdad.
Para diluir el impacto del pecado y la maldad en el mundo a través de la conversión.
Para ayudar a salvarnos antes del día del juicio final dándonos una oportunidad de pedir perdón por los pecados que hemos cometido.
Para convertir a los no-creyentes que no tendrían una oportunidad de redención sin este gran acto de misericordia.
Para fortalecer la fe de los creyentes.
Todos los mayores de 7 años experimentarán un encuentro personal místico con Jesucristo que durará no más de 15 minutos.
Es un Don de Dios Padre para convertir a la gente de regreso a la verdad. Es como se desarrollará el Día de Juicio Final sólo que esta vez usted no será condenado. En su lugar se le dará una oportunidad para pedir perdón.
Dos cometas chocarán en el cielo.
El cielo se pondrá rojo, se verá como un fuego y entonces se verá una gran cruz en el cielo para que usted primero se prepare.
Los ateos dirán que fue una ilusión mundial. Los científicos buscarán una explicación lógica pero no habrá ninguna.
Será espectacular y no nos lastimará porque viene como un acto de Amor y Misericordia de Jesús.
Nuestros pecados se nos mostrarán y esto nos hará sentir tremendo dolor y vergüenza cuando se nos revelen. Otros estarán tan asqueados e impactados por la forma en que sus pecados serán revelados que caerán muertos antes de que tengan la oportunidad de pedir perdón.
Todos verán el estado de su alma ante Dios – el bien que han hecho en sus vidas, el dolor que han infligido a otros y todo lo que no lograron hacer.
Mucha gente se caerá y llorará lágrimas de alivio. Lágrimas de alegría y felicidad. Lágrimas de asombro y amor.
Porque, por fin, será posible vivir una nueva vida a partir de entonces cuando sepamos la verdad completa.
Jesús está pidiendo ahora que todos recemos por aquellas almas que morirán del impacto, que puedan estar en pecado mortal. Todos necesitan prepararse ahora. Jesús pide que todos pidan perdón por sus pecados con antelación al Aviso.
Esta App recoge la "Cruzada de Oración" dada a la profeta MDM, pero es un mero recurso secundario. El principal recurso debe ser el Librito de la cruzada en papel, del cual ha tomado las oraciones esta App.
Jesús nos avisa, a través de MDM (ver los mensajes al final), que debemos conservar en nuestras casas biblias, velas bendecidas, comida, agua, etc.
Esta medida también se aplica al "Libro de la Verdad" así como al "Libro de la Cruzada de Oraciones". Por lo tanto, debemos procurar tener en casa uno o más ejemplares físicos del libro de oraciones.
"Preparen sus casas con candelas/velas benditas, un suministro de agua y comida para que dure por un par de semanas."
"Os aliento/exhorto a que mantengáis todos los objetos santos, rosarios, velas benditas, agua bendita, una copia de la Biblia y el santo Misal diario junto con el libro de Cruzada de Oración. Debéis mantener el Sello del Dios Vivo en vuestra casa y en ustedes si es posible."
En la tienda oficial podrás encontrar, en diversos idiomas:
El Libro de la Verdad
El Libro de la Cruzada de Oración
Medalla de la Salvación
Escapulario del Sello de Dios Vivo
Rosarios
Mucho más...
Por favor, no dudes en contactar con el diseñador de esta App si tienes alguna:
Duda
Sugerencia
Agradecimiento
Correción de gramática
Etc.
Mi queridísimo Jesús, Tú, Quien nos amas tanto, permíteme en mi humilde manera, ayudar a salvar Tus preciosas almas. Ten misericordia de todos los pecadores, no importa cuán gravemente te ofendan. Permíteme que a través de la oración y del sufrimiento, ayude a aquellas almas que podrían no sobrevivir El Aviso, para que busquen un lugar a Tu lado, en Tu Reino. Escucha Mi oración oh Dulce Jesús, para ayudarte a ganar más de aquellas almas que Tú anhelas. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo juro (prometo) mi fidelidad a Tu Sacratísima Voluntad, en todo momento. Amén.
Mi Padre Eterno, en el Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, te pido que protejas a Tus hijos de la persecución que está siendo tramada por fuerzas globales en contra de naciones inocentes. Rezo por el perdón de los pecados de aquellas almas que son causantes de este sufrimiento, para que ellas puedan volverse a Ti con corazón humilde y contrito. Por favor, da a Tus hijos torturados, la fortaleza para resistir tales sufrimientos, en expiación por los pecados del mundo, a través de Cristo Nuestro Señor. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te ruego liberes al mundo del miedo, que separa las almas de Tu amoroso Corazón. Te pido que las almas que experimentarán verdadero miedo durante El Aviso, se detengan y permitan que Tu Misericordia inunde sus almas, para que puedan ser libres de amarte de la manera en que deberían. Amén.
Une Jesús, a todas las familias durante El Aviso, para que así ellas puedan recibir la Salvación eterna. Pido que todas las familias se mantengan juntas, en unión Contigo, Jesús, para que así puedan heredar Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
"Hija Mía, el mundo debe ofrecer esta oración especial en alabanza y acción de gracias a Dios Padre, por la Misericordia que Él está brindando al mundo entero."
Oh Padre Eterno, te ofrecemos nuestras oraciones en gozosa acción de gracias, por Tu precioso Don de Misericordia, para la humanidad entera. Nos regocijamos y te ofrecemos, gloriosísimo Rey, nuestra alabanza y adoración, por Tu amorosa y tierna Misericordia. Tú, Dios Altísimo, eres nuestro Rey y por este Don que ahora nos traes, nos postramos a Tus pies en humilde servidumbre. Por favor, Dios, ten misericordia con todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús, pido a Dios que en Su Misericordia, evite que el anticristo y su infame ejército, causen terror e inflijan sufrimiento a Tus hijos. Pedimos para que sea detenido y que la mano del castigo sea evitada, por la conversión que será alcanzada durante El Aviso. Amén.
"Ésta es la oración que Mi ejército de Oración debe decir, para pedir Misericordia por las almas que están en tinieblas:"
Jesús, te ruego que perdones a aquellos pecadores, que con el alma tan oscurecida, rechazarán la Luz de Tu Misericordia. Perdónalos, Jesús, te lo suplico, a fin de redimirlos de los pecados que ellos mismos encuentran tan difícil de extraerse. Inunda sus corazones con los Rayos de Tu Misericordia y dales la oportunidad de regresar a Tu redil. Amén.
"Esta oración, deberá rezarse para suplicar clemencia, para el perdón de los pecados, durante y después de El Aviso:"
Queridísimo Jesús, te pido perdón por todos mis pecados y por el daño y las heridas, que he causado a otros. Humildemente pido las gracias para evitar ofenderte otra vez y para ofrecer penitencia, de acuerdo a Tu Santísima Voluntad. Suplico el perdón de cualquier ofensa futura, en la cual podría tomar parte y que te causará dolor y sufrimiento. Llévame Contigo a la nueva Era de Paz, para que pueda ser parte de Tu familia, por la eternidad. Te amo Jesús. Te necesito. Te honro y honro todo lo que representas. Ayúdame, Jesús, para que sea digno de entrar en Tu Reino. Amén.
Oh Sacratísimo Corazón de Jesús, enséñame a aceptar los insultos en Tu Santo Nombre con humilde acción de gracias cuando proclame Tu Palabra. Enséñame a entender cómo la humillación, el dolor y el sufrimiento me acercan más a Tu Sagrado Corazón. Permíteme aceptar tales pruebas con amor y generosidad de espíritu, para que así pueda presentarlas como ofrendas tan preciadas para Ti, con el fin de salvar almas. Amén.
Ayúdanos, querido Jesús, a levantarnos sin miedo en Tu Nombre, para llevar la Llama de Tu Amor, a través de todas las naciones. Danos, a Tus hijos, la fuerza para afrontar el abuso que enfrentaremos, entre todos aquellos que no son verdaderos creyentes de Tu Misericordia. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, por favor detén el odio y los celos que existen entre Tus seguidores, hacia Tus verdaderos visionarios en estos tiempos. Pido que escuches mi oración, para darle a Tus visionarios la fuerza que necesitan, para proclamar Tu Santísima Palabra a un mundo incrédulo. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a evitar el pecado del orgullo, cuando hablo en Tu Nombre. Perdóname si alguna vez menosprecio a alguien en Tu Santo Nombre. Ayúdame a escuchar, Jesús, cuando Tu voz sea pronunciada y lléname de Tu Santo Espíritu, para que así pueda discernir la Verdad de Tu Palabra, cuando llames a la humanidad. Amén.
"Mi promesa solemne, hijos, es que todos aquellos que me invoquen en nombre de Mi Amado Hijo Jesucristo, para salvar a sus hermanos y hermanas, se les garantizará inmunidad inmediata. Se les darán Gracias especiales a cada uno de los que se comprometan todo un mes de oración por esas almas. Esto es lo que les pido que reciten:"
Oh Padre Celestial, a través del amor de Tu amado Hijo Jesucristo, cuya Pasión en la Cruz, nos salvó del pecado, por favor salva a todos aquellos que todavía rechazan la mano de Su Misericordia. Inunda sus almas, querido Padre, con el testimonio de Tu Amor. Te suplico, Padre Celestial, que escuches mi oración y salves estas almas, de la condenación eterna. A través de Tu Misericordia, permíteles ser los primeros en entrar a la Nueva Era de Paz en la Tierra. Amén.
Oh Padre Todopoderoso, Dios Altísimo, por favor, ten misericordia de todos los pecadores. Abre sus corazones para que acepten la salvación y que reciban Gracias en abundancia. Escucha mis súplicas por mi propia familia y asegura que cada uno encontrará favor en Tu Amoroso Corazón. Oh Divino Padre Celestial, protege a todos Tus hijos en la Tierra, de cualquier guerra nuclear o de otros actos que están siendo planeados para destruir a Tus hijos. Guárdanos de todo daño y protégenos. Ilumínanos, para que así podamos abrir nuestros ojos, escuchar y aceptar la Verdad de nuestra salvación, sin ningún temor en nuestras almas. Amén.
Para ser rezada especialmente en Navidad
Oh mi Padre Celestial, te honramos con una profunda apreciación* del Sacrificio que hiciste, cuando enviaste al Salvador al mundo. Te ofrecemos con gozo y acción de gracias, nuestra oración en humilde gratitud por el Don que ahora das a Tus hijos, el Don de la Divina Misericordia. Oh Dios Altísimo, haznos dignos de aceptar esta Gran Misericordia, con gratitud. Amén.
apreciación* = profundo agradecimiento / reconocimiento.
Oh Jesús mío, mantenme fuerte durante esta prueba de Tu Gran Misericordia. Dame las gracias necesarias para hacerme pequeño ante Tus ojos. Abre mis ojos a la Verdad de Tu promesa de Salvación Eterna. Perdona mis pecados y muéstrame Tu amor y Tu mano de amistad. Acógeme dentro de los brazos de la Sagrada Familia, para que así podamos ser uno de nuevo. Te amo Jesús y prometo desde este día en adelante, que proclamaré Tu Santa Palabra sin miedo en mi corazón y con pureza de alma por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación y Mediadora de todas la Gracias, tú, que vas a participar en salvar a la humanidad de la perversidad de Satanás, ruega por nosotros. Madre de la Salvación, reza para que todas las almas puedan ser salvadas y acepten el Amor y la Misericordia mostrados por tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo, Quien viene una vez más a salvar a la humanidad y para darnos la oportunidad de la salvación eterna. Amén.
Oh querido Jesús, salva del anticristo al mundo. Protégenos de los perversos engaños de Satanás. Salva del mal a los últimos remanentes de Tu Iglesia. Da a todas Tus iglesias la fuerza y las gracias necesarias para defendernos contra las guerras y persecuciones planeadas por Satanás y su ejército de terroristas. Amén.
Madre de la Salvación, te suplico que pidas Misericordia para almas jóvenes, que están en terrible oscuridad, para que así ellas reconozcan a tu amado Hijo cuando venga a redimir a la humanidad entera. No permitas que ni una sola alma se salga del camino. No permitas que ni una sola alma rechace Su Gran Misericordia. Yo rezo, Madre, para que todas se salven y te pido que cubras a estas almas con tu Sagrado Manto, para proveerles la protección que necesitan contra el engañador. Amén.
Oh Dios Padre, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te hago una llamada para detener al anticristo de atrapar las almas de Tus hijos. Te suplico Padre Omnipotente, que lo detengas de infligir terror en Tus hijos. Te suplico que lo detengas de contaminar Tu Creación y te pido que tengas Misericordia de aquellas pobres almas que serán impotentes en contra de él. Escucha mi oración, querido Padre, y salva a todos Tus hijos de este terrible mal. Amén.
Te alabamos y te agradecemos, Oh Santo Dios Todopoderoso Creador de la humanidad, por el amor y la compasión que tienes a la humanidad. Te agradecemos por el Don de la Salvación que otorgas a Tus pobres hijos. Te suplicamos Oh Señor, que salves a aquellos que siguen al maligno, y que sus corazones se les abran a la Verdad de su Vida Eterna. Amén.
"Le doy al mundo esta Cruzada de Oración para que el Clero Católico la rece:"
Oh mi Amado Jesús, mantenme fuerte y la llama de mi amor por Ti encendida, en todo momento de mi día. Nunca permitas que esta llama de amor por Ti titubee o muera. Nunca permitas que me debilite ante la presencia de la tentación. Dame las gracias necesarias para honrar mi vocación, mi devoción, mi lealtad y para defender las Enseñanzas de la Iglesia Católica ortodoxa. Te ofrezco mi lealtad en todo momento. Yo me comprometo a luchar en Tu Ejército, para que así la Iglesia Católica pueda levantarse otra vez en gloria para darte la bienvenida, querido Jesús, cuando vengas de nuevo. Amén.
Oh mi Padre Eterno, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y por los sufrimientos que padeció para salvar al mundo del pecado, te pido ahora que protejas a Tu Santo Vicario, el Papa Benedicto, Cabeza de Tu Iglesia en la Tierra, para que así él también pueda ayudar a salvar a Tus hijos y a todos Tus siervos consagrados del flagelo de Satanás y de sus dominios de ángeles caídos, que caminan por la Tierra, robando almas. Oh Padre, protege a Tu Papa, para que Tus hijos puedan ser guiados en el verdadero sendero hacia Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Esta oración es para católicos y no católicos, pero deben tener el propósito de no volver a pecar para recibir la absolución de los pecados pasados. Los católicos todavía están obligados a confesarse si hay sacerdotes disponibles. Los católicos no deben usar esta oración como un sustituto mientras puedan confesarse.
"Deben decir esta oración por 7 días consecutivos y les será dado el Don de la Absolución Total y el poder del Espíritu Santo:"
Oh Jesús mío, Tú eres la Luz de la Tierra. Eres la Llama que toca todas las almas. Tu Misericordia y Amor no conocen límites. No somos dignos del Sacrificio que hiciste con Tu muerte en la Cruz, sin embargo sabemos que Tu Amor por nosotros es mayor que el amor que tenemos por Ti. Concédenos, Oh Señor, el Don de la Humildad, para que así seamos merecedores de Tu Nuevo Reino. Llénanos con el Espíritu Santo, para que así podamos marchar hacia adelante y guiar a Tu Ejército para proclamar la Verdad de Tu Santa Palabra y preparar a nuestros hermanos y hermanas para la Gloria de Tu Segunda Venida a la Tierra. Te honramos. Te alabamos. Nosotros mismos nos ofrecemos, nuestras penas, nuestros sufrimientos, como una ofrenda a Ti para la salvación de las almas. Te amamos Jesús. Ten Misericordia de todos Tus hijos donde sea que se encuentren. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplico que brindes protección a todos Tus santos mensajeros en el mundo. Te pido que sean protegidos del odio de otros. Te pido que Tu Santísima Palabra sea difundida rápidamente por todo el mundo. Protege a Tus mensajeros de la calumnia, el abuso, las mentiras y de todo tipo de peligro. Protege a sus familias y cúbrelos con el Espíritu Santo en todo momento, para que los Mensajes que ellos dan al mundo, sean escuchados con corazón contrito y humilde. Amén.
Nuestra Señora insta a las personas a que digan su Santo Rosario (los 3 Misterios) diariamente para ayudar a salvar su país y familia.
Oh Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de Gracia ocultos en el Rosario. Infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las Gracias por las que ruego en este Rosario. (Aquí mencionar la petición).
Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por tu propio honor y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.
Oh Jesús mío, te suplico Misericordia para aquellos afligidos por las terribles guerras. Te ruego que la paz sea instaurada en aquellas naciones atormentadas, que están ciegas a la Verdad de Tu Existencia. Por favor cubre a estas naciones con la Fuerza del Espíritu Santo, para que ellas detengan su afán de poder sobre almas inocentes. Ten Misericordia con todos Tus países que son impotentes contra las atrocidades del mal, que cubren el mundo entero. Amén.
Oh Dios Altísimo, nos arrodillamos ante Ti para suplicarte por la unificación de todos Tus hijos en la lucha por conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra. No permitas que nuestras diferencias nos dividan en este tiempo de gran apostasía en el mundo. En nuestro amor por Ti, querido Padre, te imploramos que nos des las Gracias para amarnos unos a otros en el Nombre de Tu amado Hijo Nuestro Salvador Jesucristo. Te adoramos. Te amamos. Nos unimos para luchar por la fuerza de conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra durante pruebas que podamos enfrentar en los años venideros. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te pido que derrames Tu Espíritu Santo sobre todos Tus hijos. Te ruego que perdones a aquellos que tienen odio por Ti en sus almas. Yo pido que los ateos abran sus endurecidos corazones durante Tu Gran Misericordia, y que Tus hijos que te aman puedan honrarte con dignidad para levantarse sobre toda persecución. Por favor llena a todos Tus hijos con el Don de Tu Espíritu, para que así se puedan levantar con valor y dirijan a Tu Ejército a la batalla final en contra de Satanás, sus demonios y todas aquellas almas, que son esclavas de sus falsas promesas. Amén.
Oh mi Padre Eterno, Dios Creador del Universo, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te suplico que nos hagas amarte más. Ayúdanos a ser valientes, audaces, y fuertes ante la adversidad y acepta nuestros sacrificios, sufrimientos y pruebas como un regalo ante Tu Trono para salvar a Tus hijos en la Tierra. Suaviza los corazones de las almas impuras. Abre sus ojos a la Verdad de Tu amor, para que así ellas puedan unirse con todos Tu hijos en el Paraíso de la Tierra que tan amorosamente creaste para nosotros, de acuerdo a Tu Divina Voluntad. Amén.
Oh Jesús mío, permite que mi oración invoque Tu Santo Espíritu, para que descienda sobre aquellos líderes impulsados por la lujuria, la codicia, la avaricia y el orgullo, para detener la persecución de Tus inocentes hijos. Te ruego que impidas que la pobreza, la hambruna y las guerras devoren a Tus hijos, y pido para que los líderes europeos abran sus corazones a la Verdad de Tu Amor. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ruega por tus hijos en Irlanda para que impidan que el acto perverso del aborto sea impuesto sobre nosotros. Protege esta santa nación de caer más profundo en la desesperanza por la oscuridad que cubre nuestro país. Líbranos del maligno que quiere destruir a Tus hijos que aún no han nacido. Pide que esos líderes tengan la valentía de escuchar a aquellos que aman a tu Hijo, para que así ellos sigan las Enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Dios Padre pide que todos acepten este Sello como una protección para todos y cada uno de nosotros, y nuestras familias, durante los futuros tiempos difíciles en los que tendremos que vivir.
Oh Dios Mío, mi Padre amoroso, yo acepto con amor y gratitud Tu Sello Divino de Protección. Tu Divinidad abarca mi cuerpo y alma por la eternidad. Me inclino en humilde acción de gracias y te ofrezco mi profundo amor y lealtad a Ti, mi amado Padre. Te suplico que me protejas a mí y a mis seres queridos con este Sello especial y comprometo mi vida a Tu servicio por los siglos de los siglos. Te amo querido Padre. Te consuelo en estos momentos, querido Padre. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma, y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo en expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame en mi humilde manera, imitar Tu vida de sacrificio con el fin de salvar a la humanidad. Permíteme ofrecerte el regalo de ayunar un día a la semana, durante la Cuaresma, para salvar a la humanidad, para que así ellos puedan entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Te ofrezco, querido Jesús, mi sacrificio con amor y alegría en mi corazón. Para mostrarte la medida de mi amor, a través de este sacrificio, te suplico por la salvación de toda alma que pueda haber caído fuera del estado de gracia. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a ayudarte a salvar al remanente de Tus hijos en la Tierra. Pido que, a través de Tu Misericordia, rescates del espíritu de la oscuridad las almas. Acepta mis pruebas, sufrimientos y penas en esta vida, para salvar almas del fuego del Infierno. Lléname con las Gracias para ofrecerte estos sufrimientos con amor y alegría en mi corazón, para que así todos nosotros nos unamos como uno solo en amor por la Santísima Trinidad y vivamos Contigo, como una sola Santa Familia en el Paraíso. Amén.
Jesús ayúdame, porque estoy perdido y confundido. No conozco la Verdad de la vida después de la muerte. Perdóname si te ofendo al honrar falsos dioses, que no son el Verdadero Dios. Sálvame y ayúdame a ver la Verdad con claridad y sálvame de la oscuridad de mi alma. Ayúdame a venir a la Luz de Tu Misericordia. Amén.
Oh querido Jesús, une en el amor a todos Tus Amados seguidores, para que podamos difundir la Verdad de Tu Promesa de Salvación Eterna a lo largo del mundo entero. Pedimos que aquellas almas tibias, temerosas de ofrecerse a sí mismas a Ti en mente, cuerpo y alma, bajen su armadura de orgullo y abran sus corazones a Tu amor, y sean parte de Tu santa familia en la Tierra. Abraza a todas aquellas almas perdidas, querido Jesús, y permite que nuestro amor, como sus hermanos y hermanas, las saque del desierto y las lleve con nosotros al Regazo, Amor y Luz de la Santísima Trinidad. Ponemos toda nuestra esperanza, confianza y amor en Tus Santas manos. Te suplicamos que expandas nuestra devoción para que así podamos ayudar a salvar más almas. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, por favor pide por la Iglesia Católica en estos tiempos difíciles y por nuestro bienamado Papa Benedicto XVI, para aliviar su sufrimiento. Te pedimos, Madre de la Salvación, que cubras a los siervos consagrados de Dios con tu Santo Manto, para que así les sean dadas las Gracias para ser fuertes, fieles y valientes durante las pruebas que afronten. Pide también que ellos cuiden de su rebaño de acuerdo con las Verdaderas Enseñanzas de la Iglesia Católica. Oh Santa Madre de Dios, danos a tu Iglesia remanente en la Tierra, el Don del liderazgo para que así podamos ayudar a guiar a las almas hacia el Reino de tu Hijo. Te pedimos, Madre de la Salvación, que mantengas al engañador alejado de los seguidores de tu Hijo, que buscan salvaguardar sus almas, para que sean dignos de entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh Jesús, mi amado Salvador, te pido que me cubras con Tu Santo Espíritu, para que así yo pueda hablar con autoridad Tu Santísima Palabra, para preparar a todos los hijos de Dios, para Tu Segunda Venida. Te suplico, Señor Jesús, por todas las Gracias que necesito, para que así yo pueda alcanzar a todas las religiones, credos y nacionalidades, por donde sea que yo vaya. Ayúdame a hablar con Tu lengua, aliviar a las pobres almas con Tus labios y amar todas las almas con el especial Divino Amor, el cual emana de Tu Sagrado Corazón. Ayúdame a salvar las almas muy cercanas a Tu Corazón y permíteme consolarte, querido Jesús, cuando las almas confundidas continúen rechazando Tu Misericordia. Jesús, yo soy nada sin Ti, pero con Tu generosa ayuda, lucharé en Tu Nombre, para ayudar a salvar a la humanidad entera. Amén.
Oh Jesús mío, yo no soy más que un humilde siervo y necesito que me guíes, para que pueda preparar almas para Tu Gloriosa Segunda Venida. Ayúdame a convertir almas y a prepararlas de acuerdo a Tu Santa Voluntad, para que así ellas sean dignas de entrar al Nuevo Cielo y Tierra, que prometiste a toda la humanidad, mediante Tu muerte en la Cruz. Dame las Gracias que necesito, para que así pueda impartir Tu Palabra a las almas sedientas y que nunca renuncie a mi deber a Ti, querido Jesús, a Quien yo prometí mi lealtad a través de mis Votos Sagrados. Amén.
Oh Jesús mío, ayuda a Tus pobres hijos quienes están ciegos a Tu Promesa de Salvación. Te suplico, con la ayuda de mis oraciones y sufrimientos, que abras los ojos de los no creyentes, para que así ellos puedan ver Tu tierno Amor y corran hacia Tus Sagrados Brazos por protección. Ayúdalos a ver la Verdad y a buscar perdón por todos sus pecados, para que así ellos puedan ser salvados y ser los primeros en entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso. Te pido por estas pobres almas, incluyendo hombres, mujeres y niños y te insto a que los absuelvas de sus pecados. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y en conmemoración de Su muerte en la Cruz, para salvarnos de nuestros pecados, te suplico que salves las almas que no se pueden salvar ellas mismas y que pueden morir en pecado mortal durante El Aviso. En expiación por los sufrimientos de Tu amado Hijo, te ruego que perdones a aquellos que no son capaces de buscar Redención, porque ellos no vivirán lo suficiente para pedir a Jesús, Tu Hijo, por Misericordia para liberarlos del pecado. Amén.
Querido Jesús, dame la fortaleza para concentrarme en Tus Enseñanzas y para proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Nunca me permitas ser tentado a idolatrar al falso profeta, quien tratará de presentarse a sí mismo como Tú. Mantén fuerte mi amor por Ti. Dame la Gracia del Discernimiento, para que jamás niegue la Verdad contenida en la Santa Biblia, sin hacer caso de cuantas mentiras me sean presentadas con el propósito de alentarme a darle la espalda a Tu Verdadera Palabra. Amén.
Oh Jesús, conozco tan poco de Ti, pero por favor, ayúdame a abrir mi corazón para dejarte entrar en mi alma, para que así puedas sanarme, consolarme y llenarme con Tu Paz.
Ayúdame a sentir alegría, vencer todos los pensamientos negativos y aprender la manera de hacerme comprender cómo complacerte, para que así yo pueda entrar en Tu Nuevo Paraíso, en donde pueda vivir una vida de amor, alegría y maravilla Contigo, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Jesús, estoy perdido. Estoy confundido y me siento como un prisionero atrapado en una red de la cual no puedo escapar. Confío en que Tú, Jesús, vendrás en mi ayuda y me liberarás de las cadenas de Satanás y sus demonios. Ayúdame porque estoy perdido. Necesito Tu amor para que me dé la fortaleza de creer en Ti y confiar en Ti, para que así pueda ser salvado de este mal y se me muestre la Luz - para que por fin pueda encontrar paz, amor y felicidad. Amén.
Oh Bendita Madre, Madre de la Salvación para el mundo entero, ruega para que mi amor por Jesús pueda volver a encenderse. Ayúdame a sentir la Llama de Su Amor, para que ésta llene mi alma. Ayúdame para amar más a Jesús. Ruega para que mi fe, amor y devoción hacia Él, se hagan más fuertes. Disipa cualquier duda que me atormente y ayúdame a ver claramente la Divina Luz de la Verdad que irradia de tu amado Hijo, el Salvador de toda la humanidad. Amén.
Oh Jesús mío, concédeme la Gracia de proclamar Tu Santa Palabra a toda la humanidad para que las almas puedan ser salvadas. Derrama Tu Santo Espíritu sobre mí, Tu humilde siervo, para que así Tu Santa Palabra pueda ser escuchada y aceptada, especialmente por aquellas almas que más necesitan Tu Misericordia. Ayúdame a honrar Tu Santa Voluntad en todo momento y a nunca ofender o condenar a aquellos que rechazan la Mano de Tu Misericordia. Amén.
Oh Jesús, soy Tu humilde siervo, y te prometo mi amor y lealtad. Te suplico que me des una señal de Tu llamada. Ayúdame a abrir mis ojos y ser testigo de Tu Promesa. Bendíceme con la Gracia del Espíritu Santo, para que no sea engañado por quienes afirman venir en Tu Nombre, pero que no dicen la Verdad. Muéstrame la Verdad. Permíteme sentir Tu Amor para que pueda cumplir Tu Santísima Voluntad. Te pido, con humilde corazón, que me muestres el camino por el cual te puedo ayudar a salvar las almas de la humanidad. Amén.
Oh querido Jesús, ayúdame a saber Quién Eres. Perdóname por no haber hablado antes Contigo. Ayúdame a encontrar paz en esta vida, y que me sea mostrada la Verdad de la Vida Eterna. Consuela mi corazón. Alivia mis preocupaciones. Dame paz. Abre ahora mi corazón para que puedas llenar mi alma con Tu Amor. Amén.
Oh Espíritu Santo ven, derrama Tus Dones de Amor, Sabiduría y Entendimiento sobre mi humilde alma. Lléname con la Luz de la Verdad para que pueda distinguir la Verdad de Dios, de las mentiras esparcidas por Satanás y sus ángeles. Ayúdame a asir la antorcha, y a transmitir la Llama del Entendimiento a todos los que encuentre, por Cristo, Nuestro Señor. Amén.
Mi amadísimo Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo y en Memoria de Su Pasión en la Cruz, acudo a Ti. Tú, Dios Altísimo, Creador del Mundo y de todo lo que es, sostén nuestra salvación en Tus Santas Manos. Abraza a todos Tus hijos, incluyendo aquellos que no te conocen y a los que sí, pero que apartan su mirada. Perdona nuestros pecados y sálvanos de la persecución de Satanás y su ejército. Tómanos en Tus Brazos y llénanos con la esperanza que necesitamos para ver el camino de la Verdad. Amén.
Oh Dios Padre, en Nombre de Tu amado Hijo, te suplico que concedas la fuerza y las Gracias necesarias para ayudar a los Sacerdotes a resistir la persecución que padecen. Ayúdalos a aferrarse a la Verdad de las Enseñanzas de Tu Hijo Jesucristo, y a nunca renunciar, debilitarse o someterse a las falsedades acerca de la existencia de la Sagrada Eucaristía. Amén.
Oh Padre celestial, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, Quien sufrió grandemente por los pecados de la humanidad, por favor ayúdanos en estos tiempos difíciles que enfrentamos. Ayúdanos a sobrevivir a la persecución que está siendo planeada por los gobernantes codiciosos y por aquellos que quieren destruir Tus Iglesias y a Tus hijos. Te imploramos, querido Padre, que nos ayudes a alimentar a nuestras familias y salves las vidas de aquellos que serán forzados a una guerra, en contra de su voluntad. Te amamos querido Padre. Te suplicamos que nos ayudes en este, nuestro tiempo de necesidad. Sálvanos de las garras del anticristo. Ayúdanos a sobrevivir su marca, la marca de la bestia, al negarnos a aceptarla. Ayuda a los que te aman a permanecer fieles a Tu Santa Palabra en todo momento, para que así nos concedas las Gracias para sobrevivir en cuerpo y en alma. Amén.
Oh mi querido Jesús, por favor abre los corazones de todos los hijos de Dios al Don de Tu gran Misericordia. Ayúdalos a aceptar Tu Divina Misericordia con amor y gratitud. Permíteles que puedan volverse humildes ante Ti y que puedan suplicar perdón por sus pecados, para que lleguen a ser parte de Tu Glorioso Reino. Amén.
Oh amado Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo, Quien se sacrificó a Sí mismo en la Cruz por la humanidad entera, ayúdame a permanecer fiel a la Verdad. Cúbreme con la Sangre Preciosa de Tu Hijo y concédeme las Gracias para continuar sirviéndote en fe, confianza y honra, por el resto de mi ministerio. Nunca permitas que me desvíe del Verdadero Significado del Sacrificio de la Santa Misa, ni de la forma de suministrar la Sagrada Eucaristía a Tus hijos. Dame la fortaleza para representarte, y alimentar Tu rebaño como debe ser alimentado, con el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Hijo Jesucristo, el Salvador de la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, abre mis oídos al sonido de Tu Voz. Abre mi corazón a Tu llamada amorosa. Colma mi alma con el Espíritu Santo, para que pueda reconocerte en este momento. Te ofrezco mi humilde lealtad a todo lo que me solicites. Ayúdame a discernir la Verdad, a levantarme, responder y seguir Tu Voz, para que pueda ayudarte a salvar las almas de toda la humanidad. Tu Voluntad es mandato para mí. Dame valor para dejarme guiar por Ti, para que pueda tomar la armadura necesaria para dirigir a Tu Iglesia hacia Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
"Mi amadísima hija, así como Mi Padre Eterno legó el Gran Don de Su Sello a la humanidad así, también, deben sus hijos prometer su lealtad a Su Divina Voluntad. Pido a todos los hijos de Dios, que marcharán hacia adelante en Su ejército, que ayuden a salvar las almas de todos los hijos de Dios, incluyendo los endurecidos pecadores, a que tomen este compromiso."
Oh Dios Altísimo, Oh Padre Celestial, te prometo mi lealtad permanente para honrarte y obedecerte en todas las cosas unido a Tu Divina Voluntad aquí en la Tierra. Yo, por la Sagrada Sangre de Tu Único Hijo amado, el Verdadero Mesías, te ofrezco mi mente, mi cuerpo y mi alma en nombre de todas las almas, para que podamos unirnos, como uno, en Tu Reino Celestial que está por venir, para que Tu Divina Voluntad sea hecha en la Tierra así como en el Cielo. Amén.
"Hijos de Dios, prepárense cada día para El Aviso, porque puede suceder en cualquier momento."
Oh querido Dulce Jesús, suplico Misericordia para las almas de mi familia (mencionar aquí sus nombres...). Te ofrezco mis sufrimientos, mis pruebas y mis oraciones para salvar sus almas del espíritu de la oscuridad. No permitas que ninguno de estos, Tus hijos, te condenen o rechacen Tu Mano de Misericordia. Abre sus corazones para que se entrelacen con Tu Sagrado Corazón, para que así puedan buscar el perdón necesario para salvarse de las llamas del Infierno. Dales la oportunidad de enmendarse para que puedan ser convertidos con los Rayos de Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh amado Padre Celestial, en Memoria de la Crucifixión de Tu amado Hijo Jesucristo, te suplico que nos protejas, Tus hijos, de la crucifixión que está siendo planeada por el anticristo y sus seguidores para destruir a Tus hijos. Danos las Gracias que necesitamos para rechazar la marca de la bestia y concédenos la ayuda necesaria para luchar contra el mal en el mundo, propagado por aquellos que siguen el camino de Satanás. Te suplicamos, querido Padre, que protejas a todos Tus hijos en estos tiempos terribles y haznos suficientemente fuertes para levantarnos y proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Amén.
Oh Jesús, ayúdame, pues soy un pecador extraviado, desamparado y en la oscuridad. Soy débil y me falta valor para buscarte. Dame fuerzas para llamarte ahora y así poder despojarme de la oscuridad dentro de mi alma. Introdúceme en Tu Luz, querido Jesús. Perdóname. Ayúdame a ser íntegro nuevamente y guíame a Tu Amor, Paz y Vida Eterna. Confío completamente en Ti y te pido que me tomes en mente, cuerpo y alma, mientras yo me entrego a Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh mi amada Madre de la Salvación, te pido que reces para que me sea dado el Alimento de Vida para que me sustente en esta jornada, y me ayude a salvar a todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que están siendo engañados por falsos ídolos y falsos dioses para que abran sus ojos a la Verdad de la Muerte de Tu Hijo, que murió en la Cruz, para salvar a todos los hijos de Dios y llevar a cada uno a la Vida Eterna. Amén.
Oh mi amadísimo Salvador Jesucristo, acepta mi regalo de oración y sacrificios para ayudar a salvar a mis hermanos y hermanas de la prisión de oscuridad en la que se encuentran. Permíteme ayudar a salvar sus almas. Te suplico que les perdones sus pecados y te pido que inundes sus almas con el Espíritu Santo para que corran hacia Tus Brazos como el refugio que ellos tan desesperadamente necesitan, antes de que se pierdan para siempre. Te ofrezco el regalo de mi entrega por tales almas, en humilde servicio y gratitud. Amén.
Oh querido Jesús, Salvador de la humanidad, a través de Tu Divina Misericordia, suplico clemencia por todas aquellas pobres almas en pecado que puedan ser llevadas de esta Tierra durante El Aviso. Perdónales sus pecados y en memoria de Tu Pasión, te ruego que me concedas este favor especial en expiación por sus pecados. Me ofrezco a Ti, en mente, cuerpo y alma, como una penitencia para salvar sus almas y traerles Vida Eterna. Amén.
Oh amado Jesús, ayúdame a permanecer fiel a Tu Santísima Palabra en todo momento. Dame fuerzas para defender la Verdad de Tu Iglesia ante la adversidad. Cólmame con la Gracia para administrar los Santos Sacramentos de la manera como Tú nos enseñaste. Ayúdame a alimentar a Tu Iglesia con el Pan de Vida y a permanecer fiel a Ti, aun cuando se me prohíba hacerlo. Libérame de la cadena de engaños que se me pudiera presentar, para que pueda proclamar la Verdadera Palabra de Dios. Cubre a todos Tus siervos consagrados, en este tiempo, con Tu Preciosa Sangre, para que permanezcamos valientes, fieles y firmes en nuestra lealtad a Ti, nuestro amado Salvador Jesucristo. Amén.
Por favor, amado Jesús, te pido que mantengas a mis hijos a salvo del rey de las mentiras. Consagro a estos niños (decir sus nombres…) a Tu Sagrado Corazón y te pido que, por medio del manto de Tu Preciosa Sangre, ilumines sus almas y los pongas a salvo en Tus amorosos Brazos para que puedan ser protegidos de todo daño. Te pido que abras sus corazones e inundes sus almas con Tu Santo Espíritu durante la Iluminación de las Conciencias, para que sean limpiados de toda iniquidad. Amén.
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, cúbreme con Tu Santísimo Manto y protege a mi familia de la influencia de Satanás y de sus ángeles caídos. Ayúdame a confiar en la Divina Misericordia de tu amado Hijo, Jesucristo, en todo momento. Presérvame en mi amor por Él y nunca permitas que me aparte de la Verdad de Sus Enseñanzas, sin importar cuántas tentaciones sean colocadas delante de mí. Amén.
Dios, Padre Todopoderoso, acepto Tu Divina Voluntad. Ayuda a Tus hijos a aceptarla. Impide que Satanás prive el derecho que tienen Tus hijos a la herencia de su Padre. Nunca permitas que nos demos por vencidos en la lucha por nuestra herencia en el Paraíso. Escucha nuestras súplicas para desterrar a Satanás y a sus ángeles caídos. Te pido, querido Padre, que purifiques la Tierra con Tu Misericordia y que nos cubras con Tu Santo Espíritu. Guíanos para constituir Tu Santísimo Ejército, provisto con el poder para desterrar por siempre a la bestia. Amén.
Oh querido Jesús, ayuda a Tus siervos consagrados para que reconozcan el cisma que se está desarrollando dentro de Tu Iglesia. Ayuda a Tus siervos consagrados a permanecer firmes y fieles a Tu Santa Palabra. No permitas nunca que las ambiciones mundanas empañen su amor puro hacia Ti. Concédeles la Gracia de permanecer puros y humildes ante Ti y de honrar Tu Santísima Presencia en la Eucaristía. Ayuda y guía a todos aquellos siervos consagrados que pueden ser tibios en su amor por Ti y reaviva el Fuego del Espíritu Santo en sus almas. Ayúdalos a reconocer las tentaciones que se les presentan para distraerlos. Abre sus ojos para que puedan ver la Verdad en todo momento. Bendícelos en estos tiempos, querido Jesús, y cúbrelos con Tu Preciosa Sangre para conservarlos a salvo de todo daño. Dales la fuerza para resistir la seducción de Satanás, en caso de que fueran perturbados por la tentación de negar la existencia del pecado. Amén.
Oh Jesús, salva a los hijos de Dios del anticristo. Protégenos de los planes para controlar la Tierra. Señor, sálvanos de la persecución. A las almas oscuras protégelas del anticristo para que puedan ser redimidas ante Tus Ojos. Ayúdanos en nuestra debilidad. Fortalécenos en espíritu para que nos pongamos de pie y unos a otros nos guiemos, mientras marchamos en Tu Ejército hacia las Puertas del Paraíso. Yo te necesito, querido Jesús. Yo te amo, querido Jesús. Glorifico Tu Presencia en la Tierra. Rechazo la oscuridad. Te adoro y me entrego a Ti, en cuerpo y espíritu, y así puedas revelarme la Verdad de Tu Presencia de modo que yo siempre confíe en Tu Misericordia en todo momento. Amén.
Querido Jesús, estoy dispuesto a propagar Tu Santa Palabra. Dame el valor, la fuerza y el conocimiento para transmitir la Verdad para que tantas almas como sea posible puedan ser llevadas a Ti. Acógeme en Tu Sagrado Corazón y cúbreme con Tu Preciosa Sangre para que sea llenado con las Gracias para propagar la conversión para la Salvación de todos los hijos de Dios en todas partes del mundo, no importando cuál sea su credo. Confío siempre en Ti. Tu amado discípulo. Amén.
Oh Jesús, ayúdame a salvar las almas de la gente joven de todo el mundo. Por tu Gracia, ayúdalos a ver la Verdad de Tu Existencia. Llévalos a Tu Sagrado Corazón y abre sus ojos a Tu Amor y Misericordia. Sálvalos del fuego del Infierno y por medio de mis oraciones ten Misericordia de sus almas. Amén.
Oh Madre de Dios, ayúdame a preparar mi alma para el Don del Espíritu Santo. Llévame de la mano como a un niño, y condúceme en el camino hacia el Don de Discernimiento, por el poder del Espíritu Santo. Abre mi corazón y enséñame a entregarme en cuerpo, mente y alma. Libérame del pecado del orgullo y ruega para que yo sea Perdonado de todos los pecados pasados, para que así mi alma sea purificada y que yo sea sanado, para que pueda recibir el Don del Espíritu Santo. Te doy gracias, Madre de la Salvación, por tu intercesión, y con amor en mi corazón espero por este Don, el cual anhelo con alegría. Amén.
Jesús, te entrego mi dolor y mi sufrimiento por lo que Tú sufriste durante Tu Agonía en el Calvario. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco a Ti. Cada abuso y ataque verbal que sufro, te lo ofrezco en honor a Tu Coronación de Espinas. Cada crítica injusta hacia mí, la ofrezco en honor a Tu humillación frente a Pilato. Cada tormento físico que soporto de manos de otros, te lo ofrezco en honor de Tu Flagelación en la Columna. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco en honor de la tortura corporal que sufriste durante la Coronación de Espinas, cuando estas te lisiaron Tu ojo. Cada vez que te imite, cuando transmita Tus Enseñanzas y cuando se burlen de mí en Tu Nombre, permite que te ayude en el camino hacia el Calvario. Ayúdame a estar libre de orgullo, y a nunca tener miedo de admitir que te amo, querido Jesús. Y luego, cuando todo parezca no tener esperanza en mi vida, querido Jesús, ayúdame a ser valiente, recordando cómo Tú voluntariamente permitiste ser crucificado de ese modo vil y cruel. Ayúdame a levantarme y a ser considerado como verdadero cristiano, un verdadero (fiel) soldado en Tu Ejército, humilde y de corazón contrito, en memoria del Sacrificio que Tú hiciste por mí. Toma mi mano, querido Jesús y enséñame cómo mi propio sufrimiento puede inspirar a otros a unirse a Tu Ejército junto con almas simpatizantes que te aman. Ayúdame a aceptar el sufrimiento y a ofrecértelo como una ofrenda para salvar almas en la batalla final contra la tiranía del maligno. Amén.
Jesús, ayúdame a aceptar el Amor de Dios como se me está siendo mostrado. Abre mis ojos, mi mente, mi corazón y mi alma, para que pueda ser salvado. Ayúdame a creer llenando mi corazón con Tu amor. Luego, sujétame y sálvame del tormento de la duda. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial, Dios Creador del hombre, por favor escucha mi oración. Te ruego que salves a Gran Bretaña de las garras del mal y la dictadura. Te pido que nos unas a todos, de todas las religiones, credos y colores como una sola familia ante Tus Ojos. Danos la fuerza para unirnos en oposición de todas las leyes introducidas para proscribir* Tus Enseñanzas. Danos la fuerza y el valor para nunca abandonarte y para ayudar a salvar a todos Tus hijos a través de nuestras oraciones. Congrega a todos mis hermanos y hermanas en unidad para rendir homenaje a Tu Promesa de traernos Vida Eterna y la entrada a Tu Paraíso. Amén. proscribir* = prohibir, excluir el uso o una constumbre.
Oh Jesús, protégeme del poder de Satanás. Llévame a Tu Corazón, mientras que yo me libero de toda mi lealtad a él y a sus malos caminos. Te entrego mi voluntad y vengo ante Ti de rodillas con un corazón humilde y contrito. Dejo mi vida en Tus Santos Brazos. Sálvame del mal. Libérame y llévame a Tu refugio seguro de protección ahora y para siempre. Amén.
Oh querido Jesús, te ruego que derrames Tu Misericordia sobre las almas perdidas. Perdónales su rechazo hacia Ti y utiliza mi oración y sufrimiento, para que así Tú puedas, mediante Tu Misericordia, derramar sobre ellos las Gracias que necesitan para santificar sus almas. Te pido el Don de Clemencia para sus almas. Te pido que abras sus corazones para que vayan a Ti y te pido que los llenes con el Espíritu Santo, para que puedan aceptar la Verdad de Tu Amor y vivir Contigo y con toda la familia de Dios para siempre. Amén.
Oh querido Jesús, te suplico Misericordia para quienes cometen asesinatos. Insto por clemencia para quienes están en pecado mortal. Te ofrezco mi propio sufrimiento y dificultades para que puedas abrir Tu Corazón y les perdones sus pecados. Te pido que cubras con tu Preciosa Sangre a todos aquellos con mala intención en sus almas, para que así ellos puedan ser lavados y purificados de sus iniquidades. Amén.
Oh Pan Celestial, llena mi cuerpo con el nutrimento (sustento) que necesita. Llena mi alma con la Presencia Divina de Jesucristo. Dame las Gracias para cumplir la Santa Voluntad de Dios. Lléname con la paz y la calma que provienen de Tu Sagrada Presencia. Nunca me dejes dudar de Tu Presencia. Ayúdame a aceptarte en Cuerpo y Alma, y que, mediante la Sagrada Eucaristía, las Gracias otorgadas sobre mí me ayuden a proclamar la Gloria de Nuestro Señor Jesucristo. Purifica mi corazón. Abre mi alma y santifícame cuando reciba el Gran Don de la Sagrada Eucaristía. Concédeme las Gracias y los favores otorgados sobre todos los hijos de Dios, y concédeme inmunidad contra las llamas del Purgatorio. Amén.
Jesús, Rey y Salvador del mundo, a Ti prometemos nuestro honor, nuestra lealtad y obras, para proclamar Tu Gloria a todos. Ayúdanos a obtener la fortaleza y la confianza, para levantarnos y declarar la Verdad en todo momento. Nunca nos permitas vacilar o retrasarnos en nuestra marcha hacia la victoria y en nuestro plan de salvar almas. Prometemos nuestra entrega, nuestros corazones y todo lo que poseemos, para que estemos libres de obstáculos, mientras continuamos el espinoso camino hacia las Puertas del Nuevo Paraíso. Te amamos, queridísimo Jesús, nuestro amado Salvador y Redentor. Nos unimos en cuerpo, mente y espíritu dentro de Tu Sagrado Corazón. Derrama sobre nosotros Tu gracia de Protección. Cúbrenos con Tu Preciosa Sangre, para que seamos llenados con valentía y amor para levantarnos y declarar la Verdad de Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Padre, Dios Altísimo, nosotros, Tus pobres hijos, nos postramos ante Tu Glorioso Trono en el Cielo. Te rogamos que libres del mal al mundo. Imploramos Tu Misericordia por las almas de aquellos que causan terribles sufrimientos a Tus hijos en la Tierra. Por favor perdónalos. Por favor elimina al anticristo, tan pronto como él se dé a conocer. Te pedimos, querido Señor, que mitigues Tu Mano de Castigo. En cambio, te rogamos que aceptes nuestras oraciones y nuestros sufrimientos, para aliviar los sufrimientos de Tus hijos, en este momento. Confiamos en Ti. Te honramos. Te damos gracias por el gran Sacrificio que hiciste cuando enviaste a Tu único Hijo, Jesucristo, para salvarnos del pecado. Damos la bienvenida a Tu Hijo, una vez más, como el Salvador de la humanidad. Por favor protégenos. Guárdanos del mal. Ayuda a nuestras familias. Ten Misericordia de nosotros. Amén.
Oh amado Jesús, te suplico que ilumines las almas de las elites que gobiernan el mundo. Muéstrales la prueba de Tu Misericordia. Ayúdalos a estar abiertos de corazón y mostrar verdadera humildad, en honor de Tu Gran Sacrificio, por Tu muerte en la Cruz, cuando moriste por sus pecados. Ayúdalos a discernir Quién es su Verdadero Hacedor, Quién es su Creador, y llénalos con las Gracias para ver la Verdad. Por favor, impide que se lleven a cabo sus planes de herir a millones de personas mediante las vacunas, la escasez de alimentos, las adopciones forzadas de niños inocentes y la división de las familias. Sánalos. Cúbrelos con Tu Luz y llévalos al Regazo de Tu Corazón para salvarlos de las acechanzas del maligno. Amén.
Oh querido Jesús, cubre nuestra nación con Tu Más Preciada Protección. Perdona nuestros pecados en contra de los Mandamientos de Dios. Ayuda al pueblo estadounidense a volver a Dios. Abre sus mentes al Verdadero Sendero del Señor. Desbloquea sus corazones endurecidos, a fin de que den la bienvenida a Tu Mano de Misericordia. Ayuda a esta nación a levantarse contra las blasfemias, las cuales puedan ser infligidas a nosotros para obligarnos a negar Tu Presencia. Te rogamos, Jesús, que nos salves, protégenos de todo mal y acoge a nuestro pueblo en Tu Sagrado Corazón. Amén.
Me presento ante Ti confundido, inseguro y frustrado, querido Jesús, porque estoy preocupado acerca de la Verdad que Tú proclamas en Tus Mensajes. Perdóname si te he ofendido. Perdóname si no puedo escucharte. Abre mis ojos para que se me pueda mostrar qué es lo que Tú necesitas que comprenda. Te imploro, que me des el Poder del Espíritu Santo para que me muestre la Verdad. Te amo, querido Jesús, y te ruego que me liberes del tormento de la duda. Ayúdame a responder a Tu llamada. Perdóname si te he ofendido y acércame más a Tu Corazón. Guíame a Tu Nuevo Reino y concédeme el favor de que por medio de mis propias oraciones y sufrimientos, pueda ayudarte a rescatar almas, tan preciosas para Tu Sagrado Corazón. Amén.
Oh Padre, en Nombre de Tu Hijo, sálvanos del comunismo. Sálvanos de la dictadura. Protege nuestra nación contra el paganismo. Salva a nuestros hijos del mal. Ayúdanos a ver la Luz de Dios. Abre nuestros corazones a las Enseñanzas de Tu Hijo. Ayuda a todas las Iglesias a permanecer fieles a la Palabra de Dios. Te suplicamos que mantengas nuestras naciones a salvo de la persecución. Queridísimo Señor, míranos con Misericordia, por mucho que te ofendamos. Jesús, Hijo del Hombre, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre. Sálvanos de las acechanzas del demonio. Te imploramos querido Dios, que intervengas e impidas que el mal devore al mundo en este tiempo. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, muestra Misericordia para todos nosotros pobres pecadores. Ilumina aquellos corazones de piedra, tan desesperados en su búsqueda de orientación. Perdónales sus iniquidades. Ayúdalos, mediante Tu Amor y Misericordia, para que encuentren en su corazón como comprender Tu gran Don de Redención. Te imploro que perdones a todas las almas que rechazan la Verdad de Dios. Cúbrelos con Tu Luz, querido Jesús, para que ella los ciegue a la perversidad y acechanzas del demonio, que tratará de arrancarlos de Ti para siempre. Te suplico que des a todos los hijos de Dios, la fuerza para que estén agradecidos por Tu Gran Misericordia. Pido que abras la Puerta de Tu Reino a todas las almas perdidas que vagan por la Tierra en estado de desamparo y desesperanza. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a mí, un pobre miserable* pecador, a ir a Ti con remordimiento en mi alma. Purifícame de los pecados, que han destruido mi vida. Dame el Don de una nueva vida, libre de las cadenas del pecado, y la libertad, que mis pecados me niegan. Renuévame en la Luz de Tu Misericordia. Acógeme en Tu corazón. Déjame sentir Tu Amor para que pueda volver a acercarme a Ti y que mi amor por Ti sea encendido. Ten misericordia de mí, Jesús, y manténme libre de pecado. Hazme digno de entrar en Tu Nuevo Paraíso. Amén. miserable* = desdichado.
Oh Jesús mío, te ofrezco alabanza y acción de gracias por Tu Gloriosa Segunda Venida. Tú, mi Salvador, naciste para darme Vida Eterna y para liberarme del pecado. Te ofrezco mi amor, mi agradecimiento y mi adoración mientras preparo mi alma para Tu Gran Venida. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, protégeme en mi hora de necesidad, cuando sea confrontado con el mal. Ayúdame a defender la Palabra de Dios con fortaleza y valor, sin ningún miedo en mi alma. Ruega para que permanezca leal a las Enseñanzas de Cristo y que pueda entregar mis miedos, mis preocupaciones y mi tristeza, completa y totalmente. Ayúdame, para que pueda caminar adelante, sin temor, en este sendero solitario, con el fin de proclamar la Verdad de la Santa Palabra de Dios, incluso cuando los enemigos de Dios, hagan esta tarea casi imposible. Oh Bendita Madre, te pido que, a través de tu intercesión, la fe de todos los cristianos permanezca fuerte, en todo momento, durante la persecución. Amén.
Oh querido Jesús, te pido por el Don de la Perseverancia. Te ruego que derrames sobre mí las Gracias que necesito para mantener Tu Santísima Palabra. Te pido que me libres de cualquier duda persistente. Te pido que inundes mi alma con amabilidad, paciencia y perseverancia. Ayúdame a permanecer digno cuando sea insultado en Tu Santo Nombre. Hazme fuerte y cúbreme con la Gracia para seguir adelante, incluso cuando esté cansado, falto de fuerza y cuando me enfrente con todas las tribulaciones, que tenemos por delante, mientras trabajo incansablemente para ayudarte a salvar la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, Tú estás cerca de mi corazón. Yo soy uno Contigo. Te amo. Te quiero. Déjame sentir Tu Amor. Déjame sentir Tu Dolor. Déjame sentir Tu Presencia. Concédeme la Gracia de la humildad para que yo sea hecho digno de Tu Reino en la Tierra, así como en el Cielo. Concédeme las Lágrimas de Conversión, para que pueda verdaderamente ofrecerme a Ti, como verdadero discípulo, para ayudarte en Tu Misión para salvar cada una de las almas en la Tierra, antes de que vengas otra vez a juzgar a los vivos y a los muertos. Amén.
Oh querido Jesús, me postro delante de Ti, cansado, enfermo, con dolor y con anhelo de oír Tu Voz. Déjame ser tocado por Tu Divina Presencia, para que sea inundado por Tu Divina Luz a través de mi mente, cuerpo y alma. Yo confío en Tu Misericordia. Entrego mi dolor y sufrimiento completamente delante de Ti y pido que me des la Gracia de confiar en Ti, para que puedas curarme de este dolor y oscuridad, para que yo pueda llegar a estar sano de nuevo y así, pueda seguir el Sendero de la Verdad y permitirte que me conduzcas a la vida en el Nuevo Paraíso. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en mi ayuda, mientras lucho por encontrar tiempo para la oración. Ayúdame a darle, a tu amado Hijo, Jesucristo, el tiempo que Él merece para mostrarle cuánto lo amo. Pido que tú, mi Bendita Madre de la Salvación, solicites para mí las Gracias que necesito y pidas a tu querido Hijo toda gracia y favor, para que Él pueda envolverme dentro del Seno* de Su Sagrado Corazón. Amén. Seno* = parte interna de algo / Regazo = quien recibe alguien o algo dándole amparo, protección o consuelo.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh amada Madre de la Salvación, te imploro que unas, a través de tus oraciones, a todo el Ejército Remanente de Dios, en todo el mundo. Cubre todos los Grupos de Cruzada de Oración con la Gracia de Salvación, derramada sobre nosotros, a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Envía a tus ángeles para que cubran a cada uno de nosotros y especialmente a aquellos sacerdotes que dirigen los Grupos de Cruzada de Oración. Ayúdanos a evitar las distracciones, las cuales causan división entre nosotros, y protégenos con el Don de la Armadura, para que nos volvamos inmunes a los ataques que tendremos que soportar, debido a nuestro amor a Jesucristo, en esta Santa Misión para salvar almas. Amén.
Oh mi Bienaventurada Madre de la Salvación, por favor pide a tu Hijo que derrame Sus Gracias y Amor sobre aquellos líderes que controlan el mundo. Ruega para que la Luz de Dios les cure la ceguera y desatranque sus corazones de piedra. Detenlos para que dejen de infligir la persecución a personas inocentes. Por favor ruega para que Jesús los guíe, y los detenga para que no impidan que la Verdad de Sus Enseñanzas se propague a las naciones, en todo el mundo. Amén.
Oh Dios Padre Todopoderoso, en el Nombre de Tu amado Hijo, Jesucristo, ten Misericordia de todos tus hijos en Australia y Nueva Zelanda. Perdónanos por nuestro rechazo a Tu Santa Palabra. Perdónanos por el pecado de la indiferencia. Líbranos de nuestra cultura pagana y cúbrenos con las Gracias para inspirar esperanza, fe y caridad, entre nuestros hermanos y hermanas. Te rogamos por el Don del Discernimiento y te pedimos que nos concedas a todos nosotros las Bendiciones que necesitamos para asegurar que solo la Verdad de Tu Santa Palabra pueda ser escuchada, para que a todas las almas se les otorguen las llaves de la Vida Eterna. Amén.
Oh querido Jesús, te rogamos por las habilidades para sobrevivir a las pruebas que ahora enfrentamos, ya que el último Papa verdadero termina su Misión para Ti. Ayúdanos a soportar el terrible abuso que ahora tendremos que enfrentar a causa de la caída de la Iglesia, que una vez conocimos. Nunca dejes que nos apartemos de la Verdad de Tu Palabra Divina. Ayúdanos a permanecer en silencio cuando los ataques sean colocados sobre nuestros hombros para convencernos a darte la espalda, a Ti, y a los Sacramentos que diste al mundo. Cubre a Tu Ejército con el poderoso Amor que necesitamos, como un escudo, para protegernos contra el falso profeta y el anticristo. Ayuda a Tu Iglesia en la Tierra a que se extienda y multiplique, para que pueda adherirse a la Verdad y ayudarte a guiar a nuestros hermanos y hermanas en el Sendero de la Verdad para que nos preparemos, adecuadamente, para Tu Segunda Venida. Amén.
Oh querido Padre Todopoderoso, Creador de todo lo que Es y Será, ayúdanos a todos los que podemos reconocer la Presencia de Tu amado Hijo, hoy día en la Iglesia, a ser muy fuertes. Ayúdame a superar mi miedo, mi soledad y el rechazo que sufro de mis seres queridos, mientras sigo a Tu Hijo, Jesucristo, mi Salvador. Por favor, protege a mis seres queridos de caer en la trampa de creer en las mentiras, las cuales han sido diseñadas por Satanás para destruir, dividir y causar estragos entre todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que siguen la abominación en Tu Iglesia, a que se salven del fuego eterno del infierno. Amén.
Queridísimo Jesús, cuando esté deprimido, levántame. Cuando dude, ilumíname. Cuando esté afligido, muéstrame Tu Amor. Cuando critique, ayúdame a permanecer en silencio. Cuando juzgue a otro públicamente, sella mis labios. Cuando profiera blasfemias, en Tu Nombre, redímeme y tráeme de vuelta a Tu protección. Cuando me falte valor, dame la espada que necesito para hacer batalla (luchar) y salvar las almas que deseas. Cuando me resista a Tu Amor, ayúdame a rendirme y abandonarme, completamente, dentro de Tu Amoroso cuidado. Cuando me aleje, ayúdame a encontrar el Camino de la Verdad. Cuando ponga en duda Tu Palabra, dame las respuestas que busco. Ayúdame a ser paciente, amoroso y amable, incluso con los que te maldigan. Ayúdame a Perdonar a los que me ofenden y dame la Gracia que necesito para seguirte hasta los confines de la Tierra. Amén.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
Queridísimo Jesús te presento el alma de (nombre del alma), que ha abandonado su alma a Satanás. Toma esta alma y redímela ante Tus Santos Ojos. Libera esta alma de la esclavitud de la bestia y tráele salvación eterna. Amén.
Oh, mi queridísimo Jesús, con mi amor por Ti, por favor acepta mi alma en unión Contigo. Toma mi alma, cúbrela con Tu Espíritu Santo, y ayúdame, a través de esta Oración, a salvar a todos aquellos con los que tenga contacto. Envuelve cada alma que encuentre con Tu Santa Misericordia y ofréceles la salvación necesaria para entrar a Tu Reino. Oye mis oraciones. Escucha mis súplicas y a través de Tu Misericordia, salva las almas de la humanidad entera. Amén.
Querido Jesús, toma bajo Tu protección las almas de estos hijos de Dios que no te conocen, que no reconocen Tu Amor y que no aceptan Tu Promesa. Vierte Tu Gracia de Conversión y dales Vida Eterna. Se misericordioso con todos aquellos quienes no creen en Tu Presencia y que no intentarán el arrepentimiento por sus pecados. Amén.
Soy un terrible pecador, Jesús. Por mis acciones, he causado sufrimiento desesperado a otros. Soy rechazado como resultado. Ya no soy tolerado en la Tierra en ninguna parte. Rescátame de este desierto y salvaguárdame de las garras del mal. Permite que me arrepienta. Acepta mi remordimiento. Lléname de Tu Fuerza y ayúdame a levantarme de las profundidades de la desesperación. Entrego a Ti, querido Jesús, mi libre albedrío, para que hagas en mí lo que quieras, y así pueda ser salvado del fuego del Infierno. Amén.
Jesús, ayúdame a encontrar la valentía, el coraje y el nervio, para ponerme de pie y ser considerado, y así pueda ingresar a Tu Ejército Remanente y subir el mismo monte Calvario, el cual tuviste que soportar por mis pecados. Dame la fuerza para llevar Tu Cruz y Tu carga, para que pueda ayudarte a salvar almas. Líbrame de mis debilidades. Disipa mis miedos. Aplasta todas mis dudas. Abre mis ojos a la Verdad. Ayúdame, y ayuda a todos aquellos quienes respondan la Llamada para llevar Tu Cruz, para seguirte con un ferviente y humilde corazón y que por medio de mi ejemplo, otros se armen de valor para que hagan lo mismo. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, ayúdame a confiar en Ti. A confiar en Tu Promesa de volver otra vez. A aceptar la Verdad de Tu Segunda Venida. A confiar en la Promesa de Dios Padre cuando dijo que te daría Tu Reino. Ayúdame a confiar en Tus Enseñanzas, en Tu Plan para salvar al mundo. Ayúdame a aceptar, con Gracia, Tus Dones. Ayúdame a confiar en Ti, para que pierda mi temor y así pueda dejar a Tu Amor inundar mi corazón y mi alma. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, te suplico que me mantengas fuerte y valiente, para que pueda defender la Verdad en Tu Santísimo Nombre. Dame la Gracia que necesito, lo imploro - para dar testimonio de Tu Santa Palabra en todo momento. Permíteme resistir las presiones para promover falsedades, cuando sé en mi corazón que te ofenden. Ayúdame a permanecer fiel a Tu Santa Palabra, hasta el día que muera. Amén.
Oh querida Madre de la Salvación, consagro a mis hijos (nombre del hijo/de los hijos aquí) ante tu Hijo, para que Él pueda traerles paz de espíritu y amor de corazón. Por favor reza para que mis hijos sean aceptados dentro de los Brazos Misericordiosos de tu Hijo y protégelos del mal. Ayúdalos a permanecer fieles a la Santa Palabra de Dios, especialmente en los momentos cuando sean tentados a alejarse de Él. Amén.
Queridísimo Jesús, recurro a Ti para que cubras con Tu especial Gracia de Salvación, las almas de aquellos quienes han sido infestados por Satanás. Libera sus pobres almas del cautiverio malvado del cual ellos no pueden escapar. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en medio de nosotros y cubre nuestra tierra con tu protección. Aplasta la cabeza de la bestia y acaba con su perversa influencia entre nosotros. Ayuda a tus pobres hijos perdidos a levantarse y decir la Verdad, cuando estemos rodeados de mentiras. Por favor, Oh Madre de Dios, protege nuestra tierra y mantennos fuertes, para que podamos permanecer fieles a Tu Hijo en nuestro tiempo de persecución. Amén.
Señor Mío, abre mis ojos. Permíteme ver al enemigo y cierra mi corazón al engaño. Te entrego todo a Ti, querido Jesús. Confío en Tu Misericordia. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, cubre mi alma con tus Lágrimas de Salvación. Líbrame de dudas. Levanta mi corazón, para que sienta la Presencia de tu Hijo. Tráeme paz y consuelo. Ruega para que verdaderamente yo sea convertido. Ayúdame a aceptar la Verdad y a abrir mi corazón para recibir la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Amén.
Querido Jesús, ayúdame. Me estoy ahogando en lágrimas de dolor. Mi corazón está confundido. No sé en quién puedo confiar. Por favor lléname con Tu Espíritu Santo, para que yo pueda elegir el sendero correcto hacia Tu Reino. Ayúdame, querido Jesús, a permanecer siempre fiel a Tu Palabra, dada al mundo por Pedro y a nunca desviarme de lo que Tú nos enseñaste o nunca negar Tu muerte en la Cruz. Jesús, Tú eres el Camino. Muéstrame el Camino. Sostenme y llévame sobre Tu camino de Gran Misericordia. Amén.
Queridísimo Jesús, yo consagro las almas de (nombrarlos aquí) y todos aquellos que intercambiaron sus almas por el precio de la fama. Líbralos de su infestación. Aléjalos de la amenaza de los Illuminati, quienes los devoran. Dales el valor de alejarse, sin temor, de esta esclativud malvada. Tómalos en Tus Brazos de Misericordia y nútrelos para devolverlos a un Estado de Gracia, para que sean dignos de presentarse ante Ti. Por Tu Divinidad, ayúdame a través de esta oración, por las almas adoptadas de Satanás, para sacarlas de la masonería. Libéralas de los grilletes que las atan y que resultan en una terrible tortura en las cámaras del Infierno. Ayúdalas, a través del sufrimiento de las almas elegidas, a través de mis oraciones y a través de Tu Misericordia, a estar en primera línea, dispuestas para entrar por las Puertas de la Nueva Era de Paz - el Nuevo Paraíso. Te ruego que las liberes del cautiverio. Amén.
Querido Jesús, clamo a Tu Misericordia por la generación perdida de almas jóvenes. Por aquellos que no te conocen, cúbrelos con el Don de la vista*. Aquellos que sí te conocen, pero quienes te ignoran, atráelos de regreso dentro de Tu Misericordia. Por favor dales pronto la prueba de Tu existencia y guíalos hacia aquellos quienes pueden ayudarlos y guiarlos hacia la Verdad. Llena sus mentes y almas con el anhelo por Ti. Ayúdalos a reconocer el vacío, el cual existe en ellos porque no sienten Tu Presencia. Te ruego, querido Señor, que no los abandones y en Tu Misericordia concédeles Vida Eterna. Amén. vista* = En este caso para que ellos Lo vean o Lo reconozcan.
Jesús ayúdame, estoy tan confundido. Mi corazón no se abre a Ti. Mis ojos no pueden verte. Mi mente te bloquea. Mi boca no puede pronunciar palabras para consolarte. Mi alma está nublada con oscuridad. Por favor, ten piedad de mí, un pobre pecador. Me siento desamparado, sin Tu Presencia. Lléname con Tus Gracias, para que tenga el valor para buscarte, para suplicarte por Misericordia. Ayúdame, a Tu discípulo perdido, quien te ama, pero quien ya no siente que el amor se avive en mi corazón, para ver y aceptar la Verdad. Amén.
Oh mi dulce Jesús, quita las guerras que destruyen a la humanidad. Protege a los inocentes del sufrimiento. Protege a las almas que tratan de lograr la verdadera paz. Abre los corazones de aquellos afectados por el dolor de la guerra. Protege a los jóvenes y vulnerables. Salva todas las almas cuyas vidas sean destruidas por la guerra. Fortalécenos a todos, querido Jesús, quienes rezamos por las almas de todos los hijos de Dios y concédenos la Gracia para soportar el sufrimiento, el que nos puede ser dado durante tiempos de conflicto. Te suplicamos que detengas la propagación de la guerra y que traigas almas al Refugio Sagrado de Tu Corazón. Amén.
Estamos unidos a Tu Sagrado Corazón, querido Jesús. Hablamos con autoridad la Verdadera Palabra de Dios. Caminaremos hasta los confines de la Tierra para difundir la Verdad. Nunca aceptaremos ninguna nueva doctrina falsa en Tu nombre, que no sea la que Tú Mismo nos enseñaste. Nos mantenemos fieles, leales y firmes en nuestra fe. Trataremos a aquellos que te traicionan con amor y compasión, en la esperanza de que volverán a Ti. Seremos firmes, pero pacientes, con aquellos que nos persiguen en Tu Nombre. Caminaremos victoriosos todo el camino a Tu Nuevo Paraíso. Prometemos, que a través de nuestro dolor y sufrimiento, te traeremos todas aquellas almas perdidas que están hambrientas de Tu Amor. Por favor, acepta nuestras oraciones por todos los pecadores en el mundo, para que podamos llegar a ser una sola familia, unida en amor por Ti, en la Nueva Era de Paz. Amén.
Querido Jesús, te pido que me consagres a mí, a mi familia, amigos y nación a la Protección de Tu Preciosa Sangre. Moriste por mí y Tus heridas son mis heridas porque acepto con dignidad el sufrimiento, el cual soportaré al aproximarse Tu Segunda Venida. Sufro Contigo querido Jesús mientras tratas de reunir a todos los hijos de Dios en Tu Corazón, para que tengamos Vida Eterna. Cúbreme y cubre con tu Preciosa Sangre a todos aquellos que necesitan Tu Protección. Amén.
Mi queridísimo Jesús, escucha esta oración de mí, un alma muy indigna y ayúdame a amarte más. Por mi libre voluntad, te ofrezco este Regalo de regreso, querido Jesús, para que pueda convertirme en Tu humilde servidor y permanecer obediente a la Voluntad de Dios. Mi voluntad es Tu Voluntad. Tu Mandato significa que soy obediente a todos Tus deseos. Mi libre albedrío es Tuyo para hacer con él lo que sea necesario para salvar a todas las personas, en todo el mundo, quienes estén separadas de Ti. Otorgo este Regalo, el cual me fue dado al nacer, a Tu Santísimo Servicio. Amén.
Oh Dios, mi Padre Misericordioso, Creador de todo lo que es, escucha mi súplica por la libertad. Libérame de las cadenas de la esclavitud y protégeme de la malvada persecución. Ayúdame a discernir la Verdad y ven en mi ayuda, incluso si estoy confundido y puede que dude de Tu Palabra. Perdóname si te ofendo y llévame hacia el Refugio de Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdame, un humilde siervo de Dios, a defender Su Santísima Palabra en tiempos de tormento. Conságrame querida Madre, a tu Hijo, para que Él pueda cubrirme con Su Preciosa Sangre. Concédeme, por la intercesión de tu Hijo, Jesucristo, la Gracia, la fortaleza y la voluntad para permanecer fiel a las Enseñanzas de Cristo en los tiempos de Tribulación, los cuales devorarán Su Santísima Iglesia en la Tierra. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a soportar cualquier tipo de persecución en Tu Santo Nombre. Ayuda a aquellos que caen en el error, en la creencia de que ellos dan testimonio de Tu Obra. Abre los ojos de todos aquellos que puedan estar tentados a destruir a otros, a través de actos, hechos o gestos malvados. Protégeme contra los enemigos de Dios, que se levantarán para tratar de silenciar Tu Palabra y quienes tratarán de desterrarte. Ayúdame a Perdonar a aquellos que te traicionan y dame la Gracia de permanecer firme en mi amor por Ti. Ayúdame a vivir la Verdad, que nos enseñaste y a permanecer bajo Tu protección, por siempre. Amén.
Oh, Jesús, prepárame para que pueda llegar ante Ti sin avergonzarme. Ayúdame y ayuda a mis seres queridos (nombrarlos aquí...) para que nos preparemos a confesar todas nuestras malas acciones. A admitir nuestras deficiencias. A pedir por el perdón de todos los pecados. A mostrar amor a aquellos a quienes hemos ofendido. A rogar por Misericordia para la salvación. A que nos humillemos ante Ti, para que en el Día de la Gran Iluminación, mi conciencia, y la de aquellos (nombrarlos aquí...) estén limpias y que Tú inundes nuestras almas con Tu Divina Misericordia. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Oh Dios, por favor lléname con Tu Amor. Ayúdame a compartir el Don del Amor con todos aquellos que necesitan de Tu Misericordia. Ayúdame a amarte más. Ayúdame a amar a todos aquellos que necesitan de Tu Amor. Ayúdame a amar a Tus enemigos. Permite que el Amor con el que me Bendices sea utilizado para envolver los corazones de todos los que entren en contacto conmigo. Con el Amor, que Tú infundes en mi alma, ayúdame a vencer todo mal, convertir almas y derrotar al diablo y a todos aquellos agentes malvados suyos, que tratan de destruir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
¡Oh, mi querida Madre de la Salvación!, por favor pide a tu Hijo, Jesucristo, le conceda Misericordia a (decir todos los nombres aquí...) durante el Aviso y de nuevo en el Día final, antes de que lleguen ante tu Hijo. Por favor, pide para que cada uno de ellos sean salvados y disfruten de los frutos de la Vida Eterna. Protégelos, todos los días, y llévalos a tu Hijo, para que Su Presencia se muestre a ellos y les sea concedida la paz del espíritu y alcancen grandes Gracias. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
Querido Jesús, perdóname, un alma distanciada, que renunció a Ti porque estaba ciego. Perdóname por reemplazar Tu Amor con cosas inútiles que no significan nada. Ayúdame a armarme de valor para caminar a Tu Lado, y aceptar con gratitud Tu Amor y Misericordia. Ayúdame a permanecer cerca de Tu Sagrado Corazón y nunca volver a desviarme de Ti. Amén.
Oh Dios el Altísimo, ayúdame a creer en Tu Existencia. Echa todas mis dudas a un lado. Abre mis ojos a la Verdad de la vida después de esta vida y guíame hacia el camino a la Vida Eterna. Por favor déjame sentir Tu Presencia y concédeme el Don de la Verdadera Fe antes del día que yo muera. Amén.
Oh, Amada Madre de la Salvación, ayúdame en mi momento de necesidad. Ruega para que sea bendecido con los Dones derramados por el Poder del Espíritu Santo sobre mi indigna alma, para defender en todo momento la Verdad. Sostenme en cada suceso, donde se me pida negar la Verdad, la Palabra de Dios, los Sagrados Sacramentos y la Sacratísima Eucaristía.
Ayúdame a utilizar las Gracias que reciba para permanecer firme contra la perversidad de Satanás y la de todas aquellas pobres almas que él utiliza para deshonrar a tu Hijo, Jesucristo. Ayúdame en mi hora de necesidad. Por el bien de las almas, dame el valor de proveer los Sacramentos a cada hijo de Dios, cuando, por los enemigos de Dios me sea prohibido hacerlo. Amén.
Queridísimo Jesús, ayúdame a escuchar Tu Palabra. Vivir Tu Palabra. Hablar Tu Palabra. Impartir Tu Palabra. Dame las fuerzas para defender la Verdad, incluso cuando sea perseguido por ello. Ayúdame a mantener viva Tu Palabra, cuando ella sea ahogada por Tus enemigos.
Déjame sentir Tu Coraje (Valentía) cuando esté decaído. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Dame la Gracia de permanecer digno para permanecer fiel a Tu Santísima Voluntad, cuando las puertas del Infierno prevalezcan* contra mí. Amén.
prevalezcan* = se impongan / crezcan y aumenten.
"Cuando encontréis que comenzáis a dudar de Dios o a perder la confianza en Su Amor o en Su Promesa, entonces debéis recitar esta Cruzada de Oración, que será conocida como la Oración de Renovación:"
Oh, Dios Todopoderoso, oh Dios Altísimo, mira hacia mí, Tu humilde servidor, con amor y compasión en Tu corazón. Renuévame en Tu Luz. Levántame de nuevo en Tu favor*. Lléname de la Gracia, para que me pueda ofrecer a Ti en humilde servidumbre y en conformidad con Tu Santísima Voluntad. Líbrame del pecado de orgullo y de todo lo que te insulta y ayúdame a amarte con un profundo y permanente deseo de estar a tu servicio todos mis días, por siempre y para siempre. Amén. favor*=benevolencia
Oh, Madre de la Salvación, protégeme contra todo tipo de odio. Ayúdame a permanecer en silencio, cuando sea confrontado por el odio. Mantenme fuerte en mi lealtad a Jesucristo, cuando me encuentre más débil. Sella mis labios. Ayúdame a darle la espalda a aquellos que me involucren con palabras, las cuales nieguen las Enseñanzas de tu Hijo, o a los que se mofan de mí por mi fe. Ruega por estas almas, querida Madre, para que así ellos renuncien a Satanás y sientan la paz de tu amor y el Reinado del Espíritu Santo, dentro de sus almas. Amén.
Querido Jesús, protégeme de la maldad del diablo. Cúbreme a mí y cubre a todos aquellos que son débiles e indefensos en su presencia, con Tu Preciosa Sangre. Todos los días dame el valor para rechazarlo, y ayúdame a evitar cualquier intento por parte de él para involucrarme de alguna manera. Amén.
"Os prometo, queridos hijos, que Yo voy a aliviar vuestro dolor, vuestra tristeza y vuestro miedo, legándoos poderosas Gracias y Bendiciones. Estaréis protegidos por el círculo de mi Jerarquía de Ángeles. Para pedirme que disuelva vuestro miedo y tristeza, y os conceda la libertad frente a la persecución, por favor recitad esta oración:"
Queridísimo Padre, Dios de toda la Creación, Dios Altísimo, concédeme la Gracia y la Protección a través de Tu Jerarquía de Ángeles. Permíteme enfocarme en Tu Amor por cada uno de Tus hijos, no importa de qué manera te ofendan. Ayúdame a difundir la noticia del Pacto Final, para preparar al mundo para la Segunda Venida de Jesucristo, sin temor en mi corazón. Concédeme Tus Gracias especiales y Bendiciones para levantarme por encima de la persecución, infligida en mí por Satanás, sus demonios y sus agentes en la Tierra. Nunca me permitas temer a Tus enemigos. Dame la fuerza para amar a mis enemigos, y a aquellos que me persigan en el Nombre de Dios. Amén.
Querido Jesús, defiéndeme en mi batalla para permanecer fiel a Tu Palabra a cualquier costo. Salvaguárdame de Tus enemigos. Protégeme de aquellos que me persigan por Tu causa. Comparte mi dolor. Alivia mi sufrimiento. Levántame a la Luz de Tu Rostro, hasta el Día en que Tú vengas de nuevo para traer Salvación Eterna al mundo. Perdona a aquellos que me persiguen. Utiliza mi sufrimiento para expiar sus pecados, para que así ellos puedan encontrar la paz en sus corazones y darte la bienvenida a Ti con remordimiento en sus almas en el último Día. Amén.
"Si tenéis que hacer frente a la muerte, o si un ser amado tiene que enfrentar la muerte, entonces siempre recurrid a Mí, vuestro Jesús, por ayuda. Mi Misericordia se extiende especialmente a las almas que están afrontando la muerte, pero que no creen en Mí, cuando digan esta oración tres veces al día, en sus últimos días:"
Mi queridísimo Jesús, Perdona mis pecados. Limpia mi alma y prepárame para entrar a Tu Reino. Concédeme las Gracias para prepararme para mi unificación Contigo. Ayúdame a vencer cualquier miedo. Concédeme la valentía para preparar mi mente y mi alma, de modo que sea yo digno de estar frente a Ti. Te amo. Yo confío en Ti. Yo mismo me doy a Ti en cuerpo, mente y alma por la eternidad. Que Tu Voluntad sea la mía y líbrame del dolor, dudas o confusión. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
Oh Madre de la Salvación, por favor intercede en nombre de las almas de los Cristianos de todo el mundo. Por favor ayúdales a preservar su fe y a permanecer fieles a las Enseñanzas de Jesucristo. Ruega para que ellos tengan la fuerza de mente y espíritu para defender su fe en todo momento.
Intercede, querida Madre, a su favor, para que se abran sus ojos a la Verdad y para que se les dé la Gracia de discernir en toda doctrina falsa, presentada a ellos en el Nombre de tu Hijo. Ayúdalos a que permanezcan verdaderos y fieles servidores de Dios y a que renuncien al mal y a las mentiras, incluso si tienen que sufrir el dolor y el ridículo por ello. Oh Madre de la Salvación, protege a todos tus hijos y ruega para que cada Cristiano quiera seguir el camino del Señor hasta su último aliento. Amén.
"Yo os prometo a todos vosotros que difundiré el Regalo de Mi Amor, a través de esta Misión. Mi Amor será una característica distintiva, y todos aquellos que respondan a Mi Llamada, serán envueltos con Mi Amor, cuando reciten esta Cruzada de Oración:"
Queridísimo Jesús, lléname a mí, un recipiente vacío, con el Don de Tu Amor. Inunda mi alma con Tu Presencia. Ayúdame a amar a los demás así como Tú me amas. Ayúdame a ser un recipiente de Tu Paz, de Tu Tranquilidad y de Tu Misericordia. Abre mi corazón siempre a la difícil situación de los demás, y dame la Gracia para Perdonar a aquellos que te rechazan y a quienes me transgreden. Ayúdame a proclamar Tu Amor a través del ejemplo, tal como Tú lo harías, si estuvieras en mi lugar. Amén.
Querida Madre de la Salvación, protégeme con la Gracia de protección contra los engaños, creados por Satanás para destruir la fe de los Cristianos.
Protégenos contra aquellos que son los enemigos de Dios. Mantennos a salvo de las mentiras y la herejía, usadas para debilitar nuestro amor por tu Hijo. Abre nuestros ojos a las falsedades, engaños y a todo intento que podamos encontrar que nos anime a negar la Verdad. Amén.
Oh Dios, mi Padre Eterno, te pido que muestres Misericordia para aquellos que niegan a Tu Hijo. Te ruego por las almas de aquellos que tratan de destruir a Tus profetas.
Te ruego por la conversión de las almas, que se extravían de Ti y te pido que ayudes a todos Tus hijos a preparar sus almas y a enmendar sus vidas, de acuerdo a Tu Divina Voluntad, en espera de la Segunda Venida de Tu amado Hijo, Jesucristo. Amén.
"Venid a Mí hoy y llamadme para que Yo os ayude, sin importar cuantos temores podáis tener. Recitad esta especial Oración cada vez que estéis en apuros y Yo responderé en todo momento."
Oh, mi Jesús, ayúdame en mis momentos de gran aflicción. Tómame en Tus Brazos y llévame al Refugio de tu Corazón. Enjuga mis lágrimas. Calma mis decisiones. Levanta mi espíritu y lléname de Tu Paz. Por favor, concédeme esta petición especial (mencionarla aquí...) Ven en mi ayuda, para que mi petición sea contestada, y que mi vida pueda volver a estar en paz y en unión Contigo, querido Señor. Si mi petición no puede ser concedida, lléname entonces con las Gracias para aceptar que Tu Santa Voluntad es por el bien de mi alma y que yo permanezca fiel a Tu Palabra, por siempre, con un cálido y agradecido corazón. Amén.
Oh Jesús, lléname con el Amor de Dios. Lléname con Tu Divina Luz e inúndame con el amor que necesito para extender la semilla de la Misericordia de Dios entre todas las naciones.
Permite que Tu Amor Divino sea expandido por mí entre todos aquellos con quienes entro en contacto. Extiende Tu Amor, para que se pose sobre todas las almas, todas las religiones, todos los credos, todas las naciones - como una bruma que cautive a todos los hijos de Dios en unidad.
Ayúdanos a difundir el Amor de Dios, para que éste pueda derrotar y derrote todo el mal en el mundo. Amén.
Querido Jesús, te pido que salves a todos los que, por causas ajenas a ellos, se niegan a reconocerte. Ofrezco a Ti mi sufrimiento para traerte las almas de aquellos que te rechazan y por la Misericordia que Tú derramarás sobre el mundo entero. Ten piedad de sus almas. Llévalos a Tu Refugio Celestial y perdónales sus pecados. Amén.
Oh, Madre de Dios, Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación, ruega para que permanezcamos fieles a la Verdadera Palabra de Dios en todo momento. Prepáranos para defender la Fe, para respaldar la Verdad y rechazar la herejía.
Protege a todos tus hijos en tiempos de dificultad y da a cada uno de nosotros las Gracias para ser valientes cuando seamos desafiados a rechazar la Verdad y renunciar a tu Hijo. Ruega, Santa Madre de Dios, para que se nos dé la Divina Intervención para permanecer Cristianos, de acuerdo con la Santa Palabra de Dios. Amén.
Querido Jesús, ayúdame en mi hora de desamparo*. Libérame del pecado y abre mis ojos, mi corazón y mi alma contra el engaño del demonio y sus perversas manipulaciones. Lléname de Tu Amor cuando sienta odio en mi corazón. Lléname de Tu Paz cuando me sienta afligido. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Sálvame de la prisión en la que me encuentro, para que así pueda ser libre y sea sostenido a salvo en Tus Sagrados Brazos. Amén. desamparo* = abandono, falta de ayuda o favor, cuando no se sabe qué hacer...
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, te pido que consagres las almas de estos niños (nombrarlos aquí...) y que los presentes ante tu amado Hijo. Ruega para que Jesús, a través del Poder de Su Preciosa Sangre, cubra y proteja estas pequeñas almas con todo tipo de protección contra el mal. Yo te pido, querida Madre, protege a mi familia en los momentos de grandes dificultades y que tu Hijo mire favorablemente mi petición para unir a mi familia en una sola con Cristo y nos conceda la Salvación Eterna. Amén.
"Declaro este día, 4 de junio de 2014, como la Festividad de la Madre de la Salvación. En este día, cuando recitéis esta oración, voy a interceder en nombre de todas las almas por el Don de la Salvación, especialmente por aquellos que están en gran oscuridad espiritual del alma:"
Oh, Madre de la Salvación, pongo delante de ti hoy en este día, 4 de junio, en la Festividad de la Madre de la Salvación, las siguientes almas: (lista de nombres) Por favor, dame a mí y a todos los que te honran, querida Madre, y a quienes distribuyen la Medalla de Salvación, toda protección contra el maligno y también para todos los que rechazan la Misericordia de tu Hijo amado, Jesucristo, y todos los Dones que Él transmite a la humanidad. Ruega, querida Madre, para que se otorgue a todas las almas el Don de la Salvación Eterna. Amén.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
Querido Jesús, dame Tu Amor y abre mi corazón para aceptar Tu Amor con gratitud. Por el Poder del Espíritu Santo, deja que Tu Amor brille sobre mí, para que me convierta en faro de Tu Misericordia. Rodéame con Tu Amor y deja que mi amor por Ti diluya todo tipo de odio, que encuentre cuando propague (difunda) la noticia de Tu Palabra. Derrama Tu Misericordia sobre nosotros y Perdona a aquellos que te rechazan, te insultan y quienes son indiferentes a Tu Divinidad, y dales el Don del Amor. Deja que Tu Amor resplandezca todo en los momentos de incertidumbre, de una fe débil, en tiempos de pruebas y sufrimientos y, por el Poder del Espíritu Santo, ayúdame a llevar la Verdad a los que están más necesitados de Tu Ayuda. Amén.
Oh, querido Jesús, libera aquellas almas que son esclavas de falsos dioses y de Satanás. Ayúdanos a través de nuestras oraciones, a traerles el alivio del dolor de la posesión. Abre las puertas de su prisión, y muéstrales el camino hacia el Reino de Dios, antes de que sean tomados como rehenes por Satanás dentro del abismo del Infierno.
Te suplicamos, Jesús, que cubras estas almas con el Poder del Espíritu Santo, para que así ellas busquen la Verdad y ayúdales a encontrar el coraje (valor) para que le den la espalda a los engaños y perversidades del demonio. Amén.
"Para asegurar que permanezcáis fuertes, valientes, con calma (tranquilos) y en paz, a medida que llevéis la Cruz de mi Hijo sobre vuestros hombros, debéis recitar esta Cruzada de Oración. Porque a muchos de vosotros os resulta difícil de aceptar que estas cosas han de venir: vendrá un día en donde recitaréis esta Cruzada de Oración (158) tres veces al día, porque las presiones, que se colocarán sobre vosotros para negar a mi Hijo, serán abrumadoras."
Querido Jesús, protégeme del mal de la nueva religión única mundial, la cual no viene de Ti. Sostenme en mi trayecto hacia la libertad, a lo largo de la Ruta hacia Tu Santo Reino. Mantenme en unión Contigo, siempre que sea atormentado y forzado a tragar mentiras, que serán esparcidas por Tus enemigos para destruir las almas. Ayúdame a resistir la persecución, a permanecer firme en la Verdadera Palabra de Dios en contra de las falsas doctrinas y otros sacrilegios, a los que podría ser obligado a aceptar.
A través del Don de mi libre albedrío, llévame al Dominio de Tu Reino, para que pueda levantarme y proclamar la Verdad, cuando esta sea declarada ser una mentira. Jamás dejes que yo vacile, dude o huya por miedo, en medio de la persecución. Ayúdame a mantenerme firme y constante a la Verdad todo el tiempo que yo viva. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, te pido que intercedas por mí mientras yo suplico por el Amor de Dios. Llena mi alma, un recipiente vacío, con el Amor de Dios, para que cuando se esté desbordando, se derrame sobre las almas por las que lucho para mostrarles compasión. Por el Poder de Dios, pido que yo sea liberado de cualquier sentimiento de odio que pueda albergar por aquellos que traicionan a tu Hijo. Hazme humilde de espíritu, y lléname con generosidad del alma para que yo pueda seguir las Enseñanzas de Cristo y pueda extender Su Amor en cada parte de mi vida. Amén.
Oh Jesús mío, Salvador del mundo, ayúdame a amarte más. Ayúdame a crecer en mi amor por Ti. Llena mi corazón con Tu Amor y Compasión, para que pueda obtener las Gracias para amarte de la manera como Tú me amas.
Llena mi alma ingrata con un amor profundo y permanente por Ti y por todo lo que Tú representas. Por el Poder de Tus Gracias ayúdame para amar a mi prójimo como Tú amas a cada hijo de Dios y para mostrar compasión a aquellos que están en necesidad de Tu Amor y a quienes estén sin fe. Úneme en unión Contigo, para que yo pueda llevar la vida Cristiana, la que Tú nos enseñaste con Tu ejemplo, durante Tu tiempo en la Tierra. Amén.
"Por favor, recitad esta Oración cada vez que os sintáis separados de Mí y Yo vendré en vuestro auxilio. Yo os llenaré de una Paz que no puede, ni nunca podrá ser encontrada en ningún lugar en este mundo:"
Jesús, yo confío en Ti. Ayúdame a amarte más. Lléname con la confianza para entregarme en unión completa y definitiva Contigo. Ayúdame a aumentar mi confianza en Ti durante los momentos difíciles. Lléname de Tu Paz. Vengo a Ti, querido Jesús, como un niño, libre de todas las ataduras mundanas; libre de toda condición y te entrego mi voluntad para que hagas con ella lo que mejor te parezca, por mi propio bien y por el de las demás almas. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, por favor protege a los débiles y los inocentes que sufren a manos de aquellos que tienen odio en sus corazones. Alivia el sufrimiento padecido por Tus pobres hijos indefensos. Dales todas las Gracias que necesitan para protegerse de Tus enemigos. Llénalos de valor, esperanza y caridad, para que puedan encontrar en sus corazones cómo Perdonar a los que les atormentan. Te pido, querido Señor, mi Padre Eterno, que perdones a aquellos que desafían la Ley de la vida y ayúdales a ver lo mucho que sus acciones te ofenden, de manera que puedan enmendar sus caminos y buscar consuelo en Tus brazos. Amén.
Oh, Jesús guárdame del dolor de la persecución en Tu Nombre. Congráciame con Tu Corazón. Líbrame de la soberbia, la avaricia, la maldad, del ego y del odio en mi alma. Ayúdame a entregarme verdaderamente a Tu Misericordia. Llévate mis temores.
Ayúdame a desahogar mi dolor y lleva toda persecución lejos de mí, para que yo pueda seguirte como un niño pequeño, en el conocimiento de que todas las cosas están bajo Tu control. Libérame del odio mostrado por todos los que proclaman ser Tuyos, pero que realmente te niegan. No dejes que sus lenguas cortantes me azoten o que sus actos malvados me distraigan del Sendero de la Verdad.
Ayúdame a concentrarme solo en Tu Reino por venir y a perseverar, con dignidad, contra cualquier insulto que yo pueda padecer en Tu nombre. Tráeme la paz de la mente, la paz del corazón, la paz del alma. Amén.
Oh Jesús tráeme paz. Trae paz a mi nación y a todos aquellos países desgarrados por la guerra y la división. Siembra las semillas de paz entre esos corazones endurecidos que causan sufrimiento a otros en el nombre de la justicia.
Da a todos los hijos de Dios las Gracias para recibir Tu Paz para que el amor y la armonía puedan prosperar; para que el Amor de Dios triunfe sobre el mal y para que las almas puedan ser salvadas de la corrupción, de falsedades, de la crueldad y de la ambición malvada.
Deja que la paz reine sobre todos aquellos quienes dedican su vida a la Verdad de Tu Santa Palabra y sobre aquellos que no te conocen en absoluto. Amén.
"Mi Reino os dará la Vida Eterna, pero debéis pedir Mi Ayuda recitando esta oración:"
Jesús, ayúdame a creer en Tu Existencia. Dame una señal para que mi corazón pueda responderte.
Llena mi alma vacía con la Gracia que necesito para abrir mi mente y mi corazón a Tu Amor. Ten Misericordia de Mí, y limpia mi alma de todos los malos actos que he cometido en mi vida. Perdóname por haberte rechazado, pero por favor lléname con el amor que necesito, para hacerme digno de la Vida Eterna. Ayúdame a conocerte, a ver Tu Presencia en otras personas y lléname con la Gracia de reconocer la Señal de Dios en cada regalo hermoso que Tú has dado a la raza humana. Ayúdame a comprender Tus Caminos y sálvame de la separación y del dolor de la oscuridad que siento en mi alma. Amén.
Amadísima Madre de la Salvación, por favor presenta esta, nuestra súplica para mitigar el asesinato de inocentes, a tu amado Hijo, Jesucristo. Le pedimos, que en Su Misericordia, Él elimine la amenaza de genocidio, persecución y terror contra los hijos de Dios, en todas sus formas.
Por favor, te imploramos, querida Madre de la Salvación, que escuches nuestros llantos para obtener amor, unidad y paz en este mundo afligido. Pedimos que Jesucristo, el Hijo del Hombre, nos proteja a todos durante estos momentos de gran dolor y sufrimiento en la tierra. Amén.
"Hijos, cuando las profecías anunciadas sucedan, es importante que pidáis la Misericordia de mi Hijo para que todo sufrimiento pueda ser diluido y que los actos malvados, perpetrados contra la humanidad, puedan ser mitigados. Id en paz y amor a servir al Señor. Vuestra amada Madre, Madre de la salvación."
"La familia, nacida del Amor de Dios, siempre será atacada por el maligno. Para proteger a vuestra familia del mal por favor rezad esta Cruzada de Oración:"
Oh Dios, mi Padre Eterno, a través de la Gracia de Tu Hijo amado, Jesucristo, por favor protege a mi familia contra el mal, en todo momento. Danos la fuerza para elevarnos por encima de la intención del maligno y para permanecer unidos en nuestro amor a Ti y a los demás.
Sostennos a través de cada prueba y sufrimiento que podamos padecer y mantén vivo el amor que nos tenemos el uno al otro para que estemos en unión con Jesús. Bendice nuestras familias y danos el Don del Amor, incluso en tiempos de conflicto. Fortalece nuestro amor, para que podamos compartir la alegría de nuestra familia con los demás de modo que Tu Amor pueda ser compartido con todo el mundo. Amén.
"Recordad que Dios creó a cada uno de vosotros a Su Semejanza para que Él pudiera crear la familia perfecta. Sed agradecidos por vuestras familias ya que es uno de los mayores Dones que Él ha derramado sobre la raza humana. Cuando el sufrimiento en esta tierra llegue a su fin, y cuando se borre el odio, Dios unirá a la humanidad como una en Él. Vosotros seréis íntegros nuevamente y Su Familia tendrá la Vida Eterna."
Oh Queridísimo Padre, Oh Eterno, Dios Altísimo, hazme digno de Tu amor.
Por favor, perdóname por herir a los demás y por toda mala acción que haya causado sufrimiento a alguno de Tus hijos.
Abre mi corazón para que yo pueda darte la bienvenida (aceptarte) en mi alma, y pueda limpiarme de cualquier odio que yo pudiera sentir contra otra persona.
Ayúdame a Perdonar a mis enemigos y sembrar las semillas de Tu Amor donde quiera que vaya y entre aquellos con los que me encuentro todos los días.
Dame querido Padre, los Dones de la Perseverancia y Confianza, para que pueda mantener en alto Tu Santa Palabra y por lo tanto mantener viva, en un mundo oscurecido, la llama de Tu Gran Amor y Misericordia. Amén.
Queridísimo Jesús, por Tu compasión y misericordia, te ruego por la salvación de aquellos quienes te han rechazado; quienes niegan Tu existencia; quienes deliberadamente se oponen a Tu Santa Palabra y cuyos corazones amargos han envenenado sus almas en contra de la Luz y la Verdad de Tu Divinidad. Ten piedad de todos los pecadores. Perdona a los que blasfeman contra la Santísima Trinidad y ayúdame, a mi manera, y a través de mis sacrificios personales, a acoger dentro de Tus Amorosos Brazos, a los pecadores que más necesitan de Tu Misericordia. Te doy mi promesa, a través de mis pensamientos, mis acciones y la palabra hablada, de servirte lo mejor que pueda en Tu misión de Salvación. Amén.
"Os doy, la última oración de la Cruzada de Oración. Es para los sacerdotes. Pido que mis siervos consagrados la reciten diariamente:"
Oh, Querido Señor, mi amado Jesucristo, Abrázame. Protégeme. Mantenme en la Luz de Tu Rostro, mientras que mi persecución se intensifica, cuando mi único pecado es defender la Verdad, la Santa Palabra de Dios.
Ayúdame a encontrar la valentía para servirte fielmente en todo momento. Dame Tu valentía y Tu Fuerza, mientras lucho para defender Tus Enseñanzas contra la violenta oposición.
Jamás me abandones Jesús, en mi momento de necesidad y provéeme con todo lo que necesito para continuar sirviéndote, por medio de la prestación de los Santos Sacramentos y Tu Precioso Cuerpo y Sangre, a través del Santo Sacrificio de la Misa. Bendíceme Jesús. Camina conmigo. Reposa en mí, Quédate conmigo. Amén.
26 may 2024
Oh Santa Madre de Dios, ven a mí en este momento en mi hora de necesidad. Ofrece mis intenciones a tu Hijo, Jesucristo, cuando me ahogo de dolor. Líbrame del miedo y del dolor infligido a mi por seguir el camino de Cristo. Protege a todas las almas de la opresión física y mental en los tiempos de confusión que se avecinan. Reza, reza, reza para que se disipen las tinieblas del mundo y líbranos de los peligros del maligno y de quienes llevan a cabo sus planes perversos para destruir a la humanidad. Lléname con el don de buscar la ayuda de Dios cuando las dudas llenan mi alma respecto a Sus promesas de redimir a la humanidad de las garras del mal. Cúbrenos con tu protección y tu paz. Danos el consuelo y la fuerza que necesitamos para servir a Jesús hasta nuestro último aliento. Ruega para que nuestro sufrimiento traiga alivio a las almas que están en la oscuridad y les ayude a buscar la salvación que Dios les ha prometido mediante la muerte de Jesús en la cruz. Amén.
Queridísimo Jesús, sálvanos del engaño del falso profeta.
Jesús, ten Misericordia de nosotros.
Jesús, sálvanos de la persecución.
Jesús, presérvanos del anticristo.
Señor ten Misericordia.
Cristo ten Misericordia.
Queridísimo Jesús, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre.
Queridísimo Jesús, abre nuestros ojos a las mentiras del falso profeta.
Queridísimo Jesús, une a Tu Iglesia.
Jesús, protege nuestros Sacramentos.
Jesús, no dejes que el falso profeta divida Tu Iglesia.
Queridísimo Jesús, ayúdanos a rechazar las mentiras, presentadas a nosotros como la Verdad.
Jesús, danos fortaleza.
Jesús, danos esperanza.
Jesús, inunda nuestras almas con el Espíritu Santo.
Jesús, protégenos de la bestia.
Jesús, danos el Don del Discernimiento, para que podamos seguir el sendero de Tu Verdadera Iglesia en todo momento, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial,
Te amo.
Te honro.
Señor ten Misericordia.
Señor Perdona nuestras ofensas.
Te adoro.
Te alabo.
Te doy las gracias por todas Tus Gracias especiales.
Te suplico por la Gracia de la Inmunidad para mis amados:
(Nombrar a todos los que están en una lista para la salvación de almas)
Te ofrezco mi lealtad en todo momento.
Tú, Oh Altísimo Padre Celestial,
Creador de todas las cosas,
Creador del universo,
Creador de la humanidad,
Tú eres la Fuente de todas las cosas.
Tú eres la Fuente del Amor.
Tú eres Amor.
Te amo.
Te honro y me postro ante Ti.
Te suplico Misericordia para todas las almas que no Te conocen, que no te honran, que rechazan Tu Mano de Misericordia.
Me entrego a Ti en mente, cuerpo y alma, de modo que puedas tomarlos entre Tus Brazos, a salvo del mal. Te pido que abras la Puerta del Paraíso, para que todos Tus hijos puedan unirse, por fin, en la herencia que has creado para todos nosotros. Amén.
Oh querido Jesús, protégenos de las mentiras, las cuales ofenden a Dios.
Protégenos de Satanás y su ejército.
Ayúdanos a amarte más.
Sostennos en nuestra batalla.
Defiéndenos en nuestra fe.
Llévanos a Tu Refugio de seguridad.
Ayúdanos a levantarnos y a defender Tu Santa Voluntad.
Fortalece nuestra determinación de ser Tus verdaderos discípulos.
Danos valor.
Danos confianza.
Guíanos en el Sendero de la Verdad.
Defiéndenos del enemigo.
Derrama Tus Gracias de Protección sobre nosotros.
Ayúdanos a evitar la tentación.
Acércanos más a Tu Sagrado Corazón.
Ayúdanos a permanecer fieles a Ti en todo momento. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplicamos Misericordia por los pecados de Tus hijos.
Te agradecemos el Regalo de la Tierra.
Te agradecemos el Regalo de la vida humana.
Atesoramos el Don de la vida.
Defendemos el Don de la vida.
Te agradecemos el Regalo de Tu Hijo, Jesucristo.
Te agradecemos el Don de la Redención.
Ensalzamos Tu Divinidad.
Nos entregamos completamente, ante Ti, para que Tu
Santa Voluntad pueda ser cumplida, en la Tierra,
como lo es en el Cielo.
Te agradecemos el Don de la Iluminación de la Conciencia.
Te agradecemos la Promesa de Vida Eterna.
Damos la bienvenida al Nuevo Paraíso.
Te suplicamos que salves a todas las almas,
incluyendo aquellas que te atormentan y aquellas que se han extraviado de Ti.
Te agradecemos el Amor que muestras a todos Tus hijos.
Te agradecemos el Don de la profecía.
Te agradecemos el Don de la oración.
Te pedimos que nos concedas paz y salvación. Amén.
Jesús, salva a todos los pecadores de caer en el fuego del Infierno.
Perdona a las almas ennegrecidas.
Ayúdales a que te vean.
Sácalas de la oscuridad.
Abre sus ojos.
Abre sus corazones.
Muéstrales la Verdad.
Sálvalos.
Ayúdalos a que escuchen.
Líbralos del orgullo, la lujuria y la envidia.
Protégelos del mal.
Escucha sus peticiones de ayuda.
Toma sus manos.
Jálalos (acércalos) hacia Ti.
Sálvalos del engaño de Satanás. Amén.
"Para las almas que reciten esto durante los tiempos de persecución, sabed que verteré estas Gracias sobre vosotros. Os tranquilizaréis, os haréis más fuertes y más valientes, mientras portáis Mi pesada Cruz hacia las puertas del Nuevo Cielo y la Nueva Tierra. Más importante aún, no sucumbiréis a la intimidación la cual deberéis afrontar en Mi Santo Nombre."
Oh, querido Jesús
Mi bien amado Salvador,
Lléname de Tu Amor.
Lléname de Tu Fuerza.
Lléname de Tu Sabiduría.
Lléname de Tu Perseverancia.
Lléname de Tu Humildad.
Lléname de Tu Coraje (Valentía)
Lléname de Tu Pasión. Amén.
Oh mi Señor, guíame a Tu Reino y protégeme de la oscuridad que ha envuelto a mi alma. Escúchame ahora, oh Sagrado Corazón, y por Tu Bondad deja que Tu Luz de Amor y Protección resplandezca en mí. Amén.
Dios, si Tú eres la Verdad revélame la señal de Tu Amor. Abre mi corazón para que sea guiado. Si Tú existes, déjame sentir Tu Amor para que pueda ver la Verdad. Pido por mí ahora. Amén.
Mi querido Señor, yo te extiendo mis brazos para pedirte que acojas a mi amado/a hermano/a en Tus amorosos brazos. Bendíceles con Tu Sagrada Sangre y concédeles la gracia necesaria para que les permitas recibir el Espíritu de Tu Amor para guiarlos a la salvación eterna. Amén.
Jesús me siento perdido. Abre mi corazón para aceptar Tu Amor y muéstrame la Verdad para que yo pueda ser salvado. Amén.
Jesús: "Muchos se arrepentirán durante esta Experiencia Mística (el Aviso)... Acudan a Mí y digan:"
Por favor guíame hacia la Luz y Bondad de Tu Gran Misericordia y perdóname mis pecados. Amén.
Te urjo Jesús, en Tu Divina Misericordia, que cubras aquellas almas tibias con Tu Preciosa Sangre, para que puedan ser convertidas. Amén.
Para ser rezada al final de la Coronilla de la Divina Misericordia
Lléname ahora, oh Señor, con el Don del Espíritu Santo para llevar Tu Santísima Palabra a los pecadores que debo ayudar a salvar en Tu Nombre. Ayúdame a cubrirlos, por medio de mis oraciones, con Tu Preciosa Sangre, para que así ellos puedan ser atraídos a Tu Sagrado Corazón. Dame el Don del Espíritu Santo para que así estas pobres almas puedan deleitarse en Tu Nuevo Paraíso. Amén.
Oh mi precioso Jesús, sostenme en Tus brazos y permite que mi cabeza descanse sobre Tus hombros, para que así, me levantes a Tu Glorioso Reino, cuando sea el momento adecuado. Permite que Tu Preciosa Sangre fluya sobre mi corazón, para que podamos estar unidos como uno solo. Amén.
Jesús, si realmente eres Tú, por favor inunda mi alma con el Signo de Tu Amor para que pueda reconocerte por lo que Eres. No me permitas ser engañado por mentiras. Muéstrame en cambio, Tu Misericordia, abriendo mis ojos a la Verdad y al camino a Tu nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Jesús, yo te entrego confiadamente todas mis preocupaciones en este asunto, y así el problema es Tuyo ahora para que lo resuelvas de acuerdo a Tu Santísima Voluntad. Amén.
"Caminen hacia Mi a pedirme ayuda... Vengan. Inclinen su cabeza, dejen a un lado su vergüenza y pídanme que los perdone ahora."
Jesús, por favor perdóname mis pecados y mis ofensas contra Tí. Amén.
No rechazaré nunca el camino del Señor. Ni negaré la Existencia de Jesucristo, a Quien la humanidad ha intentado aniquilar, no solo durante Su padecimiento en la Cruz, sino también posteriormente. Yo soy Uno con Jesucristo. Hablo en Su Nombre. Camino con Él. Él me levanta, de modo que puedo también, de una manera humilde, ayudar a abrir sus corazones al Amor puro que Él guarda en Su Corazón por ustedes y solo para ustedes. Amén.
Dios Altísimo, vengo esta semana ante Tu Trono para pedir fervientemente por las almas de mis hermanos y hermanas que se niegan a reconocer Tu Existencia. Te ruego encarecidamente que les colmes con Tus Gracias, para que así ellos abran sus corazones y escuchen Tu Santísima Palabra. Amén.
"Le pido a Mis siervos, rezar mucho, con el fin de resistir la abominación que está en camino. Deben pedírmelo de la siguiente manera:"
Oh Mi amado Jesús, yo invoco Tu protección y pido Tu Misericordia para salvar a mis hermanos y hermanas, dentro de Tu Iglesia, para que no caigan víctimas del anticristo. Concédeme las gracias y protégeme con Tu armadura de Fortaleza, para hacer frente a los malignos actos, que puedan ser perpetrados en Tu Santo Nombre. Suplico por Tu Misericordia y prometo mi lealtad a Tu Santo Nombre en todo momento. Amén.
"Yo responderé a las almas más endurecidas, cuando ellas recen esta oración:"
Oh Jesús, cúbreme con Tu Preciosa Sangre y lléname del Espíritu Santo, para que pueda discernir, si estas Palabras provienen de Ti; Hazme humilde de espíritu. Recibe mis súplicas con Misericordia y abre mi corazón a la Verdad. Amén.
"Hago un llamado a todos Mis hijos, especialmente, a aquellas almas tan llenas de amor por Mí, su Creador, a unirse con sus hermanos y hermanas y levantarse en contra del mal en el mundo."
Dios Altísimo, en el Nombre de Tu amadísimo Hijo Jesucristo, Quien sacrificaste para salvarnos, a Tus pobres hijos, del fuego del infierno, escucha nuestra oración. Que podamos ofrecer nuestros humildes sacrificios y aceptar las pruebas y tribulaciones, como un medio para ganar la salvación de todas las almas, durante el Aviso.
Te rogamos que perdones a los pecadores que encuentran difícil regresar y aceptar Tu Misericordiosa Bondad, para que hagan los sacrificios necesarios, que Tu consideras más adecuados, para redimirles a Tus Santos Ojos.
"Rezándome a Mí, su Padre celestial, Dios Altísimo, Creador del Universo y de la Humanidad, escucharé su oración y les garantizaré inmunidad para todas aquellas almas por las que rezan."
Dios Padre, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, te suplico que detengas este acto abominable en donde quieren controlar a Tus hijos. Por favor, protege a todos Tus hijos en estos terribles momentos, para que podamos encontrar paz y dignidad para vivir nuestras vidas, libres del maligno. Amén.
Jesús, si puedes oírme, entonces escucha mi llamada de auxilio. Por favor ayúdame a lidiar con aquellos que me causan dolor. Ayúdame a detener la envidia que está controlando mi vida y a dejar de desear las cosas que no puedo tener. En cambio, abre mi corazón a Ti, querido Jesús. Ayúdame a sentir verdadero amor - Tu amor y a sentir verdadera paz en mi corazón. Amén.
Padre Celestial, ayúdame a llegar a ser pequeño, como un niño, ante Tus Ojos. Pido que Tus Gracias caigan sobre mí, para que así pueda responder a Tu llamada para salvar a todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús, ayúdame a ver la Verdad de Tu Santa Palabra en todo momento y a permanecer leal a Tus Enseñanzas, no importa cuánto me obliguen a rechazarte. Amén.
“Aquellos de ustedes que dicen que son ateos, escuchen ahora Mi Promesa. Yo los amo y nunca renunciaré a Mi lucha para salvarlos de las garras del engañador, Satanás, quien los ciega a la Verdad. Cuando llegue el momento, y cuando ustedes vean sus propios pecados delante de sus ojos durante “El Aviso”, por favor digan estas palabras:
Jesús, muéstrame la Verdad y sálvame del mal. Estoy verdaderamente arrepentido de mis pecados y te pido que me tomes ahora y me muestres la Luz de Tu Misericordia. Amén.
Jesús toma mi dolor, sáname y toma mi cruz. Amén.
Jesús, sálvame de las mentiras de Satanás, para que pueda discernir la Verdad de Tu Iglesia Remanente. Amén.
Comparto este dolor contigo, querido Jesús, y te pido que Bendigas a mis enemigos y a los que te atormentan , con el Don del Espíritu Santo. Amén.
Querido Padre, soy yo, Tu hijo extraviado, quien tan confundido y ciego, que sin Tu ayuda, Tu amor, nada soy. Sálvame por el Amor a Tu Hijo, Jesucristo y alcánzame la Llave a Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Jesús, quita mi terrible dolor y sufrimiento y déjame sentir Tu Amor.
Jesús: "Cuando te arrodilles ante Mí o simplemente te comuniques Conmigo en tu corazón, comienza siempre diciendo:"
Jesús perdóname, porque he pecado.
Jesús Tu Voluntad es todo lo que importa. Mi libre albedrío es Tuyo. Haz con él lo que desees. Amén.
Jesús, ¿eres Tú? ¿Estoy realmente en necesidad de Tu ayuda?
Jesús perdóname, quiero seguirte. Amén.
Jesús: "Recordad lo que ahora os digo. En ese día (Iluminación de la Conciencia),quiero que Me pidáis:"
Jesús, ruego por Misericordia para todos los que te rechazan y que son los más necesitados de Tu Ayuda.
Dios Padre: "Permítanme abrir sus corazones para que así sean bendecidos por Mi Mano."
Querido Padre, extiende tu Mano y toca mi cuerpo y alma con Tu Mano de Misericordia. Amén.
Jesús, llévame bajo Tu Refugio hacia mi Padre y tráeme la Salvación Eterna.
Jesús: "En este día (Viernes Santo), te pido que me invoques de esta manera:
Jesús, perdóname por el daño que he infligido en Tu Cuerpo, en Tu Palabra y en Tu Divinidad. Amén.
Jesús, toma mi sufrimiento y haz con él lo que te plazca. Amén.
Jesús, ayúdame. Jesús perdóname todos mis pecados.
Jesús: "Quienes se pongan de pie y defiendan la Voluntad de Dios serán colmados de grandes Gracias y, por su fe, expiarán los pecados de aquellos demasiado tercos o demasiado temerosos para resistir todo lo que contradice la Palabra de Dios. Cuando todas las atrocidades del mal aumentan y cuando el hombre se dé cuenta de que no tiene la capacidad de luchar o controlar tal maldad, deberá volverse a Mí y decir:"
Jesús, líbranos, a nosotros pecadores desvalidos, de Tus enemigos. Amén.
Jesús, todo lo que digo y hago es según Tu Santa Voluntad; Hazme según la Voluntad de Dios.
Jesús: "Si se colocan delante de los demás, entonces no pueden decir que me aman incondicionalmente porque si lo hicieran ustedes me dirían [esta oración]. (…) Vayan todos y recuerden a ustedes mismos Quien Soy Yo. Solo cuando vivan sus vidas de acuerdo a Mis Enseñanzas podrán realmente decir que son Míos."
Jesús, no soy digo de estar delante de Ti, pero haz de mí lo que quieras, y yo haré lo que Tú deseas. Amén.
Jesús: "Finalmente, les doy el Don del Amor, y, cuando Yo los inunde con este Don, ustedes serán capaces de erradicar el mal a través de sus palabras, hechos y acciones. El Amarme, significa que amarán aún a sus enemigos y, por medio de este Don, destruirán el odio. Vayan y acepten Mis Dones. Todo lo que tienen que hacer, es decirme: "
Jesús, dame los dones que necesito para permanecer fiel a Ti. Amén.
¡Oh Señora mía! ¡Oh Madre mía! Yo me ofrezco enteramente a ti y en prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo tuyo Oh Madre de bondad, guárdame y defiéndeme como a pertenencia y posesión tuya. Amén.
Jesús, si puedes oirme, entonces escucha mi llamada de auxilio. Por favor ayúdame a lidiar con aquellos que me causan dolor. Ayúdame a detener la envidia que está controlando mi vida y a dejar de desear las cosas que no puedo tener. En cambio abre mi corazón a Ti querido Jesús. Ayúdame a sentir verdadero amor, Tu amor, y a sentir verdadera paz en mi corazón. Amén.
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.
Alma de Cristo, santifícame. Cuerpo de Cristo, sálvame. Sangre de Cristo, embriágame. Agua del costado de Cristo, lávame. Pasión de Cristo, confórtame. ¡Oh, buen Jesús!, óyeme. Dentro de tus llagas, escóndeme. No permitas que me aparte de Ti. Del maligno enemigo, defiéndeme. En la hora de mi muerte, llámame. Y mándame ir a Ti. Para que con tus santos te alabe por los siglos de los siglos. Amén.
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla, sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el Poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Mi queridísimo Jesús, Tú, Quien nos amas tanto, permíteme en mi humilde manera, ayudar a salvar Tus preciosas almas. Ten misericordia de todos los pecadores, no importa cuán gravemente te ofendan. Permíteme que a través de la oración y del sufrimiento, ayude a aquellas almas que podrían no sobrevivir El Aviso, para que busquen un lugar a Tu lado, en Tu Reino. Escucha Mi oración oh Dulce Jesús, para ayudarte a ganar más de aquellas almas que Tú anhelas. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo juro (prometo) mi fidelidad a Tu Sacratísima Voluntad, en todo momento. Amén.
Esta oración es para católicos y no católicos, pero deben tener el propósito de no volver a pecar para recibir la absolución de los pecados pasados. Los católicos todavía están obligados a confesarse si hay sacerdotes disponibles. Los católicos no deben usar esta oración como un sustituto mientras puedan confesarse.
"Deben decir esta oración por 7 días consecutivos y les será dado el Don de la Absolución Total y el poder del Espíritu Santo:"
Oh Jesús mío, Tú eres la Luz de la Tierra. Eres la Llama que toca todas las almas. Tu Misericordia y Amor no conocen límites. No somos dignos del Sacrificio que hiciste con Tu muerte en la Cruz, sin embargo sabemos que Tu Amor por nosotros es mayor que el amor que tenemos por Ti. Concédenos, Oh Señor, el Don de la Humildad, para que así seamos merecedores de Tu Nuevo Reino. Llénanos con el Espíritu Santo, para que así podamos marchar hacia adelante y guiar a Tu Ejército para proclamar la Verdad de Tu Santa Palabra y preparar a nuestros hermanos y hermanas para la Gloria de Tu Segunda Venida a la Tierra. Te honramos. Te alabamos. Nosotros mismos nos ofrecemos, nuestras penas, nuestros sufrimientos, como una ofrenda a Ti para la salvación de las almas. Te amamos Jesús. Ten Misericordia de todos Tus hijos donde sea que se encuentren. Amén.
Nuestra Señora insta a las personas a que digan su Santo Rosario (los 3 Misterios) diariamente para ayudar a salvar su país y familia.
Oh Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de Gracia ocultos en el Rosario. Infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las Gracias por las que ruego en este Rosario. (Aquí mencionar la petición).
Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por tu propio honor y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.
Oh mi Padre Eterno, Dios Creador del Universo, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te suplico que nos hagas amarte más. Ayúdanos a ser valientes, audaces, y fuertes ante la adversidad y acepta nuestros sacrificios, sufrimientos y pruebas como un regalo ante Tu Trono para salvar a Tus hijos en la Tierra. Suaviza los corazones de las almas impuras. Abre sus ojos a la Verdad de Tu amor, para que así ellas puedan unirse con todos Tu hijos en el Paraíso de la Tierra que tan amorosamente creaste para nosotros, de acuerdo a Tu Divina Voluntad. Amén.
Dios Padre pide que todos acepten este Sello como una protección para todos y cada uno de nosotros, y nuestras familias, durante los futuros tiempos difíciles en los que tendremos que vivir.
Oh Dios Mío, mi Padre amoroso, yo acepto con amor y gratitud Tu Sello Divino de Protección. Tu Divinidad abarca mi cuerpo y alma por la eternidad. Me inclino en humilde acción de gracias y te ofrezco mi profundo amor y lealtad a Ti, mi amado Padre. Te suplico que me protejas a mí y a mis seres queridos con este Sello especial y comprometo mi vida a Tu servicio por los siglos de los siglos. Te amo querido Padre. Te consuelo en estos momentos, querido Padre. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma, y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo en expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos Tus hijos. Amén.
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
"Mi amadísima hija, así como Mi Padre Eterno legó el Gran Don de Su Sello a la humanidad así, también, deben sus hijos prometer su lealtad a Su Divina Voluntad. Pido a todos los hijos de Dios, que marcharán hacia adelante en Su ejército, que ayuden a salvar las almas de todos los hijos de Dios, incluyendo los endurecidos pecadores, a que tomen este compromiso."
Oh Dios Altísimo, Oh Padre Celestial, te prometo mi lealtad permanente para honrarte y obedecerte en todas las cosas unido a Tu Divina Voluntad aquí en la Tierra. Yo, por la Sagrada Sangre de Tu Único Hijo amado, el Verdadero Mesías, te ofrezco mi mente, mi cuerpo y mi alma en nombre de todas las almas, para que podamos unirnos, como uno, en Tu Reino Celestial que está por venir, para que Tu Divina Voluntad sea hecha en la Tierra así como en el Cielo. Amén.
Dios, Padre Todopoderoso, acepto Tu Divina Voluntad. Ayuda a Tus hijos a aceptarla. Impide que Satanás prive el derecho que tienen Tus hijos a la herencia de su Padre. Nunca permitas que nos demos por vencidos en la lucha por nuestra herencia en el Paraíso. Escucha nuestras súplicas para desterrar a Satanás y a sus ángeles caídos. Te pido, querido Padre, que purifiques la Tierra con Tu Misericordia y que nos cubras con Tu Santo Espíritu. Guíanos para constituir Tu Santísimo Ejército, provisto con el poder para desterrar por siempre a la bestia. Amén.
Oh querido Jesús, te ruego que derrames Tu Misericordia sobre las almas perdidas. Perdónales su rechazo hacia Ti y utiliza mi oración y sufrimiento, para que así Tú puedas, mediante Tu Misericordia, derramar sobre ellos las Gracias que necesitan para santificar sus almas. Te pido el Don de Clemencia para sus almas. Te pido que abras sus corazones para que vayan a Ti y te pido que los llenes con el Espíritu Santo, para que puedan aceptar la Verdad de Tu Amor y vivir Contigo y con toda la familia de Dios para siempre. Amén.
Queridísimo Jesús, cuando esté deprimido, levántame. Cuando dude, ilumíname. Cuando esté afligido, muéstrame Tu Amor. Cuando critique, ayúdame a permanecer en silencio. Cuando juzgue a otro públicamente, sella mis labios. Cuando profiera blasfemias, en Tu Nombre, redímeme y tráeme de vuelta a Tu protección. Cuando me falte valor, dame la espada que necesito para hacer batalla (luchar) y salvar las almas que deseas. Cuando me resista a Tu Amor, ayúdame a rendirme y abandonarme, completamente, dentro de Tu Amoroso cuidado. Cuando me aleje, ayúdame a encontrar el Camino de la Verdad. Cuando ponga en duda Tu Palabra, dame las respuestas que busco. Ayúdame a ser paciente, amoroso y amable, incluso con los que te maldigan. Ayúdame a Perdonar a los que me ofenden y dame la Gracia que necesito para seguirte hasta los confines de la Tierra. Amén.
Queridísimo Jesús te presento el alma de (nombre del alma), que ha abandonado su alma a Satanás. Toma esta alma y redímela ante Tus Santos Ojos. Libera esta alma de la esclavitud de la bestia y tráele salvación eterna. Amén.
Oh querida Madre de la Salvación, consagro a mis hijos (nombre del hijo/de los hijos aquí) ante tu Hijo, para que Él pueda traerles paz de espíritu y amor de corazón. Por favor reza para que mis hijos sean aceptados dentro de los Brazos Misericordiosos de tu Hijo y protégelos del mal. Ayúdalos a permanecer fieles a la Santa Palabra de Dios, especialmente en los momentos cuando sean tentados a alejarse de Él. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, cubre mi alma con tus Lágrimas de Salvación. Líbrame de dudas. Levanta mi corazón, para que sienta la Presencia de tu Hijo. Tráeme paz y consuelo. Ruega para que verdaderamente yo sea convertido. Ayúdame a aceptar la Verdad y a abrir mi corazón para recibir la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Amén.
Oh Dios, por favor lléname con Tu Amor. Ayúdame a compartir el Don del Amor con todos aquellos que necesitan de Tu Misericordia. Ayúdame a amarte más. Ayúdame a amar a todos aquellos que necesitan de Tu Amor. Ayúdame a amar a Tus enemigos. Permite que el Amor con el que me Bendices sea utilizado para envolver los corazones de todos los que entren en contacto conmigo. Con el Amor, que Tú infundes en mi alma, ayúdame a vencer todo mal, convertir almas y derrotar al diablo y a todos aquellos agentes malvados suyos, que tratan de destruir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
"Para asegurar que permanezcáis fuertes, valientes, con calma (tranquilos) y en paz, a medida que llevéis la Cruz de mi Hijo sobre vuestros hombros, debéis recitar esta Cruzada de Oración. Porque a muchos de vosotros os resulta difícil de aceptar que estas cosas han de venir: vendrá un día en donde recitaréis esta Cruzada de Oración (158) tres veces al día, porque las presiones, que se colocarán sobre vosotros para negar a mi Hijo, serán abrumadoras."
Querido Jesús, protégeme del mal de la nueva religión única mundial, la cual no viene de Ti. Sostenme en mi trayecto hacia la libertad, a lo largo de la Ruta hacia Tu Santo Reino. Mantenme en unión Contigo, siempre que sea atormentado y forzado a tragar mentiras, que serán esparcidas por Tus enemigos para destruir las almas. Ayúdame a resistir la persecución, a permanecer firme en la Verdadera Palabra de Dios en contra de las falsas doctrinas y otros sacrilegios, a los que podría ser obligado a aceptar.
A través del Don de mi libre albedrío, llévame al Dominio de Tu Reino, para que pueda levantarme y proclamar la Verdad, cuando esta sea declarada ser una mentira. Jamás dejes que yo vacile, dude o huya por miedo, en medio de la persecución. Ayúdame a mantenerme firme y constante a la Verdad todo el tiempo que yo viva. Amén.
Oh Jesús tráeme paz. Trae paz a mi nación y a todos aquellos países desgarrados por la guerra y la división. Siembra las semillas de paz entre esos corazones endurecidos que causan sufrimiento a otros en el nombre de la justicia.
Da a todos los hijos de Dios las Gracias para recibir Tu Paz para que el amor y la armonía puedan prosperar; para que el Amor de Dios triunfe sobre el mal y para que las almas puedan ser salvadas de la corrupción, de falsedades, de la crueldad y de la ambición malvada.
Deja que la paz reine sobre todos aquellos quienes dedican su vida a la Verdad de Tu Santa Palabra y sobre aquellos que no te conocen en absoluto. Amén.
26 may 2024
Oh Santa Madre de Dios, ven a mí en este momento en mi hora de necesidad. Ofrece mis intenciones a tu Hijo, Jesucristo, cuando me ahogo de dolor. Líbrame del miedo y del dolor infligido a mi por seguir el camino de Cristo. Protege a todas las almas de la opresión física y mental en los tiempos de confusión que se avecinan. Reza, reza, reza para que se disipen las tinieblas del mundo y líbranos de los peligros del maligno y de quienes llevan a cabo sus planes perversos para destruir a la humanidad. Lléname con el don de buscar la ayuda de Dios cuando las dudas llenan mi alma respecto a Sus promesas de redimir a la humanidad de las garras del mal. Cúbrenos con tu protección y tu paz. Danos el consuelo y la fuerza que necesitamos para servir a Jesús hasta nuestro último aliento. Ruega para que nuestro sufrimiento traiga alivio a las almas que están en la oscuridad y les ayude a buscar la salvación que Dios les ha prometido mediante la muerte de Jesús en la cruz. Amén.
Queridísimo Jesús, sálvanos del engaño del falso profeta.
Jesús, ten Misericordia de nosotros.
Jesús, sálvanos de la persecución.
Jesús, presérvanos del anticristo.
Señor ten Misericordia.
Cristo ten Misericordia.
Queridísimo Jesús, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre.
Queridísimo Jesús, abre nuestros ojos a las mentiras del falso profeta.
Queridísimo Jesús, une a Tu Iglesia.
Jesús, protege nuestros Sacramentos.
Jesús, no dejes que el falso profeta divida Tu Iglesia.
Queridísimo Jesús, ayúdanos a rechazar las mentiras, presentadas a nosotros como la Verdad.
Jesús, danos fortaleza.
Jesús, danos esperanza.
Jesús, inunda nuestras almas con el Espíritu Santo.
Jesús, protégenos de la bestia.
Jesús, danos el Don del Discernimiento, para que podamos seguir el sendero de Tu Verdadera Iglesia en todo momento, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial,
Te amo.
Te honro.
Señor ten Misericordia.
Señor Perdona nuestras ofensas.
Te adoro.
Te alabo.
Te doy las gracias por todas Tus Gracias especiales.
Te suplico por la Gracia de la Inmunidad para mis amados:
(Nombrar a todos los que están en una lista para la salvación de almas)
Te ofrezco mi lealtad en todo momento.
Tú, Oh Altísimo Padre Celestial,
Creador de todas las cosas,
Creador del universo,
Creador de la humanidad,
Tú eres la Fuente de todas las cosas.
Tú eres la Fuente del Amor.
Tú eres Amor.
Te amo.
Te honro y me postro ante Ti.
Te suplico Misericordia para todas las almas que no Te conocen, que no te honran, que rechazan Tu Mano de Misericordia.
Me entrego a Ti en mente, cuerpo y alma, de modo que puedas tomarlos entre Tus Brazos, a salvo del mal. Te pido que abras la Puerta del Paraíso, para que todos Tus hijos puedan unirse, por fin, en la herencia que has creado para todos nosotros. Amén.
Oh querido Jesús, protégenos de las mentiras, las cuales ofenden a Dios.
Protégenos de Satanás y su ejército.
Ayúdanos a amarte más.
Sostennos en nuestra batalla.
Defiéndenos en nuestra fe.
Llévanos a Tu Refugio de seguridad.
Ayúdanos a levantarnos y a defender Tu Santa Voluntad.
Fortalece nuestra determinación de ser Tus verdaderos discípulos.
Danos valor.
Danos confianza.
Guíanos en el Sendero de la Verdad.
Defiéndenos del enemigo.
Derrama Tus Gracias de Protección sobre nosotros.
Ayúdanos a evitar la tentación.
Acércanos más a Tu Sagrado Corazón.
Ayúdanos a permanecer fieles a Ti en todo momento. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplicamos Misericordia por los pecados de Tus hijos.
Te agradecemos el Regalo de la Tierra.
Te agradecemos el Regalo de la vida humana.
Atesoramos el Don de la vida.
Defendemos el Don de la vida.
Te agradecemos el Regalo de Tu Hijo, Jesucristo.
Te agradecemos el Don de la Redención.
Ensalzamos Tu Divinidad.
Nos entregamos completamente, ante Ti, para que Tu
Santa Voluntad pueda ser cumplida, en la Tierra,
como lo es en el Cielo.
Te agradecemos el Don de la Iluminación de la Conciencia.
Te agradecemos la Promesa de Vida Eterna.
Damos la bienvenida al Nuevo Paraíso.
Te suplicamos que salves a todas las almas,
incluyendo aquellas que te atormentan y aquellas que se han extraviado de Ti.
Te agradecemos el Amor que muestras a todos Tus hijos.
Te agradecemos el Don de la profecía.
Te agradecemos el Don de la oración.
Te pedimos que nos concedas paz y salvación. Amén.
Jesús, salva a todos los pecadores de caer en el fuego del Infierno.
Perdona a las almas ennegrecidas.
Ayúdales a que te vean.
Sácalas de la oscuridad.
Abre sus ojos.
Abre sus corazones.
Muéstrales la Verdad.
Sálvalos.
Ayúdalos a que escuchen.
Líbralos del orgullo, la lujuria y la envidia.
Protégelos del mal.
Escucha sus peticiones de ayuda.
Toma sus manos.
Jálalos (acércalos) hacia Ti.
Sálvalos del engaño de Satanás. Amén.
"Para las almas que reciten esto durante los tiempos de persecución, sabed que verteré estas Gracias sobre vosotros. Os tranquilizaréis, os haréis más fuertes y más valientes, mientras portáis Mi pesada Cruz hacia las puertas del Nuevo Cielo y la Nueva Tierra. Más importante aún, no sucumbiréis a la intimidación la cual deberéis afrontar en Mi Santo Nombre."
Oh, querido Jesús
Mi bien amado Salvador,
Lléname de Tu Amor.
Lléname de Tu Fuerza.
Lléname de Tu Sabiduría.
Lléname de Tu Perseverancia.
Lléname de Tu Humildad.
Lléname de Tu Coraje (Valentía)
Lléname de Tu Pasión. Amén.
Para ser rezada al final de la Coronilla de la Divina Misericordia
Lléname ahora, oh Señor, con el Don del Espíritu Santo para llevar Tu Santísima Palabra a los pecadores que debo ayudar a salvar en Tu Nombre. Ayúdame a cubrirlos, por medio de mis oraciones, con Tu Preciosa Sangre, para que así ellos puedan ser atraídos a Tu Sagrado Corazón. Dame el Don del Espíritu Santo para que así estas pobres almas puedan deleitarse en Tu Nuevo Paraíso. Amén.
Oh mi precioso Jesús, sostenme en Tus brazos y permite que mi cabeza descanse sobre Tus hombros, para que así, me levantes a Tu Glorioso Reino, cuando sea el momento adecuado. Permite que Tu Preciosa Sangre fluya sobre mi corazón, para que podamos estar unidos como uno solo. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Mi Padre Eterno, en el Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, te pido que protejas a Tus hijos de la persecución que está siendo tramada por fuerzas globales en contra de naciones inocentes. Rezo por el perdón de los pecados de aquellas almas que son causantes de este sufrimiento, para que ellas puedan volverse a Ti con corazón humilde y contrito. Por favor, da a Tus hijos torturados, la fortaleza para resistir tales sufrimientos, en expiación por los pecados del mundo, a través de Cristo Nuestro Señor. Amén.
Oh Padre Todopoderoso, Dios Altísimo, por favor, ten misericordia de todos los pecadores. Abre sus corazones para que acepten la salvación y que reciban Gracias en abundancia. Escucha mis súplicas por mi propia familia y asegura que cada uno encontrará favor en Tu Amoroso Corazón. Oh Divino Padre Celestial, protege a todos Tus hijos en la Tierra, de cualquier guerra nuclear o de otros actos que están siendo planeados para destruir a Tus hijos. Guárdanos de todo daño y protégenos. Ilumínanos, para que así podamos abrir nuestros ojos, escuchar y aceptar la Verdad de nuestra salvación, sin ningún temor en nuestras almas. Amén.
Oh Jesús mío, te suplico Misericordia para aquellos afligidos por las terribles guerras. Te ruego que la paz sea instaurada en aquellas naciones atormentadas, que están ciegas a la Verdad de Tu Existencia. Por favor cubre a estas naciones con la Fuerza del Espíritu Santo, para que ellas detengan su afán de poder sobre almas inocentes. Ten Misericordia con todos Tus países que son impotentes contra las atrocidades del mal, que cubren el mundo entero. Amén.
Oh Jesús mío, permite que mi oración invoque Tu Santo Espíritu, para que descienda sobre aquellos líderes impulsados por la lujuria, la codicia, la avaricia y el orgullo, para detener la persecución de Tus inocentes hijos. Te ruego que impidas que la pobreza, la hambruna y las guerras devoren a Tus hijos, y pido para que los líderes europeos abran sus corazones a la Verdad de Tu Amor. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Padre celestial, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, Quien sufrió grandemente por los pecados de la humanidad, por favor ayúdanos en estos tiempos difíciles que enfrentamos. Ayúdanos a sobrevivir a la persecución que está siendo planeada por los gobernantes codiciosos y por aquellos que quieren destruir Tus Iglesias y a Tus hijos. Te imploramos, querido Padre, que nos ayudes a alimentar a nuestras familias y salves las vidas de aquellos que serán forzados a una guerra, en contra de su voluntad. Te amamos querido Padre. Te suplicamos que nos ayudes en este, nuestro tiempo de necesidad. Sálvanos de las garras del anticristo. Ayúdanos a sobrevivir su marca, la marca de la bestia, al negarnos a aceptarla. Ayuda a los que te aman a permanecer fieles a Tu Santa Palabra en todo momento, para que así nos concedas las Gracias para sobrevivir en cuerpo y en alma. Amén.
Oh Padre, en Nombre de Tu Hijo, sálvanos del comunismo. Sálvanos de la dictadura. Protege nuestra nación contra el paganismo. Salva a nuestros hijos del mal. Ayúdanos a ver la Luz de Dios. Abre nuestros corazones a las Enseñanzas de Tu Hijo. Ayuda a todas las Iglesias a permanecer fieles a la Palabra de Dios. Te suplicamos que mantengas nuestras naciones a salvo de la persecución. Queridísimo Señor, míranos con Misericordia, por mucho que te ofendamos. Jesús, Hijo del Hombre, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre. Sálvanos de las acechanzas del demonio. Te imploramos querido Dios, que intervengas e impidas que el mal devore al mundo en este tiempo. Amén.
Oh mi dulce Jesús, quita las guerras que destruyen a la humanidad. Protege a los inocentes del sufrimiento. Protege a las almas que tratan de lograr la verdadera paz. Abre los corazones de aquellos afectados por el dolor de la guerra. Protege a los jóvenes y vulnerables. Salva todas las almas cuyas vidas sean destruidas por la guerra. Fortalécenos a todos, querido Jesús, quienes rezamos por las almas de todos los hijos de Dios y concédenos la Gracia para soportar el sufrimiento, el que nos puede ser dado durante tiempos de conflicto. Te suplicamos que detengas la propagación de la guerra y que traigas almas al Refugio Sagrado de Tu Corazón. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, por favor protege a los débiles y los inocentes que sufren a manos de aquellos que tienen odio en sus corazones. Alivia el sufrimiento padecido por Tus pobres hijos indefensos. Dales todas las Gracias que necesitan para protegerse de Tus enemigos. Llénalos de valor, esperanza y caridad, para que puedan encontrar en sus corazones cómo Perdonar a los que les atormentan. Te pido, querido Señor, mi Padre Eterno, que perdones a aquellos que desafían la Ley de la vida y ayúdales a ver lo mucho que sus acciones te ofenden, de manera que puedan enmendar sus caminos y buscar consuelo en Tus brazos. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ruega por tus hijos en Irlanda para que impidan que el acto perverso del aborto sea impuesto sobre nosotros. Protege esta santa nación de caer más profundo en la desesperanza por la oscuridad que cubre nuestro país. Líbranos del maligno que quiere destruir a Tus hijos que aún no han nacido. Pide que esos líderes tengan la valentía de escuchar a aquellos que aman a tu Hijo, para que así ellos sigan las Enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Oh amado Padre Celestial, en Memoria de la Crucifixión de Tu amado Hijo Jesucristo, te suplico que nos protejas, Tus hijos, de la crucifixión que está siendo planeada por el anticristo y sus seguidores para destruir a Tus hijos. Danos las Gracias que necesitamos para rechazar la marca de la bestia y concédenos la ayuda necesaria para luchar contra el mal en el mundo, propagado por aquellos que siguen el camino de Satanás. Te suplicamos, querido Padre, que protejas a todos Tus hijos en estos tiempos terribles y haznos suficientemente fuertes para levantarnos y proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial, Dios Creador del hombre, por favor escucha mi oración. Te ruego que salves a Gran Bretaña de las garras del mal y la dictadura. Te pido que nos unas a todos, de todas las religiones, credos y colores como una sola familia ante Tus Ojos. Danos la fuerza para unirnos en oposición de todas las leyes introducidas para proscribir* Tus Enseñanzas. Danos la fuerza y el valor para nunca abandonarte y para ayudar a salvar a todos Tus hijos a través de nuestras oraciones. Congrega a todos mis hermanos y hermanas en unidad para rendir homenaje a Tu Promesa de traernos Vida Eterna y la entrada a Tu Paraíso. Amén. proscribir* = prohibir, excluir el uso o una constumbre.
Oh querido Padre, Dios Altísimo, nosotros, Tus pobres hijos, nos postramos ante Tu Glorioso Trono en el Cielo. Te rogamos que libres del mal al mundo. Imploramos Tu Misericordia por las almas de aquellos que causan terribles sufrimientos a Tus hijos en la Tierra. Por favor perdónalos. Por favor elimina al anticristo, tan pronto como él se dé a conocer. Te pedimos, querido Señor, que mitigues Tu Mano de Castigo. En cambio, te rogamos que aceptes nuestras oraciones y nuestros sufrimientos, para aliviar los sufrimientos de Tus hijos, en este momento. Confiamos en Ti. Te honramos. Te damos gracias por el gran Sacrificio que hiciste cuando enviaste a Tu único Hijo, Jesucristo, para salvarnos del pecado. Damos la bienvenida a Tu Hijo, una vez más, como el Salvador de la humanidad. Por favor protégenos. Guárdanos del mal. Ayuda a nuestras familias. Ten Misericordia de nosotros. Amén.
Oh amado Jesús, te suplico que ilumines las almas de las elites que gobiernan el mundo. Muéstrales la prueba de Tu Misericordia. Ayúdalos a estar abiertos de corazón y mostrar verdadera humildad, en honor de Tu Gran Sacrificio, por Tu muerte en la Cruz, cuando moriste por sus pecados. Ayúdalos a discernir Quién es su Verdadero Hacedor, Quién es su Creador, y llénalos con las Gracias para ver la Verdad. Por favor, impide que se lleven a cabo sus planes de herir a millones de personas mediante las vacunas, la escasez de alimentos, las adopciones forzadas de niños inocentes y la división de las familias. Sánalos. Cúbrelos con Tu Luz y llévalos al Regazo de Tu Corazón para salvarlos de las acechanzas del maligno. Amén.
Oh querido Jesús, cubre nuestra nación con Tu Más Preciada Protección. Perdona nuestros pecados en contra de los Mandamientos de Dios. Ayuda al pueblo estadounidense a volver a Dios. Abre sus mentes al Verdadero Sendero del Señor. Desbloquea sus corazones endurecidos, a fin de que den la bienvenida a Tu Mano de Misericordia. Ayuda a esta nación a levantarse contra las blasfemias, las cuales puedan ser infligidas a nosotros para obligarnos a negar Tu Presencia. Te rogamos, Jesús, que nos salves, protégenos de todo mal y acoge a nuestro pueblo en Tu Sagrado Corazón. Amén.
Oh mi Bienaventurada Madre de la Salvación, por favor pide a tu Hijo que derrame Sus Gracias y Amor sobre aquellos líderes que controlan el mundo. Ruega para que la Luz de Dios les cure la ceguera y desatranque sus corazones de piedra. Detenlos para que dejen de infligir la persecución a personas inocentes. Por favor ruega para que Jesús los guíe, y los detenga para que no impidan que la Verdad de Sus Enseñanzas se propague a las naciones, en todo el mundo. Amén.
Oh Dios Padre Todopoderoso, en el Nombre de Tu amado Hijo, Jesucristo, ten Misericordia de todos tus hijos en Australia y Nueva Zelanda. Perdónanos por nuestro rechazo a Tu Santa Palabra. Perdónanos por el pecado de la indiferencia. Líbranos de nuestra cultura pagana y cúbrenos con las Gracias para inspirar esperanza, fe y caridad, entre nuestros hermanos y hermanas. Te rogamos por el Don del Discernimiento y te pedimos que nos concedas a todos nosotros las Bendiciones que necesitamos para asegurar que solo la Verdad de Tu Santa Palabra pueda ser escuchada, para que a todas las almas se les otorguen las llaves de la Vida Eterna. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
"Ésta es la oración que Mi ejército de Oración debe decir, para pedir Misericordia por las almas que están en tinieblas:"
Jesús, te ruego que perdones a aquellos pecadores, que con el alma tan oscurecida, rechazarán la Luz de Tu Misericordia. Perdónalos, Jesús, te lo suplico, a fin de redimirlos de los pecados que ellos mismos encuentran tan difícil de extraerse. Inunda sus corazones con los Rayos de Tu Misericordia y dales la oportunidad de regresar a Tu redil. Amén.
"Mi promesa solemne, hijos, es que todos aquellos que me invoquen en nombre de Mi Amado Hijo Jesucristo, para salvar a sus hermanos y hermanas, se les garantizará inmunidad inmediata. Se les darán Gracias especiales a cada uno de los que se comprometan todo un mes de oración por esas almas. Esto es lo que les pido que reciten:"
Oh Padre Celestial, a través del amor de Tu amado Hijo Jesucristo, cuya Pasión en la Cruz, nos salvó del pecado, por favor salva a todos aquellos que todavía rechazan la mano de Su Misericordia. Inunda sus almas, querido Padre, con el testimonio de Tu Amor. Te suplico, Padre Celestial, que escuches mi oración y salves estas almas, de la condenación eterna. A través de Tu Misericordia, permíteles ser los primeros en entrar a la Nueva Era de Paz en la Tierra. Amén.
Oh Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación y Mediadora de todas la Gracias, tú, que vas a participar en salvar a la humanidad de la perversidad de Satanás, ruega por nosotros. Madre de la Salvación, reza para que todas las almas puedan ser salvadas y acepten el Amor y la Misericordia mostrados por tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo, Quien viene una vez más a salvar a la humanidad y para darnos la oportunidad de la salvación eterna. Amén.
Madre de la Salvación, te suplico que pidas Misericordia para almas jóvenes, que están en terrible oscuridad, para que así ellas reconozcan a tu amado Hijo cuando venga a redimir a la humanidad entera. No permitas que ni una sola alma se salga del camino. No permitas que ni una sola alma rechace Su Gran Misericordia. Yo rezo, Madre, para que todas se salven y te pido que cubras a estas almas con tu Sagrado Manto, para proveerles la protección que necesitan contra el engañador. Amén.
Por favor, amado Jesús, te pido que mantengas a mis hijos a salvo del rey de las mentiras. Consagro a estos niños (decir sus nombres…) a Tu Sagrado Corazón y te pido que, por medio del manto de Tu Preciosa Sangre, ilumines sus almas y los pongas a salvo en Tus amorosos Brazos para que puedan ser protegidos de todo daño. Te pido que abras sus corazones e inundes sus almas con Tu Santo Espíritu durante la Iluminación de las Conciencias, para que sean limpiados de toda iniquidad. Amén.
Oh Jesús, ayúdame a salvar las almas de la gente joven de todo el mundo. Por tu Gracia, ayúdalos a ver la Verdad de Tu Existencia. Llévalos a Tu Sagrado Corazón y abre sus ojos a Tu Amor y Misericordia. Sálvalos del fuego del Infierno y por medio de mis oraciones ten Misericordia de sus almas. Amén.
Querido Jesús, toma bajo Tu protección las almas de estos hijos de Dios que no te conocen, que no reconocen Tu Amor y que no aceptan Tu Promesa. Vierte Tu Gracia de Conversión y dales Vida Eterna. Se misericordioso con todos aquellos quienes no creen en Tu Presencia y que no intentarán el arrepentimiento por sus pecados. Amén.
Queridísimo Jesús, recurro a Ti para que cubras con Tu especial Gracia de Salvación, las almas de aquellos quienes han sido infestados por Satanás. Libera sus pobres almas del cautiverio malvado del cual ellos no pueden escapar. Amén.
Querido Jesús, clamo a Tu Misericordia por la generación perdida de almas jóvenes. Por aquellos que no te conocen, cúbrelos con el Don de la vista*. Aquellos que sí te conocen, pero quienes te ignoran, atráelos de regreso dentro de Tu Misericordia. Por favor dales pronto la prueba de Tu existencia y guíalos hacia aquellos quienes pueden ayudarlos y guiarlos hacia la Verdad. Llena sus mentes y almas con el anhelo por Ti. Ayúdalos a reconocer el vacío, el cual existe en ellos porque no sienten Tu Presencia. Te ruego, querido Señor, que no los abandones y en Tu Misericordia concédeles Vida Eterna. Amén. vista* = En este caso para que ellos Lo vean o Lo reconozcan.
Oh, Jesús, prepárame para que pueda llegar ante Ti sin avergonzarme. Ayúdame y ayuda a mis seres queridos (nombrarlos aquí...) para que nos preparemos a confesar todas nuestras malas acciones. A admitir nuestras deficiencias. A pedir por el perdón de todos los pecados. A mostrar amor a aquellos a quienes hemos ofendido. A rogar por Misericordia para la salvación. A que nos humillemos ante Ti, para que en el Día de la Gran Iluminación, mi conciencia, y la de aquellos (nombrarlos aquí...) estén limpias y que Tú inundes nuestras almas con Tu Divina Misericordia. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Querido Jesús, te pido que salves a todos los que, por causas ajenas a ellos, se niegan a reconocerte. Ofrezco a Ti mi sufrimiento para traerte las almas de aquellos que te rechazan y por la Misericordia que Tú derramarás sobre el mundo entero. Ten piedad de sus almas. Llévalos a Tu Refugio Celestial y perdónales sus pecados. Amén.
Queridísimo Jesús, por Tu compasión y misericordia, te ruego por la salvación de aquellos quienes te han rechazado; quienes niegan Tu existencia; quienes deliberadamente se oponen a Tu Santa Palabra y cuyos corazones amargos han envenenado sus almas en contra de la Luz y la Verdad de Tu Divinidad. Ten piedad de todos los pecadores. Perdona a los que blasfeman contra la Santísima Trinidad y ayúdame, a mi manera, y a través de mis sacrificios personales, a acoger dentro de Tus Amorosos Brazos, a los pecadores que más necesitan de Tu Misericordia. Te doy mi promesa, a través de mis pensamientos, mis acciones y la palabra hablada, de servirte lo mejor que pueda en Tu misión de Salvación. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a ayudarte a salvar al remanente de Tus hijos en la Tierra. Pido que, a través de Tu Misericordia, rescates del espíritu de la oscuridad las almas. Acepta mis pruebas, sufrimientos y penas en esta vida, para salvar almas del fuego del Infierno. Lléname con las Gracias para ofrecerte estos sufrimientos con amor y alegría en mi corazón, para que así todos nosotros nos unamos como uno solo en amor por la Santísima Trinidad y vivamos Contigo, como una sola Santa Familia en el Paraíso. Amén.
Oh querido Jesús, une en el amor a todos Tus Amados seguidores, para que podamos difundir la Verdad de Tu Promesa de Salvación Eterna a lo largo del mundo entero. Pedimos que aquellas almas tibias, temerosas de ofrecerse a sí mismas a Ti en mente, cuerpo y alma, bajen su armadura de orgullo y abran sus corazones a Tu amor, y sean parte de Tu santa familia en la Tierra. Abraza a todas aquellas almas perdidas, querido Jesús, y permite que nuestro amor, como sus hermanos y hermanas, las saque del desierto y las lleve con nosotros al Regazo, Amor y Luz de la Santísima Trinidad. Ponemos toda nuestra esperanza, confianza y amor en Tus Santas manos. Te suplicamos que expandas nuestra devoción para que así podamos ayudar a salvar más almas. Amén.
Oh Jesús mío, ayuda a Tus pobres hijos quienes están ciegos a Tu Promesa de Salvación. Te suplico, con la ayuda de mis oraciones y sufrimientos, que abras los ojos de los no creyentes, para que así ellos puedan ver Tu tierno Amor y corran hacia Tus Sagrados Brazos por protección. Ayúdalos a ver la Verdad y a buscar perdón por todos sus pecados, para que así ellos puedan ser salvados y ser los primeros en entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso. Te pido por estas pobres almas, incluyendo hombres, mujeres y niños y te insto a que los absuelvas de sus pecados. Amén.
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
Oh mi amadísimo Salvador Jesucristo, acepta mi regalo de oración y sacrificios para ayudar a salvar a mis hermanos y hermanas de la prisión de oscuridad en la que se encuentran. Permíteme ayudar a salvar sus almas. Te suplico que les perdones sus pecados y te pido que inundes sus almas con el Espíritu Santo para que corran hacia Tus Brazos como el refugio que ellos tan desesperadamente necesitan, antes de que se pierdan para siempre. Te ofrezco el regalo de mi entrega por tales almas, en humilde servicio y gratitud. Amén.
Oh querido Jesús, Salvador de la humanidad, a través de Tu Divina Misericordia, suplico clemencia por todas aquellas pobres almas en pecado que puedan ser llevadas de esta Tierra durante El Aviso. Perdónales sus pecados y en memoria de Tu Pasión, te ruego que me concedas este favor especial en expiación por sus pecados. Me ofrezco a Ti, en mente, cuerpo y alma, como una penitencia para salvar sus almas y traerles Vida Eterna. Amén.
Oh querido Jesús, te suplico Misericordia para quienes cometen asesinatos. Insto por clemencia para quienes están en pecado mortal. Te ofrezco mi propio sufrimiento y dificultades para que puedas abrir Tu Corazón y les perdones sus pecados. Te pido que cubras con tu Preciosa Sangre a todos aquellos con mala intención en sus almas, para que así ellos puedan ser lavados y purificados de sus iniquidades. Amén.
Oh, mi queridísimo Jesús, con mi amor por Ti, por favor acepta mi alma en unión Contigo. Toma mi alma, cúbrela con Tu Espíritu Santo, y ayúdame, a través de esta Oración, a salvar a todos aquellos con los que tenga contacto. Envuelve cada alma que encuentre con Tu Santa Misericordia y ofréceles la salvación necesaria para entrar a Tu Reino. Oye mis oraciones. Escucha mis súplicas y a través de Tu Misericordia, salva las almas de la humanidad entera. Amén.
Queridísimo Jesús, yo consagro las almas de (nombrarlos aquí) y todos aquellos que intercambiaron sus almas por el precio de la fama. Líbralos de su infestación. Aléjalos de la amenaza de los Illuminati, quienes los devoran. Dales el valor de alejarse, sin temor, de esta esclativud malvada. Tómalos en Tus Brazos de Misericordia y nútrelos para devolverlos a un Estado de Gracia, para que sean dignos de presentarse ante Ti. Por Tu Divinidad, ayúdame a través de esta oración, por las almas adoptadas de Satanás, para sacarlas de la masonería. Libéralas de los grilletes que las atan y que resultan en una terrible tortura en las cámaras del Infierno. Ayúdalas, a través del sufrimiento de las almas elegidas, a través de mis oraciones y a través de Tu Misericordia, a estar en primera línea, dispuestas para entrar por las Puertas de la Nueva Era de Paz - el Nuevo Paraíso. Te ruego que las liberes del cautiverio. Amén.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
Oh Dios, mi Padre Eterno, te pido que muestres Misericordia para aquellos que niegan a Tu Hijo. Te ruego por las almas de aquellos que tratan de destruir a Tus profetas.
Te ruego por la conversión de las almas, que se extravían de Ti y te pido que ayudes a todos Tus hijos a preparar sus almas y a enmendar sus vidas, de acuerdo a Tu Divina Voluntad, en espera de la Segunda Venida de Tu amado Hijo, Jesucristo. Amén.
Oh, querido Jesús, libera aquellas almas que son esclavas de falsos dioses y de Satanás. Ayúdanos a través de nuestras oraciones, a traerles el alivio del dolor de la posesión. Abre las puertas de su prisión, y muéstrales el camino hacia el Reino de Dios, antes de que sean tomados como rehenes por Satanás dentro del abismo del Infierno.
Te suplicamos, Jesús, que cubras estas almas con el Poder del Espíritu Santo, para que así ellas busquen la Verdad y ayúdales a encontrar el coraje (valor) para que le den la espalda a los engaños y perversidades del demonio. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te ruego liberes al mundo del miedo, que separa las almas de Tu amoroso Corazón. Te pido que las almas que experimentarán verdadero miedo durante El Aviso, se detengan y permitan que Tu Misericordia inunde sus almas, para que puedan ser libres de amarte de la manera en que deberían. Amén.
Une Jesús, a todas las familias durante El Aviso, para que así ellas puedan recibir la Salvación eterna. Pido que todas las familias se mantengan juntas, en unión Contigo, Jesús, para que así puedan heredar Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
"Esta oración, deberá rezarse para suplicar clemencia, para el perdón de los pecados, durante y después de El Aviso:"
Queridísimo Jesús, te pido perdón por todos mis pecados y por el daño y las heridas, que he causado a otros. Humildemente pido las gracias para evitar ofenderte otra vez y para ofrecer penitencia, de acuerdo a Tu Santísima Voluntad. Suplico el perdón de cualquier ofensa futura, en la cual podría tomar parte y que te causará dolor y sufrimiento. Llévame Contigo a la nueva Era de Paz, para que pueda ser parte de Tu familia, por la eternidad. Te amo Jesús. Te necesito. Te honro y honro todo lo que representas. Ayúdame, Jesús, para que sea digno de entrar en Tu Reino. Amén.
Oh Jesús mío, mantenme fuerte durante esta prueba de Tu Gran Misericordia. Dame las gracias necesarias para hacerme pequeño ante Tus ojos. Abre mis ojos a la Verdad de Tu promesa de Salvación Eterna. Perdona mis pecados y muéstrame Tu amor y Tu mano de amistad. Acógeme dentro de los brazos de la Sagrada Familia, para que así podamos ser uno de nuevo. Te amo Jesús y prometo desde este día en adelante, que proclamaré Tu Santa Palabra sin miedo en mi corazón y con pureza de alma por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y en conmemoración de Su muerte en la Cruz, para salvarnos de nuestros pecados, te suplico que salves las almas que no se pueden salvar ellas mismas y que pueden morir en pecado mortal durante El Aviso. En expiación por los sufrimientos de Tu amado Hijo, te ruego que perdones a aquellos que no son capaces de buscar Redención, porque ellos no vivirán lo suficiente para pedir a Jesús, Tu Hijo, por Misericordia para liberarlos del pecado. Amén.
Oh mi querido Jesús, por favor abre los corazones de todos los hijos de Dios al Don de Tu gran Misericordia. Ayúdalos a aceptar Tu Divina Misericordia con amor y gratitud. Permíteles que puedan volverse humildes ante Ti y que puedan suplicar perdón por sus pecados, para que lleguen a ser parte de Tu Glorioso Reino. Amén.
"Hijos de Dios, prepárense cada día para El Aviso, porque puede suceder en cualquier momento."
Oh querido Dulce Jesús, suplico Misericordia para las almas de mi familia (mencionar aquí sus nombres...). Te ofrezco mis sufrimientos, mis pruebas y mis oraciones para salvar sus almas del espíritu de la oscuridad. No permitas que ninguno de estos, Tus hijos, te condenen o rechacen Tu Mano de Misericordia. Abre sus corazones para que se entrelacen con Tu Sagrado Corazón, para que así puedan buscar el perdón necesario para salvarse de las llamas del Infierno. Dales la oportunidad de enmendarse para que puedan ser convertidos con los Rayos de Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, muestra Misericordia para todos nosotros pobres pecadores. Ilumina aquellos corazones de piedra, tan desesperados en su búsqueda de orientación. Perdónales sus iniquidades. Ayúdalos, mediante Tu Amor y Misericordia, para que encuentren en su corazón como comprender Tu gran Don de Redención. Te imploro que perdones a todas las almas que rechazan la Verdad de Dios. Cúbrelos con Tu Luz, querido Jesús, para que ella los ciegue a la perversidad y acechanzas del demonio, que tratará de arrancarlos de Ti para siempre. Te suplico que des a todos los hijos de Dios, la fuerza para que estén agradecidos por Tu Gran Misericordia. Pido que abras la Puerta de Tu Reino a todas las almas perdidas que vagan por la Tierra en estado de desamparo y desesperanza. Amén.
¡Oh, mi querida Madre de la Salvación!, por favor pide a tu Hijo, Jesucristo, le conceda Misericordia a (decir todos los nombres aquí...) durante el Aviso y de nuevo en el Día final, antes de que lleguen ante tu Hijo. Por favor, pide para que cada uno de ellos sean salvados y disfruten de los frutos de la Vida Eterna. Protégelos, todos los días, y llévalos a tu Hijo, para que Su Presencia se muestre a ellos y les sea concedida la paz del espíritu y alcancen grandes Gracias. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh Jesús, pido a Dios que en Su Misericordia, evite que el anticristo y su infame ejército, causen terror e inflijan sufrimiento a Tus hijos. Pedimos para que sea detenido y que la mano del castigo sea evitada, por la conversión que será alcanzada durante El Aviso. Amén.
Oh querido Jesús, salva del anticristo al mundo. Protégenos de los perversos engaños de Satanás. Salva del mal a los últimos remanentes de Tu Iglesia. Da a todas Tus iglesias la fuerza y las gracias necesarias para defendernos contra las guerras y persecuciones planeadas por Satanás y su ejército de terroristas. Amén.
Oh Dios Padre, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te hago una llamada para detener al anticristo de atrapar las almas de Tus hijos. Te suplico Padre Omnipotente, que lo detengas de infligir terror en Tus hijos. Te suplico que lo detengas de contaminar Tu Creación y te pido que tengas Misericordia de aquellas pobres almas que serán impotentes en contra de él. Escucha mi oración, querido Padre, y salva a todos Tus hijos de este terrible mal. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Padre celestial, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, Quien sufrió grandemente por los pecados de la humanidad, por favor ayúdanos en estos tiempos difíciles que enfrentamos. Ayúdanos a sobrevivir a la persecución que está siendo planeada por los gobernantes codiciosos y por aquellos que quieren destruir Tus Iglesias y a Tus hijos. Te imploramos, querido Padre, que nos ayudes a alimentar a nuestras familias y salves las vidas de aquellos que serán forzados a una guerra, en contra de su voluntad. Te amamos querido Padre. Te suplicamos que nos ayudes en este, nuestro tiempo de necesidad. Sálvanos de las garras del anticristo. Ayúdanos a sobrevivir su marca, la marca de la bestia, al negarnos a aceptarla. Ayuda a los que te aman a permanecer fieles a Tu Santa Palabra en todo momento, para que así nos concedas las Gracias para sobrevivir en cuerpo y en alma. Amén.
Oh Jesús, salva a los hijos de Dios del anticristo. Protégenos de los planes para controlar la Tierra. Señor, sálvanos de la persecución. A las almas oscuras protégelas del anticristo para que puedan ser redimidas ante Tus Ojos. Ayúdanos en nuestra debilidad. Fortalécenos en espíritu para que nos pongamos de pie y unos a otros nos guiemos, mientras marchamos en Tu Ejército hacia las Puertas del Paraíso. Yo te necesito, querido Jesús. Yo te amo, querido Jesús. Glorifico Tu Presencia en la Tierra. Rechazo la oscuridad. Te adoro y me entrego a Ti, en cuerpo y espíritu, y así puedas revelarme la Verdad de Tu Presencia de modo que yo siempre confíe en Tu Misericordia en todo momento. Amén.
Oh querido Padre, Dios Altísimo, nosotros, Tus pobres hijos, nos postramos ante Tu Glorioso Trono en el Cielo. Te rogamos que libres del mal al mundo. Imploramos Tu Misericordia por las almas de aquellos que causan terribles sufrimientos a Tus hijos en la Tierra. Por favor perdónalos. Por favor elimina al anticristo, tan pronto como él se dé a conocer. Te pedimos, querido Señor, que mitigues Tu Mano de Castigo. En cambio, te rogamos que aceptes nuestras oraciones y nuestros sufrimientos, para aliviar los sufrimientos de Tus hijos, en este momento. Confiamos en Ti. Te honramos. Te damos gracias por el gran Sacrificio que hiciste cuando enviaste a Tu único Hijo, Jesucristo, para salvarnos del pecado. Damos la bienvenida a Tu Hijo, una vez más, como el Salvador de la humanidad. Por favor protégenos. Guárdanos del mal. Ayuda a nuestras familias. Ten Misericordia de nosotros. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi Padre Eterno, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y por los sufrimientos que padeció para salvar al mundo del pecado, te pido ahora que protejas a Tu Santo Vicario, el Papa Benedicto, Cabeza de Tu Iglesia en la Tierra, para que así él también pueda ayudar a salvar a Tus hijos y a todos Tus siervos consagrados del flagelo de Satanás y de sus dominios de ángeles caídos, que caminan por la Tierra, robando almas. Oh Padre, protege a Tu Papa, para que Tus hijos puedan ser guiados en el verdadero sendero hacia Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh Dios Altísimo, nos arrodillamos ante Ti para suplicarte por la unificación de todos Tus hijos en la lucha por conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra. No permitas que nuestras diferencias nos dividan en este tiempo de gran apostasía en el mundo. En nuestro amor por Ti, querido Padre, te imploramos que nos des las Gracias para amarnos unos a otros en el Nombre de Tu amado Hijo Nuestro Salvador Jesucristo. Te adoramos. Te amamos. Nos unimos para luchar por la fuerza de conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra durante pruebas que podamos enfrentar en los años venideros. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te pido que derrames Tu Espíritu Santo sobre todos Tus hijos. Te ruego que perdones a aquellos que tienen odio por Ti en sus almas. Yo pido que los ateos abran sus endurecidos corazones durante Tu Gran Misericordia, y que Tus hijos que te aman puedan honrarte con dignidad para levantarse sobre toda persecución. Por favor llena a todos Tus hijos con el Don de Tu Espíritu, para que así se puedan levantar con valor y dirijan a Tu Ejército a la batalla final en contra de Satanás, sus demonios y todas aquellas almas, que son esclavas de sus falsas promesas. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, por favor pide por la Iglesia Católica en estos tiempos difíciles y por nuestro bienamado Papa Benedicto XVI, para aliviar su sufrimiento. Te pedimos, Madre de la Salvación, que cubras a los siervos consagrados de Dios con tu Santo Manto, para que así les sean dadas las Gracias para ser fuertes, fieles y valientes durante las pruebas que afronten. Pide también que ellos cuiden de su rebaño de acuerdo con las Verdaderas Enseñanzas de la Iglesia Católica. Oh Santa Madre de Dios, danos a tu Iglesia remanente en la Tierra, el Don del liderazgo para que así podamos ayudar a guiar a las almas hacia el Reino de tu Hijo. Te pedimos, Madre de la Salvación, que mantengas al engañador alejado de los seguidores de tu Hijo, que buscan salvaguardar sus almas, para que sean dignos de entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh Dios Padre, en Nombre de Tu amado Hijo, te suplico que concedas la fuerza y las Gracias necesarias para ayudar a los Sacerdotes a resistir la persecución que padecen. Ayúdalos a aferrarse a la Verdad de las Enseñanzas de Tu Hijo Jesucristo, y a nunca renunciar, debilitarse o someterse a las falsedades acerca de la existencia de la Sagrada Eucaristía. Amén.
Oh querido Jesús, ayuda a Tus siervos consagrados para que reconozcan el cisma que se está desarrollando dentro de Tu Iglesia. Ayuda a Tus siervos consagrados a permanecer firmes y fieles a Tu Santa Palabra. No permitas nunca que las ambiciones mundanas empañen su amor puro hacia Ti. Concédeles la Gracia de permanecer puros y humildes ante Ti y de honrar Tu Santísima Presencia en la Eucaristía. Ayuda y guía a todos aquellos siervos consagrados que pueden ser tibios en su amor por Ti y reaviva el Fuego del Espíritu Santo en sus almas. Ayúdalos a reconocer las tentaciones que se les presentan para distraerlos. Abre sus ojos para que puedan ver la Verdad en todo momento. Bendícelos en estos tiempos, querido Jesús, y cúbrelos con Tu Preciosa Sangre para conservarlos a salvo de todo daño. Dales la fuerza para resistir la seducción de Satanás, en caso de que fueran perturbados por la tentación de negar la existencia del pecado. Amén.
Jesús, Rey y Salvador del mundo, a Ti prometemos nuestro honor, nuestra lealtad y obras, para proclamar Tu Gloria a todos. Ayúdanos a obtener la fortaleza y la confianza, para levantarnos y declarar la Verdad en todo momento. Nunca nos permitas vacilar o retrasarnos en nuestra marcha hacia la victoria y en nuestro plan de salvar almas. Prometemos nuestra entrega, nuestros corazones y todo lo que poseemos, para que estemos libres de obstáculos, mientras continuamos el espinoso camino hacia las Puertas del Nuevo Paraíso. Te amamos, queridísimo Jesús, nuestro amado Salvador y Redentor. Nos unimos en cuerpo, mente y espíritu dentro de Tu Sagrado Corazón. Derrama sobre nosotros Tu gracia de Protección. Cúbrenos con Tu Preciosa Sangre, para que seamos llenados con valentía y amor para levantarnos y declarar la Verdad de Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Jesús, te rogamos por las habilidades para sobrevivir a las pruebas que ahora enfrentamos, ya que el último Papa verdadero termina su Misión para Ti. Ayúdanos a soportar el terrible abuso que ahora tendremos que enfrentar a causa de la caída de la Iglesia, que una vez conocimos. Nunca dejes que nos apartemos de la Verdad de Tu Palabra Divina. Ayúdanos a permanecer en silencio cuando los ataques sean colocados sobre nuestros hombros para convencernos a darte la espalda, a Ti, y a los Sacramentos que diste al mundo. Cubre a Tu Ejército con el poderoso Amor que necesitamos, como un escudo, para protegernos contra el falso profeta y el anticristo. Ayuda a Tu Iglesia en la Tierra a que se extienda y multiplique, para que pueda adherirse a la Verdad y ayudarte a guiar a nuestros hermanos y hermanas en el Sendero de la Verdad para que nos preparemos, adecuadamente, para Tu Segunda Venida. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a soportar cualquier tipo de persecución en Tu Santo Nombre. Ayuda a aquellos que caen en el error, en la creencia de que ellos dan testimonio de Tu Obra. Abre los ojos de todos aquellos que puedan estar tentados a destruir a otros, a través de actos, hechos o gestos malvados. Protégeme contra los enemigos de Dios, que se levantarán para tratar de silenciar Tu Palabra y quienes tratarán de desterrarte. Ayúdame a Perdonar a aquellos que te traicionan y dame la Gracia de permanecer firme en mi amor por Ti. Ayúdame a vivir la Verdad, que nos enseñaste y a permanecer bajo Tu protección, por siempre. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Oh Madre de la Salvación, por favor intercede en nombre de las almas de los Cristianos de todo el mundo. Por favor ayúdales a preservar su fe y a permanecer fieles a las Enseñanzas de Jesucristo. Ruega para que ellos tengan la fuerza de mente y espíritu para defender su fe en todo momento.
Intercede, querida Madre, a su favor, para que se abran sus ojos a la Verdad y para que se les dé la Gracia de discernir en toda doctrina falsa, presentada a ellos en el Nombre de tu Hijo. Ayúdalos a que permanezcan verdaderos y fieles servidores de Dios y a que renuncien al mal y a las mentiras, incluso si tienen que sufrir el dolor y el ridículo por ello. Oh Madre de la Salvación, protege a todos tus hijos y ruega para que cada Cristiano quiera seguir el camino del Señor hasta su último aliento. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
"Le doy al mundo esta Cruzada de Oración para que el Clero Católico la rece:"
Oh mi Amado Jesús, mantenme fuerte y la llama de mi amor por Ti encendida, en todo momento de mi día. Nunca permitas que esta llama de amor por Ti titubee o muera. Nunca permitas que me debilite ante la presencia de la tentación. Dame las gracias necesarias para honrar mi vocación, mi devoción, mi lealtad y para defender las Enseñanzas de la Iglesia Católica ortodoxa. Te ofrezco mi lealtad en todo momento. Yo me comprometo a luchar en Tu Ejército, para que así la Iglesia Católica pueda levantarse otra vez en gloria para darte la bienvenida, querido Jesús, cuando vengas de nuevo. Amén.
Oh Jesús mío, yo no soy más que un humilde siervo y necesito que me guíes, para que pueda preparar almas para Tu Gloriosa Segunda Venida. Ayúdame a convertir almas y a prepararlas de acuerdo a Tu Santa Voluntad, para que así ellas sean dignas de entrar al Nuevo Cielo y Tierra, que prometiste a toda la humanidad, mediante Tu muerte en la Cruz. Dame las Gracias que necesito, para que así pueda impartir Tu Palabra a las almas sedientas y que nunca renuncie a mi deber a Ti, querido Jesús, a Quien yo prometí mi lealtad a través de mis Votos Sagrados. Amén.
Oh Jesús, soy Tu humilde siervo, y te prometo mi amor y lealtad. Te suplico que me des una señal de Tu llamada. Ayúdame a abrir mis ojos y ser testigo de Tu Promesa. Bendíceme con la Gracia del Espíritu Santo, para que no sea engañado por quienes afirman venir en Tu Nombre, pero que no dicen la Verdad. Muéstrame la Verdad. Permíteme sentir Tu Amor para que pueda cumplir Tu Santísima Voluntad. Te pido, con humilde corazón, que me muestres el camino por el cual te puedo ayudar a salvar las almas de la humanidad. Amén.
Oh amado Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo, Quien se sacrificó a Sí mismo en la Cruz por la humanidad entera, ayúdame a permanecer fiel a la Verdad. Cúbreme con la Sangre Preciosa de Tu Hijo y concédeme las Gracias para continuar sirviéndote en fe, confianza y honra, por el resto de mi ministerio. Nunca permitas que me desvíe del Verdadero Significado del Sacrificio de la Santa Misa, ni de la forma de suministrar la Sagrada Eucaristía a Tus hijos. Dame la fortaleza para representarte, y alimentar Tu rebaño como debe ser alimentado, con el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Hijo Jesucristo, el Salvador de la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, abre mis oídos al sonido de Tu Voz. Abre mi corazón a Tu llamada amorosa. Colma mi alma con el Espíritu Santo, para que pueda reconocerte en este momento. Te ofrezco mi humilde lealtad a todo lo que me solicites. Ayúdame a discernir la Verdad, a levantarme, responder y seguir Tu Voz, para que pueda ayudarte a salvar las almas de toda la humanidad. Tu Voluntad es mandato para mí. Dame valor para dejarme guiar por Ti, para que pueda tomar la armadura necesaria para dirigir a Tu Iglesia hacia Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh amado Jesús, ayúdame a permanecer fiel a Tu Santísima Palabra en todo momento. Dame fuerzas para defender la Verdad de Tu Iglesia ante la adversidad. Cólmame con la Gracia para administrar los Santos Sacramentos de la manera como Tú nos enseñaste. Ayúdame a alimentar a Tu Iglesia con el Pan de Vida y a permanecer fiel a Ti, aun cuando se me prohíba hacerlo. Libérame de la cadena de engaños que se me pudiera presentar, para que pueda proclamar la Verdadera Palabra de Dios. Cubre a todos Tus siervos consagrados, en este tiempo, con Tu Preciosa Sangre, para que permanezcamos valientes, fieles y firmes en nuestra lealtad a Ti, nuestro amado Salvador Jesucristo. Amén.
Me presento ante Ti confundido, inseguro y frustrado, querido Jesús, porque estoy preocupado acerca de la Verdad que Tú proclamas en Tus Mensajes. Perdóname si te he ofendido. Perdóname si no puedo escucharte. Abre mis ojos para que se me pueda mostrar qué es lo que Tú necesitas que comprenda. Te imploro, que me des el Poder del Espíritu Santo para que me muestre la Verdad. Te amo, querido Jesús, y te ruego que me liberes del tormento de la duda. Ayúdame a responder a Tu llamada. Perdóname si te he ofendido y acércame más a Tu Corazón. Guíame a Tu Nuevo Reino y concédeme el favor de que por medio de mis propias oraciones y sufrimientos, pueda ayudarte a rescatar almas, tan preciosas para Tu Sagrado Corazón. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, te suplico que me mantengas fuerte y valiente, para que pueda defender la Verdad en Tu Santísimo Nombre. Dame la Gracia que necesito, lo imploro - para dar testimonio de Tu Santa Palabra en todo momento. Permíteme resistir las presiones para promover falsedades, cuando sé en mi corazón que te ofenden. Ayúdame a permanecer fiel a Tu Santa Palabra, hasta el día que muera. Amén.
Señor Mío, abre mis ojos. Permíteme ver al enemigo y cierra mi corazón al engaño. Te entrego todo a Ti, querido Jesús. Confío en Tu Misericordia. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdame, un humilde siervo de Dios, a defender Su Santísima Palabra en tiempos de tormento. Conságrame querida Madre, a tu Hijo, para que Él pueda cubrirme con Su Preciosa Sangre. Concédeme, por la intercesión de tu Hijo, Jesucristo, la Gracia, la fortaleza y la voluntad para permanecer fiel a las Enseñanzas de Cristo en los tiempos de Tribulación, los cuales devorarán Su Santísima Iglesia en la Tierra. Amén.
Oh, Amada Madre de la Salvación, ayúdame en mi momento de necesidad. Ruega para que sea bendecido con los Dones derramados por el Poder del Espíritu Santo sobre mi indigna alma, para defender en todo momento la Verdad. Sostenme en cada suceso, donde se me pida negar la Verdad, la Palabra de Dios, los Sagrados Sacramentos y la Sacratísima Eucaristía.
Ayúdame a utilizar las Gracias que reciba para permanecer firme contra la perversidad de Satanás y la de todas aquellas pobres almas que él utiliza para deshonrar a tu Hijo, Jesucristo. Ayúdame en mi hora de necesidad. Por el bien de las almas, dame el valor de proveer los Sacramentos a cada hijo de Dios, cuando, por los enemigos de Dios me sea prohibido hacerlo. Amén.
"Os doy, la última oración de la Cruzada de Oración. Es para los sacerdotes. Pido que mis siervos consagrados la reciten diariamente:"
Oh, Querido Señor, mi amado Jesucristo, Abrázame. Protégeme. Mantenme en la Luz de Tu Rostro, mientras que mi persecución se intensifica, cuando mi único pecado es defender la Verdad, la Santa Palabra de Dios.
Ayúdame a encontrar la valentía para servirte fielmente en todo momento. Dame Tu valentía y Tu Fuerza, mientras lucho para defender Tus Enseñanzas contra la violenta oposición.
Jamás me abandones Jesús, en mi momento de necesidad y provéeme con todo lo que necesito para continuar sirviéndote, por medio de la prestación de los Santos Sacramentos y Tu Precioso Cuerpo y Sangre, a través del Santo Sacrificio de la Misa. Bendíceme Jesús. Camina conmigo. Reposa en mí, Quédate conmigo. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, por favor detén el odio y los celos que existen entre Tus seguidores, hacia Tus verdaderos visionarios en estos tiempos. Pido que escuches mi oración, para darle a Tus visionarios la fuerza que necesitan, para proclamar Tu Santísima Palabra a un mundo incrédulo. Amén.
Oh Padre Todopoderoso, Dios Altísimo, por favor, ten misericordia de todos los pecadores. Abre sus corazones para que acepten la salvación y que reciban Gracias en abundancia. Escucha mis súplicas por mi propia familia y asegura que cada uno encontrará favor en Tu Amoroso Corazón. Oh Divino Padre Celestial, protege a todos Tus hijos en la Tierra, de cualquier guerra nuclear o de otros actos que están siendo planeados para destruir a Tus hijos. Guárdanos de todo daño y protégenos. Ilumínanos, para que así podamos abrir nuestros ojos, escuchar y aceptar la Verdad de nuestra salvación, sin ningún temor en nuestras almas. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplico que brindes protección a todos Tus santos mensajeros en el mundo. Te pido que sean protegidos del odio de otros. Te pido que Tu Santísima Palabra sea difundida rápidamente por todo el mundo. Protege a Tus mensajeros de la calumnia, el abuso, las mentiras y de todo tipo de peligro. Protege a sus familias y cúbrelos con el Espíritu Santo en todo momento, para que los Mensajes que ellos dan al mundo, sean escuchados con corazón contrito y humilde. Amén.
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, cúbreme con Tu Santísimo Manto y protege a mi familia de la influencia de Satanás y de sus ángeles caídos. Ayúdame a confiar en la Divina Misericordia de tu amado Hijo, Jesucristo, en todo momento. Presérvame en mi amor por Él y nunca permitas que me aparte de la Verdad de Sus Enseñanzas, sin importar cuántas tentaciones sean colocadas delante de mí. Amén.
Soy un terrible pecador, Jesús. Por mis acciones, he causado sufrimiento desesperado a otros. Soy rechazado como resultado. Ya no soy tolerado en la Tierra en ninguna parte. Rescátame de este desierto y salvaguárdame de las garras del mal. Permite que me arrepienta. Acepta mi remordimiento. Lléname de Tu Fuerza y ayúdame a levantarme de las profundidades de la desesperación. Entrego a Ti, querido Jesús, mi libre albedrío, para que hagas en mí lo que quieras, y así pueda ser salvado del fuego del Infierno. Amén.
Querido Jesús, te pido que me consagres a mí, a mi familia, amigos y nación a la Protección de Tu Preciosa Sangre. Moriste por mí y Tus heridas son mis heridas porque acepto con dignidad el sufrimiento, el cual soportaré al aproximarse Tu Segunda Venida. Sufro Contigo querido Jesús mientras tratas de reunir a todos los hijos de Dios en Tu Corazón, para que tengamos Vida Eterna. Cúbreme y cubre con tu Preciosa Sangre a todos aquellos que necesitan Tu Protección. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a soportar cualquier tipo de persecución en Tu Santo Nombre. Ayuda a aquellos que caen en el error, en la creencia de que ellos dan testimonio de Tu Obra. Abre los ojos de todos aquellos que puedan estar tentados a destruir a otros, a través de actos, hechos o gestos malvados. Protégeme contra los enemigos de Dios, que se levantarán para tratar de silenciar Tu Palabra y quienes tratarán de desterrarte. Ayúdame a Perdonar a aquellos que te traicionan y dame la Gracia de permanecer firme en mi amor por Ti. Ayúdame a vivir la Verdad, que nos enseñaste y a permanecer bajo Tu protección, por siempre. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protégeme contra todo tipo de odio. Ayúdame a permanecer en silencio, cuando sea confrontado por el odio. Mantenme fuerte en mi lealtad a Jesucristo, cuando me encuentre más débil. Sella mis labios. Ayúdame a darle la espalda a aquellos que me involucren con palabras, las cuales nieguen las Enseñanzas de tu Hijo, o a los que se mofan de mí por mi fe. Ruega por estas almas, querida Madre, para que así ellos renuncien a Satanás y sientan la paz de tu amor y el Reinado del Espíritu Santo, dentro de sus almas. Amén.
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, te pido que consagres las almas de estos niños (nombrarlos aquí...) y que los presentes ante tu amado Hijo. Ruega para que Jesús, a través del Poder de Su Preciosa Sangre, cubra y proteja estas pequeñas almas con todo tipo de protección contra el mal. Yo te pido, querida Madre, protege a mi familia en los momentos de grandes dificultades y que tu Hijo mire favorablemente mi petición para unir a mi familia en una sola con Cristo y nos conceda la Salvación Eterna. Amén.
"La familia, nacida del Amor de Dios, siempre será atacada por el maligno. Para proteger a vuestra familia del mal por favor rezad esta Cruzada de Oración:"
Oh Dios, mi Padre Eterno, a través de la Gracia de Tu Hijo amado, Jesucristo, por favor protege a mi familia contra el mal, en todo momento. Danos la fuerza para elevarnos por encima de la intención del maligno y para permanecer unidos en nuestro amor a Ti y a los demás.
Sostennos a través de cada prueba y sufrimiento que podamos padecer y mantén vivo el amor que nos tenemos el uno al otro para que estemos en unión con Jesús. Bendice nuestras familias y danos el Don del Amor, incluso en tiempos de conflicto. Fortalece nuestro amor, para que podamos compartir la alegría de nuestra familia con los demás de modo que Tu Amor pueda ser compartido con todo el mundo. Amén.
"Recordad que Dios creó a cada uno de vosotros a Su Semejanza para que Él pudiera crear la familia perfecta. Sed agradecidos por vuestras familias ya que es uno de los mayores Dones que Él ha derramado sobre la raza humana. Cuando el sufrimiento en esta tierra llegue a su fin, y cuando se borre el odio, Dios unirá a la humanidad como una en Él. Vosotros seréis íntegros nuevamente y Su Familia tendrá la Vida Eterna."
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Mi amadísimo Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo y en Memoria de Su Pasión en la Cruz, acudo a Ti. Tú, Dios Altísimo, Creador del Mundo y de todo lo que es, sostén nuestra salvación en Tus Santas Manos. Abraza a todos Tus hijos, incluyendo aquellos que no te conocen y a los que sí, pero que apartan su mirada. Perdona nuestros pecados y sálvanos de la persecución de Satanás y su ejército. Tómanos en Tus Brazos y llénanos con la esperanza que necesitamos para ver el camino de la Verdad. Amén.
Oh Jesús, protégeme del poder de Satanás. Llévame a Tu Corazón, mientras que yo me libero de toda mi lealtad a él y a sus malos caminos. Te entrego mi voluntad y vengo ante Ti de rodillas con un corazón humilde y contrito. Dejo mi vida en Tus Santos Brazos. Sálvame del mal. Libérame y llévame a Tu refugio seguro de protección ahora y para siempre. Amén.
Oh querido Jesús, te suplico Misericordia para quienes cometen asesinatos. Insto por clemencia para quienes están en pecado mortal. Te ofrezco mi propio sufrimiento y dificultades para que puedas abrir Tu Corazón y les perdones sus pecados. Te pido que cubras con tu Preciosa Sangre a todos aquellos con mala intención en sus almas, para que así ellos puedan ser lavados y purificados de sus iniquidades. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en medio de nosotros y cubre nuestra tierra con tu protección. Aplasta la cabeza de la bestia y acaba con su perversa influencia entre nosotros. Ayuda a tus pobres hijos perdidos a levantarse y decir la Verdad, cuando estemos rodeados de mentiras. Por favor, Oh Madre de Dios, protege nuestra tierra y mantennos fuertes, para que podamos permanecer fieles a Tu Hijo en nuestro tiempo de persecución. Amén.
Oh Dios, mi Padre Misericordioso, Creador de todo lo que es, escucha mi súplica por la libertad. Libérame de las cadenas de la esclavitud y protégeme de la malvada persecución. Ayúdame a discernir la Verdad y ven en mi ayuda, incluso si estoy confundido y puede que dude de Tu Palabra. Perdóname si te ofendo y llévame hacia el Refugio de Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
Querido Jesús, perdóname, un alma distanciada, que renunció a Ti porque estaba ciego. Perdóname por reemplazar Tu Amor con cosas inútiles que no significan nada. Ayúdame a armarme de valor para caminar a Tu Lado, y aceptar con gratitud Tu Amor y Misericordia. Ayúdame a permanecer cerca de Tu Sagrado Corazón y nunca volver a desviarme de Ti. Amén.
"Os prometo, queridos hijos, que Yo voy a aliviar vuestro dolor, vuestra tristeza y vuestro miedo, legándoos poderosas Gracias y Bendiciones. Estaréis protegidos por el círculo de mi Jerarquía de Ángeles. Para pedirme que disuelva vuestro miedo y tristeza, y os conceda la libertad frente a la persecución, por favor recitad esta oración:"
Queridísimo Padre, Dios de toda la Creación, Dios Altísimo, concédeme la Gracia y la Protección a través de Tu Jerarquía de Ángeles. Permíteme enfocarme en Tu Amor por cada uno de Tus hijos, no importa de qué manera te ofendan. Ayúdame a difundir la noticia del Pacto Final, para preparar al mundo para la Segunda Venida de Jesucristo, sin temor en mi corazón. Concédeme Tus Gracias especiales y Bendiciones para levantarme por encima de la persecución, infligida en mí por Satanás, sus demonios y sus agentes en la Tierra. Nunca me permitas temer a Tus enemigos. Dame la fuerza para amar a mis enemigos, y a aquellos que me persigan en el Nombre de Dios. Amén.
Querido Jesús, defiéndeme en mi batalla para permanecer fiel a Tu Palabra a cualquier costo. Salvaguárdame de Tus enemigos. Protégeme de aquellos que me persigan por Tu causa. Comparte mi dolor. Alivia mi sufrimiento. Levántame a la Luz de Tu Rostro, hasta el Día en que Tú vengas de nuevo para traer Salvación Eterna al mundo. Perdona a aquellos que me persiguen. Utiliza mi sufrimiento para expiar sus pecados, para que así ellos puedan encontrar la paz en sus corazones y darte la bienvenida a Ti con remordimiento en sus almas en el último Día. Amén.
Querida Madre de la Salvación, protégeme con la Gracia de protección contra los engaños, creados por Satanás para destruir la fe de los Cristianos.
Protégenos contra aquellos que son los enemigos de Dios. Mantennos a salvo de las mentiras y la herejía, usadas para debilitar nuestro amor por tu Hijo. Abre nuestros ojos a las falsedades, engaños y a todo intento que podamos encontrar que nos anime a negar la Verdad. Amén.
"Declaro este día, 4 de junio de 2014, como la Festividad de la Madre de la Salvación. En este día, cuando recitéis esta oración, voy a interceder en nombre de todas las almas por el Don de la Salvación, especialmente por aquellos que están en gran oscuridad espiritual del alma:"
Oh, Madre de la Salvación, pongo delante de ti hoy en este día, 4 de junio, en la Festividad de la Madre de la Salvación, las siguientes almas: (lista de nombres) Por favor, dame a mí y a todos los que te honran, querida Madre, y a quienes distribuyen la Medalla de Salvación, toda protección contra el maligno y también para todos los que rechazan la Misericordia de tu Hijo amado, Jesucristo, y todos los Dones que Él transmite a la humanidad. Ruega, querida Madre, para que se otorgue a todas las almas el Don de la Salvación Eterna. Amén.
Querido Jesús, dame Tu Amor y abre mi corazón para aceptar Tu Amor con gratitud. Por el Poder del Espíritu Santo, deja que Tu Amor brille sobre mí, para que me convierta en faro de Tu Misericordia. Rodéame con Tu Amor y deja que mi amor por Ti diluya todo tipo de odio, que encuentre cuando propague (difunda) la noticia de Tu Palabra. Derrama Tu Misericordia sobre nosotros y Perdona a aquellos que te rechazan, te insultan y quienes son indiferentes a Tu Divinidad, y dales el Don del Amor. Deja que Tu Amor resplandezca todo en los momentos de incertidumbre, de una fe débil, en tiempos de pruebas y sufrimientos y, por el Poder del Espíritu Santo, ayúdame a llevar la Verdad a los que están más necesitados de Tu Ayuda. Amén.
Amadísima Madre de la Salvación, por favor presenta esta, nuestra súplica para mitigar el asesinato de inocentes, a tu amado Hijo, Jesucristo. Le pedimos, que en Su Misericordia, Él elimine la amenaza de genocidio, persecución y terror contra los hijos de Dios, en todas sus formas.
Por favor, te imploramos, querida Madre de la Salvación, que escuches nuestros llantos para obtener amor, unidad y paz en este mundo afligido. Pedimos que Jesucristo, el Hijo del Hombre, nos proteja a todos durante estos momentos de gran dolor y sufrimiento en la tierra. Amén.
"Hijos, cuando las profecías anunciadas sucedan, es importante que pidáis la Misericordia de mi Hijo para que todo sufrimiento pueda ser diluido y que los actos malvados, perpetrados contra la humanidad, puedan ser mitigados. Id en paz y amor a servir al Señor. Vuestra amada Madre, Madre de la salvación."
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
"Hija Mía, el mundo debe ofrecer esta oración especial en alabanza y acción de gracias a Dios Padre, por la Misericordia que Él está brindando al mundo entero."
Oh Padre Eterno, te ofrecemos nuestras oraciones en gozosa acción de gracias, por Tu precioso Don de Misericordia, para la humanidad entera. Nos regocijamos y te ofrecemos, gloriosísimo Rey, nuestra alabanza y adoración, por Tu amorosa y tierna Misericordia. Tú, Dios Altísimo, eres nuestro Rey y por este Don que ahora nos traes, nos postramos a Tus pies en humilde servidumbre. Por favor, Dios, ten misericordia con todos Tus hijos. Amén.
Oh Sacratísimo Corazón de Jesús, enséñame a aceptar los insultos en Tu Santo Nombre con humilde acción de gracias cuando proclame Tu Palabra. Enséñame a entender cómo la humillación, el dolor y el sufrimiento me acercan más a Tu Sagrado Corazón. Permíteme aceptar tales pruebas con amor y generosidad de espíritu, para que así pueda presentarlas como ofrendas tan preciadas para Ti, con el fin de salvar almas. Amén.
Ayúdanos, querido Jesús, a levantarnos sin miedo en Tu Nombre, para llevar la Llama de Tu Amor, a través de todas las naciones. Danos, a Tus hijos, la fuerza para afrontar el abuso que enfrentaremos, entre todos aquellos que no son verdaderos creyentes de Tu Misericordia. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame en mi humilde manera, imitar Tu vida de sacrificio con el fin de salvar a la humanidad. Permíteme ofrecerte el regalo de ayunar un día a la semana, durante la Cuaresma, para salvar a la humanidad, para que así ellos puedan entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Te ofrezco, querido Jesús, mi sacrificio con amor y alegría en mi corazón. Para mostrarte la medida de mi amor, a través de este sacrificio, te suplico por la salvación de toda alma que pueda haber caído fuera del estado de gracia. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a ayudarte a salvar al remanente de Tus hijos en la Tierra. Pido que, a través de Tu Misericordia, rescates del espíritu de la oscuridad las almas. Acepta mis pruebas, sufrimientos y penas en esta vida, para salvar almas del fuego del Infierno. Lléname con las Gracias para ofrecerte estos sufrimientos con amor y alegría en mi corazón, para que así todos nosotros nos unamos como uno solo en amor por la Santísima Trinidad y vivamos Contigo, como una sola Santa Familia en el Paraíso. Amén.
Oh Jesús mío, concédeme la Gracia de proclamar Tu Santa Palabra a toda la humanidad para que las almas puedan ser salvadas. Derrama Tu Santo Espíritu sobre mí, Tu humilde siervo, para que así Tu Santa Palabra pueda ser escuchada y aceptada, especialmente por aquellas almas que más necesitan Tu Misericordia. Ayúdame a honrar Tu Santa Voluntad en todo momento y a nunca ofender o condenar a aquellos que rechazan la Mano de Tu Misericordia. Amén.
Oh Espíritu Santo ven, derrama Tus Dones de Amor, Sabiduría y Entendimiento sobre mi humilde alma. Lléname con la Luz de la Verdad para que pueda distinguir la Verdad de Dios, de las mentiras esparcidas por Satanás y sus ángeles. Ayúdame a asir la antorcha, y a transmitir la Llama del Entendimiento a todos los que encuentre, por Cristo, Nuestro Señor. Amén.
Querido Jesús, estoy dispuesto a propagar Tu Santa Palabra. Dame el valor, la fuerza y el conocimiento para transmitir la Verdad para que tantas almas como sea posible puedan ser llevadas a Ti. Acógeme en Tu Sagrado Corazón y cúbreme con Tu Preciosa Sangre para que sea llenado con las Gracias para propagar la conversión para la Salvación de todos los hijos de Dios en todas partes del mundo, no importando cuál sea su credo. Confío siempre en Ti. Tu amado discípulo. Amén.
Jesús, ayúdame a encontrar la valentía, el coraje y el nervio, para ponerme de pie y ser considerado, y así pueda ingresar a Tu Ejército Remanente y subir el mismo monte Calvario, el cual tuviste que soportar por mis pecados. Dame la fuerza para llevar Tu Cruz y Tu carga, para que pueda ayudarte a salvar almas. Líbrame de mis debilidades. Disipa mis miedos. Aplasta todas mis dudas. Abre mis ojos a la Verdad. Ayúdame, y ayuda a todos aquellos quienes respondan la Llamada para llevar Tu Cruz, para seguirte con un ferviente y humilde corazón y que por medio de mi ejemplo, otros se armen de valor para que hagan lo mismo. Amén.
Jesús ayúdame, estoy tan confundido. Mi corazón no se abre a Ti. Mis ojos no pueden verte. Mi mente te bloquea. Mi boca no puede pronunciar palabras para consolarte. Mi alma está nublada con oscuridad. Por favor, ten piedad de mí, un pobre pecador. Me siento desamparado, sin Tu Presencia. Lléname con Tus Gracias, para que tenga el valor para buscarte, para suplicarte por Misericordia. Ayúdame, a Tu discípulo perdido, quien te ama, pero quien ya no siente que el amor se avive en mi corazón, para ver y aceptar la Verdad. Amén.
Estamos unidos a Tu Sagrado Corazón, querido Jesús. Hablamos con autoridad la Verdadera Palabra de Dios. Caminaremos hasta los confines de la Tierra para difundir la Verdad. Nunca aceptaremos ninguna nueva doctrina falsa en Tu nombre, que no sea la que Tú Mismo nos enseñaste. Nos mantenemos fieles, leales y firmes en nuestra fe. Trataremos a aquellos que te traicionan con amor y compasión, en la esperanza de que volverán a Ti. Seremos firmes, pero pacientes, con aquellos que nos persiguen en Tu Nombre. Caminaremos victoriosos todo el camino a Tu Nuevo Paraíso. Prometemos, que a través de nuestro dolor y sufrimiento, te traeremos todas aquellas almas perdidas que están hambrientas de Tu Amor. Por favor, acepta nuestras oraciones por todos los pecadores en el mundo, para que podamos llegar a ser una sola familia, unida en amor por Ti, en la Nueva Era de Paz. Amén.
Oh, Jesús guárdame del dolor de la persecución en Tu Nombre. Congráciame con Tu Corazón. Líbrame de la soberbia, la avaricia, la maldad, del ego y del odio en mi alma. Ayúdame a entregarme verdaderamente a Tu Misericordia. Llévate mis temores.
Ayúdame a desahogar mi dolor y lleva toda persecución lejos de mí, para que yo pueda seguirte como un niño pequeño, en el conocimiento de que todas las cosas están bajo Tu control. Libérame del odio mostrado por todos los que proclaman ser Tuyos, pero que realmente te niegan. No dejes que sus lenguas cortantes me azoten o que sus actos malvados me distraigan del Sendero de la Verdad.
Ayúdame a concentrarme solo en Tu Reino por venir y a perseverar, con dignidad, contra cualquier insulto que yo pueda padecer en Tu nombre. Tráeme la paz de la mente, la paz del corazón, la paz del alma. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Jesús, te entrego mi dolor y mi sufrimiento por lo que Tú sufriste durante Tu Agonía en el Calvario. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco a Ti. Cada abuso y ataque verbal que sufro, te lo ofrezco en honor a Tu Coronación de Espinas. Cada crítica injusta hacia mí, la ofrezco en honor a Tu humillación frente a Pilato. Cada tormento físico que soporto de manos de otros, te lo ofrezco en honor de Tu Flagelación en la Columna. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco en honor de la tortura corporal que sufriste durante la Coronación de Espinas, cuando estas te lisiaron Tu ojo. Cada vez que te imite, cuando transmita Tus Enseñanzas y cuando se burlen de mí en Tu Nombre, permite que te ayude en el camino hacia el Calvario. Ayúdame a estar libre de orgullo, y a nunca tener miedo de admitir que te amo, querido Jesús. Y luego, cuando todo parezca no tener esperanza en mi vida, querido Jesús, ayúdame a ser valiente, recordando cómo Tú voluntariamente permitiste ser crucificado de ese modo vil y cruel. Ayúdame a levantarme y a ser considerado como verdadero cristiano, un verdadero (fiel) soldado en Tu Ejército, humilde y de corazón contrito, en memoria del Sacrificio que Tú hiciste por mí. Toma mi mano, querido Jesús y enséñame cómo mi propio sufrimiento puede inspirar a otros a unirse a Tu Ejército junto con almas simpatizantes que te aman. Ayúdame a aceptar el sufrimiento y a ofrecértelo como una ofrenda para salvar almas en la batalla final contra la tiranía del maligno. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, protégeme en mi hora de necesidad, cuando sea confrontado con el mal. Ayúdame a defender la Palabra de Dios con fortaleza y valor, sin ningún miedo en mi alma. Ruega para que permanezca leal a las Enseñanzas de Cristo y que pueda entregar mis miedos, mis preocupaciones y mi tristeza, completa y totalmente. Ayúdame, para que pueda caminar adelante, sin temor, en este sendero solitario, con el fin de proclamar la Verdad de la Santa Palabra de Dios, incluso cuando los enemigos de Dios, hagan esta tarea casi imposible. Oh Bendita Madre, te pido que, a través de tu intercesión, la fe de todos los cristianos permanezca fuerte, en todo momento, durante la persecución. Amén.
Oh querido Jesús, te pido por el Don de la Perseverancia. Te ruego que derrames sobre mí las Gracias que necesito para mantener Tu Santísima Palabra. Te pido que me libres de cualquier duda persistente. Te pido que inundes mi alma con amabilidad, paciencia y perseverancia. Ayúdame a permanecer digno cuando sea insultado en Tu Santo Nombre. Hazme fuerte y cúbreme con la Gracia para seguir adelante, incluso cuando esté cansado, falto de fuerza y cuando me enfrente con todas las tribulaciones, que tenemos por delante, mientras trabajo incansablemente para ayudarte a salvar la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, Tú estás cerca de mi corazón. Yo soy uno Contigo. Te amo. Te quiero. Déjame sentir Tu Amor. Déjame sentir Tu Dolor. Déjame sentir Tu Presencia. Concédeme la Gracia de la humildad para que yo sea hecho digno de Tu Reino en la Tierra, así como en el Cielo. Concédeme las Lágrimas de Conversión, para que pueda verdaderamente ofrecerme a Ti, como verdadero discípulo, para ayudarte en Tu Misión para salvar cada una de las almas en la Tierra, antes de que vengas otra vez a juzgar a los vivos y a los muertos. Amén.
Oh querido Jesús, me postro delante de Ti, cansado, enfermo, con dolor y con anhelo de oír Tu Voz. Déjame ser tocado por Tu Divina Presencia, para que sea inundado por Tu Divina Luz a través de mi mente, cuerpo y alma. Yo confío en Tu Misericordia. Entrego mi dolor y sufrimiento completamente delante de Ti y pido que me des la Gracia de confiar en Ti, para que puedas curarme de este dolor y oscuridad, para que yo pueda llegar a estar sano de nuevo y así, pueda seguir el Sendero de la Verdad y permitirte que me conduzcas a la vida en el Nuevo Paraíso. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en mi ayuda, mientras lucho por encontrar tiempo para la oración. Ayúdame a darle, a tu amado Hijo, Jesucristo, el tiempo que Él merece para mostrarle cuánto lo amo. Pido que tú, mi Bendita Madre de la Salvación, solicites para mí las Gracias que necesito y pidas a tu querido Hijo toda gracia y favor, para que Él pueda envolverme dentro del Seno* de Su Sagrado Corazón. Amén. Seno* = parte interna de algo / Regazo = quien recibe alguien o algo dándole amparo, protección o consuelo.
Oh amada Madre de la Salvación, te imploro que unas, a través de tus oraciones, a todo el Ejército Remanente de Dios, en todo el mundo. Cubre todos los Grupos de Cruzada de Oración con la Gracia de Salvación, derramada sobre nosotros, a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Envía a tus ángeles para que cubran a cada uno de nosotros y especialmente a aquellos sacerdotes que dirigen los Grupos de Cruzada de Oración. Ayúdanos a evitar las distracciones, las cuales causan división entre nosotros, y protégenos con el Don de la Armadura, para que nos volvamos inmunes a los ataques que tendremos que soportar, debido a nuestro amor a Jesucristo, en esta Santa Misión para salvar almas. Amén.
Oh querido Padre Todopoderoso, Creador de todo lo que Es y Será, ayúdanos a todos los que podemos reconocer la Presencia de Tu amado Hijo, hoy día en la Iglesia, a ser muy fuertes. Ayúdame a superar mi miedo, mi soledad y el rechazo que sufro de mis seres queridos, mientras sigo a Tu Hijo, Jesucristo, mi Salvador. Por favor, protege a mis seres queridos de caer en la trampa de creer en las mentiras, las cuales han sido diseñadas por Satanás para destruir, dividir y causar estragos entre todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que siguen la abominación en Tu Iglesia, a que se salven del fuego eterno del infierno. Amén.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, ayúdame a confiar en Ti. A confiar en Tu Promesa de volver otra vez. A aceptar la Verdad de Tu Segunda Venida. A confiar en la Promesa de Dios Padre cuando dijo que te daría Tu Reino. Ayúdame a confiar en Tus Enseñanzas, en Tu Plan para salvar al mundo. Ayúdame a aceptar, con Gracia, Tus Dones. Ayúdame a confiar en Ti, para que pierda mi temor y así pueda dejar a Tu Amor inundar mi corazón y mi alma. Amén.
Mi queridísimo Jesús, escucha esta oración de mí, un alma muy indigna y ayúdame a amarte más. Por mi libre voluntad, te ofrezco este Regalo de regreso, querido Jesús, para que pueda convertirme en Tu humilde servidor y permanecer obediente a la Voluntad de Dios. Mi voluntad es Tu Voluntad. Tu Mandato significa que soy obediente a todos Tus deseos. Mi libre albedrío es Tuyo para hacer con él lo que sea necesario para salvar a todas las personas, en todo el mundo, quienes estén separadas de Ti. Otorgo este Regalo, el cual me fue dado al nacer, a Tu Santísimo Servicio. Amén.
"Yo os prometo a todos vosotros que difundiré el Regalo de Mi Amor, a través de esta Misión. Mi Amor será una característica distintiva, y todos aquellos que respondan a Mi Llamada, serán envueltos con Mi Amor, cuando reciten esta Cruzada de Oración:"
Queridísimo Jesús, lléname a mí, un recipiente vacío, con el Don de Tu Amor. Inunda mi alma con Tu Presencia. Ayúdame a amar a los demás así como Tú me amas. Ayúdame a ser un recipiente de Tu Paz, de Tu Tranquilidad y de Tu Misericordia. Abre mi corazón siempre a la difícil situación de los demás, y dame la Gracia para Perdonar a aquellos que te rechazan y a quienes me transgreden. Ayúdame a proclamar Tu Amor a través del ejemplo, tal como Tú lo harías, si estuvieras en mi lugar. Amén.
Oh Queridísimo Padre, Oh Eterno, Dios Altísimo, hazme digno de Tu amor.
Por favor, perdóname por herir a los demás y por toda mala acción que haya causado sufrimiento a alguno de Tus hijos.
Abre mi corazón para que yo pueda darte la bienvenida (aceptarte) en mi alma, y pueda limpiarme de cualquier odio que yo pudiera sentir contra otra persona.
Ayúdame a Perdonar a mis enemigos y sembrar las semillas de Tu Amor donde quiera que vaya y entre aquellos con los que me encuentro todos los días.
Dame querido Padre, los Dones de la Perseverancia y Confianza, para que pueda mantener en alto Tu Santa Palabra y por lo tanto mantener viva, en un mundo oscurecido, la llama de Tu Gran Amor y Misericordia. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Ayúdanos, querido Jesús, a levantarnos sin miedo en Tu Nombre, para llevar la Llama de Tu Amor, a través de todas las naciones. Danos, a Tus hijos, la fuerza para afrontar el abuso que enfrentaremos, entre todos aquellos que no son verdaderos creyentes de Tu Misericordia. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a evitar el pecado del orgullo, cuando hablo en Tu Nombre. Perdóname si alguna vez menosprecio a alguien en Tu Santo Nombre. Ayúdame a escuchar, Jesús, cuando Tu voz sea pronunciada y lléname de Tu Santo Espíritu, para que así pueda discernir la Verdad de Tu Palabra, cuando llames a la humanidad. Amén.
Jesús ayúdame, porque estoy perdido y confundido. No conozco la Verdad de la vida después de la muerte. Perdóname si te ofendo al honrar falsos dioses, que no son el Verdadero Dios. Sálvame y ayúdame a ver la Verdad con claridad y sálvame de la oscuridad de mi alma. Ayúdame a venir a la Luz de Tu Misericordia. Amén.
Oh Jesús, mi amado Salvador, te pido que me cubras con Tu Santo Espíritu, para que así yo pueda hablar con autoridad Tu Santísima Palabra, para preparar a todos los hijos de Dios, para Tu Segunda Venida. Te suplico, Señor Jesús, por todas las Gracias que necesito, para que así yo pueda alcanzar a todas las religiones, credos y nacionalidades, por donde sea que yo vaya. Ayúdame a hablar con Tu lengua, aliviar a las pobres almas con Tus labios y amar todas las almas con el especial Divino Amor, el cual emana de Tu Sagrado Corazón. Ayúdame a salvar las almas muy cercanas a Tu Corazón y permíteme consolarte, querido Jesús, cuando las almas confundidas continúen rechazando Tu Misericordia. Jesús, yo soy nada sin Ti, pero con Tu generosa ayuda, lucharé en Tu Nombre, para ayudar a salvar a la humanidad entera. Amén.
Querido Jesús, dame la fortaleza para concentrarme en Tus Enseñanzas y para proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Nunca me permitas ser tentado a idolatrar al falso profeta, quien tratará de presentarse a sí mismo como Tú. Mantén fuerte mi amor por Ti. Dame la Gracia del Discernimiento, para que jamás niegue la Verdad contenida en la Santa Biblia, sin hacer caso de cuantas mentiras me sean presentadas con el propósito de alentarme a darle la espalda a Tu Verdadera Palabra. Amén.
Oh Jesús, conozco tan poco de Ti, pero por favor, ayúdame a abrir mi corazón para dejarte entrar en mi alma, para que así puedas sanarme, consolarme y llenarme con Tu Paz.
Ayúdame a sentir alegría, vencer todos los pensamientos negativos y aprender la manera de hacerme comprender cómo complacerte, para que así yo pueda entrar en Tu Nuevo Paraíso, en donde pueda vivir una vida de amor, alegría y maravilla Contigo, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Jesús, estoy perdido. Estoy confundido y me siento como un prisionero atrapado en una red de la cual no puedo escapar. Confío en que Tú, Jesús, vendrás en mi ayuda y me liberarás de las cadenas de Satanás y sus demonios. Ayúdame porque estoy perdido. Necesito Tu amor para que me dé la fortaleza de creer en Ti y confiar en Ti, para que así pueda ser salvado de este mal y se me muestre la Luz - para que por fin pueda encontrar paz, amor y felicidad. Amén.
Oh Bendita Madre, Madre de la Salvación para el mundo entero, ruega para que mi amor por Jesús pueda volver a encenderse. Ayúdame a sentir la Llama de Su Amor, para que ésta llene mi alma. Ayúdame para amar más a Jesús. Ruega para que mi fe, amor y devoción hacia Él, se hagan más fuertes. Disipa cualquier duda que me atormente y ayúdame a ver claramente la Divina Luz de la Verdad que irradia de tu amado Hijo, el Salvador de toda la humanidad. Amén.
Oh querido Jesús, ayúdame a saber Quién Eres. Perdóname por no haber hablado antes Contigo. Ayúdame a encontrar paz en esta vida, y que me sea mostrada la Verdad de la Vida Eterna. Consuela mi corazón. Alivia mis preocupaciones. Dame paz. Abre ahora mi corazón para que puedas llenar mi alma con Tu Amor. Amén.
Oh Jesús, ayúdame, pues soy un pecador extraviado, desamparado y en la oscuridad. Soy débil y me falta valor para buscarte. Dame fuerzas para llamarte ahora y así poder despojarme de la oscuridad dentro de mi alma. Introdúceme en Tu Luz, querido Jesús. Perdóname. Ayúdame a ser íntegro nuevamente y guíame a Tu Amor, Paz y Vida Eterna. Confío completamente en Ti y te pido que me tomes en mente, cuerpo y alma, mientras yo me entrego a Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh Dios el Altísimo, ayúdame a creer en Tu Existencia. Echa todas mis dudas a un lado. Abre mis ojos a la Verdad de la vida después de esta vida y guíame hacia el camino a la Vida Eterna. Por favor déjame sentir Tu Presencia y concédeme el Don de la Verdadera Fe antes del día que yo muera. Amén.
Querido Jesús, protégeme de la maldad del diablo. Cúbreme a mí y cubre a todos aquellos que son débiles e indefensos en su presencia, con Tu Preciosa Sangre. Todos los días dame el valor para rechazarlo, y ayúdame a evitar cualquier intento por parte de él para involucrarme de alguna manera. Amén.
"Venid a Mí hoy y llamadme para que Yo os ayude, sin importar cuantos temores podáis tener. Recitad esta especial Oración cada vez que estéis en apuros y Yo responderé en todo momento."
Oh, mi Jesús, ayúdame en mis momentos de gran aflicción. Tómame en Tus Brazos y llévame al Refugio de tu Corazón. Enjuga mis lágrimas. Calma mis decisiones. Levanta mi espíritu y lléname de Tu Paz. Por favor, concédeme esta petición especial (mencionarla aquí...) Ven en mi ayuda, para que mi petición sea contestada, y que mi vida pueda volver a estar en paz y en unión Contigo, querido Señor. Si mi petición no puede ser concedida, lléname entonces con las Gracias para aceptar que Tu Santa Voluntad es por el bien de mi alma y que yo permanezca fiel a Tu Palabra, por siempre, con un cálido y agradecido corazón. Amén.
Oh, Madre de Dios, Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación, ruega para que permanezcamos fieles a la Verdadera Palabra de Dios en todo momento. Prepáranos para defender la Fe, para respaldar la Verdad y rechazar la herejía.
Protege a todos tus hijos en tiempos de dificultad y da a cada uno de nosotros las Gracias para ser valientes cuando seamos desafiados a rechazar la Verdad y renunciar a tu Hijo. Ruega, Santa Madre de Dios, para que se nos dé la Divina Intervención para permanecer Cristianos, de acuerdo con la Santa Palabra de Dios. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, te pido que intercedas por mí mientras yo suplico por el Amor de Dios. Llena mi alma, un recipiente vacío, con el Amor de Dios, para que cuando se esté desbordando, se derrame sobre las almas por las que lucho para mostrarles compasión. Por el Poder de Dios, pido que yo sea liberado de cualquier sentimiento de odio que pueda albergar por aquellos que traicionan a tu Hijo. Hazme humilde de espíritu, y lléname con generosidad del alma para que yo pueda seguir las Enseñanzas de Cristo y pueda extender Su Amor en cada parte de mi vida. Amén.
Oh, Jesús guárdame del dolor de la persecución en Tu Nombre. Congráciame con Tu Corazón. Líbrame de la soberbia, la avaricia, la maldad, del ego y del odio en mi alma. Ayúdame a entregarme verdaderamente a Tu Misericordia. Llévate mis temores.
Ayúdame a desahogar mi dolor y lleva toda persecución lejos de mí, para que yo pueda seguirte como un niño pequeño, en el conocimiento de que todas las cosas están bajo Tu control. Libérame del odio mostrado por todos los que proclaman ser Tuyos, pero que realmente te niegan. No dejes que sus lenguas cortantes me azoten o que sus actos malvados me distraigan del Sendero de la Verdad.
Ayúdame a concentrarme solo en Tu Reino por venir y a perseverar, con dignidad, contra cualquier insulto que yo pueda padecer en Tu nombre. Tráeme la paz de la mente, la paz del corazón, la paz del alma. Amén.
"Mi Reino os dará la Vida Eterna, pero debéis pedir Mi Ayuda recitando esta oración:"
Jesús, ayúdame a creer en Tu Existencia. Dame una señal para que mi corazón pueda responderte.
Llena mi alma vacía con la Gracia que necesito para abrir mi mente y mi corazón a Tu Amor. Ten Misericordia de Mí, y limpia mi alma de todos los malos actos que he cometido en mi vida. Perdóname por haberte rechazado, pero por favor lléname con el amor que necesito, para hacerme digno de la Vida Eterna. Ayúdame a conocerte, a ver Tu Presencia en otras personas y lléname con la Gracia de reconocer la Señal de Dios en cada regalo hermoso que Tú has dado a la raza humana. Ayúdame a comprender Tus Caminos y sálvame de la separación y del dolor de la oscuridad que siento en mi alma. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi amada Madre de la Salvación, te pido que reces para que me sea dado el Alimento de Vida para que me sustente en esta jornada, y me ayude a salvar a todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que están siendo engañados por falsos ídolos y falsos dioses para que abran sus ojos a la Verdad de la Muerte de Tu Hijo, que murió en la Cruz, para salvar a todos los hijos de Dios y llevar a cada uno a la Vida Eterna. Amén.
Oh Madre de Dios, ayúdame a preparar mi alma para el Don del Espíritu Santo. Llévame de la mano como a un niño, y condúceme en el camino hacia el Don de Discernimiento, por el poder del Espíritu Santo. Abre mi corazón y enséñame a entregarme en cuerpo, mente y alma. Libérame del pecado del orgullo y ruega para que yo sea Perdonado de todos los pecados pasados, para que así mi alma sea purificada y que yo sea sanado, para que pueda recibir el Don del Espíritu Santo. Te doy gracias, Madre de la Salvación, por tu intercesión, y con amor en mi corazón espero por este Don, el cual anhelo con alegría. Amén.
Jesús, ayúdame a aceptar el Amor de Dios como se me está siendo mostrado. Abre mis ojos, mi mente, mi corazón y mi alma, para que pueda ser salvado. Ayúdame a creer llenando mi corazón con Tu amor. Luego, sujétame y sálvame del tormento de la duda. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a mí, un pobre miserable* pecador, a ir a Ti con remordimiento en mi alma. Purifícame de los pecados, que han destruido mi vida. Dame el Don de una nueva vida, libre de las cadenas del pecado, y la libertad, que mis pecados me niegan. Renuévame en la Luz de Tu Misericordia. Acógeme en Tu corazón. Déjame sentir Tu Amor para que pueda volver a acercarme a Ti y que mi amor por Ti sea encendido. Ten misericordia de mí, Jesús, y manténme libre de pecado. Hazme digno de entrar en Tu Nuevo Paraíso. Amén. miserable* = desdichado.
Querido Jesús, ayúdame. Me estoy ahogando en lágrimas de dolor. Mi corazón está confundido. No sé en quién puedo confiar. Por favor lléname con Tu Espíritu Santo, para que yo pueda elegir el sendero correcto hacia Tu Reino. Ayúdame, querido Jesús, a permanecer siempre fiel a Tu Palabra, dada al mundo por Pedro y a nunca desviarme de lo que Tú nos enseñaste o nunca negar Tu muerte en la Cruz. Jesús, Tú eres el Camino. Muéstrame el Camino. Sostenme y llévame sobre Tu camino de Gran Misericordia. Amén.
Oh, Jesús, prepárame para que pueda llegar ante Ti sin avergonzarme. Ayúdame y ayuda a mis seres queridos (nombrarlos aquí...) para que nos preparemos a confesar todas nuestras malas acciones. A admitir nuestras deficiencias. A pedir por el perdón de todos los pecados. A mostrar amor a aquellos a quienes hemos ofendido. A rogar por Misericordia para la salvación. A que nos humillemos ante Ti, para que en el Día de la Gran Iluminación, mi conciencia, y la de aquellos (nombrarlos aquí...) estén limpias y que Tú inundes nuestras almas con Tu Divina Misericordia. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Queridísimo Jesús, ayúdame a escuchar Tu Palabra. Vivir Tu Palabra. Hablar Tu Palabra. Impartir Tu Palabra. Dame las fuerzas para defender la Verdad, incluso cuando sea perseguido por ello. Ayúdame a mantener viva Tu Palabra, cuando ella sea ahogada por Tus enemigos.
Déjame sentir Tu Coraje (Valentía) cuando esté decaído. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Dame la Gracia de permanecer digno para permanecer fiel a Tu Santísima Voluntad, cuando las puertas del Infierno prevalezcan* contra mí. Amén.
prevalezcan* = se impongan / crezcan y aumenten.
"Cuando encontréis que comenzáis a dudar de Dios o a perder la confianza en Su Amor o en Su Promesa, entonces debéis recitar esta Cruzada de Oración, que será conocida como la Oración de Renovación:"
Oh, Dios Todopoderoso, oh Dios Altísimo, mira hacia mí, Tu humilde servidor, con amor y compasión en Tu corazón. Renuévame en Tu Luz. Levántame de nuevo en Tu favor*. Lléname de la Gracia, para que me pueda ofrecer a Ti en humilde servidumbre y en conformidad con Tu Santísima Voluntad. Líbrame del pecado de orgullo y de todo lo que te insulta y ayúdame a amarte con un profundo y permanente deseo de estar a tu servicio todos mis días, por siempre y para siempre. Amén. favor*=benevolencia
"Si tenéis que hacer frente a la muerte, o si un ser amado tiene que enfrentar la muerte, entonces siempre recurrid a Mí, vuestro Jesús, por ayuda. Mi Misericordia se extiende especialmente a las almas que están afrontando la muerte, pero que no creen en Mí, cuando digan esta oración tres veces al día, en sus últimos días:"
Mi queridísimo Jesús, Perdona mis pecados. Limpia mi alma y prepárame para entrar a Tu Reino. Concédeme las Gracias para prepararme para mi unificación Contigo. Ayúdame a vencer cualquier miedo. Concédeme la valentía para preparar mi mente y mi alma, de modo que sea yo digno de estar frente a Ti. Te amo. Yo confío en Ti. Yo mismo me doy a Ti en cuerpo, mente y alma por la eternidad. Que Tu Voluntad sea la mía y líbrame del dolor, dudas o confusión. Amén.
Oh Jesús, lléname con el Amor de Dios. Lléname con Tu Divina Luz e inúndame con el amor que necesito para extender la semilla de la Misericordia de Dios entre todas las naciones.
Permite que Tu Amor Divino sea expandido por mí entre todos aquellos con quienes entro en contacto. Extiende Tu Amor, para que se pose sobre todas las almas, todas las religiones, todos los credos, todas las naciones - como una bruma que cautive a todos los hijos de Dios en unidad.
Ayúdanos a difundir el Amor de Dios, para que éste pueda derrotar y derrote todo el mal en el mundo. Amén.
Querido Jesús, ayúdame en mi hora de desamparo*. Libérame del pecado y abre mis ojos, mi corazón y mi alma contra el engaño del demonio y sus perversas manipulaciones. Lléname de Tu Amor cuando sienta odio en mi corazón. Lléname de Tu Paz cuando me sienta afligido. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Sálvame de la prisión en la que me encuentro, para que así pueda ser libre y sea sostenido a salvo en Tus Sagrados Brazos. Amén. desamparo* = abandono, falta de ayuda o favor, cuando no se sabe qué hacer...
Oh Jesús mío, Salvador del mundo, ayúdame a amarte más. Ayúdame a crecer en mi amor por Ti. Llena mi corazón con Tu Amor y Compasión, para que pueda obtener las Gracias para amarte de la manera como Tú me amas.
Llena mi alma ingrata con un amor profundo y permanente por Ti y por todo lo que Tú representas. Por el Poder de Tus Gracias ayúdame para amar a mi prójimo como Tú amas a cada hijo de Dios y para mostrar compasión a aquellos que están en necesidad de Tu Amor y a quienes estén sin fe. Úneme en unión Contigo, para que yo pueda llevar la vida Cristiana, la que Tú nos enseñaste con Tu ejemplo, durante Tu tiempo en la Tierra. Amén.
"Por favor, recitad esta Oración cada vez que os sintáis separados de Mí y Yo vendré en vuestro auxilio. Yo os llenaré de una Paz que no puede, ni nunca podrá ser encontrada en ningún lugar en este mundo:"
Jesús, yo confío en Ti. Ayúdame a amarte más. Lléname con la confianza para entregarme en unión completa y definitiva Contigo. Ayúdame a aumentar mi confianza en Ti durante los momentos difíciles. Lléname de Tu Paz. Vengo a Ti, querido Jesús, como un niño, libre de todas las ataduras mundanas; libre de toda condición y te entrego mi voluntad para que hagas con ella lo que mejor te parezca, por mi propio bien y por el de las demás almas. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Para ser rezada especialmente en Navidad
Oh mi Padre Celestial, te honramos con una profunda apreciación* del Sacrificio que hiciste, cuando enviaste al Salvador al mundo. Te ofrecemos con gozo y acción de gracias, nuestra oración en humilde gratitud por el Don que ahora das a Tus hijos, el Don de la Divina Misericordia. Oh Dios Altísimo, haznos dignos de aceptar esta Gran Misericordia, con gratitud. Amén.
apreciación* = profundo agradecimiento / reconocimiento.
Te alabamos y te agradecemos, Oh Santo Dios Todopoderoso Creador de la humanidad, por el amor y la compasión que tienes a la humanidad. Te agradecemos por el Don de la Salvación que otorgas a Tus pobres hijos. Te suplicamos Oh Señor, que salves a aquellos que siguen al maligno, y que sus corazones se les abran a la Verdad de su Vida Eterna. Amén.
Oh Pan Celestial, llena mi cuerpo con el nutrimento (sustento) que necesita. Llena mi alma con la Presencia Divina de Jesucristo. Dame las Gracias para cumplir la Santa Voluntad de Dios. Lléname con la paz y la calma que provienen de Tu Sagrada Presencia. Nunca me dejes dudar de Tu Presencia. Ayúdame a aceptarte en Cuerpo y Alma, y que, mediante la Sagrada Eucaristía, las Gracias otorgadas sobre mí me ayuden a proclamar la Gloria de Nuestro Señor Jesucristo. Purifica mi corazón. Abre mi alma y santifícame cuando reciba el Gran Don de la Sagrada Eucaristía. Concédeme las Gracias y los favores otorgados sobre todos los hijos de Dios, y concédeme inmunidad contra las llamas del Purgatorio. Amén.
Oh Jesús mío, te ofrezco alabanza y acción de gracias por Tu Gloriosa Segunda Venida. Tú, mi Salvador, naciste para darme Vida Eterna y para liberarme del pecado. Te ofrezco mi amor, mi agradecimiento y mi adoración mientras preparo mi alma para Tu Gran Venida. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Esta especial oración diaria es un Regalo de Dios Padre, dado a la Profeta María Divina Misericordia, para la protección de todos los hijos de Dios.
A todos los que acepten este Sello, se les ofrecerá protección a cada uno de ustedes y a sus familias durante el periodo de transición hasta la Segunda Venida de Cristo.
Dios Padre pide que todos acepten este Sello como una protección para todos y cada uno de nosotros, y nuestras familias, durante los futuros tiempos difíciles en los que tendremos que vivir.
Oh Dios Mío, mi Padre amoroso, yo acepto con amor y gratitud Tu Sello Divino de Protección. Tu Divinidad abarca mi cuerpo y alma por la eternidad. Me inclino en humilde acción de gracias y te ofrezco mi profundo amor y lealtad a Ti, mi amado Padre. Te suplico que me protejas a mí y a mis seres queridos con este Sello especial y comprometo mi vida a Tu servicio por los siglos de los siglos. Te amo querido Padre. Te consuelo en estos momentos, querido Padre. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma, y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo en expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos Tus hijos. Amén.
"Vayan, hijos Míos y no teman. Confíen en Mí, su amado Padre, Quien amorosamente los creó a cada uno de ustedes. Yo conozco cada una de las almas, cada parte suya es conocida por Mí. Ninguno de ustedes es amado menos que el otro. Debido a esto no quiero perder un alma. Ni una. Por favor continúen rezando Mi Coronilla de la Divina Misericordia todos los días. Un día entenderán por qué esta purificación es necesaria. Su amoroso Padre en el Cielo Dios Altísimo."
El sello debe imprimirse y si es posible que un sacerdote católico lo bendiga. En internet se pueden descargar ejemplares.
"...Mi imagen ha de ser creada y una Medalla* acuñada donde, por un lado, he de estar colocada con el sol detrás de mi cabeza y donde doce estrellas entretejidas en una corona de espinas se asiente sobre mi cabeza. En el reverso de la Medalla, deseo representar el Sagrado Corazón de mi Hijo con las Dos Espadas de Salvación, que han de ser cruzadas en cada lado.
Las Espadas de Salvación tendrán un doble propósito. La Primer Espada matará a la bestia y se me ha dado la autoridad para hacer esto en el Último Día. La otra Espada penetrará los corazones de los pecadores más endurecidos y será la Espada por la que sus almas serán salvadas.
Esta Medalla ha de hacerse disponible a granel y entonces, cuando sean recibidas por aquellos que las buscan, deben ser bendecidas por un sacerdote y luego dadas libremente (sin restricciones) a otros. La Medalla de Salvación ofrece el Don de Conversión y Salvación."
"Todos aquellos que reciban la Medalla de Salvación deben recitar esta Cruzada de Oración:"
Oh, Madre de la Salvación, cubre mi alma con tus Lágrimas de Salvación. Líbrame de dudas. Levanta mi corazón, para que sienta la Presencia de tu Hijo. Tráeme paz y consuelo. Ruega para que verdaderamente yo sea convertido. Ayúdame a aceptar la Verdad y a abrir mi corazón para recibir la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Amén.
"...A cada persona a quien se le dé una Medalla, incluso si no está bendecida, le será dado un extraordinario Don. Pronto después, Dios infundirá en ellos una Gracia, un conocimiento dentro de sus propias impotencias y una conciencia del Amor Todopoderoso de Dios. Él iluminará incluso a la más terca de las almas y a aquellos con corazones de piedra. Pronto ellos buscarán la Verdad y entonces llamarán a Dios, suplicándole que les ayude a tranquilizar sus corazones y que los llene con Su Gran Misericordia..."
*Medalla disponible en internet.
Una vez adquiridas, las medallas deben ser distribuidas gratuitamente.
"Mi muy querida y amada hija, Yo quiero que les pidas a Mis discípulos que empiecen a rezar diariamente Mis Letanías de Jesús para la Humanidad, ahora, y de ahora en adelante.
Estas oraciones brindarán grandes Gracias y salvarán a todos aquellos, los cuales habéis puesto dentro de vuestras intenciones especiales para la salvación de sus almas.
La segunda, es en honor de Mi Padre Eterno, quien ama a cada uno de Sus preciados hijos.
Yo recuesto Mi Cabeza sobre Su Hombro, Mis Brazos Lo rodean cada día, para darle consuelo mientras Él se preocupa por todas aquellas pobres almas que están perdidas para Él.
Venid a Él, Mis amados discípulos y agradeced a Mi Padre por el Regalo de Su Gracia de Inmunidad contra el Fuego del Infierno, para aquellos quienes respondan a Su Llamado."
Oh Altísimo Padre Celestial,
Te amo.
Te honro.
Señor ten Misericordia.
Señor Perdona nuestras ofensas.
Te adoro.
Te alabo.
Te doy las gracias por todas Tus Gracias especiales.
Te suplico por la Gracia de la Inmunidad para mis amados:
(Nombrar a todos los que están en una lista para la salvación de almas)
Te ofrezco mi lealtad en todo momento.
Tú, Oh Altísimo Padre Celestial,
Creador de todas las cosas,
Creador del universo,
Creador de la humanidad,
Tú eres la Fuente de todas las cosas.
Tú eres la Fuente del Amor.
Tú eres Amor.
Te amo.
Te honro y me postro ante Ti.
Te suplico Misericordia para todas las almas que no Te conocen, que no te honran, que rechazan Tu Mano de Misericordia.
Me entrego a Ti en mente, cuerpo y alma, de modo que puedas tomarlos entre Tus Brazos, a salvo del mal. Te pido que abras la Puerta del Paraíso, para que todos Tus hijos puedan unirse, por fin, en la herencia que has creado para todos nosotros. Amén.
"Mi niña, el Cielo se regocija. El Coro de los Ángeles está cantando con el máximo de sus voces en alabanza para Mi Padre.
Su Misericordia Gloriosa otorgada por Él, mediante la Gracia Especial de Inmunidad, está empezando a ser aclamada con gran amor y gozo, por todos los Ángeles y Santos en el Cielo.
Mis hijos no entienden todavía el significado de este gran Don de Misericordia, otorgado por El Padre, Dios el Altísimo.
Vosotros, hijos Míos, ahora tenéis el poder para salvar a los otros, las almas extraviadas.
Esto significa que el poder del maligno, puede ser conquistado de una manera que no era posible hasta ahora...
...Apreciadlo (valoradlo), porque éste es un Don excepcional que viene del Cielo.
Esto prueba a vosotros el Amor de vuestro Padre por cada uno de Sus hijos amados.
Éste es uno de los grandes milagros, presentados a todos los hijos de Dios, en los Tiempos finales."
"Mi amadísima hija, cómo me regocijo con el amor mostrado a Mí por Mis preciosos seguidores, cuyo amor es tan cercanamente entrelazado con Mi Sagrado Corazón.
Me deleito con Mis hijos leales, cuyo amor por Mí, me trae tal gozo en medio de Mi dolor. Ellos son la luz que me trae la fuerza necesaria para guiar a Mi ejército.
stos, Mis hijos elegidos, creen que ha sido su fe solamente la que los ha traído a Mí. De lo que no se dan cuenta es que Mi Espíritu Santo descendió sobre ellos, especialmente sobre aquellos con corazones abiertos, para que así puedan unirse a Mi Iglesia remanente en la Tierra.
Ellos, Mis amados seguidores, que muestran obediencia, determinación de voluntad y amor puro en sus almas, serán los fundamentos sobre los cuales voy a reconstruir Mi Iglesia en la Tierra.
A Mi ejército, por su amor a Mi, les serán dadas gracias especiales ahora. Yo les garantizo esta Indulgencia Plenaria para permitirles portar Mi antorcha de fuego, para que así ellos puedan difundir la conversión.
Este Don Mío, les permitirá difundir la verdad de Mi Santa Palabra, para que así toque corazones por todas partes a donde vayan..."
Esta oración es para católicos y no católicos, pero deben tener el propósito de no volver a pecar para recibir la absolución de los pecados pasados. Los católicos todavía están obligados a confesarse si hay sacerdotes disponibles. Los católicos no deben usar esta oración como un sustituto mientras puedan confesarse.
"Deben decir esta oración por 7 días consecutivos y les será dado el Don de la Absolución Total y el poder del Espíritu Santo:"
Oh Jesús mío, Tú eres la Luz de la Tierra. Eres la Llama que toca todas las almas. Tu Misericordia y Amor no conocen límites. No somos dignos del Sacrificio que hiciste con Tu muerte en la Cruz, sin embargo sabemos que Tu Amor por nosotros es mayor que el amor que tenemos por Ti. Concédenos, Oh Señor, el Don de la Humildad, para que así seamos merecedores de Tu Nuevo Reino. Llénanos con el Espíritu Santo, para que así podamos marchar hacia adelante y guiar a Tu Ejército para proclamar la Verdad de Tu Santa Palabra y preparar a nuestros hermanos y hermanas para la Gloria de Tu Segunda Venida a la Tierra. Te honramos. Te alabamos. Nosotros mismos nos ofrecemos, nuestras penas, nuestros sufrimientos, como una ofrenda a Ti para la salvación de las almas. Te amamos Jesús. Ten Misericordia de todos Tus hijos donde sea que se encuentren. Amén.
Jesús nos ofrece la cruzada de oración 104 para salvar aquellas almas que se han entregado completamente a Satanás.
Cada vez que se recite esta cruzada (procurar hacerlo tras recibir la Sagrada Eucaristía), Jesús salvará otras cien almas más.
”Finalmente, están aquellas (almas) que saben todo sobre Mí y el hecho de que Yo Soy el Mesías. Ningún milagro o acto de amor las atraerá a Mí porque se han abandonado a sí mismas a Satanás. Estas almas serán devoradas por la bestia y él no las dejará ir libres porque no me ven como su Salvador. Ellos todavía no saben la verdad del plan de la bestia. A fin de que ellos se salven, vosotros, Mis amados seguidores, debéis darme vuestra lealtad encomendándome las almas de ellos, durante vuestras oraciones y cuando recibáis la Sagrada Eucaristía. Debéis ofrecérmelos cada día y por cada alma que dediquéis a Mi Misericordia, salvaré cien más."
Queridísimo Jesús te presento el alma de (nombre del alma), que ha abandonado su alma a Satanás. Toma esta alma y redímela ante Tus Santos Ojos. Libera esta alma de la esclavitud de la bestia y tráele salvación eterna. Amén.
”Haced esto todos los días. Al final de cada mes estaréis llenos de alegría porque sabréis a cuántas almas como éstas les ha sido dada esta Gran Misericordia. Éste es solo otro Don con el que os bendigo y las gracias que recibiréis, cuando recitéis esta Cruzada de Oración, serán en abundancia.”
"Mi hija, ¿puedo pedir a aquellos que siguen estos Mensajes que oren por esta Misión? Vuestras oraciones son requeridas para que este Trabajo esté protegido de todas las trampas malvadas y obras del maligno, por aquellos que le sirven y lo honran. Nunca antes vuestras oraciones se han necesitado tanto como lo es en este momento. La obra del maligno contra esta Misión de Salvación es intensa y su odio va en aumento."
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
”Mis amados hijos, debéis presentar vuestras Oraciones cada día a Mi Hijo, para la protección de esta Misión contra el odio de Satanás. Si hacéis esto, muchas Bendiciones os serán dadas. Para aquellos de vosotros que podáis, por favor, ofreced Misas, tan a menudo como sea posible, por la profeta de Dios María de la Divina Misericordia y por todos los siervos de Dios, para que a través de la Misericordia de Dios, todas las almas se unan con Él en Su Reino, para siempre.”
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Jesús perdóname, porque he pecado.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Pedimos a:
Nuestra bendita Madre de la Salvación,
San José,
San Benito,
Santa Faustina,
Papa San Juan Pablo II,
San Juan Bautista,
San padre Pío,
San Pedro y San Pablo,
San Juan Evangelista,
San Agustín,
San Malaquías,
Santa Teresa de Ávila,
San Miguel Arcángel,
nuestros ángeles Custodios
y a todos los ángeles y Santos del Cielo,
que se unan en estas oraciones e intercedan por nosotros y nuestras familias. Amén.
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.
- "Jesús libranos a nosotros, pecadores indefensos, del enemigo."
- "Jesús, dame los Dones que necesito para permanecer fiel a Ti."
- "Jesús, Tu Voluntad es todo lo que importa. Mi libre albedrío es Tuyo, haz con él lo que desees."
Nuestra Señora insta a las personas a que digan su Santo Rosario (los 3 Misterios) diariamente para ayudar a salvar su país y familia.
Oración antes del Rosario:
Oh Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de Gracia ocultos en el Rosario. Infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las Gracias por las que ruego en este Rosario.
+ Te pedimos especialmente por la intercesión y asistencia del Santo Arcángel Miguel y por la protección de Dios y la Jerarquía de Ángeles.
+ Por la protección de La Misión de Salvación.
+ Por María Divina Misericordia y su familia.
+ Por los sacerdotes de esta Misión.
+ Por todos los coordinadores.
+ Por todo el Ejército Remanente de Cristo y sus familias. A través del doloroso sufrimiento de nuestro Señor Jesucristo y del Inmaculado Corazón de María, ofrecemos nuestras oraciones y sufrimientos para aliviar el sufrimiento de María Divina Misericordia y evitar los ataques a la Misión.
+ Oramos por las intenciones personales de María Divina Misericordia.
+ Oramos por la fortaleza de María para superar los obstáculos que se le presentan todos los días para asegurar que estos Mensajes se difundan por todas partes.
Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por tu propio honor y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.
Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María la Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilatos, fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los Cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre todo poderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno y lleva a todas las almas al Cielo, socorre especialmente a las más necesitadas de Tu misericordia. Amén.
Madre de la Salvación, ruega por nosotros.
(1) Primer Misterio Doloroso: La agonía en el huerto.
(2) Segundo Misterio Doloroso: La flagelación en la columna.
(3) Tercer Misterio Doloroso: La coronación de espinas.
(4) Cuarto Misterio Doloroso: Jesús con la cruz a cuestas.
(5) Quinto Misterio Doloroso: La Crucifixión.
Dios te salve Reina y Madre, Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve a ti clamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. ¡Ea, pues, Señora, Abogada nuestra! Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de Tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosísima! ¡Oh dulce siempre Virgen María! Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, por favor detén el odio y los celos que existen entre Tus seguidores, hacia Tus verdaderos visionarios en estos tiempos. Pido que escuches mi oración, para darle a Tus visionarios la fuerza que necesitan, para proclamar Tu Santísima Palabra a un mundo incrédulo. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplico que brindes protección a todos Tus santos mensajeros en el mundo. Te pido que sean protegidos del odio de otros. Te pido que Tu Santísima Palabra sea difundida rápidamente por todo el mundo. Protege a Tus mensajeros de la calumnia, el abuso, las mentiras y de todo tipo de peligro. Protege a sus familias y cúbrelos con el Espíritu Santo en todo momento, para que los Mensajes que ellos dan al mundo, sean escuchados con corazón contrito y humilde. Amén.
Dios Padre pide que todos acepten este Sello como una protección para todos y cada uno de nosotros, y nuestras familias, durante los futuros tiempos difíciles en los que tendremos que vivir.
Oh Dios Mío, mi Padre amoroso, yo acepto con amor y gratitud Tu Sello Divino de Protección. Tu Divinidad abarca mi cuerpo y alma por la eternidad. Me inclino en humilde acción de gracias y te ofrezco mi profundo amor y lealtad a Ti, mi amado Padre. Te suplico que me protejas a mí y a mis seres queridos con este Sello especial y comprometo mi vida a Tu servicio por los siglos de los siglos. Te amo querido Padre. Te consuelo en estos momentos, querido Padre. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma, y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo en expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos Tus hijos. Amén.
Oh amada Madre de la Salvación, te imploro que unas, a través de tus oraciones, a todo el Ejército Remanente de Dios, en todo el mundo. Cubre todos los Grupos de Cruzada de Oración con la Gracia de Salvación, derramada sobre nosotros, a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Envía a tus ángeles para que cubran a cada uno de nosotros y especialmente a aquellos sacerdotes que dirigen los Grupos de Cruzada de Oración. Ayúdanos a evitar las distracciones, las cuales causan división entre nosotros, y protégenos con el Don de la Armadura, para que nos volvamos inmunes a los ataques que tendremos que soportar, debido a nuestro amor a Jesucristo, en esta Santa Misión para salvar almas. Amén.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
"Os prometo, queridos hijos, que Yo voy a aliviar vuestro dolor, vuestra tristeza y vuestro miedo, legándoos poderosas Gracias y Bendiciones. Estaréis protegidos por el círculo de mi Jerarquía de Ángeles. Para pedirme que disuelva vuestro miedo y tristeza, y os conceda la libertad frente a la persecución, por favor recitad esta oración:"
Queridísimo Padre, Dios de toda la Creación, Dios Altísimo, concédeme la Gracia y la Protección a través de Tu Jerarquía de Ángeles. Permíteme enfocarme en Tu Amor por cada uno de Tus hijos, no importa de qué manera te ofendan. Ayúdame a difundir la noticia del Pacto Final, para preparar al mundo para la Segunda Venida de Jesucristo, sin temor en mi corazón. Concédeme Tus Gracias especiales y Bendiciones para levantarme por encima de la persecución, infligida en mí por Satanás, sus demonios y sus agentes en la Tierra. Nunca me permitas temer a Tus enemigos. Dame la fuerza para amar a mis enemigos, y a aquellos que me persigan en el Nombre de Dios. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
Oh Madre de la Salvación, por favor intercede en nombre de las almas de los Cristianos de todo el mundo. Por favor ayúdales a preservar su fe y a permanecer fieles a las Enseñanzas de Jesucristo. Ruega para que ellos tengan la fuerza de mente y espíritu para defender su fe en todo momento.
Intercede, querida Madre, a su favor, para que se abran sus ojos a la Verdad y para que se les dé la Gracia de discernir en toda doctrina falsa, presentada a ellos en el Nombre de tu Hijo. Ayúdalos a que permanezcan verdaderos y fieles servidores de Dios y a que renuncien al mal y a las mentiras, incluso si tienen que sufrir el dolor y el ridículo por ello. Oh Madre de la Salvación, protege a todos tus hijos y ruega para que cada Cristiano quiera seguir el camino del Señor hasta su último aliento. Amén.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
Oh Glorioso Padre Celestial, escucha nuestra súplica y nuestro clamor a Ti, éste día y todos los días. Bendice a la Profeta que tan amorosamente has enviado a nosotros para darnos Tus palabras, Tu Aviso de Misericordia, Tu Amor. Dale gracias en abundancia con los siete Dones de Tu Espíritu Santo, para que ella pueda realizar todo lo que se le ha dicho y se le ha pedido. Ella es solo una entre miles de millones, que Tú has elegido para que nos ayude a que alcancemos nuestra legítima herencia. Guíala hacia la plenitud de Tu Gracia y al cumplimiento de Tu Sagrada Escritura. A través de la Preciosa Sangre que Tu Hijo derramó, te pedimos a Ti Eterno Padre Todopoderoso que la bendigas y la fortalezcas hasta que todo se haya cumplido. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
3 días de oración por el Ejército Remanente. Esta jornada de oración se repite 2 veces al mes (1a. y 3a semana de cada mes)
Las guerras, disturbios, corrupción, y el mal en el mundo son cada vez mayores. Con el rezo de las siguientes cruzadas pedimos ayuda a Dios para permanecer fuertes. También pedimos la protección del Cielo para María de la Divina Misericordia y todos los videntes genuinos de Dios.
"Mi Reino os dará la Vida Eterna, pero debéis pedir Mi Ayuda recitando esta oración:"
Jesús, ayúdame a creer en Tu Existencia. Dame una señal para que mi corazón pueda responderte.
Llena mi alma vacía con la Gracia que necesito para abrir mi mente y mi corazón a Tu Amor. Ten Misericordia de Mí, y limpia mi alma de todos los malos actos que he cometido en mi vida. Perdóname por haberte rechazado, pero por favor lléname con el amor que necesito, para hacerme digno de la Vida Eterna. Ayúdame a conocerte, a ver Tu Presencia en otras personas y lléname con la Gracia de reconocer la Señal de Dios en cada regalo hermoso que Tú has dado a la raza humana. Ayúdame a comprender Tus Caminos y sálvame de la separación y del dolor de la oscuridad que siento en mi alma. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, por favor pide por la Iglesia Católica en estos tiempos difíciles y por nuestro bienamado Papa Benedicto XVI, para aliviar su sufrimiento. Te pedimos, Madre de la Salvación, que cubras a los siervos consagrados de Dios con tu Santo Manto, para que así les sean dadas las Gracias para ser fuertes, fieles y valientes durante las pruebas que afronten. Pide también que ellos cuiden de su rebaño de acuerdo con las Verdaderas Enseñanzas de la Iglesia Católica. Oh Santa Madre de Dios, danos a tu Iglesia remanente en la Tierra, el Don del liderazgo para que así podamos ayudar a guiar a las almas hacia el Reino de tu Hijo. Te pedimos, Madre de la Salvación, que mantengas al engañador alejado de los seguidores de tu Hijo, que buscan salvaguardar sus almas, para que sean dignos de entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, por favor detén el odio y los celos que existen entre Tus seguidores, hacia Tus verdaderos visionarios en estos tiempos. Pido que escuches mi oración, para darle a Tus visionarios la fuerza que necesitan, para proclamar Tu Santísima Palabra a un mundo incrédulo. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplico que brindes protección a todos Tus santos mensajeros en el mundo. Te pido que sean protegidos del odio de otros. Te pido que Tu Santísima Palabra sea difundida rápidamente por todo el mundo. Protege a Tus mensajeros de la calumnia, el abuso, las mentiras y de todo tipo de peligro. Protege a sus familias y cúbrelos con el Espíritu Santo en todo momento, para que los Mensajes que ellos dan al mundo, sean escuchados con corazón contrito y humilde. Amén.
Oh Dios, mi Padre Eterno, te pido que muestres Misericordia para aquellos que niegan a Tu Hijo. Te ruego por las almas de aquellos que tratan de destruir a Tus profetas.
Te ruego por la conversión de las almas, que se extravían de Ti y te pido que ayudes a todos Tus hijos a preparar sus almas y a enmendar sus vidas, de acuerdo a Tu Divina Voluntad, en espera de la Segunda Venida de Tu amado Hijo, Jesucristo. Amén.
Oh querido Jesús, ayuda a Tus siervos consagrados para que reconozcan el cisma que se está desarrollando dentro de Tu Iglesia. Ayuda a Tus siervos consagrados a permanecer firmes y fieles a Tu Santa Palabra. No permitas nunca que las ambiciones mundanas empañen su amor puro hacia Ti. Concédeles la Gracia de permanecer puros y humildes ante Ti y de honrar Tu Santísima Presencia en la Eucaristía. Ayuda y guía a todos aquellos siervos consagrados que pueden ser tibios en su amor por Ti y reaviva el Fuego del Espíritu Santo en sus almas. Ayúdalos a reconocer las tentaciones que se les presentan para distraerlos. Abre sus ojos para que puedan ver la Verdad en todo momento. Bendícelos en estos tiempos, querido Jesús, y cúbrelos con Tu Preciosa Sangre para conservarlos a salvo de todo daño. Dales la fuerza para resistir la seducción de Satanás, en caso de que fueran perturbados por la tentación de negar la existencia del pecado. Amén.
Jesús, Rey y Salvador del mundo, a Ti prometemos nuestro honor, nuestra lealtad y obras, para proclamar Tu Gloria a todos. Ayúdanos a obtener la fortaleza y la confianza, para levantarnos y declarar la Verdad en todo momento. Nunca nos permitas vacilar o retrasarnos en nuestra marcha hacia la victoria y en nuestro plan de salvar almas. Prometemos nuestra entrega, nuestros corazones y todo lo que poseemos, para que estemos libres de obstáculos, mientras continuamos el espinoso camino hacia las Puertas del Nuevo Paraíso. Te amamos, queridísimo Jesús, nuestro amado Salvador y Redentor. Nos unimos en cuerpo, mente y espíritu dentro de Tu Sagrado Corazón. Derrama sobre nosotros Tu gracia de Protección. Cúbrenos con Tu Preciosa Sangre, para que seamos llenados con valentía y amor para levantarnos y declarar la Verdad de Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Jesús, salva del anticristo al mundo. Protégenos de los perversos engaños de Satanás. Salva del mal a los últimos remanentes de Tu Iglesia. Da a todas Tus iglesias la fuerza y las gracias necesarias para defendernos contra las guerras y persecuciones planeadas por Satanás y su ejército de terroristas. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
"Para asegurar que permanezcáis fuertes, valientes, con calma (tranquilos) y en paz, a medida que llevéis la Cruz de mi Hijo sobre vuestros hombros, debéis recitar esta Cruzada de Oración. Porque a muchos de vosotros os resulta difícil de aceptar que estas cosas han de venir: vendrá un día en donde recitaréis esta Cruzada de Oración (158) tres veces al día, porque las presiones, que se colocarán sobre vosotros para negar a mi Hijo, serán abrumadoras."
Querido Jesús, protégeme del mal de la nueva religión única mundial, la cual no viene de Ti. Sostenme en mi trayecto hacia la libertad, a lo largo de la Ruta hacia Tu Santo Reino. Mantenme en unión Contigo, siempre que sea atormentado y forzado a tragar mentiras, que serán esparcidas por Tus enemigos para destruir las almas. Ayúdame a resistir la persecución, a permanecer firme en la Verdadera Palabra de Dios en contra de las falsas doctrinas y otros sacrilegios, a los que podría ser obligado a aceptar.
A través del Don de mi libre albedrío, llévame al Dominio de Tu Reino, para que pueda levantarme y proclamar la Verdad, cuando esta sea declarada ser una mentira. Jamás dejes que yo vacile, dude o huya por miedo, en medio de la persecución. Ayúdame a mantenerme firme y constante a la Verdad todo el tiempo que yo viva. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Querido Jesús, protégeme de la maldad del diablo. Cúbreme a mí y cubre a todos aquellos que son débiles e indefensos en su presencia, con Tu Preciosa Sangre. Todos los días dame el valor para rechazarlo, y ayúdame a evitar cualquier intento por parte de él para involucrarme de alguna manera. Amén.
Oh Madre de la Salvación, por favor intercede en nombre de las almas de los Cristianos de todo el mundo. Por favor ayúdales a preservar su fe y a permanecer fieles a las Enseñanzas de Jesucristo. Ruega para que ellos tengan la fuerza de mente y espíritu para defender su fe en todo momento.
Intercede, querida Madre, a su favor, para que se abran sus ojos a la Verdad y para que se les dé la Gracia de discernir en toda doctrina falsa, presentada a ellos en el Nombre de tu Hijo. Ayúdalos a que permanezcan verdaderos y fieles servidores de Dios y a que renuncien al mal y a las mentiras, incluso si tienen que sufrir el dolor y el ridículo por ello. Oh Madre de la Salvación, protege a todos tus hijos y ruega para que cada Cristiano quiera seguir el camino del Señor hasta su último aliento. Amén.
"Mi labor como Corredentora, en asistir (ayudar) a mi Hijo en Su gran plan para unir a todos y llevarles la Vida Eterna, ha sido establecido. Como Madre de la Salvación, todas las potestades asignadas a mí para aplastar la cabeza de la serpiente ha significado que su poder (el de la serpiente) disminuirá rápidamente.(...)
Declaro este día, 4 de junio de 2014, como la Festividad de la Madre de la Salvación. En este día, cuando recitéis esta oración(cruzada de oración 154), voy a interceder en nombre de todas las almas por el Don de la Salvación, especialmente por aquellos que están en gran oscuridad espiritual del alma.”
Para festejar este día tan lleno de Bendiciones por la intercesión de nuestra Madre de la Salvación, y para venerarla, se puede realizar lo siguiente:
Leer los mensajes del 4 de Junio de 2014 y del 1 de diciembre de 2013 (www.elgranaviso-mensajes.com)
Recitar la oración del Magnificat.
Recitar las oraciones de la Cruzada de Oración 154, 115, 130 y 159.
Rezar el Santo Rosario.
Terminar con la Consagración a Dios por medio de María Inmaculada.
A continuación se añaden las oraciones citadas:
Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. El hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia -como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Amén.
"Declaro este día, 4 de junio de 2014, como la Festividad de la Madre de la Salvación. En este día, cuando recitéis esta oración, voy a interceder en nombre de todas las almas por el Don de la Salvación, especialmente por aquellos que están en gran oscuridad espiritual del alma:"
Oh, Madre de la Salvación, pongo delante de ti hoy en este día, 4 de junio, en la Festividad de la Madre de la Salvación, las siguientes almas: (lista de nombres) Por favor, dame a mí y a todos los que te honran, querida Madre, y a quienes distribuyen la Medalla de Salvación, toda protección contra el maligno y también para todos los que rechazan la Misericordia de tu Hijo amado, Jesucristo, y todos los Dones que Él transmite a la humanidad. Ruega, querida Madre, para que se otorgue a todas las almas el Don de la Salvación Eterna. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, cubre mi alma con tus Lágrimas de Salvación. Líbrame de dudas. Levanta mi corazón, para que sienta la Presencia de tu Hijo. Tráeme paz y consuelo. Ruega para que verdaderamente yo sea convertido. Ayúdame a aceptar la Verdad y a abrir mi corazón para recibir la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Amén.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, te pido que intercedas por mí mientras yo suplico por el Amor de Dios. Llena mi alma, un recipiente vacío, con el Amor de Dios, para que cuando se esté desbordando, se derrame sobre las almas por las que lucho para mostrarles compasión. Por el Poder de Dios, pido que yo sea liberado de cualquier sentimiento de odio que pueda albergar por aquellos que traicionan a tu Hijo. Hazme humilde de espíritu, y lléname con generosidad del alma para que yo pueda seguir las Enseñanzas de Cristo y pueda extender Su Amor en cada parte de mi vida. Amén.
¡Oh Dios mío! En unión del Corazón Inmaculado de María, os ofrezco la preciosisima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, que se inmola en todos los altares del mundo, uniendo a ella cada uno de mis pensamientos, palabras y acciones de este día. ¡Oh Jesús! Deseo ganar todos los méritos e indulgencias que me sean posibles y los ofrezco junto con todo mi ser a María Inmaculada, para que Ella las aplique como crea mejor a los intereses de tu Sacratisimo Corazón. ¡Preciosa Sangre de Jesús, Salvanos! ¡Corazón Inmaculado de María, ruega por nosotros! ¡Sagrado Corazón de Jesús, ten misericordia de nosotros!
Deseo que durante estos nueve días lleves a las almas a la fuente de Mi misericordia para que saquen fuerzas, alivio y toda gracia que necesiten para afrontar las dificultades de la vida y especialmente en la hora de la muerte. Cada día traerás a Mi Corazón a un grupo diferente de almas y las sumergirás en este mar de Mi misericordia. Y a todas estas almas Yo las introduciré en la casa de Mi Padre (…) Cada día pedirás a Mi Padre las gracias para estas almas por Mi amarga pasión.”
Jesús también le ha pedido a María Divina Misericordia rezar esta Novena:
"Hijos, necesito que recéis Mi Coronilla de la Divina Misericordia y comiencéis la Novena de la Divina Misericordia desde el Viernes Santo. Es importante que tantos como podáis de vosotros completéis esta Novena por las demás almas. Recibiréis grandes gracias y por esto Yo nunca os abandonaré. Os salvaré vuestra alma cuando vengáis delante de Mí en el Día del Juicio."
La Novena consiste en rezar la Coronilla de la Divina Misericordia durante nueve días. Debe empezarse el Viernes Santo, nueve días antes de la Fiesta de la Divina Misericordia (el segundo Domingo de Pascua)
Leer la intención y la oración del día correspondiente.
Rezar la Coronilla de la Divina Misericordia.
Esta fiesta se celebra el Domingo siguiente al Domingo de Resurrección, justo al acabar la Novena. Es una fiesta solicitada por el mismo Jesucristo a través de Santa Faustina Kowalska. Estas son algunas de las palabras que Jesús le dijo a Santa Faustina sobre esta fiesta:
"Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea un refugio y amparo para todas las almas y, especialmente, para los pobres pecadores... Ese día derramo un mar de gracias sobre las almas que se acerquen al manantial de mi Misericordia. El alma que se confiese y reciba la Santa Comunión obtendrá el perdón total de las culpas y de las penas... Que ningún alma tema acercarse a Mí, aunque sus pecados sean como escarlata”
"En ese día estarán abiertas todas las Fuentes de mi Misericordia. Deseo que esta Festividad sea un refugio para todas las almas, pero sobre todo para los pecadores"
"Hija Mía, di que esta Fiesta ha brotado de las entrañas de Mi misericordia para el consuelo del mundo entero"
Las almas mueren a pesar de Mi amarga Pasión. Les ofrezco la última tabla de salvación, es decir, la Fiesta de Mi misericordia. Si no adoran Mi misericordia, morirán para siempre. Secretaria de Mi misericordia, escribe, habla a las almas de esta gran misericordia Mía, porque está cercano el día terrible, el día de Mi justicia"
Si se desea recibir el perdón de todas las culpas y penas en este día, es necesario:
Confiar firmemente en la Divina Misericordia del Señor.
Venir al Señor con un corazón humilde y contrito, arrepentirse de todo pecado.
Comenzar una Novena a la Divina Misericordia el Viernes Santo.
Confesarse (con un sacerdote) en ese día si es posible. Sino es posible, siete días antes o después según aprobación de la Iglesia.
Comulgar el Domingo de la Fiesta de la Divina Misericordia.
Venerar la imagen de la Divina Misericordia.
Ser misericordioso como Dios es misericordioso, practicar obras de misericordia, físicamente ayudando a otros o espiritualmente con oraciones de intercesión.
"Hoy tráeme a toda la Humanidad, especialmente a todos los pecadores y sumérgelos en la inmensidad de mi Misericordia. De esta forma me consolarás de la amarga tristeza en que me sume la pérdida de las almas."
Misericordiosísimo Jesús, cuya inclinación natural es la de tener compasión de nosotros y perdonarnos, no mires nuestros pecados, sino la confianza que depositamos en tu Bondad infinita. Acógenos en la morada de tu Corazón Misericordioso y no permitas que salgamos jamás de Él. Te lo pedimos por el amor que te une al Padre y al Espíritu Santo.
Padre Eterno, vuelve tu mirada misericordiosa hacia toda la Humanidad y en especial hacia los pobres pecadores, encerrándoles en el Misericordiosísimo Corazón de Jesús y, por los méritos de su dolorosa Pasión, muéstranos tu Misericordia, para que alabemos la omnipotencia de tu Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy tráeme a las almas de los sacerdotes y religiosos y sumérgelas en mi Insondable Misericordia. Fueron ellas las que me dieron fortaleza para soportar las amarguras de mi Pasión. A través de ellas, como a través de canales, mi Misericordia fluye hacia la Humanidad."
Misericordiosísimo Jesús, de quien procede todo bien, multiplica tus gracias sobre las almas consagradas a tu servicio, para que puedan hacer obras dignas de misericordia; y que todos los que las vean, glorifiquen al Padre de Misericordia que está en el Cielo.
Padre Eterno, mira con misericordia al grupo elegido de tu Viña, las almas de los sacerdotes y religiosos. Dótalas con la fortaleza de tus Bendiciones y por el amor del Corazón de tu Hijo, al cual están unidas, concédelas el poder de tu Luz, para que puedan guiar a otros por el camino de la Salvación y con una sola voz canten alabanzas a tu Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy tráeme a todas las almas devotas y fieles y sumérgelas en el gran océano de mi Misericordia. Ellas me confortaron a lo largo del Vía Crucis y fueron una gota de consuelo en medio de un mar de amargura."
Misericordiosísimo Jesús, que desde el tesoro de tu Misericordia, distribuyes tus gracias a raudales entre todos y cada uno de nosotros. Acógenos en el seno de tu muy compasivo Corazón y no permitas que salgamos nunca de Él. Te imploramos esta gracia en virtud del más excelso amor; aquel con el que tu Corazón arde por el Padre Celestial.
Padre Eterno, vuelve tus ojos misericordiosos hacia las almas fieles, que guardan el legado de Tu Hijo. Y por los méritos y dolores de su Pasión, concédeles tu bendición y tenlas siempre bajo tu tutela. Que nunca claudique su amor o pierdan el tesoro de nuestra santa Fe, sino que, con todo el ejército de Ángeles y Santos, glorifiquen tu infinita Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy tráeme a los que no creen en Mí y a los que todavía no me conocen. Pensaba en ellos durante las angustias de mi Pasión, y su futuro fervor sirvió de consuelo a mi Corazón. Sumérgelos en la inmensidad de mi Misericordia."
Misericordiosísimo Jesús, Tú que eres la Luz del género humano, recibe en la morada de tu Corazón lleno de compasión, a las almas de aquellos que todavía no creen en Ti, o que no te conocen. Que los rayos de tu Gracia las ilumine para que también, unidas a nosotros, ensalcen tu maravillosa Misericordia; y no las dejes salir de la morada de tu Corazón desbordante de piedad.
Padre Eterno, vuelve tu piadosa mirada hacia las almas de aquellos que no creen en tu Hijo, y hacia las de aquellos que todavía no te conocen, pero que están presentes en el muy compasivo Corazón de Jesús. Aproxímalas a la luz del Evangelio. Estas almas desconocen la gran felicidad que es amarte. Concédelas que también ellas ensalcen la generosidad de tu Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy tráeme a las almas de nuestros hermanos separados y sumérgelas en la Inmensidad de mi Misericordia. Ellas, durante las angustias de mi Pasión, desgarraron mi Cuerpo y mi Corazón, es decir, mi Iglesia. A medida que se reincorporan a ella, mis heridas cicatrizan, y de esta forma sirven de bálsamo a mi Pasión."
Misericordiosísimo Jesús, que eres la Bondad misma, no niegues la Luz a aquellos que te buscan. Recibe en el seno de tu Corazón, desbordante de piedad, a las almas de nuestros hermanos separados. Encamínalas, con la ayuda de tu Luz, hacia la unidad de la Iglesia, y no las dejes marchar de la morada de tu muy compasivo Corazón, que es todo amor; haz que también ellas lleguen a glorificar la generosidad de tu Misericordia.
Padre Eterno, vuelve tu mirada misericordiosa hacia las almas de nuestros hermanos separados, especialmente hacia las almas de aquellos que han malgastado tus bendiciones y abusado de tus gracias manteniéndose obstinadamente en el error. También ellas están acogidas en el Corazón misericordioso de Jesús; no mires sus errores sino el Amor de tu Hijo y los dolores que para su provecho sufrió y aceptó por ellas durante su Pasión y haz que también ellas glorifiquen tu gran Misericordia por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy tráeme a las almas mansas y humildes y a las almas de los niños pequeños y sumérgelas en mi Misericordia. Estas almas son las más parecidas a mi Corazón. Ellas me proporcionaron fortaleza durante mi amarga Agonía, ya que las veía como ángeles terrenales, velando junto a mis Altares. Derramo sobre ellas un torrente de gracias porque sólo el alma humilde es capaz de recibir mi Gracia. Es a las almas humildes a las que concedo mi Confianza."
Misericordiosísimo Jesús, que dijiste: "Aprended de Mí, que soy manso y humilde de Corazón". Acoge en el seno de tu Corazón desbordante de piedad, a todas las almas mansas y humildes, y a las de los niños pequeños. Estas almas son la delicia de las regiones celestiales y las preferidas del Padre Eterno, que muy particularmente se recrea en ellas. Son como un ramillete de florecillas que despiden su perfume ante el trono de Dios y el mismo Dios se embriaga con su fragancia. Ellas encuentran abrigo perenne en tu Piadosísimo Corazón, oh, Jesús, y entonan incesantemente himnos de amor y de gloria.
Padre Eterno, vuelve tu mirada llena de Misericordia hacia las almas mansas, hacia las almas humildes y hacia las almas de los niños pequeños acurrucadas en el seno del Corazón de Jesús rebosante de piedad. Estas almas son las que se asemejan más a tu Hijo. Su fragancia asciende desde la tierra hasta alcanzar tu Trono, Señor y Padre de Misericordia y Bondad suprema. Te suplico, bendigas a toda la Humanidad, por el amor que te inspiran estas almas y el gozo que te proporcionan, para lograr que todas las almas entonen a la vez, las alabanzas que se merece tu Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén.
"Hoy, tráeme a las almas que veneran y glorifican mi misericordia de modo especial y sumérgelas en mi misericordia. Estas almas son las que más lamentaron mi pasión y penetraron más profundamente en mi Espíritu. Ellas son un reflejo viviente de mi Corazón compasivo. Estas almas resplandecerán con una luz especial en la vida futura. Ninguna de ellas irá al fuego del infierno. Defenderé de modo especial a cada una en la hora de la muerte.”
Misericordiosísimo Jesús, cuyo Corazón es el Amor mismo, acoge en el seno de tu Piadosísimo Corazón a las almas de aquellos que de una manera especial alaban y honran la grandeza de tu Misericordia. Dótalas con el poder de Dios y en medio de las dificultades y aflicciones, haz que sigan adelante, confiadas en tu Misericordia; y unidas a Ti, oh, Jesús, carguen sobre sus hombros el peso de toda la Humanidad; y por ello no serán juzgadas con severidad, sino que tu Misericordia las protegerá especialmente cuando llegue la hora de la muerte.
Padre Eterno, vuelve tu mirada hacia las almas que alaban y honran tu supremo atributo, la Misericordia infinita, y que están protegidas dentro del muy compasivo Corazón de Jesús. Estas almas son un Evangelio viviente, sus manos están rebosantes de obras de misericordia, y sus corazones, desbordantes de alegría, entonan cánticos de alabanza a Ti, Altísimo Señor, exaltando tu Misericordia. Te lo suplico, Señor: Muéstrales tu Misericordia, de acuerdo con la esperanza y confianza que en Ti depositan. Que se cumpla en ellas la promesa hecha por Jesús: "A las almas que veneren mi infinita Misericordia, las protegeré durante toda su vida, como a mi propia Gloria, y muy especialmente en la hora de la muerte."
"Hoy tráeme a las almas que están detenidas en el Purgatorio y sumérgelas en las profundidades de mi Misericordia. Que mi Sangre, cayendo a chorros, apacigüe las llamas en que se abrasan. Todas estas almas me son muy queridas. Ellas cumplen el castigo que se debe a mi Justicia. En tu poder está socorrerlos. Saca todas las Indulgencias del tesoro de mi Iglesia y ofrécelas por ellas. ¡Ohl, si supieras qué tormentos padecen, ofrecerías continuamente por ellas el óbolo de tus oraciones y así saldarías las deudas que ellas tienen con mi Justicia."
Misericordiosísimo Jesús, que exclamaste: ¡misericordia!, introduzco ahora en el seno de tu Corazón, desbordante de Misericordia, las almas del Purgatorio, almas que tanto aprecias pero que, no obstante, han de pagar su culpa. Que el manantial de Sangre y Agua que brotó de tu Corazón, apague las llamas purificadoras, para que, también allí, el poder de tu Misericordia sea glorificado.
Padre Eterno, mira con ojos misericordiosos a estas almas que padecen en el Purgatorio y que Jesús acoge en su Corazón desbordante de compasión. Te suplico, por la dolorosa Pasión que sufrió tu Hijo, y por toda la amargura que anegó su Sacratísima Alma, que te muestres misericordioso con las almas que se hallan bajo tu mirada justiciera. No las mires de otro modo, sino sólo a través de las Llagas de Jesús, tu Hijo bien amado; porque creemos firmemente que tu Bondad y Compasión son infinitas. Amén.
"Hoy tráeme a las almas tibias y sumérgelas en el abismo de mi Misericordia. Estas almas, son las que más dolorosamente hieren mi Corazón. Por su tibieza e indiferencia mi Alma sintió una inmensa repugnancia en el Huerto de los Olivos. Ellas fueron las que me hicieron gritar: "Padre, si es posible, aparta de Mí este cáliz". Para ellas, la última esperanza de salvación será el recurrir a mi Misericordia."
Piadosísimo Jesús, a Ti que eres la Piedad misma, hoy te traigo al seno de tu compasivo Corazón a las almas enfermas de tibieza. Que estas almas heladas, que se parecen a cadáveres y que te llenan de repugnancia, se calienten con el fuego de tu puro Amor ¡oh, Jesús!, todo compasión, ejerce la omnipotencia de tu Misericordia, y atráelas a Ti, que eres llama de Amor puro y comunícalas el fuego de tu divino Amor, porque Tú todo lo puedes.
Padre Eterno, mira con ojos misericordiosos a las almas tibias que, a pesar de todo, Jesús cobija en el seno de su Corazón todo Misericordia. Padre de Misericordia, te ruego, por los sufrimientos que padeció tu Hijo, y por sus tres largas horas de Agonía en la Cruz: que ellas también glorifiquen el mar sin fondo de tu Misericordia. Amén.
”Doy ahora a todos vosotros un Regalo especial, bendecido por mi Hijo, para que a todas las almas se les conceda inmunidad contra los fuegos del infierno y sea concedida la salvación. Mi Hijo desea que cada alma sea salvada, no importa cuán grave es su pecado. Pido que ahora empecéis la Novena de la Salvación. Debéis empezar esto de inmediato y continuarla, mientras os instruyo para el fin de los tiempos. Debéis recitar esta Oración por un total de siete días consecutivos de un mes calendario, comenzando los lunes, en el horario de la mañana. Debéis recitarla tres veces durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Para el ayuno se os pide comer solo una comida principal durante el día y entonces solo pan y agua en las otras dos comidas.
Esta es la oración que debéis decir para cada uno de los siete días."
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
”Mi promesa para ayudar a mi Hijo, Jesucristo, en Su Plan para la Humanidad es llamar a todos vosotros, que reconocéis mi labor como Mediadora de Todas las Gracias y Corredentora, juntos, para que el mundo entero pueda unirse como uno solo en unión con Jesucristo, vuestro Salvador y Redentor.”
El rosario cuenta de 5 decenas de Ave Marías. Se puede rezar de la siguiente manera:
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Uno: Dios mío, ven en mi ayuda.
Todos: Señor, date prisa en socorrerme.
Nuestra Señora insta a las personas a que digan su Santo Rosario (los 3 Misterios) diariamente para ayudar a salvar su país y familia.
Oh Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de Gracia ocultos en el Rosario. Infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las Gracias por las que ruego en este Rosario. (Aquí mencionar la petición).
Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por tu propio honor y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.
Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser vos quien sois, bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén.
Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María la Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilatos, fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los Cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre todo poderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
Según el día de la semana se eligen los Misterios a rezar y se comienzan las 5 decenas:
Padre Nuestro (en las cuentas grandes)
Uno: Padre Nuestro que estás en el Cielo, santificado sea Tu Nombre; venga a nosotros Tu Reino; hágase Tu Voluntad en la Tierra como en el Cielo.
Todos: Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras deudas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
10 Ave Marías (en las cuentas pequeñas)
Uno: Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Todos: Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
1 Gloria al Padre
Uno: Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
Todos: Como era en el principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Jaculatoria a María
Uno: María, Madre de gracia, Madre de piedad, amor y misericordia.
Todos: Defiéndenos del enemigo y ampáranos, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Oración pedida por Nuesta Señora de Fátima (opcional)
Uno: Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados; líbranos del fuego del infierno,
Todos: lleva a todas las almas al Cielo, especialmente a las más necesitadas de Tu Misericordia. Amén.
(Volver a repetir la secuencia desde el Padre Nuestro. Así hasta completar las 5 decenas)
Dios te salve Reina y Madre, Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve a ti clamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. ¡Ea, pues, Señora, Abogada nuestra! Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de Tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosísima! ¡Oh dulce siempre Virgen María! Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Oh Dios, cuyo Hijo Unigénito, por Su vida, muerte y resurrección, nos ha comprado la recompensa de la vida eterna; concédenos, te suplicamos, que, meditando sobre estos misterios del Santísimo Rosario de la Bienaventurada Virgen María, podamos imitar lo que contienen y obtener lo que prometen, por el mismo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.
Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio, haya sido desamparado. Animado por esta confianza, a Vos acudo, Madre, Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis pecados me atrevo a comparecer ante Vos. Madre de Dios, no desechéis mis súplicas, antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
"Mi niña, rezando mi Santo Rosario, se puede salvar naciones. Mis hijos nunca deben olvidar el poder de Mi Santo Rosario. Es tan poderoso que vuelve al engañador inútil. Él, no puede hacerle nada ni a ti, ni a tu familia cuando lo rezas diariamente. Por favor pide a Mis hijos que empiecen a rezar Mi Santo Rosario desde hoy en adelante, con el fin de proteger, no solo a sus familias sino también a sus comunidades. El Rosario es el arma más poderosa contra los planes malvados del maligno, pues él quiere destruir lo que pueda en estos, sus últimos días, sobre la Tierra."
"Di a la gente que rece mi Santo Rosario, aún los no católicos, ya que este es el arma más grande contra la influencia del engañador, que gime de dolor cuando Este es dicho. Su poder es debilitado cuando mis hijos dicen esta oración.
(...)
La oración a mí, su Bendita Madre, hiere al maligno que se encoge y pierde su poder cuando mi Rosario es recitado. Esta es el arma que se me ha dado, para así yo poder ayudar a salvar a las almas perdidas, antes de que aplaste la cabeza de la serpiente, por fin. Nunca subestimen el poder del Rosario, porque incluso un solo grupo de personas dedicadas a la devoción regular de mi Santo Rosario, puede salvar a su nación."
"Les ayudaré, hijos, a estar más cerca del corazón de mi Hijo. Cuando trabajamos juntos, hijos míos, podemos evitar desastres alrededor del mundo. Nunca olviden la importancia de mi Santísimo Rosario, porque cuando lo rezan cada día, pueden ayudar a salvar a su nación. El poder de Satanás se debilita cuando ustedes rezan mi Rosario. El huye con gran dolor y se vuelve impotente. Es muy importante, no importa a cuál creencia cristiana pertenezcan, rezarlo al menos una vez al día."
"Satanás no puede dañar o atacar a todos aquellos que reciten mi Santo Rosario todos los días. Recitando tres o más Rosarios vosotros podéis extender esta protección para otros. Si aún cien personas pudieran hacer esto podrían salvar a su nación de la contaminación esparcida por el maligno."
"A los sacerdotes en la Iglesia Católica, os insto a llevar (portar) las cuentas de mi Santísimo Rosario y una Cruz Benedictina con vosotros en todo momento. Debéis recitar mi Santo Rosario todos los días y estad atentos de aquellos en las filas más altas dentro de la Iglesia para ver quién recita mi Santo Rosario en público. Cuando yo estoy siendo venerada, mi Santo Rosario debe ser recitado por todos los presentes ante mí. Si ellos, quienes dicen, guían a los fieles a buscar mi ayuda ante el Trono de Dios, no pueden recitar mi Rosario, entonces ellos necesitan vuestras oraciones. El venir ante mí, buscando mi ayuda, sin recitar mi Rosario, está sin sustancia, ya que es parecido a un soldado yendo a la batalla sin ninguna armadura.
Mi Rosario es la oración más poderosa y, cuando es dicho diariamente, destruirá el poder del maligno. Aquellos, cuyas almas han sido oscurecidas por Satanás, encontrarán demasiado doloroso recitar esta oración."
"Por favor, orad por la esperanza y rezad mi Santo Rosario todos los días por todos aquellos que gobiernan en Roma. Debéis rezar por todos los que dirigen la Iglesia Católica. Por favor, incluid al hombre que se sienta en la Silla de Pedro, porque él necesita enormemente de vuestras oraciones. Orad para que él acepte la Verdad de la muerte de mi Hijo en la Cruz y para que abra su corazón a las suplicas de mi Hijo por misericordia para todos los hijos de Dios."
"Mi queridísimos hijos, os pido que recitéis mi Santo Rosario cada día de ahora en adelante para proteger esta Misión de los ataques satánicos. Por recitar mi Santísimo Rosario, cada día, diluiréis la perversión de Satanás, y de aquellos a quienes influencía, cuando intenta alejar a las almas de seguir esta Llamada especial del Cielo.
Todos aquellos de distintas creencias debéis también recitar mi Santo Rosario, porque os traerá a cada uno gran protección. El Santísimo Rosario es para todos y para aquellos que se quieran beneficiar de mi protección – el Regalo que he recibido de Dios para defender a las almas del maligno."
"Cuando mi Hijo manifiesta Sus Heridas dentro del cuerpo de un alma elegida, trae consigo una terrible persecución. Esto es cuando el maligno ataca con una rabia grave y violenta. Estarás asustada al principio, pero ahora que comprendes, aceptarás esto y simplemente te protegerás a ti misma a través de la recitación, al menos tres veces al día, de mi Santísimo Rosario."
"Rezad para que Rusia finalmente ceda y permita ser consagrada al nombre de Mi Bendita Madre. Rezad, rezad y rezad para que esto ocurra. Pues será por medio de la oración que este gran logro será posible. Si esto sucede, millones de personas se salvarán. Porque el peligro está en que las fuerzas comunistas se levanten junto a la serpiente y se unan, dejándoos a vosotros indefensos. Mirad la velocidad con que las naciones se levantan para luchar. La rapidez de los acontecimientos globales causará mucha consternación mientras se desencadenan con intensidad. Vosotros, Mis seguidores, debéis escuchar. Los grupos de oración serán esenciales para difundir la conversión y para disolver estos eventos desastrosos."
(Lunes y Sábado)
La Anunciación del Ángel a María y la Encarnación del Verbo. (Lc. 1, 26-28)
"En el sexto mes, el Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen que estaba desposada con un hombre perteneciente a la familia de David, llamado José. El nombre de la virgen era María. El Ángel entró en su casa y la saludó, diciendo: «¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está contigo»."
La Visitación de la Santísima Virgen a su prima Santa Isabel. (Lc. 1, 39-42)
"En aquellos días, María partió y fue a prisa a un pueblo de la montaña de Judá. Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. Apenas ésta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su seno, e Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamó: «¡Bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre!"
El Nacimiento de Jesús en Belén. (Lc. 2, 6-7)
"Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo del parto; y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en la posada."
La Presentación del Niño Jesús en el Templo. (Lc. 2, 22-24)
"Cuando llegó el día fijado por la Ley de Moisés para la purificación, llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo al Señor, como está escrito en la Ley: todo varón primogénito será consagrado al Señor. También debían ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o de pichones de paloma, como ordena la Ley del Señor."
Jesús perdido y hallado en el Templo. (Lc. 2, 46-47)
"Al tercer día, lo hallaron en el Templo en medio de los doctores de la Ley, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Y todos los que lo oían estaban asombrados de su inteligencia y sus respuestas."
(Martes y Viernes)
La Agonía de Jesús en el Huerto. (Lc. 22, 41-44)
"Después se alejó de ellos, más o menos a la distancia de un tiro de piedra, y puesto de rodillas, oraba: «Padre, si quieres, aleja de mí este cáliz. Pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya». Entonces se le apareció un ángel del cielo que lo reconfortaba. En medio de la angustia, él oraba más intensamente, y su sudor era como gotas de sangre que corrían hasta el suelo."
La Flagelación. (Mc. 15,15)
"Pilato, para contentar a la multitud, les puso en libertad a Barrabás; y a Jesús, después de haberlo hecho azotar, lo entregó para que fuera crucificado."
La Coronación de espinas. (Mc. 15, 16-19)
"Los soldados lo llevaron dentro del palacio, al pretorio, y convocaron a toda la guardia. Lo vistieron con un manto de púrpura, hicieron una corona de espinas y se la colocaron. Y comenzaron a saludarlo: «¡Salve, rey de los judíos!». Y le golpeaban la cabeza con una caña, le escupían y, doblando la rodilla, le rendían homenaje."
Jesús condenado a muerte lleva la Cruz al Calvario. (Jn. 19, 17-18)
"Jesús, cargando sobre sí la cruz, salió de la ciudad para dirigirse al lugar llamado «del Cráneo», en hebreo, «Gólgota». Allí lo crucificaron; y con Él a otros dos, uno a cada lado y Jesús en el medio."
Crucifixión y muerte de nuestro Señor Jesucristo. (Lc. 23, 44-46)
"Era alrededor del mediodía. El sol se eclipsó y la oscuridad cubrió toda la tierra hasta las tres de la tarde. El velo del Templo se rasgó por el medio. Jesús, con un grito, exclamó: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu». Y diciendo esto, expiró."
(Miércoles y Domingo)
La Resurrección del Señor. (Lc. 24, 1-6)
"El primer día de la semana, al amanecer, las mujeres fueron al sepulcro con los perfumes que habían preparado. Ellas encontraron removida la piedra del sepulcro y entraron, pero no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. Mientras estaban desconcertadas a causa de esto, se les aparecieron dos hombres con vestiduras deslumbrantes. Como las mujeres, llenas de temor, no se atrevían a levantar la vista del suelo, ellos les preguntaron: «¿Por qué buscan entre los muertos al que está vivo? No está aquí, ha resucitado."
La Ascensión del Señor a los Cielos. (Hch. 1, 9-11)
"Dicho esto, los Apóstoles lo vieron elevarse, y una nube lo ocultó de la vista de ellos. Como permanecían con la mirada puesta en el cielo mientras Jesús subía, se les aparecieron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: «Hombres de Galilea, ¿por qué siguen mirando al cielo? Este Jesús que les ha sido quitado y fue elevado al cielo, vendrá de la misma manera que lo han visto partir»."
La venida del Espíritu Santo. (Hch. 2, 1-4)
"Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De pronto, vino del cielo un ruido, semejante a una fuerte ráfaga de viento, que resonó en toda la casa donde se encontraban. Entonces vieron aparecer unas lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en distintas lenguas, según el Espíritu les permitía expresarse."
La Asunción de María Santísima en Cuerpo y Alma al Cielo. (Sal. 45,14-15)
"Embellecida con corales engarzados en oro y vestida de brocado, es llevada hasta el Rey."
María Coronada como Reina y Señora de todo lo creado. (Ap. 12,1)
"Y apareció en el cielo un gran signo: una Mujer revestida del sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas en su cabeza."
(Jueves)
El Bautismo de nuestro Señor Jesucristo en el río Jordán. (Lc. 3, 21-22)
"Todo el pueblo se hacía bautizar, y también fue bautizado Jesús. Y mientras estaba orando, se abrió el cielo y el Espíritu Santo descendió sobre Él en forma corporal, como una paloma. Se oyó entonces una voz del cielo: «Tú eres mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta toda mi predilección»."
La auto-revelación de nuestro Señor Jesucristo en las bodas de Caná. (Jn. 2, 1-11)
"Tres días después se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. Jesús también fue invitado con sus discípulos. Y como faltaba vino, la madre de Jesús le dijo: «No tienen vino». Jesús le respondió: «Mujer, ¿qué hay ya entre tú y yo? Mi hora no ha llegado todavía». Pero su madre dijo a los sirvientes: «Haced lo que Él os diga». Había allí seis tinajas de piedra destinadas a los ritos de purificación de los judíos, que contenían unos cien litros cada una. Jesús dijo a los sirvientes: «Llenen de agua estas tinajas». Y las llenaron hasta el borde. «Sacadlo ahora, agregó Jesús, y llévenlo al encargado del banquete». Así lo hicieron. El encargado probó el agua cambiada en vino y como ignoraba su origen, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo y le dijo: «Siempre se sirve primero el buen vino y cuando todos han bebido bien, se trae el de inferior calidad. Tú, en cambio, has guardado el buen vino hasta este momento». Este fue el primero de los signos de Jesús, y lo hizo en Caná de Galilea. Así manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en Él."
La proclamación del Reino de Dios y el llamado a la conversión. (Lc. 17, 20-25)
"Los fariseos le preguntaron cuándo llegaría el Reino de Dios. Él les respondió: «El Reino de Dios no viene ostensiblemente, y no se podrá decir: “Está aquí” o “Está allí”. Porque el Reino de Dios ya está entre vosotros». Jesús dijo después a sus discípulos: «Vendrá el tiempo en que desearán ver uno solo de los días del Hijo del hombre y no lo verán. Os dirán: “Está aquí” o “Está allí”, pero no corráis a buscarlo. Como el relámpago brilla de un extremo al otro del cielo, así será el Hijo del hombre cuando llegue su Día. Pero antes tendrá que sufrir mucho y será rechazado por esta generación."
La Transfiguración de nuestro Señor Jesucristo en el monte Tabor. (Mt. 17, 1-9)
"Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan, y los llevó aparte a un monte elevado. Allí se transfiguró en presencia de ellos: su rostro resplandecía como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la luz. De pronto se les aparecieron Moisés y Elías, hablando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: «Señor, ¡qué bien estamos aquí! Si quieres, levantaré aquí mismo tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías». Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y se oyó una voz que decía desde la nube: «Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo». Al oír esto, los discípulos cayeron con el rostro en tierra, llenos de temor. Jesús se acercó a ellos y, tocándolos, les dijo: «Levántense, no tengan miedo». Cuando alzaron los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús solo. Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó: «No hablen a nadie de esta visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos»"
La Institución de la Sagrada Eucaristía. (Mt. 26, 26-27)
"Mientras comían, Jesús tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen y coman, esto es mi Cuerpo». Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, diciendo: «Beban todos de ella, porque esta es mi Sangre»"
(en negrita responden todos)
Señor, ten piedad. Señor, ten piedad.
Cristo, ten piedad. Cristo, ten piedad.
Señor, ten piedad. Señor, ten piedad.
Cristo, óyenos. Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos. Cristo, escúchanos.
Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo redentor del mundo, ten misericordia de nosotros.
Dios Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Trinidad Santa, un solo Dios, ten misericordia de nosotros.
(se repite "ruega por nosotros" tras cada aclamación)
Santa Maria, ruega por nosotros. Santa Madre de Dios, Santa Virgen de las Vírgenes, Madre de Cristo, Madre de la Iglesia, Madre de la divina gracia, Madre purísima, Madre castísima, Madre siempre virgen, Madre inmaculada, Madre amable, Madre admirable, Madre del buen consejo, Madre del Creador, Madre del Salvador, Madre de misericordia, Virgen prudentísima, Virgen digna de veneración, Virgen digna de alabanza, Virgen poderosa, Virgen clemente, Virgen fiel, Espejo de justicia, Trono de la sabiduría, Causa de nuestra alegría, Vaso espiritual, Vaso digno de honor, Vaso de insigne devoción, Rosa mística, Torre de David, Torre de marfil, Casa de oro, Arca de la Alianza, Puerta del cielo, Estrella de la mañana, Salud de los enfermos, Refugio de los pecadores, Consoladora de los afligidos, Auxilio de los cristianos, Reina de los Ángeles, Reina de los Patriarcas, Reina de los Profetas, Reina de los Apóstoles, Reina de los Mártires, Reina de los Confesores, Reina de las Vírgenes, Reina de todos los Santos, Reina concebida sin pecado original, Reina asunta al Cielo, Reina del Santísimo Rosario, Reina de la familia, Reina del Ejército Remanente, Reina de la paz,
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de nosotros.
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Se reza con un rosario normal de 5 misterios con 10 cuentas cada uno.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
"Expiraste, Jesús, pero tu muerte hizo brotar un manantial de vida para las almas y el océano de tu misericordia inundó el mundo entero. ¡Oh! fuente de vida, insondable Misericordia Divina, inunda el mundo entero derramando sobre nosotros hasta la última gota de tu Sangre. Amén."
(Diario Faustina Kowalska, 1319)
Padre Nuestro que estás en el Cielo, santificado sea Tu Nombre; venga a nosotros Tu Reino; hágase Tu Voluntad en la Tierra como en el Cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María la Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilatos, fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los Cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre todo poderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
Se comienza con la 1ª decena:
En la cuenta grande:
Uno: "Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación por nuestros pecados y los pecados del mundo entero."
En las cuentas pequeñas (10 veces)
Uno: "Por Su dolorosa Pasión,"
El resto: "ten Misericordia de nosotros y del mundo entero."
(Repetir esto hasta completar las 5 decenas del rosario)
Al terminar las 5 decenas:
"Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero."
"Oh Sangre y Agua que brotaste del Sagrado Corazón de Jesús como fuente de Misericordia para nosotros, en vos confío."
"Oh Dios Eterno, en quien la Misericordia es infinita y el tesoro de compasión inagotable, vuelve a nosotros Tu mirada bondadosa y aumenta Tu misericordia en nosotros, para que en momentos difíciles no nos desesperemos ni nos desalentemos, sino que, con gran confianza, nos sometamos a Tu santa voluntad, que es el Amor y la Misericordia en sí mismos. Amén."
(Diario Faustina Kowalska, 950)
"Decid esta oración todos los días, después de recitar Mi Divina Misericordia y vosotros, por vuestra lealtad a Mí, ayudaréis a salvar a Mis hijos."
Lléname ahora, oh Señor, con el Don del Espíritu Santo para llevar Tu Santísima Palabra a los pecadores que debo ayudar a salvar en Tu Nombre. Ayúdame a cubrirlos, por medio de mis oraciones, con Tu Preciosa Sangre, para que así ellos puedan ser atraídos a Tu Sagrado Corazón. Dame el Don del Espíritu Santo para que así estas pobres almas puedan deleitarse en Tu Nuevo Paraíso. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
"Dependerá de vosotros Mis amados seguidores, el ayudarme a salvar aquellas pobres almas, a quienes necesito traer cerca de Mi pecho, para que así pueda prepararlas para Mi Nuevo Paraíso. Hijos, necesito que recéis Mi Coronilla de la Divina Misericordia y comiencéis la Novena de la Divina Misericordia desde el Viernes Santo. Es importante que tantos como podáis de vosotros completéis esta Novena por las demás almas. Recibiréis grandes gracias y por esto Yo nunca os abandonaré. Os salvaré vuestra alma cuando vengáis delante de Mí en el Día del Juicio. Nunca os canséis de rezar para salvar a otras almas. Vosotros sóis Mi ejército y a través las gracias que os doy, trabajaréis Conmigo para limpiar la Tierra del Pecado, antes de Mi Segunda Venida."
"Por favor, reza diariamente a Mi Hijo, recitando la coronilla de la Divina Misericordia. De esa manera estarás más cerca de Él y lo sentirás moverse en tu corazón."
"La oración de Mis seguidores, combinada con la recitación de Mi Divina Coronilla de la Divina Misericordia, regalo dado a la hermana Faustina en el siglo XX, puede salvar vuestras almas en el momento de la muerte.
Ahora rezad, rezad y rezad Mi Divina Misericordia, por vuestras propias almas y por las de los no creyentes. Los grupos de oración ayudarán a propagar la verdad y a instilar la Fe en los que han perdido todo el sentido de quiénes son y de dónde vinieron. La Divina Misericordia será un instrumento fundamental para empezar a propagar la iluminación evangélica que pronto se sentirá en todo el mundo."
"Recen la coronilla de Mi Divina Misericordia, por estas almas, todos los días, si es posible, durante el mayor tiempo posible. Ayúdenme a salvarles."
"Recen por todos Mis pobres atormentados hijos, que están sufriendo gran dificultad en el mundo como resultado del horror de los actos de los que son víctimas. Todo debido a los pecados de la humanidad. Déjenme recordarles a todos Mis hijos de todas partes que reciten la Coronilla de Mi Divina Misericordia todos los días."
"Pregunta a Jesús: ¿Qué Te ayuda? Respuesta: La oración, mucha oración. La devoción de Mis seguidores, con el rezo diario de la Coronilla de la Misericordia y del Santo Rosario, salvará a Mis hijos. Ellos, Mis seguidores, tienen que perseverar aunque sea costoso."
"Paciencia, oración silenciosa diaria, la formación de grupos de oración, rezo diario de la coronilla de la Divina Misericordia, ayuno y el Santo Rosario a Mi Amada Madre, combinados, actúan como la fórmula perfecta para salvar almas."
"Pasa este período de tiempo en contemplación silenciosa y en simple oración. Esto es todo lo que cualquiera de Mis hijos necesita para concentrarse. Ellos deben de tener como objetivo, traer a sus familias y amigos hacia Mí, en preparación para Mi llegada.
Recen, recen, recen Mi Divina Coronilla, para asegurar la salvación de aquellas almas tan infestadas por el mal, y que la única salvación de ellos será a través de las oraciones que ustedes hagan."
"Finalmente me gustaría pedir a Mis seguidores que recen la Coronilla de la Divina Misericordia en cada oportunidad, mientras el momento se acerca para Mi Gran Aviso."
"Vuestras Oraciones, hijos, han sido muy poderosas y especialmente aquellos de vosotros que rezáis Mi Cruzada de Oraciones, Mi Coronilla de la Divina Misericordia y el Santo Rosario, diariamente. Ya habéis retrasado y evitado una guerra nuclear, salvado a millones de almas del fuego del Infierno, así como también, habéis evitado muchos terremotos."
"Ayudad a aquellos que no escucharán, a través de la recitación diaria de Mi Coronilla de la Divina Misericordia."
De las revelaciones de Jesús a Santa Faustina Kowalska (contenidas en su diario)
"Reza incesantemente este rosario que te he enseñado. Quienquiera que lo rece recibirá gran misericordia a la hora de la muerte”
"Por medio de este rosario obtendrás todo lo que me pides, si lo que me pides está de acuerdo con Mi voluntad"
"Cuando un pecador, por más grande que sea, rece este rosario con confianza y amor, llenaré su corazón de paz"
"Quiero que Mis sacerdotes recomienden el rezo de este rosario como última esperanza de salvación, por los pecadores"
"Cuando se rece este rosario al lado de un moribundo, me pondré entre Mi Padre y el alma del agonizante como un Redentor Misericordioso”
"Oh, qué gracias más grandes concederé a las almas que recen este rosario; las entrañas de Mi Misericordia se estremecen por quienes lo rezan"
"Hija Mía, me son muy agradables las palabras de tu corazón y por el rezo del rosario de la Misericordia acercas a Mí a la humanidad entera"
"Hija Mía, anima a las almas a rezar el rosario de la Misericordia que te he enseñado. A quienes lo recen les daré lo que me pidan. Cuando lo recen los pecadores empedernidos, colmaré sus almas de paz y la hora de su muerte será feliz... Proclama que ningún alma que ha invocado Mi Misericordia ha quedado defraudada ni ha sentido confusión. Me complazco particularmente en el alma que confía en Mi bondad"
"El ayuno es una de las formas más poderosas de librar a vuestra alma de Satanás y sus demonios. Tan pocas personas en el mundo se pueden comprometer a este sacrificio, a pesar de que es tan simple y no daña su salud. Un día de ayuno a la semana os traerá gracias especiales. Haciendo pequeños sacrificios en honor a Mí, su Divino Salvador, no solo salvaréis almas, sino que también os acercaréis más a Mí. Otros sacrificios en donde vosotros renunciéis a bienes mundanos también os acercarán más a Mi Sagrado Corazón."
"Imiten Mi ayuno en el desierto, haciendo pequeños sacrificios. Ayunar es importante para sus almas. Este limpia el espíritu y me da gran consuelo. Ustedes pueden salvar muchas almas ayunando solo una vez por semana."
"Recordad hijos, que por el pecado original vosotros siempre caeréis víctimas de la tentación del maligno. Es por medio de la oración, el ayuno y la dedicación a la Sagrada Eucaristía, como estaréis más cerca de Mí. Esto requiere tiempo, del que hay que saber disponer."
"Paciencia, oración silenciosa diaria, la formación de grupos de oración, rezo diario de la coronilla de la Divina Misericordia, ayuno y el Santo Rosario a Mi Amada Madre, combinados, actúan como la fórmula perfecta para salvar almas."
"Reza, reza, reza, porque sin la oración, especialmente el rezo de mi Santo Rosario, satanás puede alejarte de la Sagrada Palabra de mi Precioso Hijo. Recuerda también la importancia del ayuno, pues este mantiene al engañador acorralado (a raya)."
El ayuno puede realizarse de diveras maneras. Desde un pequeño sacrificio en el que se renuncia a algo que nos gusta, hasta un día entero sin comer más que un poco de agua y pan. Se trata de renunciar a algo que deseamos y ofrecer esa renuncia por amor a Jesús y María.
Cada uno debe medir sus capacidades. En esta tarea es muy conveniente el consejo de un buen director espiritual.
Una forma muy recomendada para ayunar es la que la propia Virgen María nos ha indicado en estos mensajes:
1 comida principal durante el día.
Pan y agua para las otras 2 comidas.
Si no se puede ayunar de alimentos, se puede ayunar de otra cosa que dé placer como televisión, internet, dulces, etc. Importante recordar que Jesús no nos pide ayunar de la Eucaristía.
En cada sub-sección de este apartado sobre el ayuno se especifican las instrucciones concretas a seguir en cada periodo de ayuno (Semana Santa, Agosto, etc.)
Oh Jesús mío, ayúdame en mi humilde manera, imitar Tu vida de sacrificio con el fin de salvar a la humanidad. Permíteme ofrecerte el regalo de ayunar un día a la semana, durante la Cuaresma, para salvar a la humanidad, para que así ellos puedan entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Te ofrezco, querido Jesús, mi sacrificio con amor y alegría en mi corazón. Para mostrarte la medida de mi amor, a través de este sacrificio, te suplico por la salvación de toda alma que pueda haber caído fuera del estado de gracia. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
"Mi amadísima hija, di a Mis hijos que este tiempo de Cuaresma es un tiempo de reflexión silenciosa, de sacrificio personal y una oportunidad de rezar por la mitigación de la guerra en el mundo.
Imiten Mi ayuno en el desierto, haciendo pequeños sacrificios.
Ayunar es importante para sus almas. Éste limpia el espíritu y me da gran consuelo.
Ustedes pueden salvar muchas almas ayunando solo una vez por semana.
Esto puede ser de acuerdo a su deseo. Todo lo que importa es que ofrezcan este día por las almas.”
Jesús nos invita al ayuno, sacrificio y oración durante toda la Cuaresma, especialmente para mitigar las guerras.
Tiempo de reflexión silenciosa: meditar su Vida en la Tierra y su Muerte en la Cruz.
Realizar pequeños sacrificios.
Ayunar 1 día a la semana.
Prepararse para la Semana Santa rezando la Cruzada de Oración (34)
La Virgen María, en el mensaje del 9 de Marzo de 2012, también nos invita a rezar los 4 misterios del Rosario (gozosos, luminosos, dolorosos y gloriosos) cada Viernes de Cuaresma.
Según las instrucciones de Jesucristo del mensaje del 22 de Febrero de 2012, el ayuno puede ser de acuerdo al deseo de cada uno. Todo lo que importa es que se ofrezca ese día por las almas.
Oh Jesús mío, ayúdame en mi humilde manera, imitar Tu vida de sacrificio con el fin de salvar a la humanidad. Permíteme ofrecerte el regalo de ayunar un día a la semana, durante la Cuaresma, para salvar a la humanidad, para que así ellos puedan entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Te ofrezco, querido Jesús, mi sacrificio con amor y alegría en mi corazón. Para mostrarte la medida de mi amor, a través de este sacrificio, te suplico por la salvación de toda alma que pueda haber caído fuera del estado de gracia. Amén.
”Mientras las guerras están siendo ahora trazadas, es importante que mi Santo Rosario sea rezado todos los días antes de la Pascua.
Hijos, si vosotros pudiérais dedicaros cada día de la semana a Mi Santo Rosario, con cada viernes rezando los cuatro misterios, desde ahora y hasta la Pascua, mucha destrucción en el mundo puede ser y será mitigada.
Mi Hijo está tan contento con aquellos que aceptan Su Santa Palabra con amor y pureza de corazón."
”Hasta una pequeña muestra de ayuno cosechará, para todos vosotros, un conocimiento de Mi Plan de Salvación y cómo podéis ayudarme a salvar las almas de todos los pecadores.”
”Tan pronto como ésta oración sea dicha (cruzada de oración 42) durante vuestro ayuno, Mi Padre Eterno detendrá a ésta gente de imponer la austeridad que están planeando para poder controlaros.
Éstas mismas personas quieren abolir el Cristianismo, por éso es importante que vosotros evitéis que ésto suceda, a través de sacrificios especiales.”
Jesús nos invita al ayuno, sacrificio y oración durante toda la Semana Santa, uniéndonos a los planes de Salvación de nuestro Señor y Redentor Jesucristo, como lo expresa en sus mensajes del 22 de marzo de 2013 y del 4 de abril de 2012.
Recibir el Sacramento de la confesión.
Ofrecer un tiempo de ayuno a partir del Lunes y terminando el Viernes Santo a las 15:30 hrs (03:30 PM)
Rezar la Coronilla de la Divina Misericordia diariamente.
Empezar el Viernes Santo la Novena de la Divina Misericordia.
Si se desea compartir la Copa de Sufrimiento con Jesús, rezar la Cruzada de Oración 103 (3 veces) preferiblemente en cualquier momento del tiempo de ayuno.
Rezar la Cruzada de Oración 42 (preferiblemente durante un tiempo de ayuno) para detener la moneda mundial.
En cuanto al tipo de ayuno, Jesús no fue específico. Lo coherente es seguir las leyes de la Iglesia para el Viernes Santo:
Ayuno (1 comida fuerte al día más dos comidas pequeñas que sumadas no sobrepasen la comida principal en cantidad)
Abstinencia (no comer carne)
Jesús no quiere que nadie ponga en peligro su salud. En caso de tener un buen director espiritual, consultarle a él.
Si no se puede ayunar de alimentos, se puede ayunar de otra cosa que dé placer como la televisión, internet, dulces, etc. Importante recordar que Jesús no nos pide ayunar de la Eucaristía.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
”Nunca os canséis de rezar para salvar a otras almas. Vosotros sóis Mi ejército y a través las gracias que os doy, trabajaréis Conmigo para limpiar la Tierra del Pecado, antes de Mi Segunda Venida. Orar no es fácil para todos vosotros. La mejor manera es que os unáis a Mi Dolorosa Pasión y meditéis en Mi sufrimiento, y, en particular, en Mi Agonía en el Huerto. Mi Gran Misericordia estará entonces en su máxima potencia. Fue precisamente por los pecadores, incluidos esos paganos que nunca tuvieron la oportunidad de conocerme, por quienes más Me angustié."
”Doy ahora a todos vosotros un Regalo especial, bendecido por mi Hijo, para que a todas las almas se les conceda inmunidad contra los fuegos del infierno y sea concedida la salvación. Mi Hijo desea que cada alma sea salvada, no importa cuán grave es su pecado. Pido que ahora empecéis la Novena de la Salvación. Debéis empezar esto de inmediato y continuarla, mientras os instruyo para el fin de los tiempos. Debéis recitar esta Oración por un total de siete días consecutivos de un mes calendario, comenzando los lunes, en el horario de la mañana. Debéis recitarla tres veces durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Para el ayuno se os pide comer solo una comida principal durante el día y entonces solo pan y agua en las otras dos comidas.
Esta es la oración que debéis decir para cada uno de los siete días."
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
La Virgen María fue muy específica en cuanto al tipo de ayuno a seguir:
1 comida principal durante el día.
Pan y agua para las otras 2 comidas.
Esto sólo es necesario durante 1 día de dicha semana.
En caso de no poder llevar a cabo este tipo de ayuno, al menos intentar realizar otro tipo de sacrificio.
"Hijos, os urjo a que dediquéis el mes de Junio a la conversión de la humanidad y para asegurarnos de que los hombres
buscarán la salvación.
Llamad a este mes el mes de la Cruzada de Conversión y rezad, como uno solo, por medio de los grupos de oración en todo el mundo.
Aquí está la oración de la Cruzada para la Cruzada de Conversión."
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
De acuerdo con lo dicho por Jesucristo en el mensaje del 3 de Junio de 2012, este mes será el tiempo en que se ultimen, silenciosamente, los planes para aumentar los conflictos en el Medio Oriente.
Siguiendo las instrucciones de la Madre de la Salvación y de nuestro Señor Jesucristo, como lo expresan en sus mensajes del 31 de Mayo de 2012 y del 3 de Junio de 2012 respectivamente, se recomienda:
Ayunar un día a la semana durante este mes.
Recitar el Rosario diariamente.
Recitar la Coronilla de la Divina Misericordia diariamente.
Rezar la Cruzada de Oración 58 durante este mes.
Recibir la Sagrada Eucaristía todos los días si es posible.
Tiempo de contemplación silenciosa.
La Virgen María no fue específica en cuanto al tipo de ayuno a seguir.
Se recomienda el siguiente ayuno propuesto por la Virgen para la Novena de la Salvación:
1 comida principal durante el día.
Pan y agua para las otras 2 comidas.
Esto es necesario realizarlo 1 día a la semana durante todo el mes de Junio.
En caso de no poder llevar a cabo este tipo de ayuno, al menos intentar realizar otro tipo de sacrificio.
"Este mes es el tiempo cuando, a través de la Cruzada de Conversión, mucha gente puede recibir las gracias de la conversión
instantánea, a través de los sacrificios hechos por aquellos de vosotros que respondáis a Mi Madre, la Madre de la Salvación (...)
Sed fuertes. Sed pacientes. Sed humildes de corazón. Someted vuestra voluntad a Mí y ofreced vuestras pruebas y sacrificios por la conversión de todos los pecadores."
"Les pido a todos Mis hijos que pasen el mes de agosto, rezando la Divina Misericordia diariamente, por las almas perdidas que no sobrevivirán al GRAN AVISO. Un día de ayuno a la semana es también requerido, como también la Misa diaria y recibir Mi Santísima Eucaristía. Si suficientes de ustedes hacen esto, en lo que llamo 'el mes de la salvación de las almas', entonces millones de almas serán salvadas a través del mundo."
"Esto es lo que deben hacer. Vayan a Misa todos los días y reciban la Sagrada Eucaristía. Luego, todos los días a las 15:00 hrs. en punto recen la coronilla de la Divina Misericordia. Para aquellos de ustedes que puedan, deberían ayunar por un día a la semana (...) Utilicen este mes para rezar por todas las almas que puedan perecer en guerras, terremotos o en la Confesión venidera, El Aviso.
El objetivo es sacrificarse por las almas perdidas que no sobrevivirán al Gran Aviso, a las guerras o a los terremotos. Siguiendo las instrucciones de la Madre de la Salvación en el mensaje del 23 de Julio de 2011, se recomienda:
Ayunar un día a la semana durante este mes.
Recitar el Rosario diariamente.
Recitar la Coronilla de la Divina Misericordia diariamente.
Acudir a la Santa Misa y recibir la Sagrada Eucaristía todos los días si es posible.
Tiempo de contemplación silenciosa.
La Virgen María no fue específica en cuanto al tipo de ayuno a seguir. Se recomienda el siguiente ayuno ya recomendado por la Virgen para la Novena de la Salvación:
1 comida principal durante el día.
Pan y agua para las otras 2 comidas.
Esto es necesario realizarlo 1 día a la semana durante todo el mes de Agosto. En caso de no poder llevar a cabo este tipo de ayuno, al menos intentar realizar otro tipo de sacrificio.
Agosto es un buen mes para hacer una Novena de Salvación para pedir la salvación de las almas.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
"Mi Amor brilla a través de Mis niños fieles por todo el mundo. La luz de Mi amor que brilla a través de ellos está creando mucha conversión en el mundo, justo ahora. Este mes, aunque Mis niños no se hayan dado cuenta, millones de almas están siendo salvadas por la devoción de Mis amados seguidores. Ellos, Mis preciosos niños, siguieron Mi mandato de oración y devoción durante este mes de agosto, mes de la salvación de las almas."
Mi queridísimo Jesús, Tú, Quien nos amas tanto, permíteme en mi humilde manera, ayudar a salvar Tus preciosas almas. Ten misericordia de todos los pecadores, no importa cuán gravemente te ofendan. Permíteme que a través de la oración y del sufrimiento, ayude a aquellas almas que podrían no sobrevivir El Aviso, para que busquen un lugar a Tu lado, en Tu Reino. Escucha Mi oración oh Dulce Jesús, para ayudarte a ganar más de aquellas almas que Tú anhelas. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo juro (prometo) mi fidelidad a Tu Sacratísima Voluntad, en todo momento. Amén.
Mi Padre Eterno, en el Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, te pido que protejas a Tus hijos de la persecución que está siendo tramada por fuerzas globales en contra de naciones inocentes. Rezo por el perdón de los pecados de aquellas almas que son causantes de este sufrimiento, para que ellas puedan volverse a Ti con corazón humilde y contrito. Por favor, da a Tus hijos torturados, la fortaleza para resistir tales sufrimientos, en expiación por los pecados del mundo, a través de Cristo Nuestro Señor. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te ruego liberes al mundo del miedo, que separa las almas de Tu amoroso Corazón. Te pido que las almas que experimentarán verdadero miedo durante El Aviso, se detengan y permitan que Tu Misericordia inunde sus almas, para que puedan ser libres de amarte de la manera en que deberían. Amén.
Une Jesús, a todas las familias durante El Aviso, para que así ellas puedan recibir la Salvación eterna. Pido que todas las familias se mantengan juntas, en unión Contigo, Jesús, para que así puedan heredar Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
"Hija Mía, el mundo debe ofrecer esta oración especial en alabanza y acción de gracias a Dios Padre, por la Misericordia que Él está brindando al mundo entero."
Oh Padre Eterno, te ofrecemos nuestras oraciones en gozosa acción de gracias, por Tu precioso Don de Misericordia, para la humanidad entera. Nos regocijamos y te ofrecemos, gloriosísimo Rey, nuestra alabanza y adoración, por Tu amorosa y tierna Misericordia. Tú, Dios Altísimo, eres nuestro Rey y por este Don que ahora nos traes, nos postramos a Tus pies en humilde servidumbre. Por favor, Dios, ten misericordia con todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús, pido a Dios que en Su Misericordia, evite que el anticristo y su infame ejército, causen terror e inflijan sufrimiento a Tus hijos. Pedimos para que sea detenido y que la mano del castigo sea evitada, por la conversión que será alcanzada durante El Aviso. Amén.
"Ésta es la oración que Mi ejército de Oración debe decir, para pedir Misericordia por las almas que están en tinieblas:"
Jesús, te ruego que perdones a aquellos pecadores, que con el alma tan oscurecida, rechazarán la Luz de Tu Misericordia. Perdónalos, Jesús, te lo suplico, a fin de redimirlos de los pecados que ellos mismos encuentran tan difícil de extraerse. Inunda sus corazones con los Rayos de Tu Misericordia y dales la oportunidad de regresar a Tu redil. Amén.
"Esta oración, deberá rezarse para suplicar clemencia, para el perdón de los pecados, durante y después de El Aviso:"
Queridísimo Jesús, te pido perdón por todos mis pecados y por el daño y las heridas, que he causado a otros. Humildemente pido las gracias para evitar ofenderte otra vez y para ofrecer penitencia, de acuerdo a Tu Santísima Voluntad. Suplico el perdón de cualquier ofensa futura, en la cual podría tomar parte y que te causará dolor y sufrimiento. Llévame Contigo a la nueva Era de Paz, para que pueda ser parte de Tu familia, por la eternidad. Te amo Jesús. Te necesito. Te honro y honro todo lo que representas. Ayúdame, Jesús, para que sea digno de entrar en Tu Reino. Amén.
Oh Sacratísimo Corazón de Jesús, enséñame a aceptar los insultos en Tu Santo Nombre con humilde acción de gracias cuando proclame Tu Palabra. Enséñame a entender cómo la humillación, el dolor y el sufrimiento me acercan más a Tu Sagrado Corazón. Permíteme aceptar tales pruebas con amor y generosidad de espíritu, para que así pueda presentarlas como ofrendas tan preciadas para Ti, con el fin de salvar almas. Amén.
Ayúdanos, querido Jesús, a levantarnos sin miedo en Tu Nombre, para llevar la Llama de Tu Amor, a través de todas las naciones. Danos, a Tus hijos, la fuerza para afrontar el abuso que enfrentaremos, entre todos aquellos que no son verdaderos creyentes de Tu Misericordia. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, por favor detén el odio y los celos que existen entre Tus seguidores, hacia Tus verdaderos visionarios en estos tiempos. Pido que escuches mi oración, para darle a Tus visionarios la fuerza que necesitan, para proclamar Tu Santísima Palabra a un mundo incrédulo. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a evitar el pecado del orgullo, cuando hablo en Tu Nombre. Perdóname si alguna vez menosprecio a alguien en Tu Santo Nombre. Ayúdame a escuchar, Jesús, cuando Tu voz sea pronunciada y lléname de Tu Santo Espíritu, para que así pueda discernir la Verdad de Tu Palabra, cuando llames a la humanidad. Amén.
"Mi promesa solemne, hijos, es que todos aquellos que me invoquen en nombre de Mi Amado Hijo Jesucristo, para salvar a sus hermanos y hermanas, se les garantizará inmunidad inmediata. Se les darán Gracias especiales a cada uno de los que se comprometan todo un mes de oración por esas almas. Esto es lo que les pido que reciten:"
Oh Padre Celestial, a través del amor de Tu amado Hijo Jesucristo, cuya Pasión en la Cruz, nos salvó del pecado, por favor salva a todos aquellos que todavía rechazan la mano de Su Misericordia. Inunda sus almas, querido Padre, con el testimonio de Tu Amor. Te suplico, Padre Celestial, que escuches mi oración y salves estas almas, de la condenación eterna. A través de Tu Misericordia, permíteles ser los primeros en entrar a la Nueva Era de Paz en la Tierra. Amén.
Oh Padre Todopoderoso, Dios Altísimo, por favor, ten misericordia de todos los pecadores. Abre sus corazones para que acepten la salvación y que reciban Gracias en abundancia. Escucha mis súplicas por mi propia familia y asegura que cada uno encontrará favor en Tu Amoroso Corazón. Oh Divino Padre Celestial, protege a todos Tus hijos en la Tierra, de cualquier guerra nuclear o de otros actos que están siendo planeados para destruir a Tus hijos. Guárdanos de todo daño y protégenos. Ilumínanos, para que así podamos abrir nuestros ojos, escuchar y aceptar la Verdad de nuestra salvación, sin ningún temor en nuestras almas. Amén.
Para ser rezada especialmente en Navidad
Oh mi Padre Celestial, te honramos con una profunda apreciación* del Sacrificio que hiciste, cuando enviaste al Salvador al mundo. Te ofrecemos con gozo y acción de gracias, nuestra oración en humilde gratitud por el Don que ahora das a Tus hijos, el Don de la Divina Misericordia. Oh Dios Altísimo, haznos dignos de aceptar esta Gran Misericordia, con gratitud. Amén.
apreciación* = profundo agradecimiento / reconocimiento.
Oh Jesús mío, mantenme fuerte durante esta prueba de Tu Gran Misericordia. Dame las gracias necesarias para hacerme pequeño ante Tus ojos. Abre mis ojos a la Verdad de Tu promesa de Salvación Eterna. Perdona mis pecados y muéstrame Tu amor y Tu mano de amistad. Acógeme dentro de los brazos de la Sagrada Familia, para que así podamos ser uno de nuevo. Te amo Jesús y prometo desde este día en adelante, que proclamaré Tu Santa Palabra sin miedo en mi corazón y con pureza de alma por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación y Mediadora de todas la Gracias, tú, que vas a participar en salvar a la humanidad de la perversidad de Satanás, ruega por nosotros. Madre de la Salvación, reza para que todas las almas puedan ser salvadas y acepten el Amor y la Misericordia mostrados por tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo, Quien viene una vez más a salvar a la humanidad y para darnos la oportunidad de la salvación eterna. Amén.
Oh querido Jesús, salva del anticristo al mundo. Protégenos de los perversos engaños de Satanás. Salva del mal a los últimos remanentes de Tu Iglesia. Da a todas Tus iglesias la fuerza y las gracias necesarias para defendernos contra las guerras y persecuciones planeadas por Satanás y su ejército de terroristas. Amén.
Madre de la Salvación, te suplico que pidas Misericordia para almas jóvenes, que están en terrible oscuridad, para que así ellas reconozcan a tu amado Hijo cuando venga a redimir a la humanidad entera. No permitas que ni una sola alma se salga del camino. No permitas que ni una sola alma rechace Su Gran Misericordia. Yo rezo, Madre, para que todas se salven y te pido que cubras a estas almas con tu Sagrado Manto, para proveerles la protección que necesitan contra el engañador. Amén.
Oh Dios Padre, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te hago una llamada para detener al anticristo de atrapar las almas de Tus hijos. Te suplico Padre Omnipotente, que lo detengas de infligir terror en Tus hijos. Te suplico que lo detengas de contaminar Tu Creación y te pido que tengas Misericordia de aquellas pobres almas que serán impotentes en contra de él. Escucha mi oración, querido Padre, y salva a todos Tus hijos de este terrible mal. Amén.
Te alabamos y te agradecemos, Oh Santo Dios Todopoderoso Creador de la humanidad, por el amor y la compasión que tienes a la humanidad. Te agradecemos por el Don de la Salvación que otorgas a Tus pobres hijos. Te suplicamos Oh Señor, que salves a aquellos que siguen al maligno, y que sus corazones se les abran a la Verdad de su Vida Eterna. Amén.
"Le doy al mundo esta Cruzada de Oración para que el Clero Católico la rece:"
Oh mi Amado Jesús, mantenme fuerte y la llama de mi amor por Ti encendida, en todo momento de mi día. Nunca permitas que esta llama de amor por Ti titubee o muera. Nunca permitas que me debilite ante la presencia de la tentación. Dame las gracias necesarias para honrar mi vocación, mi devoción, mi lealtad y para defender las Enseñanzas de la Iglesia Católica ortodoxa. Te ofrezco mi lealtad en todo momento. Yo me comprometo a luchar en Tu Ejército, para que así la Iglesia Católica pueda levantarse otra vez en gloria para darte la bienvenida, querido Jesús, cuando vengas de nuevo. Amén.
Oh mi Padre Eterno, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y por los sufrimientos que padeció para salvar al mundo del pecado, te pido ahora que protejas a Tu Santo Vicario, el Papa Benedicto, Cabeza de Tu Iglesia en la Tierra, para que así él también pueda ayudar a salvar a Tus hijos y a todos Tus siervos consagrados del flagelo de Satanás y de sus dominios de ángeles caídos, que caminan por la Tierra, robando almas. Oh Padre, protege a Tu Papa, para que Tus hijos puedan ser guiados en el verdadero sendero hacia Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Esta oración es para católicos y no católicos, pero deben tener el propósito de no volver a pecar para recibir la absolución de los pecados pasados. Los católicos todavía están obligados a confesarse si hay sacerdotes disponibles. Los católicos no deben usar esta oración como un sustituto mientras puedan confesarse.
"Deben decir esta oración por 7 días consecutivos y les será dado el Don de la Absolución Total y el poder del Espíritu Santo:"
Oh Jesús mío, Tú eres la Luz de la Tierra. Eres la Llama que toca todas las almas. Tu Misericordia y Amor no conocen límites. No somos dignos del Sacrificio que hiciste con Tu muerte en la Cruz, sin embargo sabemos que Tu Amor por nosotros es mayor que el amor que tenemos por Ti. Concédenos, Oh Señor, el Don de la Humildad, para que así seamos merecedores de Tu Nuevo Reino. Llénanos con el Espíritu Santo, para que así podamos marchar hacia adelante y guiar a Tu Ejército para proclamar la Verdad de Tu Santa Palabra y preparar a nuestros hermanos y hermanas para la Gloria de Tu Segunda Venida a la Tierra. Te honramos. Te alabamos. Nosotros mismos nos ofrecemos, nuestras penas, nuestros sufrimientos, como una ofrenda a Ti para la salvación de las almas. Te amamos Jesús. Ten Misericordia de todos Tus hijos donde sea que se encuentren. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplico que brindes protección a todos Tus santos mensajeros en el mundo. Te pido que sean protegidos del odio de otros. Te pido que Tu Santísima Palabra sea difundida rápidamente por todo el mundo. Protege a Tus mensajeros de la calumnia, el abuso, las mentiras y de todo tipo de peligro. Protege a sus familias y cúbrelos con el Espíritu Santo en todo momento, para que los Mensajes que ellos dan al mundo, sean escuchados con corazón contrito y humilde. Amén.
Nuestra Señora insta a las personas a que digan su Santo Rosario (los 3 Misterios) diariamente para ayudar a salvar su país y familia.
Oh Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de Gracia ocultos en el Rosario. Infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las Gracias por las que ruego en este Rosario. (Aquí mencionar la petición).
Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por tu propio honor y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.
Oh Jesús mío, te suplico Misericordia para aquellos afligidos por las terribles guerras. Te ruego que la paz sea instaurada en aquellas naciones atormentadas, que están ciegas a la Verdad de Tu Existencia. Por favor cubre a estas naciones con la Fuerza del Espíritu Santo, para que ellas detengan su afán de poder sobre almas inocentes. Ten Misericordia con todos Tus países que son impotentes contra las atrocidades del mal, que cubren el mundo entero. Amén.
Oh Dios Altísimo, nos arrodillamos ante Ti para suplicarte por la unificación de todos Tus hijos en la lucha por conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra. No permitas que nuestras diferencias nos dividan en este tiempo de gran apostasía en el mundo. En nuestro amor por Ti, querido Padre, te imploramos que nos des las Gracias para amarnos unos a otros en el Nombre de Tu amado Hijo Nuestro Salvador Jesucristo. Te adoramos. Te amamos. Nos unimos para luchar por la fuerza de conservar Tus Iglesias Cristianas en la Tierra durante pruebas que podamos enfrentar en los años venideros. Amén.
Oh mi Señor Jesucristo, te pido que derrames Tu Espíritu Santo sobre todos Tus hijos. Te ruego que perdones a aquellos que tienen odio por Ti en sus almas. Yo pido que los ateos abran sus endurecidos corazones durante Tu Gran Misericordia, y que Tus hijos que te aman puedan honrarte con dignidad para levantarse sobre toda persecución. Por favor llena a todos Tus hijos con el Don de Tu Espíritu, para que así se puedan levantar con valor y dirijan a Tu Ejército a la batalla final en contra de Satanás, sus demonios y todas aquellas almas, que son esclavas de sus falsas promesas. Amén.
Oh mi Padre Eterno, Dios Creador del Universo, en el Nombre de Tu precioso Hijo, te suplico que nos hagas amarte más. Ayúdanos a ser valientes, audaces, y fuertes ante la adversidad y acepta nuestros sacrificios, sufrimientos y pruebas como un regalo ante Tu Trono para salvar a Tus hijos en la Tierra. Suaviza los corazones de las almas impuras. Abre sus ojos a la Verdad de Tu amor, para que así ellas puedan unirse con todos Tu hijos en el Paraíso de la Tierra que tan amorosamente creaste para nosotros, de acuerdo a Tu Divina Voluntad. Amén.
Oh Jesús mío, permite que mi oración invoque Tu Santo Espíritu, para que descienda sobre aquellos líderes impulsados por la lujuria, la codicia, la avaricia y el orgullo, para detener la persecución de Tus inocentes hijos. Te ruego que impidas que la pobreza, la hambruna y las guerras devoren a Tus hijos, y pido para que los líderes europeos abran sus corazones a la Verdad de Tu Amor. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ruega por tus hijos en Irlanda para que impidan que el acto perverso del aborto sea impuesto sobre nosotros. Protege esta santa nación de caer más profundo en la desesperanza por la oscuridad que cubre nuestro país. Líbranos del maligno que quiere destruir a Tus hijos que aún no han nacido. Pide que esos líderes tengan la valentía de escuchar a aquellos que aman a tu Hijo, para que así ellos sigan las Enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Dios Padre pide que todos acepten este Sello como una protección para todos y cada uno de nosotros, y nuestras familias, durante los futuros tiempos difíciles en los que tendremos que vivir.
Oh Dios Mío, mi Padre amoroso, yo acepto con amor y gratitud Tu Sello Divino de Protección. Tu Divinidad abarca mi cuerpo y alma por la eternidad. Me inclino en humilde acción de gracias y te ofrezco mi profundo amor y lealtad a Ti, mi amado Padre. Te suplico que me protejas a mí y a mis seres queridos con este Sello especial y comprometo mi vida a Tu servicio por los siglos de los siglos. Te amo querido Padre. Te consuelo en estos momentos, querido Padre. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma, y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo en expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame en mi humilde manera, imitar Tu vida de sacrificio con el fin de salvar a la humanidad. Permíteme ofrecerte el regalo de ayunar un día a la semana, durante la Cuaresma, para salvar a la humanidad, para que así ellos puedan entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Te ofrezco, querido Jesús, mi sacrificio con amor y alegría en mi corazón. Para mostrarte la medida de mi amor, a través de este sacrificio, te suplico por la salvación de toda alma que pueda haber caído fuera del estado de gracia. Amén.
Oh Jesús mío, ayúdame a ayudarte a salvar al remanente de Tus hijos en la Tierra. Pido que, a través de Tu Misericordia, rescates del espíritu de la oscuridad las almas. Acepta mis pruebas, sufrimientos y penas en esta vida, para salvar almas del fuego del Infierno. Lléname con las Gracias para ofrecerte estos sufrimientos con amor y alegría en mi corazón, para que así todos nosotros nos unamos como uno solo en amor por la Santísima Trinidad y vivamos Contigo, como una sola Santa Familia en el Paraíso. Amén.
Jesús ayúdame, porque estoy perdido y confundido. No conozco la Verdad de la vida después de la muerte. Perdóname si te ofendo al honrar falsos dioses, que no son el Verdadero Dios. Sálvame y ayúdame a ver la Verdad con claridad y sálvame de la oscuridad de mi alma. Ayúdame a venir a la Luz de Tu Misericordia. Amén.
Oh querido Jesús, une en el amor a todos Tus Amados seguidores, para que podamos difundir la Verdad de Tu Promesa de Salvación Eterna a lo largo del mundo entero. Pedimos que aquellas almas tibias, temerosas de ofrecerse a sí mismas a Ti en mente, cuerpo y alma, bajen su armadura de orgullo y abran sus corazones a Tu amor, y sean parte de Tu santa familia en la Tierra. Abraza a todas aquellas almas perdidas, querido Jesús, y permite que nuestro amor, como sus hermanos y hermanas, las saque del desierto y las lleve con nosotros al Regazo, Amor y Luz de la Santísima Trinidad. Ponemos toda nuestra esperanza, confianza y amor en Tus Santas manos. Te suplicamos que expandas nuestra devoción para que así podamos ayudar a salvar más almas. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, por favor pide por la Iglesia Católica en estos tiempos difíciles y por nuestro bienamado Papa Benedicto XVI, para aliviar su sufrimiento. Te pedimos, Madre de la Salvación, que cubras a los siervos consagrados de Dios con tu Santo Manto, para que así les sean dadas las Gracias para ser fuertes, fieles y valientes durante las pruebas que afronten. Pide también que ellos cuiden de su rebaño de acuerdo con las Verdaderas Enseñanzas de la Iglesia Católica. Oh Santa Madre de Dios, danos a tu Iglesia remanente en la Tierra, el Don del liderazgo para que así podamos ayudar a guiar a las almas hacia el Reino de tu Hijo. Te pedimos, Madre de la Salvación, que mantengas al engañador alejado de los seguidores de tu Hijo, que buscan salvaguardar sus almas, para que sean dignos de entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh Jesús, mi amado Salvador, te pido que me cubras con Tu Santo Espíritu, para que así yo pueda hablar con autoridad Tu Santísima Palabra, para preparar a todos los hijos de Dios, para Tu Segunda Venida. Te suplico, Señor Jesús, por todas las Gracias que necesito, para que así yo pueda alcanzar a todas las religiones, credos y nacionalidades, por donde sea que yo vaya. Ayúdame a hablar con Tu lengua, aliviar a las pobres almas con Tus labios y amar todas las almas con el especial Divino Amor, el cual emana de Tu Sagrado Corazón. Ayúdame a salvar las almas muy cercanas a Tu Corazón y permíteme consolarte, querido Jesús, cuando las almas confundidas continúen rechazando Tu Misericordia. Jesús, yo soy nada sin Ti, pero con Tu generosa ayuda, lucharé en Tu Nombre, para ayudar a salvar a la humanidad entera. Amén.
Oh Jesús mío, yo no soy más que un humilde siervo y necesito que me guíes, para que pueda preparar almas para Tu Gloriosa Segunda Venida. Ayúdame a convertir almas y a prepararlas de acuerdo a Tu Santa Voluntad, para que así ellas sean dignas de entrar al Nuevo Cielo y Tierra, que prometiste a toda la humanidad, mediante Tu muerte en la Cruz. Dame las Gracias que necesito, para que así pueda impartir Tu Palabra a las almas sedientas y que nunca renuncie a mi deber a Ti, querido Jesús, a Quien yo prometí mi lealtad a través de mis Votos Sagrados. Amén.
Oh Jesús mío, ayuda a Tus pobres hijos quienes están ciegos a Tu Promesa de Salvación. Te suplico, con la ayuda de mis oraciones y sufrimientos, que abras los ojos de los no creyentes, para que así ellos puedan ver Tu tierno Amor y corran hacia Tus Sagrados Brazos por protección. Ayúdalos a ver la Verdad y a buscar perdón por todos sus pecados, para que así ellos puedan ser salvados y ser los primeros en entrar por las Puertas del Nuevo Paraíso. Te pido por estas pobres almas, incluyendo hombres, mujeres y niños y te insto a que los absuelvas de sus pecados. Amén.
Oh Dios Altísimo, te ofrezco mi ayuno como regalo, para que así detengas las garras del mal en el mundo, que están siendo planeadas para matar a mi país de hambre, incluyendo el Pan de Vida. Acepta mi ofrecimiento y escucha mis súplicas por otras naciones, para protegerles del sufrimiento que está siendo planeado por el anticristo. Sálvanos, querido Señor, de esta maldad y protege nuestra Fe, para que así podamos honrarte con la libertad que necesitamos para amarte y adorarte por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo y en conmemoración de Su muerte en la Cruz, para salvarnos de nuestros pecados, te suplico que salves las almas que no se pueden salvar ellas mismas y que pueden morir en pecado mortal durante El Aviso. En expiación por los sufrimientos de Tu amado Hijo, te ruego que perdones a aquellos que no son capaces de buscar Redención, porque ellos no vivirán lo suficiente para pedir a Jesús, Tu Hijo, por Misericordia para liberarlos del pecado. Amén.
Querido Jesús, dame la fortaleza para concentrarme en Tus Enseñanzas y para proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Nunca me permitas ser tentado a idolatrar al falso profeta, quien tratará de presentarse a sí mismo como Tú. Mantén fuerte mi amor por Ti. Dame la Gracia del Discernimiento, para que jamás niegue la Verdad contenida en la Santa Biblia, sin hacer caso de cuantas mentiras me sean presentadas con el propósito de alentarme a darle la espalda a Tu Verdadera Palabra. Amén.
Oh Jesús, conozco tan poco de Ti, pero por favor, ayúdame a abrir mi corazón para dejarte entrar en mi alma, para que así puedas sanarme, consolarme y llenarme con Tu Paz.
Ayúdame a sentir alegría, vencer todos los pensamientos negativos y aprender la manera de hacerme comprender cómo complacerte, para que así yo pueda entrar en Tu Nuevo Paraíso, en donde pueda vivir una vida de amor, alegría y maravilla Contigo, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Jesús, estoy perdido. Estoy confundido y me siento como un prisionero atrapado en una red de la cual no puedo escapar. Confío en que Tú, Jesús, vendrás en mi ayuda y me liberarás de las cadenas de Satanás y sus demonios. Ayúdame porque estoy perdido. Necesito Tu amor para que me dé la fortaleza de creer en Ti y confiar en Ti, para que así pueda ser salvado de este mal y se me muestre la Luz - para que por fin pueda encontrar paz, amor y felicidad. Amén.
Oh Bendita Madre, Madre de la Salvación para el mundo entero, ruega para que mi amor por Jesús pueda volver a encenderse. Ayúdame a sentir la Llama de Su Amor, para que ésta llene mi alma. Ayúdame para amar más a Jesús. Ruega para que mi fe, amor y devoción hacia Él, se hagan más fuertes. Disipa cualquier duda que me atormente y ayúdame a ver claramente la Divina Luz de la Verdad que irradia de tu amado Hijo, el Salvador de toda la humanidad. Amén.
Oh Jesús mío, concédeme la Gracia de proclamar Tu Santa Palabra a toda la humanidad para que las almas puedan ser salvadas. Derrama Tu Santo Espíritu sobre mí, Tu humilde siervo, para que así Tu Santa Palabra pueda ser escuchada y aceptada, especialmente por aquellas almas que más necesitan Tu Misericordia. Ayúdame a honrar Tu Santa Voluntad en todo momento y a nunca ofender o condenar a aquellos que rechazan la Mano de Tu Misericordia. Amén.
Oh Jesús, soy Tu humilde siervo, y te prometo mi amor y lealtad. Te suplico que me des una señal de Tu llamada. Ayúdame a abrir mis ojos y ser testigo de Tu Promesa. Bendíceme con la Gracia del Espíritu Santo, para que no sea engañado por quienes afirman venir en Tu Nombre, pero que no dicen la Verdad. Muéstrame la Verdad. Permíteme sentir Tu Amor para que pueda cumplir Tu Santísima Voluntad. Te pido, con humilde corazón, que me muestres el camino por el cual te puedo ayudar a salvar las almas de la humanidad. Amén.
Oh querido Jesús, ayúdame a saber Quién Eres. Perdóname por no haber hablado antes Contigo. Ayúdame a encontrar paz en esta vida, y que me sea mostrada la Verdad de la Vida Eterna. Consuela mi corazón. Alivia mis preocupaciones. Dame paz. Abre ahora mi corazón para que puedas llenar mi alma con Tu Amor. Amén.
Oh Espíritu Santo ven, derrama Tus Dones de Amor, Sabiduría y Entendimiento sobre mi humilde alma. Lléname con la Luz de la Verdad para que pueda distinguir la Verdad de Dios, de las mentiras esparcidas por Satanás y sus ángeles. Ayúdame a asir la antorcha, y a transmitir la Llama del Entendimiento a todos los que encuentre, por Cristo, Nuestro Señor. Amén.
Mi amadísimo Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo y en Memoria de Su Pasión en la Cruz, acudo a Ti. Tú, Dios Altísimo, Creador del Mundo y de todo lo que es, sostén nuestra salvación en Tus Santas Manos. Abraza a todos Tus hijos, incluyendo aquellos que no te conocen y a los que sí, pero que apartan su mirada. Perdona nuestros pecados y sálvanos de la persecución de Satanás y su ejército. Tómanos en Tus Brazos y llénanos con la esperanza que necesitamos para ver el camino de la Verdad. Amén.
Oh Dios Padre, en Nombre de Tu amado Hijo, te suplico que concedas la fuerza y las Gracias necesarias para ayudar a los Sacerdotes a resistir la persecución que padecen. Ayúdalos a aferrarse a la Verdad de las Enseñanzas de Tu Hijo Jesucristo, y a nunca renunciar, debilitarse o someterse a las falsedades acerca de la existencia de la Sagrada Eucaristía. Amén.
Oh Padre celestial, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, Quien sufrió grandemente por los pecados de la humanidad, por favor ayúdanos en estos tiempos difíciles que enfrentamos. Ayúdanos a sobrevivir a la persecución que está siendo planeada por los gobernantes codiciosos y por aquellos que quieren destruir Tus Iglesias y a Tus hijos. Te imploramos, querido Padre, que nos ayudes a alimentar a nuestras familias y salves las vidas de aquellos que serán forzados a una guerra, en contra de su voluntad. Te amamos querido Padre. Te suplicamos que nos ayudes en este, nuestro tiempo de necesidad. Sálvanos de las garras del anticristo. Ayúdanos a sobrevivir su marca, la marca de la bestia, al negarnos a aceptarla. Ayuda a los que te aman a permanecer fieles a Tu Santa Palabra en todo momento, para que así nos concedas las Gracias para sobrevivir en cuerpo y en alma. Amén.
Oh mi querido Jesús, por favor abre los corazones de todos los hijos de Dios al Don de Tu gran Misericordia. Ayúdalos a aceptar Tu Divina Misericordia con amor y gratitud. Permíteles que puedan volverse humildes ante Ti y que puedan suplicar perdón por sus pecados, para que lleguen a ser parte de Tu Glorioso Reino. Amén.
Oh amado Padre, en Nombre de Tu Precioso Hijo, Quien se sacrificó a Sí mismo en la Cruz por la humanidad entera, ayúdame a permanecer fiel a la Verdad. Cúbreme con la Sangre Preciosa de Tu Hijo y concédeme las Gracias para continuar sirviéndote en fe, confianza y honra, por el resto de mi ministerio. Nunca permitas que me desvíe del Verdadero Significado del Sacrificio de la Santa Misa, ni de la forma de suministrar la Sagrada Eucaristía a Tus hijos. Dame la fortaleza para representarte, y alimentar Tu rebaño como debe ser alimentado, con el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Hijo Jesucristo, el Salvador de la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, abre mis oídos al sonido de Tu Voz. Abre mi corazón a Tu llamada amorosa. Colma mi alma con el Espíritu Santo, para que pueda reconocerte en este momento. Te ofrezco mi humilde lealtad a todo lo que me solicites. Ayúdame a discernir la Verdad, a levantarme, responder y seguir Tu Voz, para que pueda ayudarte a salvar las almas de toda la humanidad. Tu Voluntad es mandato para mí. Dame valor para dejarme guiar por Ti, para que pueda tomar la armadura necesaria para dirigir a Tu Iglesia hacia Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Jesús, me dirijo a Ti para pedirte que acojas a todos los hijos de Dios y los cubras con Tu Preciosa Sangre. Haz que cada gota de Tu Sangre cubra a cada alma para protegerla del maligno. Abre los corazones de todas las almas, especialmente los de las más endurecidas y de aquellas que, te conocen, pero están manchadas con el pecado del orgullo, para que se postren y supliquen que la Luz de Tu Amor inunde sus almas. Abre sus ojos para que vean la Verdad, para que la aurora de Tu Divina Misericordia descienda sobre ellos, de tal modo que se cubran con los Rayos de Tu Misericordia. Convierte todas las almas mediante las Gracias que ahora te pido, querido Jesús, (nombrar aquí las intenciones personales…). Te suplico Misericordia y te ofrezco este regalo de ayunar un día de cada semana, (durante este mes de ___________) como propiciación de todos los pecados. Amén.
"Mi amadísima hija, así como Mi Padre Eterno legó el Gran Don de Su Sello a la humanidad así, también, deben sus hijos prometer su lealtad a Su Divina Voluntad. Pido a todos los hijos de Dios, que marcharán hacia adelante en Su ejército, que ayuden a salvar las almas de todos los hijos de Dios, incluyendo los endurecidos pecadores, a que tomen este compromiso."
Oh Dios Altísimo, Oh Padre Celestial, te prometo mi lealtad permanente para honrarte y obedecerte en todas las cosas unido a Tu Divina Voluntad aquí en la Tierra. Yo, por la Sagrada Sangre de Tu Único Hijo amado, el Verdadero Mesías, te ofrezco mi mente, mi cuerpo y mi alma en nombre de todas las almas, para que podamos unirnos, como uno, en Tu Reino Celestial que está por venir, para que Tu Divina Voluntad sea hecha en la Tierra así como en el Cielo. Amén.
"Hijos de Dios, prepárense cada día para El Aviso, porque puede suceder en cualquier momento."
Oh querido Dulce Jesús, suplico Misericordia para las almas de mi familia (mencionar aquí sus nombres...). Te ofrezco mis sufrimientos, mis pruebas y mis oraciones para salvar sus almas del espíritu de la oscuridad. No permitas que ninguno de estos, Tus hijos, te condenen o rechacen Tu Mano de Misericordia. Abre sus corazones para que se entrelacen con Tu Sagrado Corazón, para que así puedan buscar el perdón necesario para salvarse de las llamas del Infierno. Dales la oportunidad de enmendarse para que puedan ser convertidos con los Rayos de Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh amado Padre Celestial, en Memoria de la Crucifixión de Tu amado Hijo Jesucristo, te suplico que nos protejas, Tus hijos, de la crucifixión que está siendo planeada por el anticristo y sus seguidores para destruir a Tus hijos. Danos las Gracias que necesitamos para rechazar la marca de la bestia y concédenos la ayuda necesaria para luchar contra el mal en el mundo, propagado por aquellos que siguen el camino de Satanás. Te suplicamos, querido Padre, que protejas a todos Tus hijos en estos tiempos terribles y haznos suficientemente fuertes para levantarnos y proclamar Tu Santa Palabra en todo momento. Amén.
Oh Jesús, ayúdame, pues soy un pecador extraviado, desamparado y en la oscuridad. Soy débil y me falta valor para buscarte. Dame fuerzas para llamarte ahora y así poder despojarme de la oscuridad dentro de mi alma. Introdúceme en Tu Luz, querido Jesús. Perdóname. Ayúdame a ser íntegro nuevamente y guíame a Tu Amor, Paz y Vida Eterna. Confío completamente en Ti y te pido que me tomes en mente, cuerpo y alma, mientras yo me entrego a Tu Divina Misericordia. Amén.
Oh mi amada Madre de la Salvación, te pido que reces para que me sea dado el Alimento de Vida para que me sustente en esta jornada, y me ayude a salvar a todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que están siendo engañados por falsos ídolos y falsos dioses para que abran sus ojos a la Verdad de la Muerte de Tu Hijo, que murió en la Cruz, para salvar a todos los hijos de Dios y llevar a cada uno a la Vida Eterna. Amén.
Oh mi amadísimo Salvador Jesucristo, acepta mi regalo de oración y sacrificios para ayudar a salvar a mis hermanos y hermanas de la prisión de oscuridad en la que se encuentran. Permíteme ayudar a salvar sus almas. Te suplico que les perdones sus pecados y te pido que inundes sus almas con el Espíritu Santo para que corran hacia Tus Brazos como el refugio que ellos tan desesperadamente necesitan, antes de que se pierdan para siempre. Te ofrezco el regalo de mi entrega por tales almas, en humilde servicio y gratitud. Amén.
Oh querido Jesús, Salvador de la humanidad, a través de Tu Divina Misericordia, suplico clemencia por todas aquellas pobres almas en pecado que puedan ser llevadas de esta Tierra durante El Aviso. Perdónales sus pecados y en memoria de Tu Pasión, te ruego que me concedas este favor especial en expiación por sus pecados. Me ofrezco a Ti, en mente, cuerpo y alma, como una penitencia para salvar sus almas y traerles Vida Eterna. Amén.
Oh amado Jesús, ayúdame a permanecer fiel a Tu Santísima Palabra en todo momento. Dame fuerzas para defender la Verdad de Tu Iglesia ante la adversidad. Cólmame con la Gracia para administrar los Santos Sacramentos de la manera como Tú nos enseñaste. Ayúdame a alimentar a Tu Iglesia con el Pan de Vida y a permanecer fiel a Ti, aun cuando se me prohíba hacerlo. Libérame de la cadena de engaños que se me pudiera presentar, para que pueda proclamar la Verdadera Palabra de Dios. Cubre a todos Tus siervos consagrados, en este tiempo, con Tu Preciosa Sangre, para que permanezcamos valientes, fieles y firmes en nuestra lealtad a Ti, nuestro amado Salvador Jesucristo. Amén.
Por favor, amado Jesús, te pido que mantengas a mis hijos a salvo del rey de las mentiras. Consagro a estos niños (decir sus nombres…) a Tu Sagrado Corazón y te pido que, por medio del manto de Tu Preciosa Sangre, ilumines sus almas y los pongas a salvo en Tus amorosos Brazos para que puedan ser protegidos de todo daño. Te pido que abras sus corazones e inundes sus almas con Tu Santo Espíritu durante la Iluminación de las Conciencias, para que sean limpiados de toda iniquidad. Amén.
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, cúbreme con Tu Santísimo Manto y protege a mi familia de la influencia de Satanás y de sus ángeles caídos. Ayúdame a confiar en la Divina Misericordia de tu amado Hijo, Jesucristo, en todo momento. Presérvame en mi amor por Él y nunca permitas que me aparte de la Verdad de Sus Enseñanzas, sin importar cuántas tentaciones sean colocadas delante de mí. Amén.
Dios, Padre Todopoderoso, acepto Tu Divina Voluntad. Ayuda a Tus hijos a aceptarla. Impide que Satanás prive el derecho que tienen Tus hijos a la herencia de su Padre. Nunca permitas que nos demos por vencidos en la lucha por nuestra herencia en el Paraíso. Escucha nuestras súplicas para desterrar a Satanás y a sus ángeles caídos. Te pido, querido Padre, que purifiques la Tierra con Tu Misericordia y que nos cubras con Tu Santo Espíritu. Guíanos para constituir Tu Santísimo Ejército, provisto con el poder para desterrar por siempre a la bestia. Amén.
Oh querido Jesús, ayuda a Tus siervos consagrados para que reconozcan el cisma que se está desarrollando dentro de Tu Iglesia. Ayuda a Tus siervos consagrados a permanecer firmes y fieles a Tu Santa Palabra. No permitas nunca que las ambiciones mundanas empañen su amor puro hacia Ti. Concédeles la Gracia de permanecer puros y humildes ante Ti y de honrar Tu Santísima Presencia en la Eucaristía. Ayuda y guía a todos aquellos siervos consagrados que pueden ser tibios en su amor por Ti y reaviva el Fuego del Espíritu Santo en sus almas. Ayúdalos a reconocer las tentaciones que se les presentan para distraerlos. Abre sus ojos para que puedan ver la Verdad en todo momento. Bendícelos en estos tiempos, querido Jesús, y cúbrelos con Tu Preciosa Sangre para conservarlos a salvo de todo daño. Dales la fuerza para resistir la seducción de Satanás, en caso de que fueran perturbados por la tentación de negar la existencia del pecado. Amén.
Oh Jesús, salva a los hijos de Dios del anticristo. Protégenos de los planes para controlar la Tierra. Señor, sálvanos de la persecución. A las almas oscuras protégelas del anticristo para que puedan ser redimidas ante Tus Ojos. Ayúdanos en nuestra debilidad. Fortalécenos en espíritu para que nos pongamos de pie y unos a otros nos guiemos, mientras marchamos en Tu Ejército hacia las Puertas del Paraíso. Yo te necesito, querido Jesús. Yo te amo, querido Jesús. Glorifico Tu Presencia en la Tierra. Rechazo la oscuridad. Te adoro y me entrego a Ti, en cuerpo y espíritu, y así puedas revelarme la Verdad de Tu Presencia de modo que yo siempre confíe en Tu Misericordia en todo momento. Amén.
Querido Jesús, estoy dispuesto a propagar Tu Santa Palabra. Dame el valor, la fuerza y el conocimiento para transmitir la Verdad para que tantas almas como sea posible puedan ser llevadas a Ti. Acógeme en Tu Sagrado Corazón y cúbreme con Tu Preciosa Sangre para que sea llenado con las Gracias para propagar la conversión para la Salvación de todos los hijos de Dios en todas partes del mundo, no importando cuál sea su credo. Confío siempre en Ti. Tu amado discípulo. Amén.
Oh Jesús, ayúdame a salvar las almas de la gente joven de todo el mundo. Por tu Gracia, ayúdalos a ver la Verdad de Tu Existencia. Llévalos a Tu Sagrado Corazón y abre sus ojos a Tu Amor y Misericordia. Sálvalos del fuego del Infierno y por medio de mis oraciones ten Misericordia de sus almas. Amén.
Oh Madre de Dios, ayúdame a preparar mi alma para el Don del Espíritu Santo. Llévame de la mano como a un niño, y condúceme en el camino hacia el Don de Discernimiento, por el poder del Espíritu Santo. Abre mi corazón y enséñame a entregarme en cuerpo, mente y alma. Libérame del pecado del orgullo y ruega para que yo sea Perdonado de todos los pecados pasados, para que así mi alma sea purificada y que yo sea sanado, para que pueda recibir el Don del Espíritu Santo. Te doy gracias, Madre de la Salvación, por tu intercesión, y con amor en mi corazón espero por este Don, el cual anhelo con alegría. Amén.
Jesús, te entrego mi dolor y mi sufrimiento por lo que Tú sufriste durante Tu Agonía en el Calvario. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco a Ti. Cada abuso y ataque verbal que sufro, te lo ofrezco en honor a Tu Coronación de Espinas. Cada crítica injusta hacia mí, la ofrezco en honor a Tu humillación frente a Pilato. Cada tormento físico que soporto de manos de otros, te lo ofrezco en honor de Tu Flagelación en la Columna. Cada insulto que sufro, te lo ofrezco en honor de la tortura corporal que sufriste durante la Coronación de Espinas, cuando estas te lisiaron Tu ojo. Cada vez que te imite, cuando transmita Tus Enseñanzas y cuando se burlen de mí en Tu Nombre, permite que te ayude en el camino hacia el Calvario. Ayúdame a estar libre de orgullo, y a nunca tener miedo de admitir que te amo, querido Jesús. Y luego, cuando todo parezca no tener esperanza en mi vida, querido Jesús, ayúdame a ser valiente, recordando cómo Tú voluntariamente permitiste ser crucificado de ese modo vil y cruel. Ayúdame a levantarme y a ser considerado como verdadero cristiano, un verdadero (fiel) soldado en Tu Ejército, humilde y de corazón contrito, en memoria del Sacrificio que Tú hiciste por mí. Toma mi mano, querido Jesús y enséñame cómo mi propio sufrimiento puede inspirar a otros a unirse a Tu Ejército junto con almas simpatizantes que te aman. Ayúdame a aceptar el sufrimiento y a ofrecértelo como una ofrenda para salvar almas en la batalla final contra la tiranía del maligno. Amén.
Jesús, ayúdame a aceptar el Amor de Dios como se me está siendo mostrado. Abre mis ojos, mi mente, mi corazón y mi alma, para que pueda ser salvado. Ayúdame a creer llenando mi corazón con Tu amor. Luego, sujétame y sálvame del tormento de la duda. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial, Dios Creador del hombre, por favor escucha mi oración. Te ruego que salves a Gran Bretaña de las garras del mal y la dictadura. Te pido que nos unas a todos, de todas las religiones, credos y colores como una sola familia ante Tus Ojos. Danos la fuerza para unirnos en oposición de todas las leyes introducidas para proscribir* Tus Enseñanzas. Danos la fuerza y el valor para nunca abandonarte y para ayudar a salvar a todos Tus hijos a través de nuestras oraciones. Congrega a todos mis hermanos y hermanas en unidad para rendir homenaje a Tu Promesa de traernos Vida Eterna y la entrada a Tu Paraíso. Amén. proscribir* = prohibir, excluir el uso o una constumbre.
Oh Jesús, protégeme del poder de Satanás. Llévame a Tu Corazón, mientras que yo me libero de toda mi lealtad a él y a sus malos caminos. Te entrego mi voluntad y vengo ante Ti de rodillas con un corazón humilde y contrito. Dejo mi vida en Tus Santos Brazos. Sálvame del mal. Libérame y llévame a Tu refugio seguro de protección ahora y para siempre. Amén.
Oh querido Jesús, te ruego que derrames Tu Misericordia sobre las almas perdidas. Perdónales su rechazo hacia Ti y utiliza mi oración y sufrimiento, para que así Tú puedas, mediante Tu Misericordia, derramar sobre ellos las Gracias que necesitan para santificar sus almas. Te pido el Don de Clemencia para sus almas. Te pido que abras sus corazones para que vayan a Ti y te pido que los llenes con el Espíritu Santo, para que puedan aceptar la Verdad de Tu Amor y vivir Contigo y con toda la familia de Dios para siempre. Amén.
Oh querido Jesús, te suplico Misericordia para quienes cometen asesinatos. Insto por clemencia para quienes están en pecado mortal. Te ofrezco mi propio sufrimiento y dificultades para que puedas abrir Tu Corazón y les perdones sus pecados. Te pido que cubras con tu Preciosa Sangre a todos aquellos con mala intención en sus almas, para que así ellos puedan ser lavados y purificados de sus iniquidades. Amén.
Oh Pan Celestial, llena mi cuerpo con el nutrimento (sustento) que necesita. Llena mi alma con la Presencia Divina de Jesucristo. Dame las Gracias para cumplir la Santa Voluntad de Dios. Lléname con la paz y la calma que provienen de Tu Sagrada Presencia. Nunca me dejes dudar de Tu Presencia. Ayúdame a aceptarte en Cuerpo y Alma, y que, mediante la Sagrada Eucaristía, las Gracias otorgadas sobre mí me ayuden a proclamar la Gloria de Nuestro Señor Jesucristo. Purifica mi corazón. Abre mi alma y santifícame cuando reciba el Gran Don de la Sagrada Eucaristía. Concédeme las Gracias y los favores otorgados sobre todos los hijos de Dios, y concédeme inmunidad contra las llamas del Purgatorio. Amén.
Jesús, Rey y Salvador del mundo, a Ti prometemos nuestro honor, nuestra lealtad y obras, para proclamar Tu Gloria a todos. Ayúdanos a obtener la fortaleza y la confianza, para levantarnos y declarar la Verdad en todo momento. Nunca nos permitas vacilar o retrasarnos en nuestra marcha hacia la victoria y en nuestro plan de salvar almas. Prometemos nuestra entrega, nuestros corazones y todo lo que poseemos, para que estemos libres de obstáculos, mientras continuamos el espinoso camino hacia las Puertas del Nuevo Paraíso. Te amamos, queridísimo Jesús, nuestro amado Salvador y Redentor. Nos unimos en cuerpo, mente y espíritu dentro de Tu Sagrado Corazón. Derrama sobre nosotros Tu gracia de Protección. Cúbrenos con Tu Preciosa Sangre, para que seamos llenados con valentía y amor para levantarnos y declarar la Verdad de Tu Nuevo Reino. Amén.
Oh querido Padre, Dios Altísimo, nosotros, Tus pobres hijos, nos postramos ante Tu Glorioso Trono en el Cielo. Te rogamos que libres del mal al mundo. Imploramos Tu Misericordia por las almas de aquellos que causan terribles sufrimientos a Tus hijos en la Tierra. Por favor perdónalos. Por favor elimina al anticristo, tan pronto como él se dé a conocer. Te pedimos, querido Señor, que mitigues Tu Mano de Castigo. En cambio, te rogamos que aceptes nuestras oraciones y nuestros sufrimientos, para aliviar los sufrimientos de Tus hijos, en este momento. Confiamos en Ti. Te honramos. Te damos gracias por el gran Sacrificio que hiciste cuando enviaste a Tu único Hijo, Jesucristo, para salvarnos del pecado. Damos la bienvenida a Tu Hijo, una vez más, como el Salvador de la humanidad. Por favor protégenos. Guárdanos del mal. Ayuda a nuestras familias. Ten Misericordia de nosotros. Amén.
Oh amado Jesús, te suplico que ilumines las almas de las elites que gobiernan el mundo. Muéstrales la prueba de Tu Misericordia. Ayúdalos a estar abiertos de corazón y mostrar verdadera humildad, en honor de Tu Gran Sacrificio, por Tu muerte en la Cruz, cuando moriste por sus pecados. Ayúdalos a discernir Quién es su Verdadero Hacedor, Quién es su Creador, y llénalos con las Gracias para ver la Verdad. Por favor, impide que se lleven a cabo sus planes de herir a millones de personas mediante las vacunas, la escasez de alimentos, las adopciones forzadas de niños inocentes y la división de las familias. Sánalos. Cúbrelos con Tu Luz y llévalos al Regazo de Tu Corazón para salvarlos de las acechanzas del maligno. Amén.
Oh querido Jesús, cubre nuestra nación con Tu Más Preciada Protección. Perdona nuestros pecados en contra de los Mandamientos de Dios. Ayuda al pueblo estadounidense a volver a Dios. Abre sus mentes al Verdadero Sendero del Señor. Desbloquea sus corazones endurecidos, a fin de que den la bienvenida a Tu Mano de Misericordia. Ayuda a esta nación a levantarse contra las blasfemias, las cuales puedan ser infligidas a nosotros para obligarnos a negar Tu Presencia. Te rogamos, Jesús, que nos salves, protégenos de todo mal y acoge a nuestro pueblo en Tu Sagrado Corazón. Amén.
Me presento ante Ti confundido, inseguro y frustrado, querido Jesús, porque estoy preocupado acerca de la Verdad que Tú proclamas en Tus Mensajes. Perdóname si te he ofendido. Perdóname si no puedo escucharte. Abre mis ojos para que se me pueda mostrar qué es lo que Tú necesitas que comprenda. Te imploro, que me des el Poder del Espíritu Santo para que me muestre la Verdad. Te amo, querido Jesús, y te ruego que me liberes del tormento de la duda. Ayúdame a responder a Tu llamada. Perdóname si te he ofendido y acércame más a Tu Corazón. Guíame a Tu Nuevo Reino y concédeme el favor de que por medio de mis propias oraciones y sufrimientos, pueda ayudarte a rescatar almas, tan preciosas para Tu Sagrado Corazón. Amén.
Oh Padre, en Nombre de Tu Hijo, sálvanos del comunismo. Sálvanos de la dictadura. Protege nuestra nación contra el paganismo. Salva a nuestros hijos del mal. Ayúdanos a ver la Luz de Dios. Abre nuestros corazones a las Enseñanzas de Tu Hijo. Ayuda a todas las Iglesias a permanecer fieles a la Palabra de Dios. Te suplicamos que mantengas nuestras naciones a salvo de la persecución. Queridísimo Señor, míranos con Misericordia, por mucho que te ofendamos. Jesús, Hijo del Hombre, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre. Sálvanos de las acechanzas del demonio. Te imploramos querido Dios, que intervengas e impidas que el mal devore al mundo en este tiempo. Amén.
Oh Sagrado Corazón de Jesús, muestra Misericordia para todos nosotros pobres pecadores. Ilumina aquellos corazones de piedra, tan desesperados en su búsqueda de orientación. Perdónales sus iniquidades. Ayúdalos, mediante Tu Amor y Misericordia, para que encuentren en su corazón como comprender Tu gran Don de Redención. Te imploro que perdones a todas las almas que rechazan la Verdad de Dios. Cúbrelos con Tu Luz, querido Jesús, para que ella los ciegue a la perversidad y acechanzas del demonio, que tratará de arrancarlos de Ti para siempre. Te suplico que des a todos los hijos de Dios, la fuerza para que estén agradecidos por Tu Gran Misericordia. Pido que abras la Puerta de Tu Reino a todas las almas perdidas que vagan por la Tierra en estado de desamparo y desesperanza. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a mí, un pobre miserable* pecador, a ir a Ti con remordimiento en mi alma. Purifícame de los pecados, que han destruido mi vida. Dame el Don de una nueva vida, libre de las cadenas del pecado, y la libertad, que mis pecados me niegan. Renuévame en la Luz de Tu Misericordia. Acógeme en Tu corazón. Déjame sentir Tu Amor para que pueda volver a acercarme a Ti y que mi amor por Ti sea encendido. Ten misericordia de mí, Jesús, y manténme libre de pecado. Hazme digno de entrar en Tu Nuevo Paraíso. Amén. miserable* = desdichado.
Oh Jesús mío, te ofrezco alabanza y acción de gracias por Tu Gloriosa Segunda Venida. Tú, mi Salvador, naciste para darme Vida Eterna y para liberarme del pecado. Te ofrezco mi amor, mi agradecimiento y mi adoración mientras preparo mi alma para Tu Gran Venida. Amén.
Oh Bendita Madre de la Salvación, protégeme en mi hora de necesidad, cuando sea confrontado con el mal. Ayúdame a defender la Palabra de Dios con fortaleza y valor, sin ningún miedo en mi alma. Ruega para que permanezca leal a las Enseñanzas de Cristo y que pueda entregar mis miedos, mis preocupaciones y mi tristeza, completa y totalmente. Ayúdame, para que pueda caminar adelante, sin temor, en este sendero solitario, con el fin de proclamar la Verdad de la Santa Palabra de Dios, incluso cuando los enemigos de Dios, hagan esta tarea casi imposible. Oh Bendita Madre, te pido que, a través de tu intercesión, la fe de todos los cristianos permanezca fuerte, en todo momento, durante la persecución. Amén.
Oh querido Jesús, te pido por el Don de la Perseverancia. Te ruego que derrames sobre mí las Gracias que necesito para mantener Tu Santísima Palabra. Te pido que me libres de cualquier duda persistente. Te pido que inundes mi alma con amabilidad, paciencia y perseverancia. Ayúdame a permanecer digno cuando sea insultado en Tu Santo Nombre. Hazme fuerte y cúbreme con la Gracia para seguir adelante, incluso cuando esté cansado, falto de fuerza y cuando me enfrente con todas las tribulaciones, que tenemos por delante, mientras trabajo incansablemente para ayudarte a salvar la humanidad. Amén.
Oh mi amado Jesús, Tú estás cerca de mi corazón. Yo soy uno Contigo. Te amo. Te quiero. Déjame sentir Tu Amor. Déjame sentir Tu Dolor. Déjame sentir Tu Presencia. Concédeme la Gracia de la humildad para que yo sea hecho digno de Tu Reino en la Tierra, así como en el Cielo. Concédeme las Lágrimas de Conversión, para que pueda verdaderamente ofrecerme a Ti, como verdadero discípulo, para ayudarte en Tu Misión para salvar cada una de las almas en la Tierra, antes de que vengas otra vez a juzgar a los vivos y a los muertos. Amén.
Oh querido Jesús, me postro delante de Ti, cansado, enfermo, con dolor y con anhelo de oír Tu Voz. Déjame ser tocado por Tu Divina Presencia, para que sea inundado por Tu Divina Luz a través de mi mente, cuerpo y alma. Yo confío en Tu Misericordia. Entrego mi dolor y sufrimiento completamente delante de Ti y pido que me des la Gracia de confiar en Ti, para que puedas curarme de este dolor y oscuridad, para que yo pueda llegar a estar sano de nuevo y así, pueda seguir el Sendero de la Verdad y permitirte que me conduzcas a la vida en el Nuevo Paraíso. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en mi ayuda, mientras lucho por encontrar tiempo para la oración. Ayúdame a darle, a tu amado Hijo, Jesucristo, el tiempo que Él merece para mostrarle cuánto lo amo. Pido que tú, mi Bendita Madre de la Salvación, solicites para mí las Gracias que necesito y pidas a tu querido Hijo toda gracia y favor, para que Él pueda envolverme dentro del Seno* de Su Sagrado Corazón. Amén. Seno* = parte interna de algo / Regazo = quien recibe alguien o algo dándole amparo, protección o consuelo.
Oh mi queridísimo Jesús, por favor bendícenos y protégenos, Tu Grupo de Cruzada de Oración, para que seamos inmunes a los perversos asaltos del demonio y a cualquier espíritu maligno, que pueda atormentarnos en esta Sagrada Misión para salvar almas. Que podamos permanecer leales y fuertes, mientras perseveramos para mantener Tu Santo Nombre ante el mundo y nunca desistir en nuestra lucha para difundir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
Oh amada Madre de la Salvación, te imploro que unas, a través de tus oraciones, a todo el Ejército Remanente de Dios, en todo el mundo. Cubre todos los Grupos de Cruzada de Oración con la Gracia de Salvación, derramada sobre nosotros, a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Envía a tus ángeles para que cubran a cada uno de nosotros y especialmente a aquellos sacerdotes que dirigen los Grupos de Cruzada de Oración. Ayúdanos a evitar las distracciones, las cuales causan división entre nosotros, y protégenos con el Don de la Armadura, para que nos volvamos inmunes a los ataques que tendremos que soportar, debido a nuestro amor a Jesucristo, en esta Santa Misión para salvar almas. Amén.
Oh mi Bienaventurada Madre de la Salvación, por favor pide a tu Hijo que derrame Sus Gracias y Amor sobre aquellos líderes que controlan el mundo. Ruega para que la Luz de Dios les cure la ceguera y desatranque sus corazones de piedra. Detenlos para que dejen de infligir la persecución a personas inocentes. Por favor ruega para que Jesús los guíe, y los detenga para que no impidan que la Verdad de Sus Enseñanzas se propague a las naciones, en todo el mundo. Amén.
Oh Dios Padre Todopoderoso, en el Nombre de Tu amado Hijo, Jesucristo, ten Misericordia de todos tus hijos en Australia y Nueva Zelanda. Perdónanos por nuestro rechazo a Tu Santa Palabra. Perdónanos por el pecado de la indiferencia. Líbranos de nuestra cultura pagana y cúbrenos con las Gracias para inspirar esperanza, fe y caridad, entre nuestros hermanos y hermanas. Te rogamos por el Don del Discernimiento y te pedimos que nos concedas a todos nosotros las Bendiciones que necesitamos para asegurar que solo la Verdad de Tu Santa Palabra pueda ser escuchada, para que a todas las almas se les otorguen las llaves de la Vida Eterna. Amén.
Oh querido Jesús, te rogamos por las habilidades para sobrevivir a las pruebas que ahora enfrentamos, ya que el último Papa verdadero termina su Misión para Ti. Ayúdanos a soportar el terrible abuso que ahora tendremos que enfrentar a causa de la caída de la Iglesia, que una vez conocimos. Nunca dejes que nos apartemos de la Verdad de Tu Palabra Divina. Ayúdanos a permanecer en silencio cuando los ataques sean colocados sobre nuestros hombros para convencernos a darte la espalda, a Ti, y a los Sacramentos que diste al mundo. Cubre a Tu Ejército con el poderoso Amor que necesitamos, como un escudo, para protegernos contra el falso profeta y el anticristo. Ayuda a Tu Iglesia en la Tierra a que se extienda y multiplique, para que pueda adherirse a la Verdad y ayudarte a guiar a nuestros hermanos y hermanas en el Sendero de la Verdad para que nos preparemos, adecuadamente, para Tu Segunda Venida. Amén.
Oh querido Padre Todopoderoso, Creador de todo lo que Es y Será, ayúdanos a todos los que podemos reconocer la Presencia de Tu amado Hijo, hoy día en la Iglesia, a ser muy fuertes. Ayúdame a superar mi miedo, mi soledad y el rechazo que sufro de mis seres queridos, mientras sigo a Tu Hijo, Jesucristo, mi Salvador. Por favor, protege a mis seres queridos de caer en la trampa de creer en las mentiras, las cuales han sido diseñadas por Satanás para destruir, dividir y causar estragos entre todos los hijos de Dios. Por favor, ayuda a todos aquellos que siguen la abominación en Tu Iglesia, a que se salven del fuego eterno del infierno. Amén.
Queridísimo Jesús, cuando esté deprimido, levántame. Cuando dude, ilumíname. Cuando esté afligido, muéstrame Tu Amor. Cuando critique, ayúdame a permanecer en silencio. Cuando juzgue a otro públicamente, sella mis labios. Cuando profiera blasfemias, en Tu Nombre, redímeme y tráeme de vuelta a Tu protección. Cuando me falte valor, dame la espada que necesito para hacer batalla (luchar) y salvar las almas que deseas. Cuando me resista a Tu Amor, ayúdame a rendirme y abandonarme, completamente, dentro de Tu Amoroso cuidado. Cuando me aleje, ayúdame a encontrar el Camino de la Verdad. Cuando ponga en duda Tu Palabra, dame las respuestas que busco. Ayúdame a ser paciente, amoroso y amable, incluso con los que te maldigan. Ayúdame a Perdonar a los que me ofenden y dame la Gracia que necesito para seguirte hasta los confines de la Tierra. Amén.
"Aquí está la Cruzada de Oración para vosotros si deseáis compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recitad esto, tres veces, cuando podáis, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno:"
Me postro delante de Ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos. Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento. Acepta esta ofrenda de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza. Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor. Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y pon mi alma en unión Contigo. A través de mi ofrenda de sufrimiento, dejo a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y unir a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén.
Queridísimo Jesús te presento el alma de (nombre del alma), que ha abandonado su alma a Satanás. Toma esta alma y redímela ante Tus Santos Ojos. Libera esta alma de la esclavitud de la bestia y tráele salvación eterna. Amén.
Oh, mi queridísimo Jesús, con mi amor por Ti, por favor acepta mi alma en unión Contigo. Toma mi alma, cúbrela con Tu Espíritu Santo, y ayúdame, a través de esta Oración, a salvar a todos aquellos con los que tenga contacto. Envuelve cada alma que encuentre con Tu Santa Misericordia y ofréceles la salvación necesaria para entrar a Tu Reino. Oye mis oraciones. Escucha mis súplicas y a través de Tu Misericordia, salva las almas de la humanidad entera. Amén.
Querido Jesús, toma bajo Tu protección las almas de estos hijos de Dios que no te conocen, que no reconocen Tu Amor y que no aceptan Tu Promesa. Vierte Tu Gracia de Conversión y dales Vida Eterna. Se misericordioso con todos aquellos quienes no creen en Tu Presencia y que no intentarán el arrepentimiento por sus pecados. Amén.
Soy un terrible pecador, Jesús. Por mis acciones, he causado sufrimiento desesperado a otros. Soy rechazado como resultado. Ya no soy tolerado en la Tierra en ninguna parte. Rescátame de este desierto y salvaguárdame de las garras del mal. Permite que me arrepienta. Acepta mi remordimiento. Lléname de Tu Fuerza y ayúdame a levantarme de las profundidades de la desesperación. Entrego a Ti, querido Jesús, mi libre albedrío, para que hagas en mí lo que quieras, y así pueda ser salvado del fuego del Infierno. Amén.
Jesús, ayúdame a encontrar la valentía, el coraje y el nervio, para ponerme de pie y ser considerado, y así pueda ingresar a Tu Ejército Remanente y subir el mismo monte Calvario, el cual tuviste que soportar por mis pecados. Dame la fuerza para llevar Tu Cruz y Tu carga, para que pueda ayudarte a salvar almas. Líbrame de mis debilidades. Disipa mis miedos. Aplasta todas mis dudas. Abre mis ojos a la Verdad. Ayúdame, y ayuda a todos aquellos quienes respondan la Llamada para llevar Tu Cruz, para seguirte con un ferviente y humilde corazón y que por medio de mi ejemplo, otros se armen de valor para que hagan lo mismo. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, ayúdame a confiar en Ti. A confiar en Tu Promesa de volver otra vez. A aceptar la Verdad de Tu Segunda Venida. A confiar en la Promesa de Dios Padre cuando dijo que te daría Tu Reino. Ayúdame a confiar en Tus Enseñanzas, en Tu Plan para salvar al mundo. Ayúdame a aceptar, con Gracia, Tus Dones. Ayúdame a confiar en Ti, para que pierda mi temor y así pueda dejar a Tu Amor inundar mi corazón y mi alma. Amén.
Oh mi queridísimo Jesús, te suplico que me mantengas fuerte y valiente, para que pueda defender la Verdad en Tu Santísimo Nombre. Dame la Gracia que necesito, lo imploro - para dar testimonio de Tu Santa Palabra en todo momento. Permíteme resistir las presiones para promover falsedades, cuando sé en mi corazón que te ofenden. Ayúdame a permanecer fiel a Tu Santa Palabra, hasta el día que muera. Amén.
Oh querida Madre de la Salvación, consagro a mis hijos (nombre del hijo/de los hijos aquí) ante tu Hijo, para que Él pueda traerles paz de espíritu y amor de corazón. Por favor reza para que mis hijos sean aceptados dentro de los Brazos Misericordiosos de tu Hijo y protégelos del mal. Ayúdalos a permanecer fieles a la Santa Palabra de Dios, especialmente en los momentos cuando sean tentados a alejarse de Él. Amén.
Queridísimo Jesús, recurro a Ti para que cubras con Tu especial Gracia de Salvación, las almas de aquellos quienes han sido infestados por Satanás. Libera sus pobres almas del cautiverio malvado del cual ellos no pueden escapar. Amén.
Oh Madre de la Salvación, ven en medio de nosotros y cubre nuestra tierra con tu protección. Aplasta la cabeza de la bestia y acaba con su perversa influencia entre nosotros. Ayuda a tus pobres hijos perdidos a levantarse y decir la Verdad, cuando estemos rodeados de mentiras. Por favor, Oh Madre de Dios, protege nuestra tierra y mantennos fuertes, para que podamos permanecer fieles a Tu Hijo en nuestro tiempo de persecución. Amén.
Señor Mío, abre mis ojos. Permíteme ver al enemigo y cierra mi corazón al engaño. Te entrego todo a Ti, querido Jesús. Confío en Tu Misericordia. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, cubre mi alma con tus Lágrimas de Salvación. Líbrame de dudas. Levanta mi corazón, para que sienta la Presencia de tu Hijo. Tráeme paz y consuelo. Ruega para que verdaderamente yo sea convertido. Ayúdame a aceptar la Verdad y a abrir mi corazón para recibir la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Amén.
Querido Jesús, ayúdame. Me estoy ahogando en lágrimas de dolor. Mi corazón está confundido. No sé en quién puedo confiar. Por favor lléname con Tu Espíritu Santo, para que yo pueda elegir el sendero correcto hacia Tu Reino. Ayúdame, querido Jesús, a permanecer siempre fiel a Tu Palabra, dada al mundo por Pedro y a nunca desviarme de lo que Tú nos enseñaste o nunca negar Tu muerte en la Cruz. Jesús, Tú eres el Camino. Muéstrame el Camino. Sostenme y llévame sobre Tu camino de Gran Misericordia. Amén.
Queridísimo Jesús, yo consagro las almas de (nombrarlos aquí) y todos aquellos que intercambiaron sus almas por el precio de la fama. Líbralos de su infestación. Aléjalos de la amenaza de los Illuminati, quienes los devoran. Dales el valor de alejarse, sin temor, de esta esclativud malvada. Tómalos en Tus Brazos de Misericordia y nútrelos para devolverlos a un Estado de Gracia, para que sean dignos de presentarse ante Ti. Por Tu Divinidad, ayúdame a través de esta oración, por las almas adoptadas de Satanás, para sacarlas de la masonería. Libéralas de los grilletes que las atan y que resultan en una terrible tortura en las cámaras del Infierno. Ayúdalas, a través del sufrimiento de las almas elegidas, a través de mis oraciones y a través de Tu Misericordia, a estar en primera línea, dispuestas para entrar por las Puertas de la Nueva Era de Paz - el Nuevo Paraíso. Te ruego que las liberes del cautiverio. Amén.
Querido Jesús, clamo a Tu Misericordia por la generación perdida de almas jóvenes. Por aquellos que no te conocen, cúbrelos con el Don de la vista*. Aquellos que sí te conocen, pero quienes te ignoran, atráelos de regreso dentro de Tu Misericordia. Por favor dales pronto la prueba de Tu existencia y guíalos hacia aquellos quienes pueden ayudarlos y guiarlos hacia la Verdad. Llena sus mentes y almas con el anhelo por Ti. Ayúdalos a reconocer el vacío, el cual existe en ellos porque no sienten Tu Presencia. Te ruego, querido Señor, que no los abandones y en Tu Misericordia concédeles Vida Eterna. Amén. vista* = En este caso para que ellos Lo vean o Lo reconozcan.
Jesús ayúdame, estoy tan confundido. Mi corazón no se abre a Ti. Mis ojos no pueden verte. Mi mente te bloquea. Mi boca no puede pronunciar palabras para consolarte. Mi alma está nublada con oscuridad. Por favor, ten piedad de mí, un pobre pecador. Me siento desamparado, sin Tu Presencia. Lléname con Tus Gracias, para que tenga el valor para buscarte, para suplicarte por Misericordia. Ayúdame, a Tu discípulo perdido, quien te ama, pero quien ya no siente que el amor se avive en mi corazón, para ver y aceptar la Verdad. Amén.
Oh mi dulce Jesús, quita las guerras que destruyen a la humanidad. Protege a los inocentes del sufrimiento. Protege a las almas que tratan de lograr la verdadera paz. Abre los corazones de aquellos afectados por el dolor de la guerra. Protege a los jóvenes y vulnerables. Salva todas las almas cuyas vidas sean destruidas por la guerra. Fortalécenos a todos, querido Jesús, quienes rezamos por las almas de todos los hijos de Dios y concédenos la Gracia para soportar el sufrimiento, el que nos puede ser dado durante tiempos de conflicto. Te suplicamos que detengas la propagación de la guerra y que traigas almas al Refugio Sagrado de Tu Corazón. Amén.
Estamos unidos a Tu Sagrado Corazón, querido Jesús. Hablamos con autoridad la Verdadera Palabra de Dios. Caminaremos hasta los confines de la Tierra para difundir la Verdad. Nunca aceptaremos ninguna nueva doctrina falsa en Tu nombre, que no sea la que Tú Mismo nos enseñaste. Nos mantenemos fieles, leales y firmes en nuestra fe. Trataremos a aquellos que te traicionan con amor y compasión, en la esperanza de que volverán a Ti. Seremos firmes, pero pacientes, con aquellos que nos persiguen en Tu Nombre. Caminaremos victoriosos todo el camino a Tu Nuevo Paraíso. Prometemos, que a través de nuestro dolor y sufrimiento, te traeremos todas aquellas almas perdidas que están hambrientas de Tu Amor. Por favor, acepta nuestras oraciones por todos los pecadores en el mundo, para que podamos llegar a ser una sola familia, unida en amor por Ti, en la Nueva Era de Paz. Amén.
Querido Jesús, te pido que me consagres a mí, a mi familia, amigos y nación a la Protección de Tu Preciosa Sangre. Moriste por mí y Tus heridas son mis heridas porque acepto con dignidad el sufrimiento, el cual soportaré al aproximarse Tu Segunda Venida. Sufro Contigo querido Jesús mientras tratas de reunir a todos los hijos de Dios en Tu Corazón, para que tengamos Vida Eterna. Cúbreme y cubre con tu Preciosa Sangre a todos aquellos que necesitan Tu Protección. Amén.
Mi queridísimo Jesús, escucha esta oración de mí, un alma muy indigna y ayúdame a amarte más. Por mi libre voluntad, te ofrezco este Regalo de regreso, querido Jesús, para que pueda convertirme en Tu humilde servidor y permanecer obediente a la Voluntad de Dios. Mi voluntad es Tu Voluntad. Tu Mandato significa que soy obediente a todos Tus deseos. Mi libre albedrío es Tuyo para hacer con él lo que sea necesario para salvar a todas las personas, en todo el mundo, quienes estén separadas de Ti. Otorgo este Regalo, el cual me fue dado al nacer, a Tu Santísimo Servicio. Amén.
Oh Dios, mi Padre Misericordioso, Creador de todo lo que es, escucha mi súplica por la libertad. Libérame de las cadenas de la esclavitud y protégeme de la malvada persecución. Ayúdame a discernir la Verdad y ven en mi ayuda, incluso si estoy confundido y puede que dude de Tu Palabra. Perdóname si te ofendo y llévame hacia el Refugio de Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdame, un humilde siervo de Dios, a defender Su Santísima Palabra en tiempos de tormento. Conságrame querida Madre, a tu Hijo, para que Él pueda cubrirme con Su Preciosa Sangre. Concédeme, por la intercesión de tu Hijo, Jesucristo, la Gracia, la fortaleza y la voluntad para permanecer fiel a las Enseñanzas de Cristo en los tiempos de Tribulación, los cuales devorarán Su Santísima Iglesia en la Tierra. Amén.
Querido Jesús, ayúdame a soportar cualquier tipo de persecución en Tu Santo Nombre. Ayuda a aquellos que caen en el error, en la creencia de que ellos dan testimonio de Tu Obra. Abre los ojos de todos aquellos que puedan estar tentados a destruir a otros, a través de actos, hechos o gestos malvados. Protégeme contra los enemigos de Dios, que se levantarán para tratar de silenciar Tu Palabra y quienes tratarán de desterrarte. Ayúdame a Perdonar a aquellos que te traicionan y dame la Gracia de permanecer firme en mi amor por Ti. Ayúdame a vivir la Verdad, que nos enseñaste y a permanecer bajo Tu protección, por siempre. Amén.
Oh, Jesús, prepárame para que pueda llegar ante Ti sin avergonzarme. Ayúdame y ayuda a mis seres queridos (nombrarlos aquí...) para que nos preparemos a confesar todas nuestras malas acciones. A admitir nuestras deficiencias. A pedir por el perdón de todos los pecados. A mostrar amor a aquellos a quienes hemos ofendido. A rogar por Misericordia para la salvación. A que nos humillemos ante Ti, para que en el Día de la Gran Iluminación, mi conciencia, y la de aquellos (nombrarlos aquí...) estén limpias y que Tú inundes nuestras almas con Tu Divina Misericordia. Amén.
Querido Jesús, ayúdanos, a Tus discípulos amados, para reunir al mundo en Tus brazos y presentarte las almas que están más necesitadas de Tu Gran Misericordia. Refuérzanos (fortalécenos) con el Don del Espíritu Santo para asegurar que la llama de la Verdad envuelva a todos los que se han separado de Ti. Une a todos los pecadores, para que a cada uno le sea dada toda oportunidad de reconciliación. Danos a todos la fuerza para permanecer firmes a Tu Santa Palabra, cuando seamos obligados a rechazar la Verdad, que se ha proclamado al mundo a través de los Santísimos Evangelios. Permanecemos en Ti, Contigo y por Ti, a cada paso de este, nuestro trayecto a la salvación. Amén.
Oh Dios, por favor lléname con Tu Amor. Ayúdame a compartir el Don del Amor con todos aquellos que necesitan de Tu Misericordia. Ayúdame a amarte más. Ayúdame a amar a todos aquellos que necesitan de Tu Amor. Ayúdame a amar a Tus enemigos. Permite que el Amor con el que me Bendices sea utilizado para envolver los corazones de todos los que entren en contacto conmigo. Con el Amor, que Tú infundes en mi alma, ayúdame a vencer todo mal, convertir almas y derrotar al diablo y a todos aquellos agentes malvados suyos, que tratan de destruir la Verdad de Tu Santa Palabra. Amén.
"Esta Novena debe rezarse una vez al mes desde ahora en adelante, durante una semana, comenzando un lunes, en el horario de la mañana. Recitarla tres veces cada mañana durante cada uno de los siete días, y en uno de estos días debéis ayunar. Este es un día de ayuno adicional requerido cada mes."
Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo. Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás. Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que lo rechazan, que lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos. Te imploramos Madre querida, que ruegues por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.
¡Oh, mi querida Madre de la Salvación!, por favor pide a tu Hijo, Jesucristo, le conceda Misericordia a (decir todos los nombres aquí...) durante el Aviso y de nuevo en el Día final, antes de que lleguen ante tu Hijo. Por favor, pide para que cada uno de ellos sean salvados y disfruten de los frutos de la Vida Eterna. Protégelos, todos los días, y llévalos a tu Hijo, para que Su Presencia se muestre a ellos y les sea concedida la paz del espíritu y alcancen grandes Gracias. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, acude en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, al Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimina todos los obstáculos en nuestra Misión para salvar almas. Amén.
Querido Jesús, perdóname, un alma distanciada, que renunció a Ti porque estaba ciego. Perdóname por reemplazar Tu Amor con cosas inútiles que no significan nada. Ayúdame a armarme de valor para caminar a Tu Lado, y aceptar con gratitud Tu Amor y Misericordia. Ayúdame a permanecer cerca de Tu Sagrado Corazón y nunca volver a desviarme de Ti. Amén.
Oh Dios el Altísimo, ayúdame a creer en Tu Existencia. Echa todas mis dudas a un lado. Abre mis ojos a la Verdad de la vida después de esta vida y guíame hacia el camino a la Vida Eterna. Por favor déjame sentir Tu Presencia y concédeme el Don de la Verdadera Fe antes del día que yo muera. Amén.
Oh, Amada Madre de la Salvación, ayúdame en mi momento de necesidad. Ruega para que sea bendecido con los Dones derramados por el Poder del Espíritu Santo sobre mi indigna alma, para defender en todo momento la Verdad. Sostenme en cada suceso, donde se me pida negar la Verdad, la Palabra de Dios, los Sagrados Sacramentos y la Sacratísima Eucaristía.
Ayúdame a utilizar las Gracias que reciba para permanecer firme contra la perversidad de Satanás y la de todas aquellas pobres almas que él utiliza para deshonrar a tu Hijo, Jesucristo. Ayúdame en mi hora de necesidad. Por el bien de las almas, dame el valor de proveer los Sacramentos a cada hijo de Dios, cuando, por los enemigos de Dios me sea prohibido hacerlo. Amén.
Queridísimo Jesús, ayúdame a escuchar Tu Palabra. Vivir Tu Palabra. Hablar Tu Palabra. Impartir Tu Palabra. Dame las fuerzas para defender la Verdad, incluso cuando sea perseguido por ello. Ayúdame a mantener viva Tu Palabra, cuando ella sea ahogada por Tus enemigos.
Déjame sentir Tu Coraje (Valentía) cuando esté decaído. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Dame la Gracia de permanecer digno para permanecer fiel a Tu Santísima Voluntad, cuando las puertas del Infierno prevalezcan* contra mí. Amén.
prevalezcan* = se impongan / crezcan y aumenten.
"Cuando encontréis que comenzáis a dudar de Dios o a perder la confianza en Su Amor o en Su Promesa, entonces debéis recitar esta Cruzada de Oración, que será conocida como la Oración de Renovación:"
Oh, Dios Todopoderoso, oh Dios Altísimo, mira hacia mí, Tu humilde servidor, con amor y compasión en Tu corazón. Renuévame en Tu Luz. Levántame de nuevo en Tu favor*. Lléname de la Gracia, para que me pueda ofrecer a Ti en humilde servidumbre y en conformidad con Tu Santísima Voluntad. Líbrame del pecado de orgullo y de todo lo que te insulta y ayúdame a amarte con un profundo y permanente deseo de estar a tu servicio todos mis días, por siempre y para siempre. Amén. favor*=benevolencia
Oh, Madre de la Salvación, protégeme contra todo tipo de odio. Ayúdame a permanecer en silencio, cuando sea confrontado por el odio. Mantenme fuerte en mi lealtad a Jesucristo, cuando me encuentre más débil. Sella mis labios. Ayúdame a darle la espalda a aquellos que me involucren con palabras, las cuales nieguen las Enseñanzas de tu Hijo, o a los que se mofan de mí por mi fe. Ruega por estas almas, querida Madre, para que así ellos renuncien a Satanás y sientan la paz de tu amor y el Reinado del Espíritu Santo, dentro de sus almas. Amén.
Querido Jesús, protégeme de la maldad del diablo. Cúbreme a mí y cubre a todos aquellos que son débiles e indefensos en su presencia, con Tu Preciosa Sangre. Todos los días dame el valor para rechazarlo, y ayúdame a evitar cualquier intento por parte de él para involucrarme de alguna manera. Amén.
"Os prometo, queridos hijos, que Yo voy a aliviar vuestro dolor, vuestra tristeza y vuestro miedo, legándoos poderosas Gracias y Bendiciones. Estaréis protegidos por el círculo de mi Jerarquía de Ángeles. Para pedirme que disuelva vuestro miedo y tristeza, y os conceda la libertad frente a la persecución, por favor recitad esta oración:"
Queridísimo Padre, Dios de toda la Creación, Dios Altísimo, concédeme la Gracia y la Protección a través de Tu Jerarquía de Ángeles. Permíteme enfocarme en Tu Amor por cada uno de Tus hijos, no importa de qué manera te ofendan. Ayúdame a difundir la noticia del Pacto Final, para preparar al mundo para la Segunda Venida de Jesucristo, sin temor en mi corazón. Concédeme Tus Gracias especiales y Bendiciones para levantarme por encima de la persecución, infligida en mí por Satanás, sus demonios y sus agentes en la Tierra. Nunca me permitas temer a Tus enemigos. Dame la fuerza para amar a mis enemigos, y a aquellos que me persigan en el Nombre de Dios. Amén.
Querido Jesús, defiéndeme en mi batalla para permanecer fiel a Tu Palabra a cualquier costo. Salvaguárdame de Tus enemigos. Protégeme de aquellos que me persigan por Tu causa. Comparte mi dolor. Alivia mi sufrimiento. Levántame a la Luz de Tu Rostro, hasta el Día en que Tú vengas de nuevo para traer Salvación Eterna al mundo. Perdona a aquellos que me persiguen. Utiliza mi sufrimiento para expiar sus pecados, para que así ellos puedan encontrar la paz en sus corazones y darte la bienvenida a Ti con remordimiento en sus almas en el último Día. Amén.
"Si tenéis que hacer frente a la muerte, o si un ser amado tiene que enfrentar la muerte, entonces siempre recurrid a Mí, vuestro Jesús, por ayuda. Mi Misericordia se extiende especialmente a las almas que están afrontando la muerte, pero que no creen en Mí, cuando digan esta oración tres veces al día, en sus últimos días:"
Mi queridísimo Jesús, Perdona mis pecados. Limpia mi alma y prepárame para entrar a Tu Reino. Concédeme las Gracias para prepararme para mi unificación Contigo. Ayúdame a vencer cualquier miedo. Concédeme la valentía para preparar mi mente y mi alma, de modo que sea yo digno de estar frente a Ti. Te amo. Yo confío en Ti. Yo mismo me doy a Ti en cuerpo, mente y alma por la eternidad. Que Tu Voluntad sea la mía y líbrame del dolor, dudas o confusión. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, protege esta Misión, un Regalo de Dios, para traer Vida Eterna a todos Sus hijos en todas partes. Por favor intervén, en nuestro nombre, a través de tu Hijo amado, Jesucristo, para que nos dé la valentía para llevar a cabo nuestros deberes* para servir a Dios en todo momento y especialmente cuando sufrimos a causa de esto.
Ayuda a esta Misión para convertir muchos miles de millones de almas, de acuerdo a la Divina Voluntad de Dios y para transformar esos corazones de piedra en amorosos servidores de tu Hijo. Danos a todos, los que estamos al servicio de Jesús en esta Misión, la fuerza para superar el odio y la persecución de la Cruz y para acoger el sufrimiento que viene con ello, con generosidad de corazón, y con la aceptación total de lo que pueda venir adelante. Amén.
deberes* = responsabilidades.
Oh Madre de la Salvación, por favor intercede en nombre de las almas de los Cristianos de todo el mundo. Por favor ayúdales a preservar su fe y a permanecer fieles a las Enseñanzas de Jesucristo. Ruega para que ellos tengan la fuerza de mente y espíritu para defender su fe en todo momento.
Intercede, querida Madre, a su favor, para que se abran sus ojos a la Verdad y para que se les dé la Gracia de discernir en toda doctrina falsa, presentada a ellos en el Nombre de tu Hijo. Ayúdalos a que permanezcan verdaderos y fieles servidores de Dios y a que renuncien al mal y a las mentiras, incluso si tienen que sufrir el dolor y el ridículo por ello. Oh Madre de la Salvación, protege a todos tus hijos y ruega para que cada Cristiano quiera seguir el camino del Señor hasta su último aliento. Amén.
"Yo os prometo a todos vosotros que difundiré el Regalo de Mi Amor, a través de esta Misión. Mi Amor será una característica distintiva, y todos aquellos que respondan a Mi Llamada, serán envueltos con Mi Amor, cuando reciten esta Cruzada de Oración:"
Queridísimo Jesús, lléname a mí, un recipiente vacío, con el Don de Tu Amor. Inunda mi alma con Tu Presencia. Ayúdame a amar a los demás así como Tú me amas. Ayúdame a ser un recipiente de Tu Paz, de Tu Tranquilidad y de Tu Misericordia. Abre mi corazón siempre a la difícil situación de los demás, y dame la Gracia para Perdonar a aquellos que te rechazan y a quienes me transgreden. Ayúdame a proclamar Tu Amor a través del ejemplo, tal como Tú lo harías, si estuvieras en mi lugar. Amén.
Querida Madre de la Salvación, protégeme con la Gracia de protección contra los engaños, creados por Satanás para destruir la fe de los Cristianos.
Protégenos contra aquellos que son los enemigos de Dios. Mantennos a salvo de las mentiras y la herejía, usadas para debilitar nuestro amor por tu Hijo. Abre nuestros ojos a las falsedades, engaños y a todo intento que podamos encontrar que nos anime a negar la Verdad. Amén.
Oh Dios, mi Padre Eterno, te pido que muestres Misericordia para aquellos que niegan a Tu Hijo. Te ruego por las almas de aquellos que tratan de destruir a Tus profetas.
Te ruego por la conversión de las almas, que se extravían de Ti y te pido que ayudes a todos Tus hijos a preparar sus almas y a enmendar sus vidas, de acuerdo a Tu Divina Voluntad, en espera de la Segunda Venida de Tu amado Hijo, Jesucristo. Amén.
"Venid a Mí hoy y llamadme para que Yo os ayude, sin importar cuantos temores podáis tener. Recitad esta especial Oración cada vez que estéis en apuros y Yo responderé en todo momento."
Oh, mi Jesús, ayúdame en mis momentos de gran aflicción. Tómame en Tus Brazos y llévame al Refugio de tu Corazón. Enjuga mis lágrimas. Calma mis decisiones. Levanta mi espíritu y lléname de Tu Paz. Por favor, concédeme esta petición especial (mencionarla aquí...) Ven en mi ayuda, para que mi petición sea contestada, y que mi vida pueda volver a estar en paz y en unión Contigo, querido Señor. Si mi petición no puede ser concedida, lléname entonces con las Gracias para aceptar que Tu Santa Voluntad es por el bien de mi alma y que yo permanezca fiel a Tu Palabra, por siempre, con un cálido y agradecido corazón. Amén.
Oh Jesús, lléname con el Amor de Dios. Lléname con Tu Divina Luz e inúndame con el amor que necesito para extender la semilla de la Misericordia de Dios entre todas las naciones.
Permite que Tu Amor Divino sea expandido por mí entre todos aquellos con quienes entro en contacto. Extiende Tu Amor, para que se pose sobre todas las almas, todas las religiones, todos los credos, todas las naciones - como una bruma que cautive a todos los hijos de Dios en unidad.
Ayúdanos a difundir el Amor de Dios, para que éste pueda derrotar y derrote todo el mal en el mundo. Amén.
Querido Jesús, te pido que salves a todos los que, por causas ajenas a ellos, se niegan a reconocerte. Ofrezco a Ti mi sufrimiento para traerte las almas de aquellos que te rechazan y por la Misericordia que Tú derramarás sobre el mundo entero. Ten piedad de sus almas. Llévalos a Tu Refugio Celestial y perdónales sus pecados. Amén.
Oh, Madre de Dios, Inmaculado Corazón de María, Madre de la Salvación, ruega para que permanezcamos fieles a la Verdadera Palabra de Dios en todo momento. Prepáranos para defender la Fe, para respaldar la Verdad y rechazar la herejía.
Protege a todos tus hijos en tiempos de dificultad y da a cada uno de nosotros las Gracias para ser valientes cuando seamos desafiados a rechazar la Verdad y renunciar a tu Hijo. Ruega, Santa Madre de Dios, para que se nos dé la Divina Intervención para permanecer Cristianos, de acuerdo con la Santa Palabra de Dios. Amén.
Querido Jesús, ayúdame en mi hora de desamparo*. Libérame del pecado y abre mis ojos, mi corazón y mi alma contra el engaño del demonio y sus perversas manipulaciones. Lléname de Tu Amor cuando sienta odio en mi corazón. Lléname de Tu Paz cuando me sienta afligido. Lléname de Tu Fuerza cuando esté débil. Sálvame de la prisión en la que me encuentro, para que así pueda ser libre y sea sostenido a salvo en Tus Sagrados Brazos. Amén. desamparo* = abandono, falta de ayuda o favor, cuando no se sabe qué hacer...
Oh Madre de Dios, Madre de la Salvación, te pido que consagres las almas de estos niños (nombrarlos aquí...) y que los presentes ante tu amado Hijo. Ruega para que Jesús, a través del Poder de Su Preciosa Sangre, cubra y proteja estas pequeñas almas con todo tipo de protección contra el mal. Yo te pido, querida Madre, protege a mi familia en los momentos de grandes dificultades y que tu Hijo mire favorablemente mi petición para unir a mi familia en una sola con Cristo y nos conceda la Salvación Eterna. Amén.
"Declaro este día, 4 de junio de 2014, como la Festividad de la Madre de la Salvación. En este día, cuando recitéis esta oración, voy a interceder en nombre de todas las almas por el Don de la Salvación, especialmente por aquellos que están en gran oscuridad espiritual del alma:"
Oh, Madre de la Salvación, pongo delante de ti hoy en este día, 4 de junio, en la Festividad de la Madre de la Salvación, las siguientes almas: (lista de nombres) Por favor, dame a mí y a todos los que te honran, querida Madre, y a quienes distribuyen la Medalla de Salvación, toda protección contra el maligno y también para todos los que rechazan la Misericordia de tu Hijo amado, Jesucristo, y todos los Dones que Él transmite a la humanidad. Ruega, querida Madre, para que se otorgue a todas las almas el Don de la Salvación Eterna. Amén.
"Yo os pido, queridos hijos, orar por todos aquellos que dedican su vida a la llamada de Dios y por esta Misión. Esta Oración debe decirse por todos los profetas, visionarios y santos siervos de Dios, para que continúen sirviéndolo mientras Él cumple el Pacto Final:"
Oh, queridísima Madre de la Salvación, escucha nuestra llamada para la protección de la Misión de Salvación y para la protección de los hijos de Dios. Oramos por aquellos que desafían la Voluntad de Dios en este gran momento de la historia. Te pedimos que protejas a todos los que responden a tu llamada y a la Palabra de Dios, para salvar a todos, de los enemigos de Dios. Por favor, ayuda a liberar las almas que son víctimas de los engaños del demonio y abre sus ojos a la Verdad.
Oh, Madre de la Salvación, ayúdanos a los pobres pecadores a que seamos dignos de recibir la Gracia de la perseverancia en nuestro tiempo de sufrimiento en el Nombre de tu Hijo amado, Jesucristo. Protege esta Misión de cualquier daño. Protege a tus hijos de la persecución. Cúbrenos a todos con tu Manto Santísimo y favorécenos con el Don de mantener nuestra fe, cada vez que seamos desafiados por decir la Verdad, por transmitir la Santa Palabra de Dios, por el resto de nuestros días ahora y para siempre. Amén.
Querido Jesús, dame Tu Amor y abre mi corazón para aceptar Tu Amor con gratitud. Por el Poder del Espíritu Santo, deja que Tu Amor brille sobre mí, para que me convierta en faro de Tu Misericordia. Rodéame con Tu Amor y deja que mi amor por Ti diluya todo tipo de odio, que encuentre cuando propague (difunda) la noticia de Tu Palabra. Derrama Tu Misericordia sobre nosotros y Perdona a aquellos que te rechazan, te insultan y quienes son indiferentes a Tu Divinidad, y dales el Don del Amor. Deja que Tu Amor resplandezca todo en los momentos de incertidumbre, de una fe débil, en tiempos de pruebas y sufrimientos y, por el Poder del Espíritu Santo, ayúdame a llevar la Verdad a los que están más necesitados de Tu Ayuda. Amén.
Oh, querido Jesús, libera aquellas almas que son esclavas de falsos dioses y de Satanás. Ayúdanos a través de nuestras oraciones, a traerles el alivio del dolor de la posesión. Abre las puertas de su prisión, y muéstrales el camino hacia el Reino de Dios, antes de que sean tomados como rehenes por Satanás dentro del abismo del Infierno.
Te suplicamos, Jesús, que cubras estas almas con el Poder del Espíritu Santo, para que así ellas busquen la Verdad y ayúdales a encontrar el coraje (valor) para que le den la espalda a los engaños y perversidades del demonio. Amén.
"Para asegurar que permanezcáis fuertes, valientes, con calma (tranquilos) y en paz, a medida que llevéis la Cruz de mi Hijo sobre vuestros hombros, debéis recitar esta Cruzada de Oración. Porque a muchos de vosotros os resulta difícil de aceptar que estas cosas han de venir: vendrá un día en donde recitaréis esta Cruzada de Oración (158) tres veces al día, porque las presiones, que se colocarán sobre vosotros para negar a mi Hijo, serán abrumadoras."
Querido Jesús, protégeme del mal de la nueva religión única mundial, la cual no viene de Ti. Sostenme en mi trayecto hacia la libertad, a lo largo de la Ruta hacia Tu Santo Reino. Mantenme en unión Contigo, siempre que sea atormentado y forzado a tragar mentiras, que serán esparcidas por Tus enemigos para destruir las almas. Ayúdame a resistir la persecución, a permanecer firme en la Verdadera Palabra de Dios en contra de las falsas doctrinas y otros sacrilegios, a los que podría ser obligado a aceptar.
A través del Don de mi libre albedrío, llévame al Dominio de Tu Reino, para que pueda levantarme y proclamar la Verdad, cuando esta sea declarada ser una mentira. Jamás dejes que yo vacile, dude o huya por miedo, en medio de la persecución. Ayúdame a mantenerme firme y constante a la Verdad todo el tiempo que yo viva. Amén.
Oh, Madre de la Salvación, te pido que intercedas por mí mientras yo suplico por el Amor de Dios. Llena mi alma, un recipiente vacío, con el Amor de Dios, para que cuando se esté desbordando, se derrame sobre las almas por las que lucho para mostrarles compasión. Por el Poder de Dios, pido que yo sea liberado de cualquier sentimiento de odio que pueda albergar por aquellos que traicionan a tu Hijo. Hazme humilde de espíritu, y lléname con generosidad del alma para que yo pueda seguir las Enseñanzas de Cristo y pueda extender Su Amor en cada parte de mi vida. Amén.
Oh Jesús mío, Salvador del mundo, ayúdame a amarte más. Ayúdame a crecer en mi amor por Ti. Llena mi corazón con Tu Amor y Compasión, para que pueda obtener las Gracias para amarte de la manera como Tú me amas.
Llena mi alma ingrata con un amor profundo y permanente por Ti y por todo lo que Tú representas. Por el Poder de Tus Gracias ayúdame para amar a mi prójimo como Tú amas a cada hijo de Dios y para mostrar compasión a aquellos que están en necesidad de Tu Amor y a quienes estén sin fe. Úneme en unión Contigo, para que yo pueda llevar la vida Cristiana, la que Tú nos enseñaste con Tu ejemplo, durante Tu tiempo en la Tierra. Amén.
"Por favor, recitad esta Oración cada vez que os sintáis separados de Mí y Yo vendré en vuestro auxilio. Yo os llenaré de una Paz que no puede, ni nunca podrá ser encontrada en ningún lugar en este mundo:"
Jesús, yo confío en Ti. Ayúdame a amarte más. Lléname con la confianza para entregarme en unión completa y definitiva Contigo. Ayúdame a aumentar mi confianza en Ti durante los momentos difíciles. Lléname de Tu Paz. Vengo a Ti, querido Jesús, como un niño, libre de todas las ataduras mundanas; libre de toda condición y te entrego mi voluntad para que hagas con ella lo que mejor te parezca, por mi propio bien y por el de las demás almas. Amén.
Oh Dios, Padre Todopoderoso, por favor protege a los débiles y los inocentes que sufren a manos de aquellos que tienen odio en sus corazones. Alivia el sufrimiento padecido por Tus pobres hijos indefensos. Dales todas las Gracias que necesitan para protegerse de Tus enemigos. Llénalos de valor, esperanza y caridad, para que puedan encontrar en sus corazones cómo Perdonar a los que les atormentan. Te pido, querido Señor, mi Padre Eterno, que perdones a aquellos que desafían la Ley de la vida y ayúdales a ver lo mucho que sus acciones te ofenden, de manera que puedan enmendar sus caminos y buscar consuelo en Tus brazos. Amén.
Oh, Jesús guárdame del dolor de la persecución en Tu Nombre. Congráciame con Tu Corazón. Líbrame de la soberbia, la avaricia, la maldad, del ego y del odio en mi alma. Ayúdame a entregarme verdaderamente a Tu Misericordia. Llévate mis temores.
Ayúdame a desahogar mi dolor y lleva toda persecución lejos de mí, para que yo pueda seguirte como un niño pequeño, en el conocimiento de que todas las cosas están bajo Tu control. Libérame del odio mostrado por todos los que proclaman ser Tuyos, pero que realmente te niegan. No dejes que sus lenguas cortantes me azoten o que sus actos malvados me distraigan del Sendero de la Verdad.
Ayúdame a concentrarme solo en Tu Reino por venir y a perseverar, con dignidad, contra cualquier insulto que yo pueda padecer en Tu nombre. Tráeme la paz de la mente, la paz del corazón, la paz del alma. Amén.
Oh Jesús tráeme paz. Trae paz a mi nación y a todos aquellos países desgarrados por la guerra y la división. Siembra las semillas de paz entre esos corazones endurecidos que causan sufrimiento a otros en el nombre de la justicia.
Da a todos los hijos de Dios las Gracias para recibir Tu Paz para que el amor y la armonía puedan prosperar; para que el Amor de Dios triunfe sobre el mal y para que las almas puedan ser salvadas de la corrupción, de falsedades, de la crueldad y de la ambición malvada.
Deja que la paz reine sobre todos aquellos quienes dedican su vida a la Verdad de Tu Santa Palabra y sobre aquellos que no te conocen en absoluto. Amén.
"Mi Reino os dará la Vida Eterna, pero debéis pedir Mi Ayuda recitando esta oración:"
Jesús, ayúdame a creer en Tu Existencia. Dame una señal para que mi corazón pueda responderte.
Llena mi alma vacía con la Gracia que necesito para abrir mi mente y mi corazón a Tu Amor. Ten Misericordia de Mí, y limpia mi alma de todos los malos actos que he cometido en mi vida. Perdóname por haberte rechazado, pero por favor lléname con el amor que necesito, para hacerme digno de la Vida Eterna. Ayúdame a conocerte, a ver Tu Presencia en otras personas y lléname con la Gracia de reconocer la Señal de Dios en cada regalo hermoso que Tú has dado a la raza humana. Ayúdame a comprender Tus Caminos y sálvame de la separación y del dolor de la oscuridad que siento en mi alma. Amén.
Amadísima Madre de la Salvación, por favor presenta esta, nuestra súplica para mitigar el asesinato de inocentes, a tu amado Hijo, Jesucristo. Le pedimos, que en Su Misericordia, Él elimine la amenaza de genocidio, persecución y terror contra los hijos de Dios, en todas sus formas.
Por favor, te imploramos, querida Madre de la Salvación, que escuches nuestros llantos para obtener amor, unidad y paz en este mundo afligido. Pedimos que Jesucristo, el Hijo del Hombre, nos proteja a todos durante estos momentos de gran dolor y sufrimiento en la tierra. Amén.
"Hijos, cuando las profecías anunciadas sucedan, es importante que pidáis la Misericordia de mi Hijo para que todo sufrimiento pueda ser diluido y que los actos malvados, perpetrados contra la humanidad, puedan ser mitigados. Id en paz y amor a servir al Señor. Vuestra amada Madre, Madre de la salvación."
"La familia, nacida del Amor de Dios, siempre será atacada por el maligno. Para proteger a vuestra familia del mal por favor rezad esta Cruzada de Oración:"
Oh Dios, mi Padre Eterno, a través de la Gracia de Tu Hijo amado, Jesucristo, por favor protege a mi familia contra el mal, en todo momento. Danos la fuerza para elevarnos por encima de la intención del maligno y para permanecer unidos en nuestro amor a Ti y a los demás.
Sostennos a través de cada prueba y sufrimiento que podamos padecer y mantén vivo el amor que nos tenemos el uno al otro para que estemos en unión con Jesús. Bendice nuestras familias y danos el Don del Amor, incluso en tiempos de conflicto. Fortalece nuestro amor, para que podamos compartir la alegría de nuestra familia con los demás de modo que Tu Amor pueda ser compartido con todo el mundo. Amén.
"Recordad que Dios creó a cada uno de vosotros a Su Semejanza para que Él pudiera crear la familia perfecta. Sed agradecidos por vuestras familias ya que es uno de los mayores Dones que Él ha derramado sobre la raza humana. Cuando el sufrimiento en esta tierra llegue a su fin, y cuando se borre el odio, Dios unirá a la humanidad como una en Él. Vosotros seréis íntegros nuevamente y Su Familia tendrá la Vida Eterna."
Oh Queridísimo Padre, Oh Eterno, Dios Altísimo, hazme digno de Tu amor.
Por favor, perdóname por herir a los demás y por toda mala acción que haya causado sufrimiento a alguno de Tus hijos.
Abre mi corazón para que yo pueda darte la bienvenida (aceptarte) en mi alma, y pueda limpiarme de cualquier odio que yo pudiera sentir contra otra persona.
Ayúdame a Perdonar a mis enemigos y sembrar las semillas de Tu Amor donde quiera que vaya y entre aquellos con los que me encuentro todos los días.
Dame querido Padre, los Dones de la Perseverancia y Confianza, para que pueda mantener en alto Tu Santa Palabra y por lo tanto mantener viva, en un mundo oscurecido, la llama de Tu Gran Amor y Misericordia. Amén.
Queridísimo Jesús, por Tu compasión y misericordia, te ruego por la salvación de aquellos quienes te han rechazado; quienes niegan Tu existencia; quienes deliberadamente se oponen a Tu Santa Palabra y cuyos corazones amargos han envenenado sus almas en contra de la Luz y la Verdad de Tu Divinidad. Ten piedad de todos los pecadores. Perdona a los que blasfeman contra la Santísima Trinidad y ayúdame, a mi manera, y a través de mis sacrificios personales, a acoger dentro de Tus Amorosos Brazos, a los pecadores que más necesitan de Tu Misericordia. Te doy mi promesa, a través de mis pensamientos, mis acciones y la palabra hablada, de servirte lo mejor que pueda en Tu misión de Salvación. Amén.
"Os doy, la última oración de la Cruzada de Oración. Es para los sacerdotes. Pido que mis siervos consagrados la reciten diariamente:"
Oh, Querido Señor, mi amado Jesucristo, Abrázame. Protégeme. Mantenme en la Luz de Tu Rostro, mientras que mi persecución se intensifica, cuando mi único pecado es defender la Verdad, la Santa Palabra de Dios.
Ayúdame a encontrar la valentía para servirte fielmente en todo momento. Dame Tu valentía y Tu Fuerza, mientras lucho para defender Tus Enseñanzas contra la violenta oposición.
Jamás me abandones Jesús, en mi momento de necesidad y provéeme con todo lo que necesito para continuar sirviéndote, por medio de la prestación de los Santos Sacramentos y Tu Precioso Cuerpo y Sangre, a través del Santo Sacrificio de la Misa. Bendíceme Jesús. Camina conmigo. Reposa en mí, Quédate conmigo. Amén.
26 may 2024
Oh Santa Madre de Dios, ven a mí en este momento en mi hora de necesidad. Ofrece mis intenciones a tu Hijo, Jesucristo, cuando me ahogo de dolor. Líbrame del miedo y del dolor infligido a mi por seguir el camino de Cristo. Protege a todas las almas de la opresión física y mental en los tiempos de confusión que se avecinan. Reza, reza, reza para que se disipen las tinieblas del mundo y líbranos de los peligros del maligno y de quienes llevan a cabo sus planes perversos para destruir a la humanidad. Lléname con el don de buscar la ayuda de Dios cuando las dudas llenan mi alma respecto a Sus promesas de redimir a la humanidad de las garras del mal. Cúbrenos con tu protección y tu paz. Danos el consuelo y la fuerza que necesitamos para servir a Jesús hasta nuestro último aliento. Ruega para que nuestro sufrimiento traiga alivio a las almas que están en la oscuridad y les ayude a buscar la salvación que Dios les ha prometido mediante la muerte de Jesús en la cruz. Amén.
Queridísimo Jesús, sálvanos del engaño del falso profeta.
Jesús, ten Misericordia de nosotros.
Jesús, sálvanos de la persecución.
Jesús, presérvanos del anticristo.
Señor ten Misericordia.
Cristo ten Misericordia.
Queridísimo Jesús, cúbrenos con Tu Preciosa Sangre.
Queridísimo Jesús, abre nuestros ojos a las mentiras del falso profeta.
Queridísimo Jesús, une a Tu Iglesia.
Jesús, protege nuestros Sacramentos.
Jesús, no dejes que el falso profeta divida Tu Iglesia.
Queridísimo Jesús, ayúdanos a rechazar las mentiras, presentadas a nosotros como la Verdad.
Jesús, danos fortaleza.
Jesús, danos esperanza.
Jesús, inunda nuestras almas con el Espíritu Santo.
Jesús, protégenos de la bestia.
Jesús, danos el Don del Discernimiento, para que podamos seguir el sendero de Tu Verdadera Iglesia en todo momento, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Altísimo Padre Celestial,
Te amo.
Te honro.
Señor ten Misericordia.
Señor Perdona nuestras ofensas.
Te adoro.
Te alabo.
Te doy las gracias por todas Tus Gracias especiales.
Te suplico por la Gracia de la Inmunidad para mis amados:
(Nombrar a todos los que están en una lista para la salvación de almas)
Te ofrezco mi lealtad en todo momento.
Tú, Oh Altísimo Padre Celestial,
Creador de todas las cosas,
Creador del universo,
Creador de la humanidad,
Tú eres la Fuente de todas las cosas.
Tú eres la Fuente del Amor.
Tú eres Amor.
Te amo.
Te honro y me postro ante Ti.
Te suplico Misericordia para todas las almas que no Te conocen, que no te honran, que rechazan Tu Mano de Misericordia.
Me entrego a Ti en mente, cuerpo y alma, de modo que puedas tomarlos entre Tus Brazos, a salvo del mal. Te pido que abras la Puerta del Paraíso, para que todos Tus hijos puedan unirse, por fin, en la herencia que has creado para todos nosotros. Amén.
Oh querido Jesús, protégenos de las mentiras, las cuales ofenden a Dios.
Protégenos de Satanás y su ejército.
Ayúdanos a amarte más.
Sostennos en nuestra batalla.
Defiéndenos en nuestra fe.
Llévanos a Tu Refugio de seguridad.
Ayúdanos a levantarnos y a defender Tu Santa Voluntad.
Fortalece nuestra determinación de ser Tus verdaderos discípulos.
Danos valor.
Danos confianza.
Guíanos en el Sendero de la Verdad.
Defiéndenos del enemigo.
Derrama Tus Gracias de Protección sobre nosotros.
Ayúdanos a evitar la tentación.
Acércanos más a Tu Sagrado Corazón.
Ayúdanos a permanecer fieles a Ti en todo momento. Amén.
Oh Dios Altísimo, te suplicamos Misericordia por los pecados de Tus hijos.
Te agradecemos el Regalo de la Tierra.
Te agradecemos el Regalo de la vida humana.
Atesoramos el Don de la vida.
Defendemos el Don de la vida.
Te agradecemos el Regalo de Tu Hijo, Jesucristo.
Te agradecemos el Don de la Redención.
Ensalzamos Tu Divinidad.
Nos entregamos completamente, ante Ti, para que Tu
Santa Voluntad pueda ser cumplida, en la Tierra,
como lo es en el Cielo.
Te agradecemos el Don de la Iluminación de la Conciencia.
Te agradecemos la Promesa de Vida Eterna.
Damos la bienvenida al Nuevo Paraíso.
Te suplicamos que salves a todas las almas,
incluyendo aquellas que te atormentan y aquellas que se han extraviado de Ti.
Te agradecemos el Amor que muestras a todos Tus hijos.
Te agradecemos el Don de la profecía.
Te agradecemos el Don de la oración.
Te pedimos que nos concedas paz y salvación. Amén.
Jesús, salva a todos los pecadores de caer en el fuego del Infierno.
Perdona a las almas ennegrecidas.
Ayúdales a que te vean.
Sácalas de la oscuridad.
Abre sus ojos.
Abre sus corazones.
Muéstrales la Verdad.
Sálvalos.
Ayúdalos a que escuchen.
Líbralos del orgullo, la lujuria y la envidia.
Protégelos del mal.
Escucha sus peticiones de ayuda.
Toma sus manos.
Jálalos (acércalos) hacia Ti.
Sálvalos del engaño de Satanás. Amén.
"Para las almas que reciten esto durante los tiempos de persecución, sabed que verteré estas Gracias sobre vosotros. Os tranquilizaréis, os haréis más fuertes y más valientes, mientras portáis Mi pesada Cruz hacia las puertas del Nuevo Cielo y la Nueva Tierra. Más importante aún, no sucumbiréis a la intimidación la cual deberéis afrontar en Mi Santo Nombre."
Oh, querido Jesús
Mi bien amado Salvador,
Lléname de Tu Amor.
Lléname de Tu Fuerza.
Lléname de Tu Sabiduría.
Lléname de Tu Perseverancia.
Lléname de Tu Humildad.
Lléname de Tu Coraje (Valentía)
Lléname de Tu Pasión. Amén.
Oh mi Señor, guíame a Tu Reino y protégeme de la oscuridad que ha envuelto a mi alma. Escúchame ahora, oh Sagrado Corazón, y por Tu Bondad deja que Tu Luz de Amor y Protección resplandezca en mí. Amén.
Dios, si Tú eres la Verdad revélame la señal de Tu Amor. Abre mi corazón para que sea guiado. Si Tú existes, déjame sentir Tu Amor para que pueda ver la Verdad. Pido por mí ahora. Amén.
Mi querido Señor, yo te extiendo mis brazos para pedirte que acojas a mi amado/a hermano/a en Tus amorosos brazos. Bendíceles con Tu Sagrada Sangre y concédeles la gracia necesaria para que les permitas recibir el Espíritu de Tu Amor para guiarlos a la salvación eterna. Amén.
Jesús me siento perdido. Abre mi corazón para aceptar Tu Amor y muéstrame la Verdad para que yo pueda ser salvado. Amén.
Jesús: "Muchos se arrepentirán durante esta Experiencia Mística (el Aviso)... Acudan a Mí y digan:"
Por favor guíame hacia la Luz y Bondad de Tu Gran Misericordia y perdóname mis pecados. Amén.
Te urjo Jesús, en Tu Divina Misericordia, que cubras aquellas almas tibias con Tu Preciosa Sangre, para que puedan ser convertidas. Amén.
Para ser rezada al final de la Coronilla de la Divina Misericordia
Lléname ahora, oh Señor, con el Don del Espíritu Santo para llevar Tu Santísima Palabra a los pecadores que debo ayudar a salvar en Tu Nombre. Ayúdame a cubrirlos, por medio de mis oraciones, con Tu Preciosa Sangre, para que así ellos puedan ser atraídos a Tu Sagrado Corazón. Dame el Don del Espíritu Santo para que así estas pobres almas puedan deleitarse en Tu Nuevo Paraíso. Amén.
Oh mi precioso Jesús, sostenme en Tus brazos y permite que mi cabeza descanse sobre Tus hombros, para que así, me levantes a Tu Glorioso Reino, cuando sea el momento adecuado. Permite que Tu Preciosa Sangre fluya sobre mi corazón, para que podamos estar unidos como uno solo. Amén.
Jesús, si realmente eres Tú, por favor inunda mi alma con el Signo de Tu Amor para que pueda reconocerte por lo que Eres. No me permitas ser engañado por mentiras. Muéstrame en cambio, Tu Misericordia, abriendo mis ojos a la Verdad y al camino a Tu nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Jesús, yo te entrego confiadamente todas mis preocupaciones en este asunto, y así el problema es Tuyo ahora para que lo resuelvas de acuerdo a Tu Santísima Voluntad. Amén.
"Caminen hacia Mi a pedirme ayuda... Vengan. Inclinen su cabeza, dejen a un lado su vergüenza y pídanme que los perdone ahora."
Jesús, por favor perdóname mis pecados y mis ofensas contra Tí. Amén.
No rechazaré nunca el camino del Señor. Ni negaré la Existencia de Jesucristo, a Quien la humanidad ha intentado aniquilar, no solo durante Su padecimiento en la Cruz, sino también posteriormente. Yo soy Uno con Jesucristo. Hablo en Su Nombre. Camino con Él. Él me levanta, de modo que puedo también, de una manera humilde, ayudar a abrir sus corazones al Amor puro que Él guarda en Su Corazón por ustedes y solo para ustedes. Amén.
Dios Altísimo, vengo esta semana ante Tu Trono para pedir fervientemente por las almas de mis hermanos y hermanas que se niegan a reconocer Tu Existencia. Te ruego encarecidamente que les colmes con Tus Gracias, para que así ellos abran sus corazones y escuchen Tu Santísima Palabra. Amén.
"Le pido a Mis siervos, rezar mucho, con el fin de resistir la abominación que está en camino. Deben pedírmelo de la siguiente manera:"
Oh Mi amado Jesús, yo invoco Tu protección y pido Tu Misericordia para salvar a mis hermanos y hermanas, dentro de Tu Iglesia, para que no caigan víctimas del anticristo. Concédeme las gracias y protégeme con Tu armadura de Fortaleza, para hacer frente a los malignos actos, que puedan ser perpetrados en Tu Santo Nombre. Suplico por Tu Misericordia y prometo mi lealtad a Tu Santo Nombre en todo momento. Amén.
"Yo responderé a las almas más endurecidas, cuando ellas recen esta oración:"
Oh Jesús, cúbreme con Tu Preciosa Sangre y lléname del Espíritu Santo, para que pueda discernir, si estas Palabras provienen de Ti; Hazme humilde de espíritu. Recibe mis súplicas con Misericordia y abre mi corazón a la Verdad. Amén.
"Hago un llamado a todos Mis hijos, especialmente, a aquellas almas tan llenas de amor por Mí, su Creador, a unirse con sus hermanos y hermanas y levantarse en contra del mal en el mundo."
Dios Altísimo, en el Nombre de Tu amadísimo Hijo Jesucristo, Quien sacrificaste para salvarnos, a Tus pobres hijos, del fuego del infierno, escucha nuestra oración. Que podamos ofrecer nuestros humildes sacrificios y aceptar las pruebas y tribulaciones, como un medio para ganar la salvación de todas las almas, durante el Aviso.
Te rogamos que perdones a los pecadores que encuentran difícil regresar y aceptar Tu Misericordiosa Bondad, para que hagan los sacrificios necesarios, que Tu consideras más adecuados, para redimirles a Tus Santos Ojos.
"Rezándome a Mí, su Padre celestial, Dios Altísimo, Creador del Universo y de la Humanidad, escucharé su oración y les garantizaré inmunidad para todas aquellas almas por las que rezan."
Dios Padre, en Nombre de Tu amado Hijo Jesucristo, te suplico que detengas este acto abominable en donde quieren controlar a Tus hijos. Por favor, protege a todos Tus hijos en estos terribles momentos, para que podamos encontrar paz y dignidad para vivir nuestras vidas, libres del maligno. Amén.
Jesús, si puedes oírme, entonces escucha mi llamada de auxilio. Por favor ayúdame a lidiar con aquellos que me causan dolor. Ayúdame a detener la envidia que está controlando mi vida y a dejar de desear las cosas que no puedo tener. En cambio, abre mi corazón a Ti, querido Jesús. Ayúdame a sentir verdadero amor - Tu amor y a sentir verdadera paz en mi corazón. Amén.
Padre Celestial, ayúdame a llegar a ser pequeño, como un niño, ante Tus Ojos. Pido que Tus Gracias caigan sobre mí, para que así pueda responder a Tu llamada para salvar a todos Tus hijos. Amén.
Oh Jesús, ayúdame a ver la Verdad de Tu Santa Palabra en todo momento y a permanecer leal a Tus Enseñanzas, no importa cuánto me obliguen a rechazarte. Amén.
“Aquellos de ustedes que dicen que son ateos, escuchen ahora Mi Promesa. Yo los amo y nunca renunciaré a Mi lucha para salvarlos de las garras del engañador, Satanás, quien los ciega a la Verdad. Cuando llegue el momento, y cuando ustedes vean sus propios pecados delante de sus ojos durante “El Aviso”, por favor digan estas palabras:
Jesús, muéstrame la Verdad y sálvame del mal. Estoy verdaderamente arrepentido de mis pecados y te pido que me tomes ahora y me muestres la Luz de Tu Misericordia. Amén.
Jesús toma mi dolor, sáname y toma mi cruz. Amén.
Jesús, sálvame de las mentiras de Satanás, para que pueda discernir la Verdad de Tu Iglesia Remanente. Amén.
Comparto este dolor contigo, querido Jesús, y te pido que Bendigas a mis enemigos y a los que te atormentan , con el Don del Espíritu Santo. Amén.
Querido Padre, soy yo, Tu hijo extraviado, quien tan confundido y ciego, que sin Tu ayuda, Tu amor, nada soy. Sálvame por el Amor a Tu Hijo, Jesucristo y alcánzame la Llave a Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.
Jesús, quita mi terrible dolor y sufrimiento y déjame sentir Tu Amor.
Jesús: "Cuando te arrodilles ante Mí o simplemente te comuniques Conmigo en tu corazón, comienza siempre diciendo:"
Jesús perdóname, porque he pecado.
Jesús Tu Voluntad es todo lo que importa. Mi libre albedrío es Tuyo. Haz con él lo que desees. Amén.
Jesús, ¿eres Tú? ¿Estoy realmente en necesidad de Tu ayuda?
Jesús perdóname, quiero seguirte. Amén.
Jesús: "Recordad lo que ahora os digo. En ese día (Iluminación de la Conciencia),quiero que Me pidáis:"
Jesús, ruego por Misericordia para todos los que te rechazan y que son los más necesitados de Tu Ayuda.
Dios Padre: "Permítanme abrir sus corazones para que así sean bendecidos por Mi Mano."
Querido Padre, extiende tu Mano y toca mi cuerpo y alma con Tu Mano de Misericordia. Amén.
Jesús, llévame bajo Tu Refugio hacia mi Padre y tráeme la Salvación Eterna.
Jesús: "En este día (Viernes Santo), te pido que me invoques de esta manera:
Jesús, perdóname por el daño que he infligido en Tu Cuerpo, en Tu Palabra y en Tu Divinidad. Amén.
Jesús, toma mi sufrimiento y haz con él lo que te plazca. Amén.
Jesús, ayúdame. Jesús perdóname todos mis pecados.
Jesús: "Quienes se pongan de pie y defiendan la Voluntad de Dios serán colmados de grandes Gracias y, por su fe, expiarán los pecados de aquellos demasiado tercos o demasiado temerosos para resistir todo lo que contradice la Palabra de Dios. Cuando todas las atrocidades del mal aumentan y cuando el hombre se dé cuenta de que no tiene la capacidad de luchar o controlar tal maldad, deberá volverse a Mí y decir:"
Jesús, líbranos, a nosotros pecadores desvalidos, de Tus enemigos. Amén.
Jesús, todo lo que digo y hago es según Tu Santa Voluntad; Hazme según la Voluntad de Dios.
Jesús: "Si se colocan delante de los demás, entonces no pueden decir que me aman incondicionalmente porque si lo hicieran ustedes me dirían [esta oración]. (…) Vayan todos y recuerden a ustedes mismos Quien Soy Yo. Solo cuando vivan sus vidas de acuerdo a Mis Enseñanzas podrán realmente decir que son Míos."
Jesús, no soy digo de estar delante de Ti, pero haz de mí lo que quieras, y yo haré lo que Tú deseas. Amén.
Jesús: "Finalmente, les doy el Don del Amor, y, cuando Yo los inunde con este Don, ustedes serán capaces de erradicar el mal a través de sus palabras, hechos y acciones. El Amarme, significa que amarán aún a sus enemigos y, por medio de este Don, destruirán el odio. Vayan y acepten Mis Dones. Todo lo que tienen que hacer, es decirme: "
Jesús, dame los dones que necesito para permanecer fiel a Ti. Amén.
¡Oh Señora mía! ¡Oh Madre mía! Yo me ofrezco enteramente a ti y en prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo tuyo Oh Madre de bondad, guárdame y defiéndeme como a pertenencia y posesión tuya. Amén.
Jesús, si puedes oirme, entonces escucha mi llamada de auxilio. Por favor ayúdame a lidiar con aquellos que me causan dolor. Ayúdame a detener la envidia que está controlando mi vida y a dejar de desear las cosas que no puedo tener. En cambio abre mi corazón a Ti querido Jesús. Ayúdame a sentir verdadero amor, Tu amor, y a sentir verdadera paz en mi corazón. Amén.
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.
Alma de Cristo, santifícame. Cuerpo de Cristo, sálvame. Sangre de Cristo, embriágame. Agua del costado de Cristo, lávame. Pasión de Cristo, confórtame. ¡Oh, buen Jesús!, óyeme. Dentro de tus llagas, escóndeme. No permitas que me aparte de Ti. Del maligno enemigo, defiéndeme. En la hora de mi muerte, llámame. Y mándame ir a Ti. Para que con tus santos te alabe por los siglos de los siglos. Amén.